No me gustaba el plan, pero sabía que no había otra opción. Caminé detrás de Luke, observando mi alrededor asustada y tensa, sin saber que podía aparecer, mientras recorríamos ese pasillo abajo con los chicos delante. Después de unos minutos, encontramos la puerta que había nombrado Kit, la cual debían cruzar él y los dos chicos tres chicos restantes para investigar si había la salida que llevaba a un túnel de carriles el cual daba al bosque de detrás del edificio.

Nos despedimos de cada uno de los chicos, prometiendo que si no encontraban nada o pasaba algo, que se volvieran para nosotros al instante con una palabra clave que habíamos pensado: Plata, una palabra simple de recordar y fácil de decir, pero que si encontraban la salida, hicieran ruido con el trozo de metal que llevaba Calum encima para que Luke lo escuchara.

A continuación, entraron uno a uno y Luke y yo nos quedamos en ese pasillo interminable, en una distancia considerable, con el objetivo de vigilar el perímetro. Podía ser peligroso, pero yo era la única que conseguía alejarlos. Con esa presión encima, respiré profundamente y suspiré, me apoyé contra la pared, mirando fijamente el suelo.

Intenté meterme en mi mundo, para poder relajar mi cuerpo, pero escuché como Luke murmuraba en silencio, caminaba de un lado a otro y acariciaba su rostro desesperado, haciendo que toda mi atención fuera hacia él.

- ¿Qué te pasa?- susurré, sin tener valor de alzar la voz en ese momento, por el cansancio que llevaba encima y por el miedo.

Luke no me miró, escuché como suspiró aún dándome la espalda, caminó hacia un lado para poder ver su perfil y como se mordía el labio inferior.

- Nada.

- ¿Cómo que nada? ¿Estás de coña?- pregunté, alzando una ceja.

- No me apetece discutir, parece que es lo único que hacemos.- murmuró y sentí como en su voz había más tristeza que furia.

- ¿Por qué crees que hay algún motivo para discutir?- mascullé, y lo miré, buscando sus ojos, pero él no quería tener contacto visual.

- Deja de hacerte la inocente, joder- dijo él asustándome por el tono de voz normal de repente en ese silencio además que giró su cuerpo para poder mirarme-. Os vi, a ti y a Ashton, antes.

Cuando escuché sus palabras, quedé sin habla, sin saber como debería responder a eso. Mi mente, con rapidez, dividió los dos momentos que había tenido con el rizado, así que quedé confusa a que se refería.

- Dices...dices cuando...

- Mientras discutía con Kit ostia, pero si lo sabes perfectamente- espetó, y aunque él no lo supiera, me tranquilizó todo el cuerpo. Mordí mi labio inferior, esperando a que Luke siguiera hablando, pero no lo hizo, nos quedamos en silencio, tan solo mirándonos. Después de segundos así, el chico volvió a suspirar con lentitud-. Da igual, como dije, no me apetece discutir.

- No puedes abrir el tema y dejarlo así.

- ¿Y que quieres que haga? No sé como coño decirte que me duele que estés tonteando con Ashton enfrente mio.

- ¡No estábamos tonteando!- exclamé alejándome de la pared al instante, sin estar de acuerdo con sus palabras. Me di cuenta lo que hice y tapé mis labios sabiendo que no debí hacer eso, nos quedamos callados durante un rato, pero por suerte nada ocurrió.

- Ahora me dirás que agarrarse de la mano y echarse miradas no es tontear.- susurró Luke, alzando una ceja cabreado, teniendo mucho en cuenta su tono de voz intentando que aunque no esté gritando, se noté su enfado.

- Solo le sonreí porqué vino a hacerme compañía mientras tu, como siempre, entrabas al trapo con Kit y la mano la aparté, no sé si te diste cuenta de eso.

Luke fue a contestarme, sin embargo un ruido aterrador retumbó por todo el lugar, me asusté y temblé en el sitio. Observé mi alrededor, vi como la pared se empezó a formar unas grietas gigantescas y justo cuando bajé la mirada para ver a Luke, el techo se derrumbó. Grité y de la misma potencia de las rocas de cemento caer al suelo, me caí al suelo a unos metros de distancia. Por mala suerte, mi pierna se rasgó contra el suelo y como no llevaba nada que tapara mi piel, se formó una herida no muy grave pero dolorosa. Gemí de dolor y miré enfrente mio, como había mucho polvo, tosí desesperada ya que era difícil respirar. Mi mente recordó al chico al momento y mi corazón palpitó con mucha más rapidez, me levanté torpemente y grité su nombre una y otra vez, esperando alguna respuesta.

No la obtuve. Mierda. En el brazo sentí un ligero escozor aumentar y cuando miré, visualicé que también me había herido mi codo a la vez que mi antebrazo, e hice una mueca al darme cuenta que se había rasgado la chaqueta de Luke. No le di mucha importancia, ya que se escuchó un grito. Pero no era del rubio, era una mujer. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo y me retiré hacia atrás con pasos torpes, sintiendo que algo estaba viniendo, algo muy malo. Miraba a mi alrededor, sin dejar de caminar con la mente completamente en blanco y el dolor de mis dos heridas destacando en mi cuerpo.

Solo se escuchaba mis jadeos y mi corazón palpitar en ese lugar, además que el frío me había envuelto, haciéndome temblar. Sin esperarlo, de los trozos del techo que cayeron, una masa negra espesa se empezó a crear y de allí, se empezó a formar un escalofriante cuerpo de una mujer. Su piel era de color gris y estaba llena de hematomas y cortes, su pelo oscuro largo y mal cuidado destacaba, y cuando alzó su cabeza unos ojos negros chocaron con los mios. Quedé sin respiración, la mujer se alzó como por arte de mágia y en menos de dos segundos, se encontró enfrente mio mostrándome una sonrisa terrorífica que se componía de la falta de dientes y sangre, mucha sangre.

Grité asustada y mi mente se nubló, para después sentir como mi cuerpo se desvaneció.

(...)

Escuché gritos de fondo cuando recuperé la consciencia, no podía reconocer las voces ya que seguía muy mareada y confundida. Tras unos segundos, pude abrir los ojos con dificultad, acostumbrándome a la poca luz que hacían las dos bombillas de las paredes. Me orienté en el suelo, a unos metros de distancia se encontraba Ashton y le gritaba a alguien que tenía delante, así que giré mi cabeza hacia mi izquierda, para distinguir a Luke, también lejos de mi. Coloqué mi mano encima mi cabeza dolorida y me recompuse en el sitio, intentando recordar que había pasado y porqué estábamos allí.

- ¿Chi...chicos?- susurré, con la voz un poco ronca, pero suficientemente alto para que me escucharan. Los dos pararon de discutir y me miraron sorprendidos a la vez que gritaron mi nombre felices, pero ninguno de los se movió. Fruncí el ceño y miré mi alrededor- ¿Dónde estamos?

- No lo sabemos, aparecimos aquí al igual que tu desmayados.- habló Ashton, antes que el rubio.

Mientras hablaba, me levanté del suelo un poco torpe apoyándome de la pared con pocas fuerzas, y cuando tuve suficiente equilibrio caminé hacia delante justo cuando Ashton terminó de hablar. Los miré y antes de dar un paso más, ambos alzaron las manos para que parara. Los miré confundida y cuando miré el suelo, observé como esa sala redonda se dividía en tres triángulos, y la punta de Ashton se encontraba destruida, mostrando un fondo oscuro.

- Intenté ir hacia Luke cuando despertamos, pero cuando quise traspasar la linea, se destruyó.- volvió a hablar el rizado, señalando el agujero y yo como acto automático, me retiré hacia atrás.

- Esto es algo de ellos, estoy jodidamente seguro.- masculló Luke con rabia y caminó hacia atrás a paso lento. Como sabía que no se encontraba en condiciones para hablar, miré al rizado.

- ¿No sabes si los chicos están bien o algo? ¿Recuerdas algo antes de desmayarte?

- Tan solo recordar ser perseguido por uno de ellos y desmayarme por un golpe en la cabeza. ¿Qué te paso a ti?

- También recuerdo poca cosa.- susurré sin mirarle a los ojos. Había mentido, me acordaba de todo, sin embargo me  limité a decir eso, para que el tema de la discusión con Luke no apareciera o el chico volviera a acordarse.

Ashton quedó satisfecho con mi respuesta, asintió con la cabeza, y todos quedamos en silencio, observé las paredes, habían dos bombillas que iluminaban con leve potencia la sala y como encima la temperatura era fría, la sensación de estar allí era tenebrosa. Miré al rubio, quien estaba apoyando su antebrazo contra la pared y su frente estaba contra éste, haciendo que mirara hacia abajo, además que lo escuchaba murmurar.

Inesperadamente, mis ojos observaron de reojo como en la pared justo arriba donde los dos trozos de suelo de Luke y Ashton se unían, empezaron a surgir palabras. Giré mi cabeza al instante y quedé paralizada y asustada, quedé quieta mirando como cada palabra brotaba de ese muro utilizando sangre como tinta.

La olor llegó hacia a mi y reprimí las ganas de vomitar ante ese aroma repugnante

- ¿Estáis...estáis preparados preparados para jugar a un juego?- leyó Ashton con la voz temblando y a mi se me aceleró el corazón cuando esas palabras dejaron de surgir teniendo un sentido. 

Miré a Luke, y avanzó unos pasos mientras examinaba lo que había leído recientemente el rizado, a continuación todo su cuerpo se tensó y miró su alrededor desesperado.

- ¡Os dije que no los tocarais! ¡Teníamos un pacto cabrones!  Joder.- gritó el chico, mientras hablaba hacia arriba, hacia los lados y hasta en el suelo, supongo que no sabía donde se encontraban. Quedé confundida, sin entender a que se refería con ese plan y fruncí mi ceño.

- ¿De qué pacto hablas?- me sorprendí cuando esa pregunta la repitió también Ashton, nos echamos una rápida mirada y luego miré a Luke fijamente esperando una respuesta.

Antes de que pudiera hablar el chico, más palabras surgieron de ese muro mugriento y los tres quedamos quietos viéndolas hasta que se pudo leer "Ya habrá tiempo para las confesiones." Nadie dijo nada, tampoco tenía algo en mente, estaba completamente en blanco.

- No me voy a quedar aquí viendo como nos tratan como ratas de laboratorio.- espetó Luke con furia y empezó a caminar hacia donde me encontraba, sin embargo cuando llegó casi a cruzar la línea que nos separaba, ese trozo de suelo empezó a destruirse, dejando otro agujero sin fondo. Grité el nombre del chico asustada y éste por suerte se apartó al instante, sin haber consecuencias de su acto sin ser pensado.

Respiraba muy agitadamente y podía sentir mi corazón en mi garganta por el miedo que recorría mi cuerpo. Observé la pared otra vez y tragué saliva.

- ¡Esta bien! ¡Jugaremos!- grité, y miré a mi alrededor, sin saber hacia donde coño debía hablar.

- ¿Pero qué dices?- las voces de Ashton y Luke dijeron a la vez y sus ojos se clavaron en mi. Después se echaron un vistazo rápido y fue Ashton quien habló antes que el rubio-. Addison, no sabemos que tienen planeado.

- Debemos arriesgarnos, no hay otra opción. 

- Podemos encontrarla.

- ¿Ah si? ¿Dónde?- alcé una ceja, intentando hacer ver a Ashton que su comentario era absurdo.

- No sé, podemos pensar en...

- Nos están vigilando, controlan todos nuestros movimientos, yo no tengo nada de poderos paranormales, ellos ahora mandan sobre nosotros- concluyó Luke, en un murmulló y lo miré, quedando todavía más asustada y mis manos empezaron a temblar.  El rubio dejó escapar un largo suspiro y aún dándome la espalda, apoyó una mano encima la pared-. Juguemos.

Al instante, las luces se apagaron dejando el lugar en una completa oscuridad tenebrosa y el suelo comenzó a temblar como un ligero terremoto. Me apoyé corriendo a la pared para no caer y cuando pasaron unos cinco segundos, las bombillas parpadearon con lentitud volviendo a encenderse y me fije como en la pared fueron apareciendo palabras nuevas.

- El juego consiste en confesar si habéis hecho los actos impuros que se os escribirá. Debéis ser completamente sinceros o...habrán terribles consecuencias para el mentiroso.- leyó Ashton casi a punto de llorar por su voz completamente irregular y su falta de respiración.

Mordí mi labio inferior ahora así, aterrorizada por completo y sentí que necesitaba a alguien a mi lado, necesitaba sentir que tenía el apoyo de alguno de los dos, pero ellos habían jugado con eso también, sí que estábamos bajo su control.  

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En el juego ha sido inspirado en la película; Eliminado (en multimedia esta el trailer)

gracias poor leer jejeje <3