Soyeon estaba desesperada, hace unos días había descubierto (lo que ella creía) la infidelidad de su papá Beomgyu hacía su padre Yeonjun, y no sabía que hacer.

Desde que lo descubrió se volvió aún más distante con su rubio padre y más cortante con quienes la rodeaban.

El día que se enteró, Jake le propuso contarle toda la verdad al señor Yeonjun pero la rubia no quería que eso hiriece a su padre; aunque pensándolo bien, ocultarlo solo lo lastimaría más.

Estaba decidida, esa misma tarde le contaría todo lo que sabe.

Con determinación se dirigió al edificio donde Yeonjun trabajaba, ciertamente no conocía ese lugar al cien por cierto pues apenas había ido un par de veces, pero claro que recordaría donde estaba la oficina de su padre.

O eso pensaba pues tan solo tomó el elevador, subió un par de pisos y se perdió. Por suerte su padre pasaba por uno de los pasillos justo en el momento en que las puertas del elevador se abrieron.

Sin tardar, corrió en dirección a su progenitor y con un abrazo llamó su atención.

-¿Pero qué? ¡¿Soyeon princesa?! -exclamó al sentir que unos delgados brazos le envolvían la cintura y distinguir una cabellera rubia- ¿Qué haces aquí?

-¡Papá Yeon! ¡Tenía razón, yo tenía razón! -decia con insistencia aferrándose al cuerpo del mayor mientras soltaba pequeñas lágrimas.

-¿De qué hablas mi princesa? ¿De qué tenías razón? -preguntó preocupado ante la actitud de su hija.

-De papá Beom -con la mención de su esposo, Yeonjun supo que algo andaba mal- ¡Nos engañó a todos! El chico, Sunghoon, no es sobrino del tío Taehyun ¡Es su amante!

-¡¿Qué?! -exclamó confundido alejando a la chica para verla a los ojos.

-¡Qué papá Beomgyu tiene un amante y es Sunghoon!

-¿Por qué dices eso? -habló con un tono de voz enojado- ¡No puedes andar diciendo ese tipo de cosas sin tener pruebas!

-¡Pero si tengo pruebas papá! ¡Los ví hace unos días en una cafetería muy cariñosos! ¡Eso no es normal papá!

Yeonjun trataba de mantenerse en calma, quería que eso fuera solo un mal entendido pero la actitud de su hija no ayudaba.

Beomgyu había actuado raro desde que el jóven peli-negro entró en sus vidas, eso no era simple casualidad.

-Si es verdad lo que dices ¿Me podrías llevar al lugar donde los viste? -preguntó con toda la calma que pudo.

-Por supuesto papá Yeon, la cafetería está a unas cuadras del estudio de baile al que va Jungwon

En el fondo, Yeonjun sabía que hacer eso estaba mal, que destruiría la confianza que le tiene a su esposo; pero después de ver a su hija llorar sin consuelo al relatarle todo lo que vio hace días, sentía que algo andaba mal y le pondría fin a eso.

Ahora se encontraba caminando hacia la dichosa cafetería donde, según Soyeon, Beomgyu se reunía con su amante.

Ciertamente el Choi mayor tenía muchos sentimientos y emociones encontradas, rogaba porque todo fuera un mal entendido que un par de adolescentes crearon, pero todas sus dudas se resolvieron cuando a lo lejos pudo observar una cabellera rubia que tanto le encantaba junto a una peli-negra a la cual le había brindado su confianza.

Ambos estaban sentados en una de las mesas fuera del establecimiento, tomados de la mano mientras reían de lo que sea que estuvieran platicando. De vez en cuando Sunghoon se sonrojaba por lo que Beomgyu decías, esos fue suficiente para Yeonjun.

Sin pensarlo mucho, se acercó a paso firme hasta estar frente al pálido chico y tomarlo de la chaqueta para levantarlo de la silla.

-¡Cómo pudiste hacerme esto! ¡Te permití entrar a mi casa, te dí mi confianza! -gritaba sacudiendo al chico que estaba asustado- ¡¿Y así es cómo me pagas?!

-¡Yeonjun déjalo! -intervino Beomgyu al ver que su hijo estaba muy nervioso- ¡No es lo que estás pensando!

-¡NO BEOMGYU! ¡Tu también me mentiste! -dijo soltando a Sunghoon para acercarse al rubio- ¡¿Qué es lo que me falta para que tengas que buscarlo en alguien más?!

-Nada cariño, no te estoy engañando con alguien -confesó soltando unas lágrimas, desesperado.

-¡No me llames cariño! ¡Es claro lo que está pasando aquí!

-Señor Choi, le juro que no es lo que cree

-¡TU CÁLLATE! ¡No tienes derecho a hablar aquí! ¡Todo esto es tu culpa! -reprocho levantando la mano, dispuesto a pegarle al pálido peli-negro pero fue detenido por Beomgyu- ¡¿Qué haces, sueltame?!

Acto seguido empujó un poco al rubio haciendo que cayera al suelo.

-¡¿Qué le sucede?! -exclamó Sunghoon acercándose a Beomgyu pero siendo detenido por Choi.

-A mi esposo no te le acercaras nunca más -advirtió dándole una mirada furiosa; la cual fue ignorada por el jóven y trató de levantar a su padre- ¡TE DIJE QUE NO LO TOQUES!

Las emociones de Yeonjun estaban fuera de control, así que sin siquiera pensarlo empujó fuertemente al chico, haciendo que perdiera el equilibrio y cayera completamente al piso, estampando su cabeza con la jardinera que dividía la cafetería de la calle.

-¡SUNGHOON! -gritó el rubio levantandose lo más rápido que pudo, pero siendo detenido por su esposo, tomándolo del brazo- ¡SUELTAME!

-No lo toques, solo se está haciendo la víctima para que vayas con él -soltó sin remordimiento el Choi mayor, viendo el cuerpo inconciente del chico.

-¿Cómo te atreves a decir eso? -le dijo Beomgyu enfurecido, soltandose del agarre de Yeonjun.

Con lágrimas en los ojos se colocó al lado de Sunghoon, revisándolo con la mirada hasta dar con su cabeza, estaba sangrando.

-¡Está sangrando! -volteo si rostro al de Yeonjun, el cuál cambió a una mueca de preocupación- ¡Llamen a una ambulancia! ¡SI LE SUCEDE ALGO A MI HIJO NO TE LO PERDONARÉ CHOI YEONJUN!

Al oír las palabras de Beomgyu, Yeonjun quedó en shock ¿Hijo? ¿Acaso dijo hijo?

Eso no podía ser posible.

¡¡¡No puede ser!!!
Actualizo después de un mes, pido perdón 🙏 pero mi vida últimamente ha sido una locura.

Espero les gustara el capítulo y porfis no se molesten con el Yeonjun de ésta historia.