–Te diré quien eres– al escucharlo decir eso mi cuerpo no reaccionó y se quedó estático

(...)

tomé su mano para poder levantarme y al hacerlo quedamos a centímetros de distancia

recordé a ese chico con el que soñé e inmediatamente me sentí nerviosa acaso ¿podía ser Juan Luis? NO! borre esa idea de mi cabeza, no pudo haber sido él simplemente no es lo mismo

–¿Estás nerviosa?– preguntó rompiendo la pequeña distancia que antes teníamos por un momento pensé que...

se sentó en la silla y yo volví a sentarme en la cama estábamos frente a frente

–Es cierto...estoy nerviosa– dirigí mi mirada hacia ella

-Mejor haremos algo... solo pregúntame lo que quieres saber- esbozé una sonrisa y noté que se había sonrojado

–Quien era o quien soy– preguntó dudando de lo que había dicho

-No importa lo que fuiste- me miró sin comprender

volví a sonreír y seguí hablando

-Trato de decirte que no importa lo que fuiste, sino lo que eres ahora, eres una niña con un gran corazón, eres buena, cariñosa,  graciosa, inocente y con ganas de descubrir todo de la vida y de lo que te rodea- dije animadamente

entonces noté que había sonreído, al parecer mi respuesta le había gustado... a toda costa trataré de no decirle nada de lo que le ha sucedido antes de perder sus recuerdos

–Tú y yo que somos– preguntó tímida y mirando hacia el piso

no supe como responder a esa pregunta tenía algo muy claro y era que estaba enamorado de ella. Pero antes del accidente y me refiero a cuando nos conocimos no nos llevábamos bien y no le agradé para nada

Solo hay un 20% de que logre recobrar la memoria aun así es casi imposible que lo consiga

es lo mejor, lo mejor es que el pasado, se que de en el pasado junto con ESA persona que la lastimó y jugó con ella

-Somos novios- concluí con una gran sonrisa

me miró sorprendida mientras se sonrojaba y miraba hacia otro lado

–somos novios– susurró despacio pero logré escucharla

sentí una enorme felicidad al oír eso, pero no podía engañarme a mi mismo...estaba mintiéndole

me levanté de la silla y con mi mano tomé su rostro para que me viera

fue evidente notar que estaba nerviosa con mi presencia

–Ahora entiendo porque estuviste a mi lado cuidándome y preocupándote por mi– habló despacio y cuando terminó ya había aparecido su típico sonrojo

la solté y me quedé viéndola sin moverme quería analizar que tanto le afectaba lo que le había dicho, entonces recordé algo

-Recuerdas cuando me decías que no sabías que sentías al estar a mi lado, no sabías porqué sonreías y te sonrojabas- sonreí sin darme cuenta y eso encajaba perfecto con lo que la estaba haciendo creer

me miraba tratando de entender y asimilar lo que le decía

-Verás Violetta, eso era algo muy normal, ya que es lo que sientes por mí soy tu novio a pesar de que no me recuerdes ese sentimiento no se ha borrado y sigue siendo el mismo-

me volví a acercar para acariciar una de sus mejillas mientras me sentaba en la ahorilla de la cama

–Te quiero, lo que siento ¿es amor cierto?– preguntó ingenua y con una sonrisa tímida

-Solo tú eres capaz de saber si es amor- susurré cerca de su oído

–Cuando me besaste....y te disculpaste por que fue un accidente, me sentí mal– estaba abrazando la almohada 

¿fue por eso que me dijo que no me importaba?

–Lo siento creo que no debí haberlo dicho– dejó de abrazar la almohada y miró hacia sus manos

acaso era posible que estuviera enamorada de mí y solo yo no quería verlo, solo me sentiría de la misma manera que ella se sintió si fuera...amor

volví a verla y entonces me decidí a hacer lo que quería y sentía verdaderamente

-Tal vez con un beso puedas darte cuenta que sientes por mí si es amor o no-