-¿Embarazada? No perdieron el tiempo ¿verdad?-

-Estoy segura que fue parte del programa organizado que su madre tenía planeado para ella- dijo Hyunjin, su tono amargo. Miró a Heejin, en espera de sucrítica.

-Supongo que Jinsoul no trabajó- dijo Heejin -¿Su título era para el espectáculo?- Hyunjin asintió.

-Las mujeres Jung no trabajan- dijo. Se aclaró la garganta, casi librándose -Debería irme. Es tarde-

-Oh, no. Todavía no- protestó Heejin -No puedes irte sin terminar tu historia-

-No queda mucho por contar. Sólo la he visto un par de veces desde entonces- dijo.

-¿Qué tal más café? Es descafeinado- dijo Heejin. Hyunjin asintió.

-Está bien. Tomaré otra taza-

-¿Cómo te las arreglaste para evitarla todos estos años?- preguntó Heejin -Quiero decir, las veces en las que ibas a Daegu-

-Fueron cinco años después que mi madre enfermó por primera vez. Antes, cuando iba de visita no lo anunciaba. Solo me aparecía. Permanecía una noche y me iba a la mañana siguiente. Nunca vi Jinsoul- dijo -Cuando mi madre se enfermó, Seokjin ya estaba retirado de las fuerzas armadas y abrimos nuestra primera tienda unos seis meses antes. Nos turnábamos entonces, para estar con ella, llevarla a las citas médicas y otras cosas- Heejin le dio otra taza de café.

-¿Y no hablaste con Jinsoul en todo ese tiempo?-

-No. Pude sacarla de mi mente. Tenía citas. Tenía amigos. Era cuando iba a Daegu cuando ella ocupaba el lugar protagónico de mi mente-

-¿Pero la viste nuevamente?-

-Sí. Tenía veintiocho-

•••

-¿Estás cómoda?- preguntó Hyunjin mientras ahuecaba las almohadas debajo de las piernas de su madre.

-Deja el alboroto- dijo su madre -Estoy bien- Hyunjin se sentó en la silla junto a la cama de su madre, con la preocupación grabada en su rostro. Trató de ocultarlo, pero su madre le sonrió tranquilizadoramente. -No voy a morir todavía, Hyunjin. Dejar de lucir tan asustada-

-Nunca has estado enferma anteriormente- dijo.

-El cáncer es una cosa de miedo ¿no? Pero los médicos parecen pensar que podremos manejarlo. Tengo que creer en ellos- Hyunjin dejó escapar un suspiro.

-¿Has vuelto a pensar en ello?-

-¿Retirarme? Sí-

-¿Y?-

-Y tú y Seokjin tienen razón. Es el momento. Pero ¿a dónde iría? Tenías diez años cuando nos mudamos aquí. Sé que no es mucho, pero ha sido nuestra casa en estos últimos dieciocho años-

-Lo sé, mamá. Te encontraremos una casa. Algo bien iluminado y ventilado, con un pequeño patio- miró a su alrededor -Siempre sentí como si estuviésemos en un calabozo aquí-

-Sí, lo sé. Era por eso que pasabas la mayor parte de tu tiempo al aire libre, en la cubierta- dijo con una sonrisa -O arriba en la habitación de Jinsoul- Hyunjin miró hacia otro lado, no quería pensar en eso.

Jinsoul ya no era parte de su vida. Había terminado con eso. Habían pasado más de cinco años desde que la había visto. Ocho desde que habían...dormido juntas. Era asombroso cómo aquí en la mansión los recuerdos estaban todavía tan frescos.

-No has visto a su hija ¿verdad?- declaró su madre -Es una niña tan linda. Y muy inteligente- Hyunjin no respondió. Su madre sabía muy bien que ella nunca lo había visto. -Lo que sea que haya pasado entre tú y Jinsoul, eran tan buenas amigas. No entiendo por qué evitarla-

-No la evito- dijo Hyunjin. -Ella ya no vive aquí-

-Podrías hacer un esfuerzo para ir a verla. Ella ha sido tan buena conmigo. Cada vez que está aquí, siempre viene a visitarme- dijo su madre -Siempre pregunta por ti. Sé que ella te extraña- Hyunjin se puso de pie.

-Mamá, no lo hagas- dijo dándole la espalda a su madre. Sintió un nudo en la garganta y trató de tragarlo -Jinsoul y yo no necesitamos vernos-

-¿Por qué?- Ella negó con la cabeza.

-Es complicado- se volteó cuando oyó un golpe en la puerta exterior. Miró a su madre con las cejas levantadas.

-Probablemente sea Yubin con el almuerzo- dijo ella. Hyunjin se dirigió a la otra habitación y abrió la puerta, se quedó sin respiración cuando encontró a Jinsoul de pie al otro lado. Jinsoul parecía tan sorprendida como ella.

-Hyunjin- susurró. Hyunjin no pudo hablar, su mirada fue atraída por la niña de pie junto a Jinsoul. Volvió a mirar hacia arriba

-Hola-

-Tú...No te estaba esperando. Le mencioné a tu madre que quizás podríamos pasar por aquí- Hyunjin tuvo que sonreír ante esto, preguntándose por qué su madre no lo había mencionado

-Acabamos de regresar. Ella está acostada- se volvió a mirar a la niña -Ella debe ser tu hija-

-Sí. Jayoon, saluda a una antigua amiga mía. Ella es Hyunjin, la hija de la señorita Jisook- Ella le tendió la mano.

-Encantada de conocerte ¿Puedo llamarte Hyunjin?- Los ojos de Hyunjin se ampliaron. Sabía que ella tenía cinco, pero no hubo torpeza infantil en absoluto en su discurso. No pudo evitar sonreírle.

-Sí, puedes llamarme Hyunjin-

-¿Jinsoul? ¿Jayoon? ¿Son ustedes?- La mirada de Jinsoul estaba fija en Hyunjin cuando contestó.

-Sí, Jisook- Jayoon se dirigió hacia el dormitorio, demostrando que ella y Jinsoul eran visitantes frecuentes. Hyunjin y Jinsoul le siguieron.

-Ahí está mi chica guapa- dijo su madre.

-Hola, señorita Jisook- dijo aceptando el abrazo -¿Cómo fue la quimioterapia hoy?-

-No tan mal esta vez, cariño- Hyunjin miró a Jinsoul. -

¿Cuántos años tiene?- susurró.

-Un muy inteligente cinco- susurro Jinsoul en respuesta.

-Jinsoul, Hyunjin y yo estábamos hablando de ti. Estoy tan contenta de que hayas venido- dijo su madre.

-Jayoon recordó tu cita de hoy. Quería ver cómo estabas-

-Bueno ¿por qué ustedes chicas no se ponen al día? Jayoon puede hacerme compañía- dijo ella. Hyunjin estuvo a punto de protestar, pero Jinsoul tenía una mirada de desesperación en sus ojos que no pudo ignorar. Caminaron en silencio, siguiendo su camino tal vez inconscientemente hacia la cubierta.

-Es una niña linda- dijo Hyunjin rompiendo el silencio -Se parece a ti-

-Sí, gracias. Es un poco desconcertante cuando tu hija de cinco años es más inteligente que tú-

-¿En serio? ¿Cuán talentosa es?-

-Mucho. Lee desde los tres años. El próximo año terminará su curso pasando al octavo nivel-

-Wow-

-Lo sé- Jinsoul la miró a los ojos -¿Cómo has estado?-

-Bien- dijo encogiéndose de hombros.

-Tu madre dice que has abierto una tienda de alimentos saludables. Eso es maravilloso, Hyunjin-

-Seokjin y yo lo hicimos. Es pequeña, pero hasta ahora, rentable. Hemos estado más que satisfechos-

-Estoy orgullosa de ti- dijo Jinsoul mientras caminaban hacia la cubierta, aún pintada en un blanco inmaculado. Hyunjin la miró, su mirada vagó sobre su rostro y su cuerpo. Cuando Jinsoul se volteó hacia ella y sus ojos se encontraron, Hyunjin dio voz a sus pensamientos.

-Estás tan preciosa, Jinsoul- Jinsoul retiró la mirada pero no antes de que Hyunjin viera las lágrimas en ellos.

-No sé cómo puedes ver eso. Soy tan terriblemente, terriblemente...miserable- dijo con su voz quebrada por las lágrimas contenidas.

-Jinsoul- Jinsoul miró hacia ella, esta vez sin poder ocultar sus lágrimas ya que corrían por sus mejillas.

-Te extraño. Te extraño mucho- dijo casi llorando.

-Jinsoul, no lo hagas- dijo Hyunjin dando un paso hacia ella -por favor, no llores-

-Odio mi vida- dijo -Lo único bueno en mi vida es Jayoon. Ella es la única que me ha mantenido cuerda- se limpió las lágrimas con impaciencia -Soy tan...miserable. Y me siento tan sola sin ti- Entonces Hyunjin se acercó a ella, atrayéndola hacia sus brazos. Jinsoul se aferró a ella y sus lágrimas se convirtieron en sollozos. Las lágrimas de Hyunjin cayeron también. Enterró su rostro en el cabello de Jinsoul, respirando su aroma familiar.

-Por favor, no llores- murmuró -Por favor, no lo hagas- Sus brazos se apretaron y el cuerpo de Hyunjin reaccionó acercando a Jinsoul más contra ella. Reconoció el cambio en su abrazo. Lo mismo hizo Jinsoul cuando la acercó aún más hacia ella. Hyunjin deseaba besarla tanto, sabía que estaba muy cerca de cruzar la línea. Dio un paso atrás, alejándose de ella. -No podemos hacer esto- susurró.

-Por favor, Hyunjin. Te necesito tanto- dijo Jinsoul, sus ojos suplicantes. Pero Hyunjin negó con la cabeza.

-No puedo hacer esto. Me duele demasiado. Quiero estar contigo. Quiero hacer el amor contigo. Pero no puedo. Me duele irme de aquí, dejarte. No puedo hacerlo más, Jinsoul. No si quiero mantener mi cordura. Simplemente no puedo-

-Hyunjin-

-No. Lo que teníamos, era especial. Siempre va a ser especial. Siempre tendrás un lugar en mi corazón. Pero no puedo verte ¿Por qué crees que te evito? Porque duele- dijo, siendo ahora su turno para limpiar las lágrimas -Me duele ahora mismo, queriendo terriblemente estar contigo, pero sabiendo que no puedo tenerte. Nada de tí. Ni siquiera una pequeña parte de ti-

-Te amo, Hyunjin-

-Yo también te amo ¿Por qué crees que duele tan condenadamente demasiado?- negó con la cabeza -No quiero volver a verte, Jinsoul. No puedo- su mirada se cruzó con la de Jinsoul, ambos ojos todavía cubiertos de lágrimas -No quiero verte nunca más- Jinsoul se dio la vuelta, con los brazos alrededor de sí misma. -Lo siento mucho. Siento mucho todo esto- Hyunjin se aclaró la garganta, logrando poner sus emociones bajo control. -Debo volver con mi madre. Me iré por la mañana- Jinsoul asintió.

-Buscare a Jayoon en un minuto. Sólo necesito un poco de tiempo- dijo.

Hyunjin apretó sus puños, con unas terribles ganas de acercarse a ella y abrazarla nuevamente. Antes de que pudiera hacer eso, giró sobre sus talones, regresando a la casa. Tenía que sacar a Jinsoul de su vida, de su cabeza...y lo más importante, de su corazón. La única manera de hacerlo era marchándose.

Estoy triste, ah Jayoon es Yoon de stayc, no se parece mucho a Jinsoul pero vamos a hacer que si.
Lippie ✨