Narra Sallex
Varias horas de pláticas, juegos y demás cosas llegamos a New Ford. Los tres bajamos muy emocionados. Después de ir por nuestras maletas, nos acercamos a la entrada de la terminal.

<Bienvenidos a New Ford>

Se leía en el cartel de enfrente de la puerta. Al salir vimos por primera vez la ciudad de New Ford.

¡Es hermosa está ciudad! ¡Muy pintoresca! ¡Me encanta el aroma a naturaleza que se siente en en ambiente!

Esto será genial... sólo tenemos un pequeño problema...

- ¿Donde viviran? - nos preguntó Abril.

- De hecho tenemos casa - le respondió mi hermano, - sólo que... no sabemos cómo llegar a ella.

- ¿Tienen problemas marineros? - se escuchó de pronto una voz femenina.

Narra Abril
Les estaba preguntando a los zorros sobre su hogar cuándo se escuchó una voz hablarnos. Volteé hacia la voz y vi a una gata hablándonos.

- ¿Tienen problemas marineros? - nos dijo la gata.

- Este... algo así... - dijo Salex, ¿nerviosa? - Lo que pasa es que mi hermano y yo somos nuevos aquí y no sabemos llegar a nuestra nueva casa.

- Y yo no tengo dónde quedarme - agregue como si nada.

- Ahh... nuevos marineros, un gusto. Mi nombre es Flor Badilla - se presentó la gata.

- Somos Víctor y Sallex Lopex - dijeron los zorros a la vez.

- Y yo soy Abril Grayson - le respondí después con mi alegría de siempre.

- Bien, si gustan los guió par de pequeños zorros, sólo diganme la dirección - les dijo Flor con un tono serio, pero a la vez... ¿protector?

Narra Víctor
Despues de darle la dirección a Flor, los cuatro empezamos a caminar algo callados. Luego Abril empezó a hablar y terminamos de alguna manera absurda hablando de yaoi y yuri, tema que parece que a Flor le encanta, pues nos dijo que es fujoshi.

- Ya llegamos zorros - nos dijo nuestra nueva... ¿amiga? ¿conocida? No se, no nos dio alguna pista para saber eso.

- ¡Gracias Flor! - le dijo Sallex al tiempo que la abrazaba. La gata gruñó como respuesta, por lo que mi hermana se separó, . - Lo siento Flor...

- No te preocupes pequeña marinera - le respondió Flor a mi hermana, despeinandola un poco, lo que la dejó bastante sonrojada.

- Bueno, adiós chicas - les dije a las otras dos, - ¿nos vemos luego?

- Claro - respondieron ambas a la vez. - Hasta mañana zorritos - dijeron antes de irse caminando.

Mi hermana y yo entramos a nuestra nueva casa, y la exploramos un poco. Buscamos los baños de la casa, apagadores, habitaciones y lo más importante para ambos, la cocina.

- ¿Entonces la gata te sonrojó hermana? - le pregunté casi riendo, después de que ambos dejáramos nuestras maletas en nuestra respectiva habitación.

- Silencio hermano... - me dijo mi hermana, visiblemente sonrojada y mirándome. La verdad mi hermana sonrojada es bastante tierna...

- Ya, ya me callo Sallex - le dije sonriendo. - ¿Qué ocurre hermana?

- Nada... sólo que... ¿recuerdas porqué empezamos a pelear entre nosotros? - me preguntó Sallex y la verdad, esa pregunta me sorprendió.

- Claro que recuerdo el porqué... sólo dime, ¿a qué viene esa pregunta?

- Curiosidad y no recuerdo bien la respuesta - me dijo algo entre seria y sonriente.

- Bien, antes, en nuestra infancia, éramos los mejores amigo-hermanos. Despues... nuestros padres pareció que se iban a separar, supongo que temían algo entre tu y yo... así que decidimos empezar a pelear falsamente en frente de ellos y luego... pues se nos olvidó que era falsamente y peleamos de verdad - le expliqué a Sallex lo más resumido que pude hacerlo. - Sólo que aún no sé que es lo que evitaban entre nosotros.

- Hermano... creo saber que evitaban - dijo Sallex, dejándome claramente sorprendido, y acercándose un poco a mí.

Continuará...