
capítulo veintitrés
❝Visita❞
— ¡Jungkook! — El mencionado volteó, y sonrió al ver de quién, o más bien, quienes se trataban.
— ¡Jisoo, Yoongi! — exclamó feliz, y soltó a Taehyung yendo hacia sus amigos.
— Pequeño bambi — sonrió Yoongi, y revolvió el cabello del menor.
Taehyung se enderezó, observando a lo lejos a Jungkook con sus amigos. El se veía realmente feliz.
— No saben cuánto los extrañe, ocupaban un 90% de espacio en mi aburrida vida. — Bromeó el menor de todos, y los mayores rieron.
— Nosotros también te extrañamos, el trabajo no es igual sin ti Kook. — Dramátizo la pelirroja, y los tres se separaron del abrazo.
— Es cierto, pero, ¿Quien es Taekyung? — Pregunto Yoongi, poniendo sus manos en sus bolsillos.
— Uno, es Taehyung —, le corrigió el menor —, y dos, nos está esperando, vengan.
Jungkook camino hacia donde estaba Taehyung, jugando con algunas flores, no quería que los amigos de Jungkook se sintieran acosados por su mirada.
— Taehyung. — El mencionado volteó, y se paró, como era costumbre en el —, ellos son Yoongi y Jisoo, si vinieron.
El castaño les sonrió al par de amigos, e hizo una reverencia por cortesía.
— Mucho gusto, soy Kim Taehyung. — Los dos amigos voltearon a verse, y volvieron a mirar al castaño, quien por su parte estaba algo nervioso por sus miradas, parecía que lo juzgarán o algo.
— Wow, yo creí que serías lindo pero eso te queda claramente corto, eres muy bello. — Comento Jisoo, acercándose al menor, apretando sus mejillas.
— Si yo hubiera estado en tu lugar también lo habría buscado. — Le dijo Yoongi a su amigo, y Jungkook le lanzó una mirada de reproche —, Yaya hombre, que es broma.
— Bueno Taehyung, cuéntanos de ti, queremos saber más de ti.
Jungkook se sentó al lado del castaño, y el último mencionado se apoyó en el.
— Mmm, ¿Que podría contarles? Tengo 25 años, cumpliré 26 en diciembre, estoy aquí desde que tengo 15 o 14, sinceramente no llevo la cuenta, si no estuviera aquí me gustaría ser fotógrafo o pintor, captar el amor o los sentimientos en una foto o en un lienzo me haría muy feliz. — Contó el castaño con ilusión.
— Así que, tu ya tienes metas y sueños que deseas cumplir. — Taehyung asintió de inmediato ante las palabras del pelinegro.
— Ujum, oigan, ¿No quieren dar un recorrido por el hospital? Aunque sea deprimente, es interesante para las personas con privilegios. — bromeó el de piel acanelada y se paró, acomodando la camisa del hospital que traía puesta.
— oh, eso no estaría mal, total y queremos distraernos un rato. — La pelirroja sonrió dulce, y Taehyung empezó a caminar, hacia dentro del edificio.
Caminaron por los pasillos blancos y perfumados, y Taehyung les contaba que habían más habitaciones de lo que ellos pensaban.
Jungkook no sabía que había lugares de cine o canchas de fútbol, el se entereaaba recién.
— Por supuesto, esas habitaciones están reservadas para los que tienen más dinero, uy, los riquillos y sus privilegios.
Los demás rieron ante la actitud del castaño, y este volteó a verlos confundidos, no sabía de qué se reían, pero debía haber sido divertido.
— ¡Taehyung! Ya te encuentro.
El grupo de amigos volteó a ver al enfermero, y Taehyung hizo una mueca, poniendose detrás de Jungkook, como protegiéndose.
— ¿Que paso Hoseok? — el enfermero miro al grupo de amigos y luego a Taehyung.
— Ayer se olvidaron de darte tu medicina, tendré que dartela hoy. — Kim abrió sus ojos en demasía y negó de inmediato.
— Me niego, Kook, no dejes que me lleve. — Dramátizo el mayor de los dos, aferrándose al brazo de Jungkook.
— Taehyung, no lo hagas peor, ven ya. — Sin darle tiempo a Jungkook de hablar o al par de amigos a reaccionar, el enfermero que se llamaba Hoseok se estaba llevando a Taehyung a su habitación.
— Sueltane enfermero de quinta, ¡Quítame las manos de encima si no quieres acabar en el hospital de al lado! ¡Hoseok! — se escucharon los gritos del castaño por el pasillo, y finalmente desaparecieron de la vista del más menor de todos.
— wow, eso fue intenso, ¿Volvemos al jardín? — dijo Yoongi, con un rostro sereno —, tengo que decirte algo importante y darte algo que también te servirá.
Jungkook asintió, saliendo de su trance, fueron de nuevo al jardín, y el camino fue silencioso, además de incómodo.
— Taehyung, se ve muy agradable — comentó la pelirroja, una vez estuvieron en el jardín —, pero, a simple vista parece que no tiene bipolaridad, se comporta muy amable y también algo tímido.
— En eso te doy la razón Jisoo, solo se vió alterado cuando ese enfermero se lo llevó, pero aún así cambio de emoción drásticamente, no olvidemos que les dan medicinas para mantenerlos controlados o sumisos. — Propuso, esta vez Yoongi.
— Okey, ahí si me agarraste. — La chica, acomodó su cabello y miró al menor de todos, quien los veía sin ninguna expresión.
— ¿Que tenían que darme? — Jungkook alzó una ceja, intrigado, y el par de amigos asintieron de inmediato.
— Estuvimos investigando de Taehyung, cosa que tú pudiste haber echo, flojo, pero no encontramos nada, solo...
— Una noticia sobre una de las familias más reconocidaa de Corea, ¿Recuerdas a la familia Kim? — Jungkook asintió, y Jisoo aplaudió. Luego miro a Yoongi, había interrumpido su plática y no estaba feliz con eso.
— Si, bueno, al parecer, esa familia de riquillos tuvo un hijo, que casualmente se llama igual que Taehyung, apellido y nombre, pero solo se ha visto una vez, cuando tenía unos tres meses, pero aún así, te recomiendo estar alerta.
Jungkook asintió rápidamente, y observo cómo el mayor de los tres sacaba algo de su bolsillo.
— Ten, es una grabadora y una pequeña cámara, tal vez te sirva de algo aquí, ah, y una foto de los señores Kim, tal vez vengan a visitar a Taehyung. — Comento serio el pelinegro, y se enderezó.
De repente Jisoo, se sobresalto y se acercó a los dos.
— Hablando de los Reyes de Roma chicos, miren ahí. — susurro la muchacha, y ambos jóvenes voltearon disimuladamente.
Se encontraron con una mujer rubia teñida con piel clara y gafas de sol, mientras un vestido rojo se ajustaba a su cuerpo, y un chaleco cubría sus piernas pero dejaba a vista el vestuario. Y con un hombre alto, de piel acanelada, ojos negros, claramente castaño, este tenía más similitud a Taehyung, de no ser por su mirada fría y dura.
— Teníamos razón. — Dijo orgullosa la pelinegra, y Yoongi negó.
— Jungkook, tenemos que irnos con urgencia, ¿Puedes encargarte de esto?
El azabache, aún sorprendido asintió, y sus amigos se despidieron de él, y salieron de ahí, aunque Jeon pudo ver a sus amigos tomándole fotos a los señores Kim muy disimuladamente.
La verdad, una noticia de estas no se ven todos los días.
"Los tan famosos empresarios Kim, tienen un hijo internado en un hospital psiquiátrico"
No se hablaría de otra cosa en semanas.
— Disculpe, señorita, queremos ver a Kim Taehyung. — Hablo con voz firme la señora, acomodando un poco su larga cabellera rubia.
Jungkook debía estar atento, y tenia una ventaja. La grabadora y la cámara.
WAAAA perdón por demorar, no salió tan bien como pensé, perooo, adivinen, estuve revisando y...
Asylum está cerca del final.
Así es, muy, muy cerca del tan ansioso final.
Nos vemos 🐢💕.
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