Get a little high.
(Se recomienda escuchar la canción de multimedia durante el capítulo.)
Suspiré por quinta vez a la vez que crucé mis brazos relajando mi pecho contra ellos y apoyé mi espalda contra la pared dejando caer mi cabeza contra ella lentamente para no hacerme daño. Mordí mejilla interior con el aburrimiento recorriendo todo mi cuerpo, el cual permanecía allí desde hacía una hora, ya que seguía esperando a que Luke apareciera en esa enorme sala y bueno, no iba a dejarme el hecho que me preocupaba su tardanza sin saber cual era su motivo. Calum y Michael ya habían estado conmigo más de un par de veces para entablar conversación y que no pensara mucho en que estaría haciendo el rubio, sin embargo ellos preferían ir a comerse todo el festín que iban entrando los médicos cada diez minutos ya que esos glotones se zampaban hasta el más mínimo gramo.
Así que ahora me encontraba en esos momentos en los que me encontraba completamente sola, en un rincón apartada para no crear problemas o estorbar a los pacientes que sí disfrutaban de esa música ochentera y lo dejaban todo en esa pista de baile improvisada. Torcí mis labios al borde de la desesperación para conseguir algo con lo que entretenerme y entonces, por mi cabeza pasó la idea de ir a por la búsqueda de esa pala.
Así que me alejé de la pared observando a ambos lados para saber hacia donde debía dirigirme e para intentar recordar las indicaciones que me había citado Kit anteriormente, no obstante, sin esperármelo, una mano huesuda tomó mi brazo con decisión haciéndome retroceder hasta volver a mi situación principal. Fruncí el ceño cabreada preparada para soltar más de un insulto hacia la persona que me había agarrado, sin embargo cerré mi boca al visualizar a un Kit justo a mi lado a la vez que soltaba mi brazo cuando se dio cuenta que ya identifiqué que era él. Una sonrisa ladeada surgió de sus labios cortados y heridos a la vez que los lamía sin dirigirme la mirada en ningún momento.
Respiró con tranquilidad, aunque el grado de tensión en que se encontraba su cuerpo decía lo contrario y pasó una mano por su cabello rizado al mismo tiempo que caminó hacia la pared para dejar apoyado su hombro quedando su cuerpo mirando hacia mi dirección.
- ¿Has conseguido ya la pala?- murmuró, y lo logré escuchar de milagro por la alta música que rebotaba contra mis tímpanos. Ante su pregunta, presioné mis labios, avergonzada de que mi respuesta fuera no y el porqué fuera que estaba esperando a que el rubio apareciera. Kit esperó mi respuesta mientras sacó un cigarro un poco destrozado del bolsillo de su americana negra y lo encendió con el mechero que ya tenía en su mano derecha. Una vez colocó el cigarro entre sus labios, absorbió el humo tomando una calada y cuando lo dejó ir, sonrío otra vez-. Ya me lo esperaba, no te preocupes.
- ¿Sabes donde está Luke? ¿Se encuentra a salvo?- cuestioné, con rapidez, confesando mi mayor preocupación en ese momento y apoyé todo mi peso en mi pierna izquierda mientras jugaba con mis manos, arañando con cautela mis dedos por el nerviosismo que me comía por dentro.
EL rizado permaneció en silencio, tomó otra calada a la vez que de sus labios se escapó una sonrisa divertida y soltó una diminuta risa entre dientes, causando que la confusión llenara mi cerebro como una oleada. Kit se quitó el cigarro de los labios, metió su mano derecha en el bolsillo de su pantalón de paciente y por primera vez desde que llegó, clavó su mirada encima la mía.
- Se encuentra bien- se limitó a contestar y yo arqueé mucho más mis cejas, sin estar del todo satisfecha con su respuesta, bueno, directamente no me había aportado nada para dejar mi cuerpo en completa calma. Anteabrí mis labios para decir algo, sin embargo Kit alzó su dedo índice callándome en silencio, y se alejó de la pared con su mirada por encima de las cabezas de los pacientes bailando en la pista. Yo también miré, sin saber que cosa le había creado tanto interés y de la nada, él sonrío y me miró-. Me temo, que debo irme, suerte con la pala.
- Oye, no te vayas, no sé donde esta Luk...- me callé a mi misma, ya que Kit, sin ni siquiera escucharme, desapareció entre toda esa multitud dejándome hablando sola y apreté mis labios, reteniendo las ganas de buscarlo y golpear su ya herido rostro.
Formé con mis manos puños para darles una fuerte presión, por esa impotencia de tener las respuestas tan cerca pero nadie que te las quiera responder. Agarré aire para luego expulsarlo, tranquilizando mi cuerpo al instante y una vez ya no estuve tan alterada, intenté recordar donde podría encontrar la dichosa pala. Sin embargo, sentí inesperadamente un golpe de aire frío chocar con suavidad contra mi rostro y al cabo de segundos, una presencia justo detrás mio.
- ¿A quien estás esperando preciosa?- su voz murmuró no muy lejos de la parte trasera de mi oreja, provocando un escalofrío que recorrió desde mi cuello hasta mi espina dorsal.
Una sonrisa invadió mis labios al momento, giré mi cuerpo con lentitud para toparme con el suyo a centímetros y apoyado contra la pared mientras me dedicaba una sonrisa cortada ya que sus dientes mordían su labio inferior, haciéndolo lucir perfectamente sensual.
- ¿A ti quien te parece? Precioso- cuestioné de la misma manera que él y destaqué el cumplido, dejando ir el aire de mis pulmones acabando susurrando. Di un diminuto paso hacia delante para pegar mi cuerpo al suyo, él aprovechó la cercanía para colocar su mano izquierda encima mi cintura para dar un ligero apretón y analizarme visualmente desde abajo hacia arriba para terminar mirándome a los ojos. Lamió su labio inferior, empujó mi cintura hacia delante con su mano causando que mi cara quedara a centímetros de la suya y entonces besó mis labios de una manera completamente dulce aunque tan lenta que provocó más de un escalofrío por mi cuerpo. Sonríe Y separando nuestros labios, respiré- ¿Por qué has tardado tanto? ¿Ha habido algún problema?
Luke se tomó unos segundos para reaccionar, a lo que entrecerró sus ojos ligeramente y parpadeante, mordió otra vez su labio inferior para jugar con el metal situado en ese sitio de carne. No obstante, después de esa reacción poco común, de sus labios nació una sonrisa mostrando que no era de gran importancia, pero esa vez no creía mucho ese gesto.
Antes de que me respondiera, pude fijarme que encima del hombro de su americana azul oscura gastado había el rastro ligero de ese polvo negro que me traía malos y escalofriantes recuerdos. Fruncí el ceño, alcé mi mano y rocé con la yema de mis dedos ese material con confusión para a continuación mirar fijamente al chico.
- ¿Por qué tienes polvo de ellos? ¿Te han atacado?- pregunté, mucho más desesperada por alguna respuesta que fuera coherente y pudiera tranquilizar mi sistema nervioso.
- Oye, ángel, cálmate, no hay nada de que preocuparse, no ha pasado nada- dijo y su mano fue directa a colocar uno de mis mechones detrás de mi oreja con lentitud, aunque yo no cambié mi rostro, desconfiando de su palabra. Luke acabó suspirando y mordió su mejilla interior-. Lo digo enserio, estuve ayudando a Kit en varias cosas del plan, para que todo vaya perfecto y varios de ellos nos molestaron, pero se fueron no mucho después sin hacernos daño- explicó y mientras hablaba, acarició mi mejilla con su dedo pulgar dulcemente. Esa vez, su razón fue más defendible y acabé asintiendo con la cabeza, aunque aún con un poco de desconfianza. Luke me sonrío- ¿Tu has conseguido la pala?
Ante su pregunta, presioné mis labios cerrando ligeramente un ojo, intentando parecer lo más inocente posible, sin querer recibir alguna decepción de él.
- La verdad...es que estuve todo el tiempo esperándote.- murmuré y torcí mis labios, nerviosa por su reacción y jugué con mis manos un poco avergonzada sin dejar de mirarlo. Sin embargo, contradiciendo todos mis pensamientos, Luke esbozó una sonrisa enternecido y dió un ligero apretón en mi mejilla con suavidad y cariño.
- Bueno, ya estoy aquí.- murmuró y su sonrisa se llenó de perversión al mismo tiempo que con su mano colocada en mi mejilla la utilizó para conducir mi cara hacia delante, consiguiendo acercarme a él y acabando con ambas narices rozándose con suavidad. Nuestras respiraciones se mezclaron en una, Luke mordió su labio inferior mientras movía su cabeza hacia arriba abajo para acariciar su piel contra la mía al mismo tiempo que apretaba su agarre sobre mi cintura y terminó con esa cercanía uniendo nuestros labios.
Acepté ese beso con gusto, coloqué ambas de mis manos presionadas contra su cuello, dejando que mis dedos se entrelazaran con los pocos cabellos sueltos de su nuca tirando de ellos suavemente, provocando que Luke soltara un jadeo. Ese gesto llevó a otro nivel el beso, ya que el chico giró su cabeza a la vez que me acercaba mucho más a su cuerpo con fuerza y cuando sentí su lengua delinear con lentitud mi labio inferior, arqueé mi espalda sorprendida pero satisfecha con su petición de entrada y Luke aprovechó esa acción para posar su mano libre encima mi mejilla tomando el control de mi cuerpo por completo.
Por sorpresa, me obligó con suavidad a frenar el beso dejando que quedáramos frente a frente, nuestras respiraciones chocaran una con la otra y nos quedamos en silencio durante unos segundos. No tardé mucho en ese período de tiempo en volver a la realidad y acordarme en donde nos encontrábamos, así que la sangre subió a mis mejillas al mismo instante que sentí ese calor provenir de ellas.
- Joder, que vergüenza. - susurré a la vez que observaba mi alrededor mordiendo mi labio inferior rezando para que nadie, y menos las hermanas, nos hubieran visto en esa escena tan promiscua e intima.
- Entonces, te dará mucha más vergüenza saber que Ashton apareció saliendo entre la gente de la pista hará unos segundos y casi se tropieza al vernos aquí liándonos. Fue muy divertido ver su cara.- comentó Luke como si fuera la cosa más divertida del mundo sonriendo con diversión y desviando su mirada hacia un lado a la vez que escondía una de sus manos en el bolsillo delantero. Pero a mi no me hizo ninguna gracia, sentí un sabor amargo vagar por mi garganta y mordí mi mejilla interior sin dejar de observar mi alrededor con una mueca de tristeza formada en mis labios. De repente, sentí una mano tomar mi rostro obligándome a volver a mirar sus ojos azulados- ¿Qué esta mal?
- Nada- negué con la cabeza, intentando eliminar todos mis pensamientos de remordimiento y tristeza, para remplazarlos en Luke y solo él, cosa que no me era de complicación.
Sonreí ligeramente y la mano que tenía detrás de su nuca, subió hacia su oreja, la cual acaricié con cariño dando ligeros y masajeantes apretones. Nos quedamos en completo silencio tan solo mirando uno al otro mientras yo seguía con mis caricias oyendo la música de fondo, quedando en un ambiente relajante y plácido. Inesperadamente, la canción terminó y el tocadiscos dio pasó a una melodía, que consiguió captar toda mi atención. Mis ojos se llenaron de imágenes de nosotros dos bailando esa noche en la habitación de ese edificio tabú.
- ¿Es la canción que bailamos en el...?- preguntó Luke, dejando sus palabras al aire ya que le respondí con una sonrisa a la vez que asentí varias veces con mi cabeza mordiendo mi labio inferior, alegre por ese acontecimiento. Él se quedó pensativo durante un segundo y acabó por sonreír de oreja en oreja al mismo tiempo que me obligó a alejarme de su cuerpo. Lo miré confundida y de repente, alzó su mano, me miró fijamente a los ojos y elevó ambas de sus cejas.
Supe al momento a que se refería.
- No, no, no voy a bailar.- respondí, abrazando mi cuerpo al instante y rascando mi brazo derecho con nerviosismo, di pasos hacia atrás y mordí mi mejilla interior.
- ¿Qué pasa? ¿Te da corte bailar enfrente de estos panolis?- cuestionó Luke, caminando hacia a mi y no dudó en agarrar con sus dos manos mi cintura, para sujetarme y asegurarse que no iba a volver a retroceder.
Ladeé mi cabeza formando una mueca con mis labios sin embargo, antes de poder defenderme o reaccionar, el chico agarró una de mis manos contra mi voluntad y la colocó encima su hombro a la vez que tomó mi mano libre alzándola al aire con la suya, creando la típica posición de baile. Lo fulminé con la mirada, reteniendo la sonrisa que quería salir, sin querer perder el orgullo como ya era costumbre, y cuando menos me lo esperé, Luke ejerció fuerza hacia arriba, causando que agarrara su cuello con la mano que se encontraba más cerca de esa zona y de mi garganta salieran un par de carcajadas suaves y tontas mientras él daba lentas vueltas sin moverse de sitio.
No mucho después, bajó mi cuerpo con sutileza y sin ningún esfuerzo, entonces alcé un poco la cabeza para poder admirar el color azulado tan hermoso y contemplé como sus pupilas se dilataban unos milímetros cuando se fijaba en mi. Sintiéndome intimidada por ese gesto sin intención, mis mejillas volvieron a tomar un ligero calor y decidí esconder mi rostro en su cuello, al instante captando su aroma por mis fosas nasales. Dejé caer mi barbilla sobra la mano que ya se encontraba encima de su hombro y con mi nariz, acaricié la piel de su cuello con roces tan lentos y suaves que le provocó un escalofrío.
- Estoy tan enamorado de ti.- escuché a Luke murmurar eso en un tono tan bajo y con una voz tan irregular, que supe al segundo que esas palabras no debieron salir de sus labios.
Confirmé mi teoría mental cuando me alejé de su cuello y observé su rostro, el cual se encontraba con la mirada desviada y sus dientes jugaban con el metal de su labio inferior, de dónde empezó a surgir un poco de líquido rojizo. Ligeramente alterada por ese hecho el cual estaba segura que él no se había dado cuenta, la mano que no estaba unida a la de Luke fue directa a presionar hacia abajo su labio inferior con la yema de mi dedo índice, consiguiendo de vuelta la atención del chico.
- No tengas miedo en expresar tus sentimientos conmigo Luke.- susurré, suficientemente alto para que pudiera escucharme y de la manera más suave que pude, a la vez que mi mano volvió hacia detrás de su cuello para acariciar esa zona con dulzura.
- Es difícil para mi, pero lo intento, lo intento por ti.- contestó de la misma manera que yo y sus palabras consiguieron hacerme sonreír enternecida a la vez que aumenté la velocidad de mis dedos encima su piel por el revoloteo que sentí en mi estómago.
Empujé su nuca hacia delante para plantar un beso encima sus labios, saboreando al instante la mezcla sus labios con el ligero sabor a metal de la pequeña herida que se hizo al morder su piercing, pero eso no fue un obstáculo para que ambos esbozáramos una sonrisa de oreja a oreja la cual Luke se tomó el privilegio de volver a unir durante un segundo más.
- Te quiero.- masculló contra mis labios, con ambas de nuestras respiraciones mezclándose.
- Yo también te quiero, mucho.
Ante mi respuesta, Luke volvió a morder su labio inferior aunque esa vez sin hacerse daño ni tirar de su pequeño trozo de metal y a continuación, besó mi frente durante segundos largos, entrelazando los dedos de nuestras ambas manos provocando que sonriera de forma instantánea. Luke dejó en paz mi frente y clavó sus ojos en mi sin dejar de sonreír con un ligero rubor en sus mejillas, lo cual me pareció tan adorable que no pude evitar acercarme para volver a unir nuestros labios en un beso con más sentimiento. Los dos soltamos un jadeo por el repentino calor que nació en nuestros cuerpos como una flama, yo dirigí mis dos manos hacia su cabello donde las enterré con suavidad procurando dejar leves tirones y Luke tomó mi cintura causando que nuestros pechos se encontraran pudiendo sentir su corazón latir con mucha velocidad, al mismo tiempo que hizo chocar nuestras caderas. Solté un pequeño gemido, el cual fue silenciado por los labios del chico con un beso hambriento y aprovechó la situación para morder mi labio inferior con un leve gruñido al mismo tiempo que se retiró unos centímetros observándome con sus ojos cegados de lujuria y deseo.
Nos quedamos un segundo separados con nuestras narices rozándose por culpa del movimiento irregular de nuestro pecho que se expandía por todo nuestro cuerpo y lamí mis labios, sintiendo la piel hinchada provocando que mi estomago se revolviera. Luke me sonrío de lado y se volvió a acercar a mi besándome de manera apasionada aferrando sus dedos contra mi cadera, consiguiendo que le respondiera de la misma forma tirando ligeramente mi cabeza hacia atrás por la fuerza que utilizó y su lengua se encontró con la mía de manera lenta y torturadora. Sonreí en el beso, Luke imitó mi gesto y sin estimármelo, se desvió de mis labios para dirigirse directo a mi cuello, para empezar a besar y chupar mi piel sin ningún control. Mierda, era como estar en el mismo paraíso.
Puse los ojos en blanco por el repentino placer que recorrió por todo mi cuerpo de arriba abajo y mordí mi labio inferior para retener los tantos gemidos que quisieron salir de mi garganta, sin embargo me dio pavor soltarlos por si se escuchaban demasiado altos. Sentí a Luke morder demasiado fuerte una zona de mi cuello y apreté el agarre contra mi labio para reprimir ese pequeño grito de placer aunque se logró escuchar la mitad de él. Mis mejillas tomaron calor al instante y abrí mis ojos, dejando de sentirme a gusto con la escena y posé ambas de mis manos sobre el pecho de Luke para a continuación alejarlo, ganándome una mirada confundida de su parte después de que sacó su cabeza de mi cuello.
- ¿Qué ocurre ángel? ¿Te he hecho daño?- susurró con la respiración completamente irregular, tomó una grande bocanada de aire mientras sus manos seguían en mi cintura.
- No, no, para nada- negué con mi cabeza y miré al lado izquierda nerviosa asegurándome que nadie se había dado cuenta de nuestra recién escena. Después de unos segundos volví a mirar a Luke-. Es solo...que no me siento muy cómoda haciendo esto aquí, enfrente de todo el mundo.
El rubio se quedó callado, como si estuviera pensando en algo que requería observar a su alrededor durante unos largos segundos, hasta que de sus labios surgió una sonrisa y sus ojos volvieron a centrarse en mi.
- No te preocupes, ya sé donde ir.
Antes de que pudiera decir algo al respecto, su mano agarró la mía entrelazando nuestros dedos con mucha rapidez y empezó a arrastrarme hacia dentro donde se encontraban la mayoría de pacientes bailando al ritmo de esa música disco. Intenté no tropezar o chocar con ningún cuerpo para no iniciar una discusión o pelea, ya que esa gente se ofendía hasta por respirar el mismo aire que ellos. No tardamos mucho en salir entre ellos, apareciendo al otro lado de donde nos encontrábamos antes, justo donde se situaba la mesa, ahora vacía, de la comida y bebidas con varios vasos de plástico encima del mantel azul roto. Luke caminó hacia la izquierda, pasando justo por enfrente de un par de guardias, quienes nos miraron curiosos sin embargo dejaron de prestarnos atención al momento y de repente, sentí como el rubio me empujó hacia delante con mucha fuerza desde nuestras manos enlazas, haciendo que entrara dentro de una sala oscura.
Al cabo de segundos, la luz de una bombilla iluminó la mayoría de esa pequeña habitación, dejandome observar una camilla un poco sucia llena de polvo, un escritorio con varias mantas blancas manchadas de sangre encima y varias cosas aleatorias como trozos de madera esparcidos por el suelo, un par de estanterías y bastantes documentos también dispersos por el piso, como uno que estaba pisando yo. Caminé unos cuantos pasos para asegurarme que era seguro estar allí y no mucho después, sentí las manos de Luke acariciar con lentitud mi cintura con una ligera presión dejándome paralizada en el sitio. A continuación, su respiración entró en contacto con la piel de mi cuello y sin previo aviso sentí sus húmedos labios besar esa zona con toda la lentitud posible, provocando un escalofrío placentero por mi cuerpo. Mordí mi labio inferior mientras él se encargaba de morder y chupar mi piel sin control y sin pudor, con más comodidad ya que ya no nos encontrábamos en público.
Gemí en alto a gusto con su trabajo, sin esperármelo las manos de Luke giraron mi cuerpo con rapidez y en menos de segundos sus labios se estamparon contra los míos salvajemente, haciendo temblar mis piernas. Agarré su rostro con mis manos a la vez que caminé hacia atrás acabando chocando contra el muro frío y duro, asustándome por un segundo y separé mis labios de los suyos lamiéndolos exhausta. Una de las manos de Luke se colocó en mi espalda para trazar un camino imaginario hacia arriba sin dejar de mirarme con nuestras frentes unidas, haciendo su gesto mucho más sensual y mordí mi labio inferior al sentir como sus dedos encontraron la cremallera del vestido. Entonces, se encargaron de bajarlo con rapidez y Luke no tardó en volver a empezar a dejar besos con varias ligeras mordidas por la zona de mi cuello y hombro, en donde con sus dientes, se encargó de retirar los tirantes finos del vestido negro, el cual se quedó ajustado como una falda.
Una vez quedó mi sostén a la vista de sus ojos, los cuales no dudaron de observarme como si fuera lo más apetitoso del mundo mientras lamió sus labios con lentitud. Volvió a mirarme y yo sonríe para a continuación besarlo con ambas de mis manos encima de cada lado de su cara. Él siguió con el beso sorpresa acompañado de varias mordidas causando que ambos soltáramos un par de jadeos, y durante ese período de tiempo, mis dos manos se dirigieron hacia la cintura de Luke, lo acerqué metiendo un dedo entre su pantalón y su piel, provocando que él soltara un gemido. Volví a sonreír contra sus labios y mis dos manos se encargaron de primero sacar la americana que llevaba encima tirándola por algún lugar del suelo, y a continuación agarrar el trozo final de la tela de su camisa blanca para alzarla. Luke se la quitó sin ningún esfuerzo, hizo una bola con ella arrugada y la lanzó sin despegar sus labios de los míos.
Su lengua delineó mi labio inferior para pedirme la entrada, se la dí sin pudor y no tardó en invadir mi espacio bucal con la máxima lentitud que pudo utilizar, matándome de desesperación por dentro. Gemí contra sus labios, completamente excitada y mi gesto seguramente provocó una oleada de calor a Luke, ya que los dedos de una de sus manos se aferraron contra mi cadera y en menos de segundos, me elevó para que yo rodeara mis piernas alrededor de su cintura con fuerza. El beso no se aturó, el chico caminó ciegamente hasta que su cuerpo frenó de golpe y dejó caer mi cuerpo encima de lo que parecía un colchón. Reconocí la camilla anterior al instante y sonreí, un poco más cómoda con él entre mis piernas.
Sin esperarlo, la mano de Luke se colocó encima de mi cuello para ir bajando con lentitud pasando por mis clavículas, después llegó a mis pechos, donde aprovechó para dar una ligera presión a uno de ellos y no pude evitar soltar un leve gemido, él río entre dientes y siguió con su camino hasta llegar hasta mi cintura y entonces, agarró el final de mi vestido para alzarlo, sintiendo como mi piel quemaba debajo su tacto. Su mirada se volvió a fijar en mi y se quedó así unos segundos mientras sus dos manos se colaron por dentro de la cintura del vestido para agarrar mi ropa interior aturándose en ese preciso momento. Supe que estaba pidiendo permiso, y no tardé en posar una mano detrás de su nuca para acercarlo y besarlo con pasión como confirmación.
Él me sonrío contra mis labios y bajó mis bragas con ayuda mía, para que acabaran entre sus manos y viera como de reojo las dejaba a un lado en la camilla. El ambiente se volvió mucho más caliente y tuve que hacer varias respiraciones para calmar mi corazón, y sin previo aviso, Luke dejó libres mis labios para a continuación bajar su cabeza a la vez que empezó a agachar su cuerpo. Mis mejillas se volvieron rojo puro al saber que quería hacer y no tardé en sentir sus labios en mi muslo, mientras dejaba ligeros besos tan húmedos que no pude evitar soltar otro gemido y una de mis manos se enterró entre su cabello para tirar suavemente de él. Luke no dejó de dar besos a cada centímetro de piel sin tocar la zona más íntima, dejándome completamente sin cordura y sin darme cuenta, mi mano empezó a empujar levemente su cabeza hacia delante, sin embargo escuché su risa entrecortada allí abajo.
Entonces, sacó la cabeza de allí dejando de sentir su aliento chocar contra esa zona íntima y lo miré frunciendo el ceño al mismo tiempo que volvía a subir para besar mis labios corta pero dulcemente.
- Me temo que no tenemos tanto tiempo para que te retuerzas de placer ante mi- susurró contra mis labios-, debemos hacer esto rápido y sencillo.
Lamí mis labios volviendo a caer en nuestra realidad como si fuera un dolor de estomago y suspiré.
- Esta bien- respondí y justo antes de que él quería besarme, me aparté-. Pero, ¿tendré tiempo para buscar la pala?
- Se encuentra en esta sala, por eso te traje aquí.
- Pensé que fue por el calentón.
Luke soltó una carcajada entrecortada por su respiración tan agitada y su pecho subiendo y bajando con rapidez, y se quedó observándome en silencio. A continuación, como si se hubiera olvidado de nuestra conversación, acercó su rostro hasta el mio y su lengua delineó mi labio inferior para después entrar dentro de mi espacio bocal, juntándose con la mía. Entonces, consiguió hacerme olvidar de todo lo que nos rodeaba. Proseguí con el beso hambriento soltando un gruñido del placer, sintiendo como si el tiempo se fuera a detener y nos íbamos a quedar así para siempre.
No obstante, eso no iba a suceder.
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ahre me pasé chama.
pero me pasé pasé
pero bueno, la vida :vvvv
POR CIERTO ESTE VIERNES (estoy editando esto el dia 20 de febrero ahr) SALE WANT YOU BACK DE 5SOS LLPPPPMMM POR FIN
pd. he escuchado mucho dos canciones que deberíais escuchar para el capítulo que son; high de dua lipa y wethan, y la otra, que está en multimedia, es sacrifice de black atlass.)
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