La gran guerra de Underworld parte 3: Desesperacion
Buenas y bienvenidos a un nuevo capitulo espero les guste
Más de cincuenta mil americanos acababan de ser invocados. Era imposible que tantas tropas pudieran ser ubicadas en tan poco tiempo, y no podían ser japoneses. Si se hubiese difundido un anuncio en Japón, Klein y los demás habrían sido los primeros en saberlo.
Estos eran fantasmas. Todas eran sombras incorpóreas creadas con Artes.
En cierto punto, los jugadores japoneses, que estaban a punto de demoler completamente a los jugadores estadounidenses en la línea de enfrente, habían dejado de pelear y se quedaron mirando aquella escena. El espacioso campo de batalla se llenó de un silencio misterioso.
El parloteo, que provenía del ejército rojo que había llenado completamente la azotea del palacio llegó a los oídos de Asuna como un viento siniestro.
Por un momento, Asuna fue incapaz de descifrar exactamente su idioma mezclado con el vibrante ruido. Ella enfocó desesperadamente su oído, y finalmente logró detectar algunas palabras que fueron pronunciadas más fuerte que otras.
—Bigeobhan ilbon-in.
—Uli nalaleul jikyeola.
—Ganchuu renmen.
No era inglés. Tampoco era japonés. En ese momento, Klein soltó un gemido completamente irreconocible:
—Ah... Esto es malo... Esto es realmente malo... Ese enorme ejército no es de Japón ni América...
Asuna sintió un sudor frío correr por su espalda mientras escuchaba sus propias palabras:
—... Son de China y Corea del sur.
Mientras tanto en Seúl un chico de aproximadamente 20 años se recargaba en su silla dentro de un arcade VR, estaba disfrutando su tiempo libre antes de hacer su servicio militar.
—Si sólo pudiera tener esto en el ejército...
Murmuró mientras recogía la interfaz de FullDive colgando de un soporte sobre la mesa: el "AmuSphere". Perteneciente a un VR bar popular, el dispositivo estaba maltrecho por dentro y por fuera, pero para él, esta máquina brillaba más que la corona de un ángel.
—Realmente quiero jugar un juego completamente coreano antes de que me vaya para el ejército, pero parece que ese barco ha zarpado — suspiró una vez más, apartando el pensamiento de su mente. Se recostó pesadamente en su silla reclinable y se conectó al AmuSphere.
— ¡Link Start!
Pasando por los rayos de luz, ingresó el ID de usuario y la contraseña de la barra VR. Llegó a un área de lanzamiento simplista. Luego, se preparó para presionar el icono de «Silla Empire».
Pero en ese momento, se dio cuenta de que una ventana de una red social, flotando en el lado derecho del espacio oscuro, se llenaba de comentarios a una velocidad de locura. Parecía como si los varios cientos de usuarios que él seguía publicaran una sola noticia.
—¿Qué está pasando? — Desconcertado, empujó el programa de lanzamiento hacia la izquierda, y tiró la ventana de la red social hacia él. Luego abrió el enlace y leyó la noticia en voz alta.
— "Voluntarios coreanos, estadounidenses y chinos han desarrollado conjuntamente un nuevo VRMMO, y su servidor de prueba... ha sido invadido por jugadores japoneses" ¿qué? ¡¿Están atacando a los jugadores de prueba?! ¡Qué demonios!
Mientras leía se mostraba un video de cómo se libraba aquella batalla donde los japoneses se mostraban bastante desesperados para ser un simple ataque.
Una llamada entrante apareció enfrente suyo
—¿Viste el video Moonphase? — Dijo una voz femenina
—Mei Mei Shang, si acabo de verlo — Respondió el chico
—Descarga el cliente cuanto antes
—¿Qué opinas tú de esto?
—No lo sé, pero si es verdad es posible que nuestros compañeros la estén pasando mal
—Si, pero el video...
—Por ahora instalalo, yo entrare ahora mismo — Mei colgó sin darle oportunidad a Moonphase de contestarle.
—Lo sabre cuando entre, veo que muchos de mis amigos están participando.
Mientras tanto Sinon esperaba al emperador de la oscuridad Vector en las piedras circulares, Alice ya se había marchado y tenía que evitar la siguieran.
Una especie de líquido negro comenzó a caer en una columna frente a la arquera dejando un charco del cual comenzaba a salir alguien que solo veía en sus pesadillas, un hombre de cabello rubio y ojos azules.
—Lo conozco no hay duda, esos ojos ese rostro...
Lentamente levanto ambos brazos a la altura de sus hombros y cerrando los puños en señal de estrangulamiento generándole a Sinon un miedo demasiado grande.
—Subtilizer
— ¿Alice se fue? No importa, puedo atraparla rápidamente... — Luego volvió a mirar a Sinon, y sonrió ligeramente. — Hasta donde recuerdo, tú y yo debimos haber luchado antes en un torneo de Gun Gale Online. Te llamas... "Sinon", ¿No es así? ¿Quién podría haber imaginado que nos volveríamos a ver en un lugar como este?
Escuchando la voz inhumana de ese hombre, quien al mismo tiempo era el Dios Oscuro Vector y Subtilizer, Sinon desesperadamente trató de hacer que sus manos dejaran de temblar. Pero sus dedos estaban rígidos, sus palmas bañadas en sudor, y sentía que si hacia algún momento repentino, hasta el Arco de Solus se le caería.
De pie en la espalda de la criatura alada con forma de disco, Subtilizer sonrió fríamente y continuó con un japonés muy fluido.
— ¿Qué está pasando en realidad? Escuché que no había más unidades STL en Japón... ¿Acaso podrías estar asociada con RATH?
— Subtilizer... quiero saber por qué estás aquí.
— Porque es inevitable, claro está.
Subtilizer extendió sus brazos enrollados en su atuendo de combate gris, pareciendo incapaz de suprimir el júbilo dentro de él, y continuó.
— Es el destino. El poder del alma que nos ha arrastrado a ambos, juntándonos. Si... te quiero. Es por eso que nos volvimos a reunir. Esto explica mucho las cosas. Ya sea que mi objetivo, cuya alma absorbida a través del STL, esté limitado a Fluctlights Artificiales, o incluya humanos del mundo real... también entenderé completamente la dulzura de tu alma, la cual fui incapaz de saborear durante ese torneo de GGO.
Mientras Sinon escuchaba esas extrañas palabras, las palabras que este hombre había dicho durante la cuarta BoB hicieron eco en su mente.
— You soul will be so sweet.
Su cuerpo se tornó increíblemente frío, rígido, e incluso su respiración pasó a ser errática.
— Ven... a mí, Sinon. Entrégamelo todo.
Un brillo helado destelló dentro de los ojos azules de Subtilizer.
El mundo se distorsionó. Aire, sonido e incluso luz comenzaron a retorcerse y absorberse en los ojos de Subtilizer. Incluso los pensamientos similares a ese parecían ser arrastrados por un poderoso magnetismo. Una esquina de su espíritu gritó, pero por alguna razón se sentía incomparablemente débil.
Finalmente, incluso el cuerpo con armadura azul de Sinon también fue succionado hacia los brazos abiertos de Subtilizer.
Los impotentes dedos de su mano izquierda tiraron desesperadamente de la cuerda de su arco, sacudiéndose silenciosamente en medio del aire. Segundos después, a través de su consciencia nublada y apagada, sintió como su cuerpo era envuelto en la oscuridad de Subtilizer.
La mano izquierda del hombre llegó a su espalda, la derecha pasó a través de su rostro y le acarició el cabello, alejándoselo del oído.
Los delgados labios de Subtilizer se acercaron a su oído ya expuesto, y esa voz como de agua negra helada penetró directamente en su cerebro.
— Sinon, ¿alguna vez has pensado en el significado detrás del nombre "Subtilizer"? —Completamente impotente, Sinon sacudió su cabeza de izquierda a derecha. — Se refiere a "el que refina", "el que talla", "el que selecciona" y "el que roba".
La luz se tornó mucho más intensa antes de explotar repentinamente de los ojos de Subtilizer, que ahora estaba directamente frente al rostro de Sinon.
— Te robaré. Robaré tu alma.
Sinon miró torpemente esos ojos azules, los cuales estaban lo bastante cerca para tocarlos, con unos remolinos netamente negros girando dentro como si fuesen agujeros negros. Era como si estuviese amaneciendo y ella despertándose de un sueño.
Tenía que hacer algo. Pero todo se sentía como un sueño, mientras que en realidad ella no estaba haciendo nada. Simplemente un ciclo de ilusiones repetidas.
Dedos tan fríos como el hielo acariciaron su cuello. Una repugnancia y terror intensos se elevaron desde el interior de su corazón, pero incluso esos fueron succionados rápidamente de su consciencia y reemplazados por un vacío grisáceo.
—No.
Esto ya no era un evento imaginario tomando lugar en un espacio virtual.
La compresión parpadeó en el borde de su consciencia como una alarma de destello rojo. Trató de concentrarse en ello, pero el líquido viscoso, pegajoso y negro ya había alcanzado su cintura, sin darse cuenta. No había escapatoria. Era inútil resistirse.
El rostro del hombre se acercó más y más. Sus pequeños y delgados labios se separaron, engullendo el aire. Llevándose con ellos sus emociones, pensamientos, e incluso su alma misma.
—Detente. No te la robes. — Hasta esas suplicas fueron robadas de inmediato, dejando solamente un entumecimiento. — De...ten...te...
Los labios del hombre lenta y gradualmente se acercaron a la temblorosa boca de Sinon cuando un impacto metálico le dio un vuelco repentino a la consciencia de Sinon.
Abrió sus ojos de par en par y vio unas chispas plateadas asombrosas esparcirse del collar en su parte superior mientras una melodía comenzaba a sonar.
En un instante, una sensación ardiente como un choque eléctrico superó la absorción de ese hombre. Sinon avivó su conciencia ligeramente recuperada como si se tratase de una bala y lanzó todo su peso contra los brazos del hombre, escabulléndosele y uso la habilidad de vuelo de Solus para ampliar considerablemente la distancia entre ellos.
Jadeando, extendió su mano derecha dentro de su atuendo superior para sacar el objeto que continuamente emitía esas chispas.
Era un dije metálico iluminado que colgaba de una delgada cadena. Un corazón con un agujero en su extremo, a través del cual pasaba la cadena.
— ¿P-por qué esto...? ¿Aquí? — Sinon murmuró ahogadamente, atónita. Era un collar que Asada Shino siempre mantenía colgado en su cuello en el mundo real. No era nada valioso. La cadena era de acero quirúrgico inoxidable, y el dije metálico era simplemente una pieza ordinaria de aluminio plateado. Sin embargo, para Sinon, eso significaba mucho.
A finales del año pasado, ella se vio envuelta en el "Incidente de Death Gun". Uno de sus compañeros de clase fue miembro de un grupo criminal, y justo cuando él la atacó con su inyector de alta presión lleno de veneno "Succinilcolina", su antiguo y actual amor Iori Kirigaya o Saga llegó y la protegió, pero su propio pecho recibió la droga.
Él fue capaz de evitar que ese veneno mortal entrase en su cuerpo solo porque al igual que ella tenía una cajita musical metálica que se habían regalado cuando eran niños.
Luego de ese incidente, Sinon compro una cadena como la que su actual novio tenía. Había estado usando en "secreto" ese collar casero todo el tiempo, el único que sabía de ese collar era el chico que portaba la misma caja musical. Ella hizo inmersión completa con todo su atuendo en la Rama Roppongi de RATH, por lo que ni siquiera el trabajado llamado Hiraki tuvo oportunidad de verlo. Es por eso que este collar era imposible que se materializara dentro de Underworld.
Pero Kirito una vez dijo en el Dicey Café: el mundo virtual creado por el STL no consiste simplemente en objetos poligonales. Que era una realidad distinta creada a través de los recuerdos y la imaginación. Siendo así, este collar debió haberse creado mediante la propia imaginación de Sinon.
—Gracias amor mío — Sinon tocó suavemente el pendiente con sus labios, y lo colocó nuevamente en sus ropas.
Luego, dirigió su consciencia ligeramente regenerada hacia la criatura negra y alada que estaba suspendida en el cielo lejano.
Subtilizer de pie en la espalda de la criatura, vio su propia mano derecha en silencio, Sinon pudo ver nubecillas de humo blanco elevarse de sus dedos.
Aparentemente percatándose de los ojos de la chica, Subtilizer levantó la mirada, y las comisuras de su boca se torcieron con un rastro de insatisfacción. Sinon miró fijamente el rostro de ese hombre y habló:
— No eres un dios, y mucho menos un demonio. Solo eres un ser humano.
Ciertamente, Subtilizer era abrumadoramente poderoso. Probablemente poseía una imaginación insanamente poderosa que había interferido con la conciencia de Sinon... en otras palabras, con su Fluctlight.
— Pero si estamos hablando de imaginación y concentración, no hay manera de que pierda ante ti. Porque esa era la fuerza más grande de un francotirador.
Sinon agarró el equipamiento de la cuenta maestra Solus con ambas manos, el arco «Annihilate Ray», y le dirigió su mirada. El centro del arco blanco brillante comenzó a tomar una tonalidad negra mezclada con tinta azul.
Mientras el rango del cambio de color se ampliaba, el cuerpo suavemente curveado del arco comenzó a transformarse en bordes completamente rectos. Ese cilindro largo y negro-azul brillante era el cuerpo de acero de un arma de fuego. El cañón, cerrojo y culata aparecieron uno a uno, y finalmente, una mira gigantesca pareció surgir del cuerpo del arma mientras se materializaba.
En ese momento, Sinon ya no sostenía un arco elegante. En lugar de eso, un rifle de francotirador antimaterial calibre.50 directo, feroz e indescriptiblemente hermoso: «Ultima Ratio Hecate II».
Con un sonido agudo, Sinon tiró del cerrojo de su amado compañero, sonriendo.
El puente de la nariz de Subtilizer se arrugó ligeramente, y sus labios trazaron una curva que sugería la ira.
Sin un momento de vacilación, Sinon levantó su amada arma, Hécate II, que se había transformado del Arco de Solus. Ella estaba actualmente a menos de 20 metros de Subtilizer. Demasiado cerca para que un rifle de francotirador antimaterial. Incluso el acto de bloquear los movimientos del enemigo con su alto alcance de amplificación era muy difícil.
Como tal, Sinon decidió determinar el resultado de la batalla antes de que Subtilizer hiciera su movimiento; apretó el gatillo el instante en que vio una sombra negra a través de su lente de amplitud.
El retroceso intenso actuó en el cuerpo flotante de Sinon, y trató con urgencia de controlarse cuando ella comenzó a inclinarse y girar. Cada ronda causaría que su cuerpo se mueva, por lo que era completamente imposible disparar en repetidas ocasiones, pero siempre y cuando ese tiro de hace un momento hubiera dado en su objetivo, todo habría terminado.
Con dificultad, Sinon estabilizó su cuerpo, y miró a Subtilizer abriendo sus ojos con sorpresa. El hombre de pie en la parte posterior de la criatura alada había levantado la mano, y sus cinco dedos se cerraron en una forma de garra. En su palma estaba un torbellino de oscuridad y luz, girando violentamente, y en su centro estaba una partícula de luz brillante; era sin lugar a duda la bala que había disparado Sinon.
En otras palabras, ¿él podría absorber esa bala como había absorbido la conciencia de Sinon? Una bala capaz de perforar una placa de acero de dos centímetros, disparada desde un rifle de francotirador antimaterial calibre .50. El miedo ligero surgió dentro del corazón de Sinon. Junto con ello, la oscuridad de la mano izquierda de Subtilizer parecía más feroz.
—No pierdas... —Sinon respiró inconscientemente, entonces, gritó con vehemencia —¡No pierdas, Hécate!
Un gran agujero se fundió a través de la mano izquierda de Subtilizer; la carne y sangre dieron vueltas a través del aire.
—¡Puedo hacer esto!
Sinon respiró profundo y retiró el perno de la Hécate II. El casquillo de la bala expulsada se reflejó en el aire y cayó hacia el suelo.
Subtilizer miraba su mano izquierda herida en silencio. Aun así, un líquido viscoso, de tono negro estaba en este momento reparando el enorme agujero en su palma, una herida grave que no parecía fácil de curar.
Él levantó su cara, la cual ahora estaba desprovista de risa, y se quedó mirando a Sinon. Su mano derecha se movió y sacó la ballesta de su cintura.
Sinon expulsó un poco de aire por la nariz. ¿Cómo podría algo como eso competir con un rifle de francotirador antimaterial...
La ballesta de repente se contrajo. Las extremidades izquierdas y derechas del arco se comenzaron a doblar, y se alargaron por lo menos dos veces su longitud. La estructura de madera comenzó a adquirir un brillo metálico negro. Después de un corto segundo, la mano derecha de Subtilizer estaba sujetando un rifle de francotirador tan grande como el Hécate. Sinon reconocía inmediatamente esta arma.
El XM500 Barrett.
Al igual que la Hécate II, disparaba rondas calibre 50, pero era un rifle de francotirador antimaterial aún más avanzado y una sonrisa retorcida apareció una vez más en las comisuras de la boca de Subtilizer.
—Adelante — Sinon murmuró, y con fuerza presionó el mango de la Hécate II en su hombro derecho.
Por otro lado, en el mundo real gracias a la distracción con ayuda de los robots Higa, Yanai y Tori bajaban por una escalera de mantenimiento para conectarse al STL en donde se encontraba inmerso Kazuto Kirigaya. Las luces anaranjadas de emergencia alumbraban las cuales se extendían unos 40 metros hacia abajo, si existía alguna fobia a las alturas este era el momento de superarla.
—¿Qué tal todo Higa? ¿están bien? — Pregunto la doctora Rinko
—De momento si, en 5 minutos llegaremos a la compuerta, aunque creo Tori ya debió de llegar e inclusive bajar más.
—Hubieras tomado el entrenamiento cuando te lo ofrecieron — Dijo Kikouka
—Hare un reconocimiento por cualquier cosa, tú has lo tuyo con calma Higa — Respondió Tori por la radio
—Entendido, cuando estén ahí daré la orden para comenzar la distracción.
Por otro lado, Critter en compañía de otros mercenarios cuantos jugadores chinos y coreanos cuando una alarma comenzó a sonar alertando a todos en la sala.
—¡Desbloquearon la compuerta resistente a la presión! ¡Vayan a ver al pasillo!
¿Acaso RATH, quien estaba ante una desventaja aplastante en términos de equipo y potencia de fuego, había echado todo a perder y comenzado una carga banzai? ¿O estaban planeando algo más...?
Critter dejó la consola y caminó hacia la puerta de la sala de control. El poder de los elevadores había sido cortado, por lo que tenía que usar las escaleras si llegaba a pasar algo. Hans y Brigg parecían haber llegado a la misma conclusión; los estruendosos los estruendosos pasos de sus pies en las escaleras metálicas llegaban desde arriba.
Pero los pasos se detuvieron de repente, siendo reemplazados por gritos ásperos.
—¡¿Es en serio?!
Higa ya podía sentir el claro sonido de los disparos que llegaba fuera del ducto, disparos de un rifle automático.
—Empezaron a atacar a Ichiemon ¡Apúrense! — Dijo la doctora Rinko.
En ese momento, al otro lado del eje principal, las membranas musculosas y esqueleto de titanio del pobre Ichiemon probablemente había sido atravesada con innumerables agujeros. Sin embargo, su sistema de control y batería estaban instalados en su espalda, por lo que incluso si lo golpeaban, aun podría moverse por un rato más.
—El conector está a 10 metros — Contesto Higa
—iré a vigilar los fluctlight de los chicos en el monitor ¡Animo Higa!
Mientras tanto lugar donde Moonphase aterrizó fue encima de una roca cubierta con grietas y moho. Esta no era una roca natural, sino una hecha por el hombre. Parecía que se encontraba en la plataforma superior de una estructura gigantesca con forma de templo. Sus alrededores estaban llenos de jugadores coreanos que acababan de ingresar, y todos parecían situarse en los miles... probablemente llegaban a las decenas de miles.
Aunque realmente no podía discernir su ubicación ya que se encontraba en medio de una multitud, aun podía ver que una batalla se estaba desarrollando en las llanuras frente al templo. Pero los jugadores coreanos a su alrededor no se movían, probablemente el resultado de esa lucha ya había sido decidido. El grupo de personas vestido con atuendos multicolores, los cuales parecían ser jugadores japoneses, parecían haber aniquilado completamente a la legión vestida del mismo color que Moonphase y los demás. Ya había reorganizado sus tropas, pero no daban la impresión de celebrar.
Él lo sabía. Algo estaba mal. Pero era incapaz de articular de inmediato lo que era.
Al final, no parecía como un evento de promoción de un nuevo videojuego, uno como se lo había imaginado antes de hacer inmersión. Esta área, con solo un cielo rojo y una tierra negra, parecía demasiado simple, y la ausencia total de cualquier reglamento o advertencia al usuario antes de entrar no indicaba la presencia de un evento oficial.
Pero incluso así, era incapaz de creer completamente lo que había leído en ese tweet. Además, ¿qué significado había en invadir un servidor de prueba y matar a los beta testers? Incluso si uno podía provocarles un sufrimiento y humillación temporales, no serían capaces de detenerse, o retrasar el desarrollo del juego.
Cerca de la mitad de los coreanos cerca de Moonphase también parecían estar pensando en esa situación. Las voces decían: "¿Qué hacemos?" "¿En realidad son japoneses?" cosas así era lo que se escuchaban.
—¡Compañeros! — Un grito perteneciente al antiguo líder de Ataúd Risueño se escuchó a la redonda — ¡Muchísimas gracias por responder nuestro llamado! ¡Lamentablemente, los Alpha testers que estaban realizando pruebas dentro de este servidor ya han sido masacrados por los agresores japoneses, no, los invasores japoneses! ¡Pero esos chicos siguen preparándose para dirigirse hacia los otros puntos de pruebas y repetir sus crímenes! ¡Esos japoneses hackearon nuestro servidor, y crearon un equipo de alto nivel para ellos mismos de acuerdo con el contenido de sus corazones! ¡Y nosotros, a los que nos han sido arrebatados los privilegios de administrador, solo podemos darles un equipo predeterminado, camaradas! ¡Sin embargo, con determinación y sentido de justicia triunfaremos!
Esto provoco un rugido de enojo y descontento por parte de los jugadores rojos chinos y coreanos.
Para Moonphase y su amiga Mei Mei algo no estaba bien, si eran administradores porque simplemente no apagaban el servidor además de que la voz del supuesto administrador sonaba familiar.
— ¡GO!
Recibiendo esta orden entendida tanto por los coreanos como por los chinos, la legión roja estalló con una conflagración de ira abrazadora, avanzando hacia adelante como una criatura gigantesca, temblando de la forma más violenta posible.
— ¡E-ejército del Imperio Humano! ¡Equipo de suministros! ¡Avancen a toda velocidad...!
Asuna se gritó a sí misma con voz ahogada antes que el ejército rojo acumulado en los tejados derecho e izquierdo del palacio hiciera su movimiento. El equipo de suministros del Ejército de Defensa del Imperio Humano actualmente tenía un campamento establecido cerca de la entrada a las ruinas antiguas. El templo se extendía a ambos lados. En otras palabras, varias decenas de miles de enemigos estaban esparcidos directamente sobre el equipo de suministros.
— ¡Dejen sus cosas y corran ahora, carruajes y Usuarios de Artes!
Aunque había dado una orden, ya era demasiado tarde. El nuevo conector que entró en la batalla, probablemente chino y coreano, ya había cruzado las cabezas de las gigantescas estatuas divinas, y saltado directamente hacia el centro del equipo de suministros.
Asuna apretó sus dientes y levantó en alto el estoque en su mano derecha. Concentrando su imaginación en la punta de la espada, la osciló hacia abajo a la fuerza. Una luz multicolor-divina salió disparada directamente y golpeó directamente las gigantescas estatuas divinas alineadas a ambos lados del pasillo.
Incluso mientras un terrible dolor se disparaba en su cabeza, casi suficiente para hacer volar su conciencia, ella pudo concentrar su imaginación. Las estatuas de piedra sacudieron el suelo mientras se levantaban, abriendo unas bocas rectangulares, oscilando sus cortas manos, y comenzando a atacar a los jugadores reunidos en las tejas del templo.
Los soldados rojos en la parte más al frente se retiraron rápidamente y chocaron con sus fuerzas aliadas que estaban atrás. Cayeron como si fuesen piezas de dominó. Aprovechando la oportunidad, ocho carruajes, el equipo de doscientos Ascetas, y el equipo de suministros comenzó a moverse.
Asuna solo pudo controlar las estatuas por unos 30 segundos antes de que el dolor se volviese completamente insoportable, y cayó al suelo sobre sus rodillas. Pero la retaguardia del Ejército del Imperio Humano había logrado escapar al desastre y retirado exitosamente hacia el amplio desierto que había al norte de las ruinas. Cerca de 500 Guardianes y 2.000 jugadores japoneses avanzaron al frente y adoptaron una formación que flanqueaba defensivamente a sus tropas de retaguardia desde ambos lados, preparándose para participar.
Pero ya que esta área difícilmente tenía un terreno apropiado, su única opción era montar una defensa de engaño/dispareja contra las decenas de miles de enemigos. Habían sido capaz de hacer retroceder meticulosamente a los jugadores americanos, cuyos números los superaban exageradamente, solo porque habían usado los muros de las ruinas del palacio para limitar a la línea delantera a un solo lugar, y complementado una generosa rotación de sanación. Pero ahora que estaban rodeados por casi cuarenta o cincuenta mil jugadores chinos y coreanos, solo era cuestión de tiempo para que la delantera colapsara.
— Ugh...— Exprimiendo la última pizca de fuerza que le quedaba, Asuna se empujó a sí misma y levantó nuevamente el estoque.
—Por favor, una última vez... déjame construir un muro potente que pueda protegerlos a todos. — Ella oró mientras trataba de concentrar su imaginación.
Pero acompañado por un impacto extraordinario que surgió de su cuerpo como si se tratase de una corriente eléctrica, Asuna fue lanzada nuevamente al piso. Acumuló en su garganta, lo escupió, y se dio cuenta que era una pequeña cantidad de sangre.
— ¡No te esfuerces demasiado, Asuna! ¡También tenemos algo de protagonismo! –le gritó sinceramente Klein.
— Si, déjanoslo a nosotros — Agil respondió con voz profunda.
Acompañado por simultáneos aullidos que sacudieron el aire, habilidades de espada de gran rango lanzadas por la catana y el hacha de guerra brotaron. Rayos luminosos de color blanco y azul brillaron y se envolvieron entre sí mientras la sangre de varias decenas de enemigos fluía en el aire.
En ambos lados de los dos hombres, los Lores de ALO, sus aliados, y los héroes de los Caballeros Durmientes comenzaron a luchar con todas sus fuerzas. El continuo choque del metal atravesaba el campo de batalla como armas de fuego. Una única explosión rugió clara y profundamente. Espadas, hachas, y lanzas aullaron mientras cada habilidad de espada policroma explotaba de ellas, cortando a los soldados rojos sin parar.
Los asesinos comandados por Krista y Saga se encontraban detrás con los magos y sanadores reorganizándose mientras sus aliados atacaban al enemigo.
—¿Cuál es nuestra situación? — Pregunto Saga
—Es mala maestro Caleb esta estable, pero no podrá pelear mas solo quedamos los 5 arqueros de las estatuas que retrocedieron y otros 5 asesinos mas además de Sasha, Lenny y yo los demás no lo lograron — Dijo Krista
—¿Cuántas maquinas quedan?
—Solo una
—Bien los que queden que aun puedan pelear apoyen a los aliados nuevos, Sasha y Krista por favor preparen la máquina para que pueda volar algo no está bien.
—Saga — Eugeo que salía vestido sujetando su costado con su brazo derecho caminaba hacia el
—¡¿Qué haces de pie?! No estás en condiciones de pelear aun
—Vine a entregarte esto, le darás un buen uso — Eugeo extendió su mano entregándole el sudario del edén que le había puesto meses atrás — Tieze curo lo mejor que pudo mi herida, así que ya estoy fuera de peligro.
Saga estaba a punto de refutar cuando una voz volvió a llamarlo y aquel collar que llevaba comenzaba a sonar débilmente.
—Está bien regresa con las chicas, tengo que darme prisa.
Por su parte en el mundo real Higa finalmente, llegó al frente de la caja de fusibles que reflejaba opacamente las lámparas naranjas, e interfirió la cubierta con sus dedos para abrirla.
Dentro se encontraba un tablero cableado lleno de una red de cables de fibra óptica, momentáneamente lo debilitaron un poco, peor Higa tiró cable tras cable y finalmente ubicó el puerto de mantenimiento.
Tomó una bocanada de aire para calmar sus pensamientos, luego sacó un cable y su laptop de la mochila. Conectó un extremo del cable en el puerto de mantenimiento, y el otro en el computador; ejecutó el programa de control del STL con un humor que parecía una oración.
Una ventana completamente negra se abrió, y un cursó encima de este comenzó a parpadear sugerentemente. Finalmente, el cursor se movió a la derecha y mostró un mensaje de estado.
STL #3, Conectando... OK.
STL #4, Conectando... OK.
Lo primero en regresar a señales normales fueron las dos unidades dentro de la Habitación de STL N.º 2, que estaba junto a la sala de sub-control.
Luego, las conexiones mediante vinculo satelital del Ocean Turtle a los STL #5 y #6 en la Rama Roppongi también fueron confirmadas.
— ¡Sí! — Higa murmuró. Ahora debería ser capaz de operar las cuatro unidades STL que Kirigaya Kazuto, Iori Kirigaya y las tres chicas estaban usando.
Lamentablemente, solo era posible bloquear la línea que conectaba la Habitación del STL N.º 2 y la antena satelital de la sala de control principal, por lo que no podía hacer nada con las dos unidades que estaban dentro de la Habitación de STL N.º 1. Si eso fuese posible, habría sido capaz de expulsar a los atacantes que ingresaron a Underworld mediante los STL #1 y #2.
Suspendiendo esos pensamientos turbulentos, Higa colocó su mano derecha en el pequeño teclado y se preparó para comenzar la operación de inmediato.
Justo cuando se preparaba, un aullido ensordecedor llegó desde su cabeza.
— ¡D-detente!
Era la voz de Yanai. ¿Qué demonios estaba diciendo en este tipo de situación?
Higa levantó la mirada, irritado, pero se descubrió viendo el cañón de un arma, brillando entre azul y negro, a tres metros de distancia de su rostro, era la segunda vez que le apuntaban con una pistola. Detrás de este, Yanai, mirándolo con ojos agudos e inyectados de sangre, volvió a gritar.
— ¡Aleja tu mano del computador, o disparo!
— ¿Eh?
Solo quedó en blanco por medio segundo. Higa al instante comprendió la situación y comenzó a especular la razón por la que Yanai estaba haciendo eso.
Yanai era el espía que había filtrado toda la información sobre el Proyecto Alicization a los estadounidenses. Pero desafortunadamente, Higa era incapaz de tomar contramedidas y Tori aun no regresaba. Lo único que podía hacer era articular una pregunta completamente sin sentido a través de su boca sedienta.
—...Yanai, ¿por qué?
Una capa de sudor frío apareció en la frente blanca del técnico. Sus labios temblaron un poco, y luego masculló con una voz débil.
— P-primero, estás confundiendo las cosas. No creas que soy un traidor. Solo estoy llevando a cabo mi plan original. Heredé la misión final de mi jefe... es por eso que me infiltré en RATH.
— ¿L-la misión final de tu jefe? ¿De qué hablas?
— Alguien con quien estás muy familiarizado... Sugou. Casi me atrapan, pero le eché toda la culpa a otro chico y eventualmente me las arreglé para escabullírmele a la ley, aunque tuve algo de ayuda externa.
— Entonces tú... ¿estabas asociado con los experimentos humanos de Sugou?
—¿Asociado? Yo fui quien reunió los datos. Fue una pequeña pero divertida investigación... como el juego del tentáculo virtual y esas cosas...
—¡¿Por qué el Teniente Coronel Kikouka no verificó el historial de un criminal como este?! — pensó Higa, su respiración se aceleró, pero suspiró porque, en primer lugar, no podía culpar a Kikouka, aunque ya entendía un poco más a Iori.
La razón por la que la Compañía RATH fue para terminar una línea Made in Japan encima de la base de la tecnología de defensa dominadas casi todas por los Estados Unidos. En otras palabras, eso habría amenazado los intereses de los fabricantes zaibatsu y otras contratistas de defensa.
Por eso, era extremadamente difícil encontrar y contratar técnicos. Casi nadie estaba dispuesto a laborar para una gran compañía en este lugar, y no era una sorpresa que le diesen la bienvenida a Yanai, quien una vez trabajó para una compañía de investigación FullDive tan grande como RECT.
El impacto que golpeó a Higa fue más grande que el que recibió cuando vio el arma. Sus ojos se abrieron de par en par.
Sugou Noboyuki. Un hombre que trabajó en el Laboratorio Shigemura de la Universidad Técnica Touto durante el mismo periodo que Higa, Koujiro Rinko y Akihiko Kayaba. Siempre había sido deliberadamente competitivo con Kayaba, el super-genio, pero al final fue incapaz de superarlo. Ya sea por eso o no, al final, fue tan lejos como para cometer el crimen de secuestrar a cientos de jugadores de SAO para usarlos como experimentos humanos ilegales.
Debido a las acciones de Kirigaya Kazuto, el plan de Sugou fue revelado. Tras ser detenido, fue llevado a juicio por la primera instancia de la ley, pero escapo de su prisión provocando la intervención de Iori Kirigaya terminando en su propia muerte.
Yanai parecía estar temporalmente perdido en la nostalgia frente a Higa, pero rápidamente se ajustó y volvió a levantar el arma. El seguro en el lado izquierdo del revolver ya había sido liberado. Al principio, Kikouka había puesto sinceramente a todos los trabajadores técnicos a través de entrenamientos con armas de fuego, pero ahora, irónicamente, había terminado metiendo la pata.
Afortunadamente, Yanai parecía seguir teniendo unos cuantos problemitas; aún seguía temblando.
—En fin, la vida de mi jefe se acabó, pero las conexiones siguen en pie, funcionando. Por eso, si no las uso apropiadamente, terminaría desperdiciando un gran esfuerzo.
— Conexiones... ¿dónde?
— La Agencia de Seguridad Nacional de los Estados Unidos.
— ¡¿Qu-qué dijiste?!
—Si esos estadounidenses bajo nosotros pueden entregar exitosamente a A.L.I.C.E, recibiré un pago muy considerable y una posición en américa que pueda ser tomada por mí. Esa es la historia del existo americano que Sugou soñaba además que el artefacto que usaron para la creación del proyecto ayudara a mi señora.
—El precio es que todo el mundo tendrá que temblar bajo la sombra de las armas autónomas de alto rendimiento que el arma de los Estados Unidos desarrollará — Higa se resistió desesperadamente a la urgencia de replicar. Justo ahora estaba esforzándose por extraer todo, y aprovechar la oportunidad para irse.
Justo cuando Higa estaba implorando en secreto, la laptop en su mano izquierda casi se le resbala, y rápidamente la agarró.
— ¡¡A-alto!!
En ese instante, el grito distorsionado de Yanai entró en los oídos de Higa mientras apuntaba el cañón del arma hacia el ducto y tiraba del gatillo. Un rayo de luz amarillo destelló y el aire expandiéndose aturdió fuertemente sus oídos.
Las chispas explotaron del muro metálico del ducto seguido de un estruendo que retumbo en los ojos del chico.
Por otro lado, las fuerzas del Territorio Humano estaban haciendo estaban siendo abatidas, los esfuerzos del mundo real estaban preparando su siguiente ofensiva para asistir a las fuerzas del Territorio Humano
—¡Protejan a la gente de Underworld a toda costa! — Grito Asuna — Que alguien nos ayude
—¡Asuna! — Grito Saga — ¡Algo no está bien, tengo que alcanzar a Silica y a Alice, sin no llegan al World End Altar este sacrificio no servirá para nada! ¡Krista, Sasha retrocedan y protejan a los heridos!
Saga rápidamente corrió por su máquina y empleando su arte sagrada emprendió vuelo, uno que otro jugador intento derribarlo sin éxito dejando salir del combate al asesino sin escuchar que la chica llamada Silica que mencionaba estaba ahí mismo en el combate y no era la chica peli azul.
—Nos abriremos paso — Dijo Sakuya preparando su espada junto con su grupo —Rindou, Suzuran, avancen por la derecha
—¡En marcha preparen la synchronized sword skill 5, 4, 3...!"
—¡No sé rindan! — Un grito a la distancia llamo la atención de Sakuya y se dio cuenta de que se trataba de Rue con su grupo que había sido acorralados
—¡Ganemos tiempo! — Grito Rue cuando uno de sus compañeros Cait Sith fue golpeado por una espada que haciéndola caer encima de Rue
—¡Alicia! — Sakuya perdió la compostura y salió corriendo para apoyar a Rue, fue dando golpes y embestidas con su espada abriéndose camino hacia donde estaba su amiga
—¡No lo hagas Sakuya!
—¡No! — Sakuya escupió sangre de la boca, dio su mirada hacia atrás dándose cuenta de que había sido atravesada con una lanza y posteriormente cayó al suelo
Entre los dos mil (a pesar de que el número iba disminuyendo rápidamente) jugadores japoneses que actualmente están inmersos aquí, quien tiene la comprensión más clara de la situación era la líder de tercera generación del gremio "Los Caballeros Durmientes", An Si-Eun/ Siune.
Su padre era un coreano que vivía en Japón y su madre era japonesa, por lo Siune era capaz de hablar los idiomas de ambas naciones. Por lo tanto, cuando oyó partes y pedazos de los furiosos gritos procedentes del medio de los soldados rojos, fue capaz de adivinar qué tipo de información había incitado a estas personas.
Con poca distinción entre el bien y el mal, estos desarrollos corroían el mundo de los juegos en línea que Siune y sus amigos tanto adoraban. Incluso en el año 2026, dentro del servidor internacional de un VRMMO corriente principal, no era raro que las feroces disputas sobre las zonas de cacería de monstruos estallaran entre jugadores de diferentes países. Los juegos recientes como ALO rechazarían todas las conexiones del extranjero, y uno sentía que la brecha entre los países vecinos crecía más y más profundamente.
—Tengo que... Tengo que hacer algo. Soy quizás la único entre los jugadores japoneses que pueden hablar coreano. Si no avanzo, no van a entender. ¿Cierto, Yuuki? — La mencionada volteo rápidamente y le regalo su más sincera sonrisa
— ¡¡Por favor, todos, sólo por una vez, abramos una brecha en sus defensas!!
— ¡Entendido! ¡Tecchi, Talken, Nori, ¡Jun descarguen sus ataques máximos todos a la vez! ¡3, 2, 1! — La sincronización perfecta de una habilidad de espada de alta potencia provocó una explosión trascendental, que lanzó por los aires a decenas de enemigos.
En este instante de silencio y el estancamiento, Siune corrió hacia un gran jugador coreano que parecía ser el líder y lanzó su mano izquierda hacia la hoja de la espada larga que él desenfundó. Su mano fue partida y la sangre brotó.
Pero un dolor virtual como este, comparado con el sufrimiento que había experimentado Siune con los trasplantes de médula ósea y quimioterapia para su leucemia, no era absolutamente nada. Ella simplemente hizo una mueca, mantuvo su mirada fija en los ojos del hombre, y gritó en coreano:
— Escúchame, ¡A todos ustedes les han estado mintiendo!! ¡¡Este servidor pertenece a una empresa japonesa, no somos piratas informáticos, somos los usuarios legítimos! —Su voz se hizo eco ampliamente, alargando el silencio durante unos momentos más.
El coreano cuya espada fue agarrada por la mano descubierta de Siune se inclinó un poco hacia atrás, como si estuviera un poco intimidado por su impulso, pero muy rápidamente replicó bruscamente
—¡Estás mintiendo! ¡Lo vi con mis propios ojos, Ustedes mataron a todos esos jugadores que eran del mismo color que nosotros!
—¡Ellos estaban igual que ustedes, los americanos que habían sido engañadas vinieron aquí debido a información falsa! ¡Los que obstaculizan el desarrollo de la compañía japonesa son todos ustedes! Piensa en esto con más cuidado... ¡¿De verdad esta ira y odio de ustedes en este momento realmente viene de sus propios corazones?! — Las palabras de Siune causaron que los coreanos en el lugar cayeran en silencio, dudosos.
En ese momento, un fuerte- y aún algo confusa pregunta llegó desde la parte posterior de la multitud y rompió el silencio de nuevo.
—¡¿Estás diciendo la verdad?!
El que gritaba esto en coreano, corriendo de la multitud, era un jugador que no parecía diferente de los otros soldados. Siune adoptó inconscientemente una postura defensiva, pero el jugador llegó frente a ella y bajó la espada en su mano derecha, declarando su ausencia de hostilidad, entonces, levantó el visor de su casco.
—Soy "Moonphase", ¿quién eres?
—Soy Siune.
—Siune-san, ¿verdad? También he estado pensando que todo esto es un poco raro.
La frase rápidamente pronunciada de Moonphase provocó furiosos estruendos de los jugadores coreanos alrededor de ellos. Pero él ruidosamente deslizó la espada en la vaina, suprimiendo del ruido, y dio un paso hacia adelante.
— ¿¡Tienes alguna forma de demostrar lo que estás diciendo?! — Siune no pudo evitar contener la respiración.
Este "Underworld" era un mundo de realidad virtual desarrollado por una empresa japonesa financiado por el gobierno para llevar a cabo investigación y desarrollo, y los atacantes eran estadounidenses tratando de aprovechar el fruto de esa investigación, una nueva generación de Inteligencias Artificiales Siune no había dudado ni una sola vez de estas palabras que su amiga Lisbeth con lágrimas en los ojos les reveló dentro de la cúpula del árbol del mundo en la ALO. Pero cuando se le preguntó por una forma de demostrarlo, se encontró perdida.
No había evidencia física en un mundo virtual. Sólo hubo testimonios de algunas personas, pero no importa lo que les dijeran los japoneses, el otro lado no lo creerían. Siune podía sentir que la enemistad volvía a aparecer entre los jugadores coreanos alrededor de ellos en el momento en que ella quedó en silencio de este modo. ¿Qué podía hacer?
—¡Siune, las personas Underworld! — Nori de repente gritó desde la izquierda, detrás de ella. — ¡Debes hacer que conozcan a la gente que vive en Underworld, y una vez que vean que están hablando japonés, van a entender que se trata de un servidor japonés!
Sí, esa era una posibilidad. Aunque Siune y los otros sólo habían hablado algunas palabras con la gente de Underworld en el medio de la formación circular, después de sentir que no eran ni personas del mundo real ni NPC, ella había experimentado un impacto suficiente para aturdir a su alma. Aun así, debido a que había una barrera del idioma entre ellos y los coreanos, los coreanos también sentirían lo mismo. Siempre y cuando mantengan una mente abierta, se reunieran y hablaron con ellos, entenderían absolutamente.
Siune estaba a punto de traducir lo que Nori le había dicho en japonés al coreano para contarle a Moonphase. Pero justo en ese momento, un atroz rayo de luz roja apareció detrás de él.
La hoja de la espada de tipo carnicero del hombre de capa negra perforo el suelo alertando a Siune Moonphase y su recién incorporada amiga Mei
—¡Este campo de batalla no es lugar para los traidores! ¡No seas víctima de los trucos de los sucios japoneses! — A quien al final la cuchilla señaló era a Siune, quien permanecía inmóvil, aturdida.
—Si esto es realmente un servidor japonés, y ustedes realmente son usuarios legítimos, entonces ¿por qué son los únicos que tienen este equipo de gran alcance? ¡Están brillando como el equipo de GameMaster! ¡Los crearon haciendo trampa!
Sonidos de asentimiento siguieron con la declaración del hombre.
Siune refutó desesperadamente las palabras del hombre.
—¡No! ¡Nuestro equipo es diferente porque convertimos nuestras propias cuentas de alto nivel en este mundo! — Tan pronto como ella dijo eso, el hombre del poncho negro soltó una gran risa de desengaño.
—Jaja, ¡¿Qué clase de idiota convertiría su cuenta en un servidor de prueba?! ¡Mientes, todos ustedes mienten!
—¡Es verdad, créanme! Hemos venido aquí decididos, no estamos dispuestos a perder nuestros personajes...
El sonido del viento al rebanarse se escuchó de repente. Cuando la daga volaba hacia ella fue enterrada profundamente en su hombro derecho, Siune era consciente no de dolor, sino de la más profunda, más oscura desesperación. Ella era completamente incapaz de comprender las palabras gritadas por el hombre que había arrojado el arma.
Un pequeño grupo de jugadores chinos rompió el alto el fuego temporal y lanzó un asalto desde su derecha. El líder de los coreanos, al ver todo esto, hizo que Siune cayera contra el suelo de una patada, maldiciéndola.
Acostada, Siune escuchó el sonido de los pasos de sus colegas mientras corrían hacia ella, pero no era capaz de levantarse de nuevo.
Por otro lado, Scheta e Ishkahn tomados fuertemente de la mano con una Io y a su vez siendo protegidos por los pugilistas que quedaban y el dragón del caballero esperaban que los soldados rojos atacaran y terminaran con ellos, pero un gran estruendo seguido de un destello verde del cielo y los gritos de la tribu de los orcos sonaron en el campo de batalla
—¡¿están bien?! — Pregunto el recién llegado Rillpilin jefe de la tribu de los orcos.
—¿Qué haces aquí? ¿No te ordenaron esperar? — Pregunto Ishkahn confundido
Sintiendo que en la lejanía Asuna, Klein y Lisbeth se habían sumido en apuros, Leafa no pudo evitar morderse el labio. Pero ante sus ojos, casi 3,000 soldados armados en rojo estaban bloqueando su camino.
De acuerdo con el orco, los pocos cientos de personas que estaban siendo rodeadas por la armada que hizo inmersión desde el Mundo Real eran el Gremio de Luchadores, quienes estaban unidos al Ejército Oscuro como los Orcos. Leafa estuvo desconcertada por un momento al saber esto, pero decidió ayudarlos muy rápidamente.
—Él es tu compañero ¿no? Cargaré contra el enemigo sola. Rillpilin, ustedes agrúpense con el Gremio de Luchadores, y sólo necesitan luchar contra los enemigos que los ataquen primero.
—¡Quiero luchar también!
— No, no quiero que otro más de ustedes muera. No te preocupes por mí... ni siguiera decenas de miles de esa clase de enemigos son rival para mí. — Después de decir eso con una sonrisa, Leafa permaneció en soledad ante la legión roja.
Ella ya sabía que Terraria poseía suficiente HP y regeneración casi ilimitada. Lo que, es más, las personas del mundo real en frente, como ella, tenían vidas virtuales. Incluso si era demasiado tarde para alcanzar a Kirito y ayudar, Leafa no podía mirar a los Orcos morir en vano aquí.
Después de ejecutar decenas de enemigos con su ultra-largo ataque a distancia combinado, Leafa irrumpió justo en el centro directo del enemigo sin titubea.
Por alguna razón desconocida, ella fue capaz de activar Habilidades de Espada con intervalos varias veces más grandes que los de ALO, sin detenerse. Cada vez que la llamativa luz salía del equipo de GM de Terraria la "Verdurous Anima", una gran mancha de sangre pulverizaba en un patrón radial.
Pero durante el tiempo de espera entre Habilidad de Espada y Habilidad de Espada, incontables hojas de espada aprovechaban la grieta en su armadura y llegaban volando. Ella fue incapaz de evadirlas todas, y el número de heridas en su cuerpo crecía; un dolor agudo e hirviente provocaba mareos en su cabeza y estrellas en sus ojos.
Gritó agudamente y estampó su pie derecho en el suelo. Una luz verde emergió desde la planta del pie e instantáneamente curó todas las heridas de su cuerpo.
Leafa soportó en persistente dolor, incapaz de ser purgado completamente, y se concentró en balancear la espada que empuñaba. Incluso si cada pulgada de su cuerpo estaba pulverizada, al menos tenía que conducir a todos los enemigos de vuelta al mundo real.
A pesar de que sus coordenadas de inmersión se habían desplazado a algún otro lugar que la ocasión intencionada, si ella tuviera que nombrar alguna de sus responsabilidades, sería indudablemente salvar tantos residentes de Underworld como pudiera. Estas eran las personas que Kirito amaba y había jurado rescatar. Leafa usó su mano izquierda para detener una espada apuñalando hacia ella durante ese grito.
Un solo contrataque venció al propietario de la espada. Leafa clavó sus dientes en la espada apuñalada en su mano, la arrancó y la escupió en el suelo junto con una bocanada de sangre.
Koujiro Rinko corrió de vuelta a la sala de control secundaria y se sentó en la silla de malla previamente ocupada por Higa Takeru. Unas ventanas estaban abiertas en el monitor de gran tamaño directamente en frente de ella, pero la primera que ella miraba era una pequeña ventana en la parte inferior. Mostraba que había un gráfico tridimensional que representa el estado del Fluctlight de Kirigaya Kazuto.
En el centro directo de la luz reflejada, cambiando gradualmente entre los colores espectrales, había una mancha oscura que representaba un "defecto principal del cuerpo".
Actualmente, Higa Takeru estaba controlando cuatro unidades STL, preparándose para reparar este defecto utilizando los recuerdos en la mente de tres niñas que tienen relaciones profundas con Kazuto. Para hacer eso, él había logrado escabullirse en el eje inferior, el cual era un enjambre de enemigos, él mismo - espera, había otra persona.
En ese momento, los atacantes se centraban actualmente en enfrentarse a Ichiemon, que había sido puesto desde las escaleras como un señuelo. Pero incluso un robot con cuerpo de acero no podía soportar la mayor parte del salvaje ataque de rifles de asalto. Cuando Ichiemom fue destruido, no había duda de que el enemigo podría pensar: ¿Pero qué demonios estaban planeando los japoneses?
—¿Cómo está la situación de Kirito? — Pregunto Kikouka uniéndose a la doctora
—Higa está iniciando la operación ahora. ¿Funcionó el señuelo? — Cuando ella le respondió su pregunta con otra pregunta, Kikouka, con su respiración entrecortada y sus hombros temblorosos, subió sus gafas, que se habían deslizado hacia abajo.
—Tiramos todas nuestras granadas de humo atrás de Ichiemom. Eso debería darnos un poco más de tiempo antes de que el humo se disperse del pasillo, pero si no sellamos la partición después de eso, será peligroso. No queda mucho tiempo.
—Higa dijo que tomaría cinco minutos a lo mucho que muestre resultados...
Rinko cerró su boca, mirando hacia el monitor de nuevo. El Fluctlight de Kirigaya Kazuto se mantenía sin cambios. Ella pensaba en ese viejo refrán de América, "el que espera, desespera", así que apretó los puños con fuerza y movió sus ojos hacia el centro de la pantalla.
Vio un mapa parecido al de un mundo de fantasía ficticio- no, en cierto sentido, era precisamente un mapa de un mundo de fantasía ficticio, Underworld. En comparación con el mapa completo del Imperio humano que ella veía hace unos días cuando había llegado por primera vez a Ocean Turtle, este mapa muestra un área mayor. Justo al sur de una sierra circular que rodea el Imperio Humano, había una señal artificial que parecía estar compuesta por cuatro rectángulos unidos entre sí, que se asemejaban a ruinas. El punto que representa la posición actual de Yuuki Asuna, los píxeles azules que representan el ejército del Imperio Humano, y los píxeles blancos que representan a los jugadores japoneses de refuerzo estaban marcados densamente todos juntos en ese lugar.
El gigantesco cuadro de color carmesí que los rodeaba eran los jugadores americanos quienes habían hecho inmersión después de ser incitados por los atacantes - o eso debería ser, pero su escala era demasiado inmensa. Su número ya era de 20, no, 30 veces mayor al de los japoneses.
¿Realmente estaba bien? Rinko buscó la imagen de las otros dos, aparte de Yuuki Asuna, y finalmente descubrió un punto de color azul agua muy lejos al sur de las ruinas. Esa debería ser Asada Shino.
Después observo un punto gris que se dirigía al punto azul, debía de ser Iori Kirigaya que iba en asistencia de su pareja.
Entonces, ¿dónde se había ido Kirigaya Suguha? Rinko recorrió el mapa, y al fin encontró un punto amarillo verdoso a lo lejos, muy al norte del principal campo de batalla. También había un grupo de enemigos rojos presentes allí, pero Higa había dicho sin duda que ambos de sus puntos de acceso estaban en las coordenadas de Yuuki Asuna. Rinko no pudo evitar fruncir el ceño, contemplando una razón de causa -
Justo en ese entonces, pareció darse cuenta de otro punto blanco parpadeante debajo del punto brillante del Suguha, como si estuviera cubierto por ello.
No debe haber nadie del lado del Rath que haya hecho inmersión con un STL. ¿Qué demonios era ese punto, entonces?
Ella inconscientemente movió su ratón, cuidadosamente alineó el cursor con el punto e hizo clic en él una vez, abriendo una nueva ventana. Rinko examinó las diminutas letras inglesas.
—Hum... Restricción, Índice confrontacional... Detección de Umbral... ¿Informe? ¿Qué es esto?...
—¡¿Que?! — Grito Kikouka alterado
—¿Q-que pasa?
—¡Sí, no hay duda de ello, es otra Fluctlight que rompió sus límites! Pero ¿por qué ahora?! — Los ojos de Rinko se abrieron, y miró a Kikouka, quien estaba furiosamente rascándose la cabeza.
—Eh... ¿qué quieres decir, una segunda "A.L.I.C.E"?
—Sí, exactamente... Ah, no, espera... Esto es... —Kikouka se desplazó rápidamente a través de la ventana que mostraba un registro detallado, y comenzó a murmurar de nuevo.
—En sentido estricto, no es del mismo calibre que "Alice". Rompió las limitaciones de una Fluctlight artificial no a través de su sistema de circuitos lógicos, sino su circuito emocional..., no obstante, es una muestra de igual importancia. Si sólo pudiera quedarse allí y no se moviera... ¡Oh, maldición, se mueve al sur, hacia el grupo de los americanos no están muy lejos!
—Hmm... Sí, un nuevo nodo se ha generado por una reacción en cadena en su zona emocional... ¿Eh-? ¿Oye, Kikouka?
—¿Qué...Qué pasa? — Retorciendo su cuerpo y gruñendo por la consternación, Kikouka estiró su cuello hacia el monitor.
—¿Qué es este comando externo enchufado aquí? Se siente muy fuera de mí... Es demasiado deliberado... Casi como si hubiese sido creado para impedir el circuito.
—El implante de dolor simulado... en el dominio visual derecho? Pero entonces, incluso si un Fluctlight artificial pasa todo ese esfuerzo para romper los límites, sería detenido por el dolor creado por este proceso. ¿Ustedes incluso colocaron una restricción de este tipo en los residentes de Underworld?
—No... No, nosotros no hicimos eso. No hay manera de que lo hiciéramos, ese tipo de acción va en contra de nuestro objetivo... Eso es prácticamente una obstrucción evidente.
—Hmm... Buen punto. Además, el estilo de programación de este pedazo de código no es el mismo que el de Higa, hay un comentario en la misma fachada "Código 871" ¿Qué es 871?"
—¿871? Nunca he oído hablar de ese número... No, espera... espera, espera, creo... No hace mucho tiempo...
Kikouka repente comenzó a moverse, los zuecos en sus pies golpeaban con fuerza en el suelo. Se lanzó hacia una silla cercana, cogió una bata blanca sucia colgada de su respaldo, la abrió y miró el interior del cuello.
En la investigación de Rinko, Kikouka, con sus ojos muy detrás de las gafas de marco negro, tendió la bata blanca hacia Rinko, invitándola a mirar la etiqueta de su cuello.
Allí, claramente inscrito con marcador permanente negro, estaba [871].
—Esta capa blanca... pertenece a ese técnico llamado Yanai que acaba de ir abajo con Higa...
Murmurando eso, Rinko repente detuvo su discurso.
Yanai. YA NA I. Significaba 8 7 1 en japonés.
—¿8 7 1? — Rinko y Kikouka gritaron al unísono, poniéndose de pie al mismo tiempo.
Mientras tanto en el ducto donde se encontraba Higa y Yanai
— Oh dios... ¿E-estás bien?
Las palabras aparentemente preocupadas de Yanai causaron que Higa olvidara momentáneamente su dolor y gritara:
— O... ¡Oye, tú fuiste el que me disparó, ¿y ahora escupes cosas como esa?!
— No, no, realmente no quería golpearte, en serio. No tengo intención de asesinar; me tomó mucho esfuerzo comprar ese hermoso condominio en la costa oeste, pero si tengo que vivir mis días con miedo, ¿de qué me sirve?
Una vez que Higa comprendió que Yanai parecía estar realmente serio, una ola de debilidad brotó dentro de él y perdió la sensación en ambas manos. Sabía que estaba en problemas; se atrajo a si mismo frenéticamente y examinó la herida en su hombro con algo de miedo.
Al parecer la bala había alcanzado el conducto del cable, rebotó, y lo golpeó en algún lugar debajo de su clavícula. Higa no sentía mucho dolor; en su lugar, un gélido entumecimiento empezó a extenderse por todo su cuerpo desde el hombro derecho. El abdomen lateral de su camisa ya estaba teñido de rojo oscuro. Esto no se veía como un simple rasguño.
El miedo por la situación actual, y por su desarrollo futuro, comenzó a subir lentamente desde el estómago de Higa, ocasionando que comenzara a respirar en jadeos involuntariamente. Unos cuantos metros sobre su cabeza, Yanai seguía charlando con una mirada complaciente en su rostro.
— Para ser honesto, yo sólo quería obstaculizar ligeramente tu trabajo, Higa. Después de que destruí el conector de mantenimiento escaparía al cuarto de control principal más abajo. De esa manera sería capaz de escapar en el submarino. Nadie de Rath ha muerto de todas formas, así que, si mi lado puede recuperar con éxito a Alice, entonces todos estarán felices.
— ¿Nadie murió? — Higa preguntó a Yanai, olvidando una vez más su dolor.
—Si no aprovecho esta oportunidad para sanar a Kirigaya, ¡su consciencia se irá para siempre! ¡La persona que mató su alma fuiste tú, Yanai-san! ¡Y tú dijiste que no estás listo para asesinar a nadie!
— Hmm... A quien le importa si ese mocoso muere.
— Qué......
— Porque, él fue la persona que la mató. Mi más importante señorita Admin.
— ¡Su eminencia, la Clérigo Mayor Administrator de la Iglesia Axioma! Le prometí que haría todo lo posible para ayudarla a establecer un dominio total sobre Underworld. Y acordé con ella que guardaría con seguridad su Light Cube si el servidor fuera a ser formateado y la presentaría con su creadora máxima su eminencia la señorita Juno.
La Iglesia Axioma era la organización que reinaba sobre el Imperio Humano en Underworld. Sostenía control total en toda la población por medio de leyes extremadamente estrictas y una fuerza militar poderosa.
La razón por la que Higa no había obtenido el Fluctlight rompedor de límites "Alice" cuando había aparecido por primera vez era esa, en el Underworld de tiempo acelerado, la Iglesia Axioma alejó rápidamente a Alice y aplicó modificación de memoria en su Fluctlight.
Si, su velocidad fue demasiado rápida, y sus métodos fueron demasiado efectivos. Como si ellos estuvieran completamente conscientes de lo que era una Fluctlight Artificial.
Sin embargo, la verdad era precisamente eso. La Iglesia Axioma, o al menos la Fluctlight Artificial con el nombre de "Administrator", quien parecía estar a cargo, comprendía la estructura de este mundo.
—¿Fuiste tú quien corrompió Underworld?
—No, no, su eminencia Juno nos encomendó una misión como miembros de los Instrumentos de Primera Voluntad para ayudarla con su resurrección y que para ello enviaría a un representante dentro de Underworld. Estaba trabajando un cambio al momento, y luego escuché la voz de una chica viniendo del altavoz, casi hace que me cagara del susto... Había descubierto toda la lista de comandos de Underworld ella misma, y luego abrió una línea de contacto con el exterior. Si estamos siendo técnicos, tú eres el culpable principal por olvidar eliminar el comando que mostraba toda la lista, Higa. — Yanai rio entre dientes profundamente unas cuantas veces como si estuviera acordándose de algo, luego continuó con su mirada distraída. —No dejaba de pensar eso, a ese ritmo, Underworld sería totalmente formateado inmediatamente. Todo iba a ser eliminado de todos modos, así que no importaba, y por eso es que usé secretamente un STL para entrar y ver a Admii-chan. Y luego... Dios, nunca había visto una chica tan hermosa. Los niños que Sugou encerró en ALO eran bastante lindos, pero la personalidad de Admii-chan, su voz, y su manera de ser, golpeó todo mi ser... Eso significaba que si pudiéramos traer a su eminencia Juno al mundo físico nuevamente entonces ella también podría estar también y se volvería mi sirviente número 1.
— No.
Higa sentía que todos los pelos de su cuerpo se levantaban por el miedo. Yanai podía ser un traidor ridículo, pero no era un idiota. ¿Qué tipo de persona era Administrator, para ser capaz de seducir y controlar a alguien como él tan delicadamente? Justo entonces, el rostro aparentemente recordante de Yanai se quedó en blanco de nuevo.
— Pero... esa chica está muerta ahora. Asesinada... Ese mocoso no sólo detuvo el experimento de Sugou-san, mató a Admii-chan. Si no la ayudo a vengarse, eso sería simplemente demasiado triste para Admii-chan...
Yanai abrió sus ojos inyectados de sangre y apuntó el arma hacia Higa de nuevo. Los revólveres automáticos movían automáticamente el martillo después de disparar una ronda, así que el segundo disparo requeriría mucho menos presión en el gatillo comparado con el primero. Si su dedo índice presionaba sólo un poco, otra bala sería disparada.
— Si, es correcto... Si, tengo que matar al menos uno, como un sacrificio por esa chica... — Las pupilas reducidas de Yanai temblaban ligeramente en medio de sus ojos abiertos.
—Maldición. Esta vez está siendo serio. — Higa no pudo evitar cerrar sus ojos.
Antes de que aquel traidor pudiera jalar el gatillo una sobra cayó sobre de él clavando en un costado de su cuello una hoja de metal brillante y posteriormente lo arrojo al vacío.
—¿Estas bien? — Era una Tori bastante agitada y con unas cuantas heridas en su cuerpo
—S-si ¿Qué te paso?
—Digamos que aleje a los curiosos por la zona así que apresúrate.
—Higa... ¡Oye, Higa! ¡¿Estás bien?! ¡Respóndeme, oye! — Hablo Rinko por la radio
—......... Ah, no, sólo me sorprendió... que incluso tú puedas hacer ese tipo de sonido, Rinko.
— Cómo... ¡¿Cómo puedes decir algo así en este momento?! ¡¿Estás herido?! ¡¿Te disparó?!
La cantidad de sangre que estaba perdiendo era algo aterradora. Su mano derecha había perdido toda sensación, y se sentía muy frio. Incluso sus pensamientos no eran tan rápidos como de costumbre.
Pero Higa tomó una gran bocanada de aire, y después de acumular la fuerza en el estómago por un momento, dijo tan alegre como le fue posible:
— ¡No, estoy completamente bien! Sólo un rasguño. Continuaré la operación, ¡¡Por favor regrese para monitorear la situación de Kirito, Senpai!!
— ¡¿Realmente estás bien?! Voy a creerte, ¡¿De acuerdo?! Si intentas engañarme nunca te lo perdonaré, ¿está bien?
— Sobre eso... Sólo confía en mí.
Higa levantó la vista y agitó cuidadosamente su mano hacia Rinko, quien asomaba la cabeza en la entrada a decenas de metros de altura. La gran distancia, combinada con la iluminación inadecuada, debía haber hecho difícil para ella ver que él estaba sangrando.
—Entonces... Volveré al control principal primero, y si la imagen cambia, ¡volveré pronto! ¡Buena suerte, Higa! — Al momento en que su silueta estaba a punto de irse, Higa no pudo evitar llamarla en voz baja
—Ah... Rin-Rinko
—¡¿Qué, pasa algo malo?!
—No... Um, uh... ¿Sabes? En la universidad, no sólo Kayaba-senpai y ese bastardo de Sugou estaban obsesionados contigo, incluso yo lo estaba. — Higa quería decir esto, pero seguía sintiendo que, si decía algo así, su propia supervivencia disminuiría drásticamente, así que dijo algo al azar. —Um, después de que todo esto esté resuelto, ¿te gustaría comer algo juntos?
—... Recibido. Te invitaré a unas hamburguesas, o tazones de res, o lo que sea, ¡buena suerte!
Después la silueta de la profesora Koujiro desapareció de la vista de Higa.
—¿Enserio planeabas declararte en una situación como esta? — Dijo la joven asesina mirando al chico sonrojándolo
Higa sonrió con amargura, luego volvió a la computadora portátil en su mano izquierda. Puso sus entumecidos dedos derechos sobre el teclado u comenzó a escribir comandos cuidadosamente.
STL #3... Conectado a #4. #5, #6... Conectado.
Posiblemente debido a la pérdida de sangre, las palabras frente a los ojos de Higa comenzaron a duplicarse. Sacudió la cabeza y murmuró en silencio.
— Muy bien, Kirito-kun, casi es tiempo de levantarse.
Por su parte las fuerzas del Imperio Humano, así como los aliados del mundo real eran masacrados por los jugadores rojos.
—No... Basta por favor — Dijo Asuna entre sollozos tirando su espada
Un jugador rojo limpio su espada se dio cuenta de la presencia de Asuna, preparo su espada para contra ella Asuna permaneció inmóvil
—¡STOP!
El jugador rojo detuvo su espada apenas encima de la cara de Asuna, pero, el jugador rojo había despareció en el instante mientras una daga había caído al suelo al igual que Asuna cayó de rodillas
—Atiendan a los heridos — dijo Krista a sus hermanos restantes — Pero que ha..." No termino su frase ya que lanzo una bomba de humo y despareció en un instante.
Asuna miro a su alrededor al ver a todos sus amigos heridos, Klein tenía una herida importante en su brazo izquierdo, Sasha tenía su hoja izquierda rota mientras hacia un esfuerzo por levantarse, pero las heridas de sus piernas se lo impedían
—¡Ágil aguanta! — Grito Sílica a Ágil el cual estaba derribado con tres lanzas en el pecho
Asuna se levantó y se dirigió con su amiga herrera dándole un abrazo por la espalda, Liz enseguida le respondió el abrazo en mar de lágrimas
—¡Todo es mi culpa! ¡Todo están...!
—No, te equivocas Liz — dijo Asuna consolándola, pero de igual manera derramando lagrimas mientras una figura negro-encapuchada se acercó a las chicas
—Suelten sus armas y Ríndanse si no lo hacen los matemos — Dijo el hombre encapuchado
—¡¿De verdad crees que rogaremos por nuestras vidas?! — Grito Liena
—¡Hagan lo que dice por favor! ¡Tienen que vivir!" Grito Asuna con desesperación a Liena — Aunque sea humillante tienen que sobrevivir, es lo único que tenemos
Liena tratando de ponerse firme al final se rindió y tiro su espada, los demás siguieron y tiraron sus espadas generando un gran grito de Victoria entre todos los soldados rojos
—Tanto tiempo sin verte, destello veloz — La figura se quitó la capucha revelando su cara, cosa a qué todos los ex jugadores de SAO dejo sin palabras
—Poh...
—Hace tiempo que no usaba ese nombre me alegro de que lo recuerdes
—¿Está es tu venganza por haber acabado con Ataúd Risueño? — Pregunto Asuna furiosa mientras Poh comenzaba a reir
—¡No seas tonta! Te lo explicaré ¿Sabes quién dijo dónde estaba el escondite? ¡Fui yo!
—¿Por qué? — Esto había dejado sin palabras a la chica
—Quería convertirlos en homicidas, porque se hacían los héroes en el frente
—¿Ese era tu objetivo? ¿Querías que Kirito se convirtiera en un jugador rojo?
—Fuck yes. Observé la batalla escondido cuando lo perdió y mato a dos casi me muero de la risa además de que casi me descubren
—¡¿Sabes lo mucho que ha sufrido por eso?!
—Si, música para mis oídos. Pero no sé si creerte, si realmente se arrepentirá, no volvería a tocar un Vr ¿No crees? Por respeto a los que mató sé que él está aquí.
Al escuchar su afirmación hizo que Asuna ella misma se hizo decir la verdad con su lenguaje corporal
—Yo se lo preguntaré directamente ¡Tráiganmelo! — Al no tener otra opción accedieron con su demanda, Ronye fue a traer a Kirito de la carreta en su silla de ruedas.
—¡No por favor detente!
—¡It's show time!
Una figura en blanco estaba en una estructura en ruinas viendo todo lo que estaba pasando. Ronye se puso en frente de Kirito para detener a su atacante, pero este simplemente la quito del camino arrojándole hacia donde estaban los demás
Poh inspecciono a Kirito, dándole pequeños golpes con su pie, mientras que Kirito no reaccionaba
—¿Y esto? Despierta blacky — Poh inspeccionaba a Kirito dándole golpes con su pie sin respuesta alguna — ¿Me oyes? Espadachín negro
—Kirito intento levantarse varias veces mientras peleaban — Decía Ronye a las chicas
—¿Lo entiendes ahora? ¡Peleó una vez y otra vez hasta no poder más! ¡Así que déjalo en paz de una vez!
—¡No no no! ¡Esto no puede ser! esto no tiene gracia ¡Oye despierta basura! ¡Good morning! — El antiguo jugador rojo pateo la silla de Kirito tirándolo al piso ¿Enserio estás transformado del todo? El héroe no es más que un muñeco roto
Poh se arrodilló para agarrar la espada de la rosa azul de las manos de Kirito y al desenfundarla se dio cuenta de que estaba rota provocando una reacción de Kirito queriendo recuperar esa espada.
—Vaya te mueves, ¿Quieres esto? — Poh puso encima de Kirito la espada para hacer que la tomara, pero la arrojó para después tomarlo de la muñeca y lo levanto del suelo
—¡Vamos di algo! ¿Dónde está tu hermanito? — Preguntaba Poh mientras le daba de cachetadas
—¡Maldito! — Grito Klein apenas poniéndose de pie — ¡No te atrevas a tocar a Kirito!"
Klein a pesar del intento de ponerse de pie fue llevado nuevamente al piso por un soldado rojo que lo apuñalo por la espalda.
—¡No te lo perdonaré!
En eso Poh preparo su cuchilla de carnicero para acabar con su enemigo de hace mucho tiempo, los demás no podían resistir lo que estaba a punto de acabar con Kirito
—Esto es por el...
Una figura blanca corrió y se impulsó en el aire para salir disparada pasando encima de los rojos hacia la dirección donde estaba Poh dejando a todos sorprendidos pero la única que se dio cuenta de la identidad de la figura fue Liena
—¡Krista! — Grito Liena
Se trataba de Krista con su hoja oculta lista para acabar con Poh el cual al percatarse de esto soltó a Kirito dirigiendo su atención a la chica la cual estuvo a punto de encajar su hoja en el cuello de Poh, pero fue interceptada por este tomándola del cuello y arrojándola a otra dirección
—¡¿Quién eres?!
—Tu peor pesadilla
La oculta enseguida lanzo una bomba de humo desapareciendo en el instante, Poh con su cuchilla esparció el humo buscándola, pero de pronto se dio la vuelta para después parar un ataque de la hoja de Krista dándole una patada en respuesta haciendo que retrocediera, ella corrió contra el lanzándole dagas arrojadizas, pero este las desvío con su cuchilla.
Krista salto encima de Poh y en el aire desenfundó su espada para tratar de conectar un golpe con su espada a Poh, pero este apenas logro bloquearlo. Con su otra mano logro darle un golpe en su cara aún en el aire y al aterrizar en el suelo lo tomo por sorpresa agarrando la mano de este y uso su propio peso contra el para hacer que este cayera en el suelo.
Con una gran velocidad activó su hoja oculta de nuevo para darle golpearlo con ella en el pecho.
—Novata — Dijo Poh sonriendo de una manera malévola dándole una patada en el estómago quitándosela de encima.
Krista le afecto mucho el golpe que hizo que se quedara en el suelo tratando que se recuperará mientras su contrincante se puso de pie riéndose.
—Eres como el ¿No? Los famosos autoproclamados luchadores de la libertad ¿Por qué pierdes tu tiempo en eso?
Krista aún estaba recuperando su aliento y trato de arrojarle otra daga, pero este la interceptó en el aire con su mano mientras se le acercaba para quitarle su capucha y tomarla del cuello.
—Es una pena y desperdicio con una lindura como tú ¿Por qué lo haces? ¿Por qué te resistes? — Krista lo golpeaba con afán de liberarse, pero lo único que consiguió fue recibir un golpe en el estómago nuevamente
—Nos acabas y nos levantamos de nuevo — Poh dirigió a Krista quien tenía su cuello en sus manos a los demás quienes estaban sometidos
—¡Solo mira! Incluso las personas que buscabas salvar te han dado la espalda. Sin embargo, luchas, te resistes ¡¿por qué?!
Krista perdió la consciencia y soltó las manos de su atacante
—Podrías intentar hacer cosas que normalmente no haces — una voz retumbó en la cabeza de la chica — Constantemente pienso que me gustaría renacer
Krista recupero la consciencia y miro a Poh directamente a los ojos
—Porque... ¡Porque nadie más lo hará!
Krista con una gran velocidad activó su hoja oculta para acabar con Poh el cual apenas pudo evitar un golpe fatal provocándole la perdida de uno de sus ojos. Krista se recuperó en seguida y tomándolo por sorpresa le dio una patada en la cara para después rematarle con un golpe en el estómago, en seguida tomó su espada de nuevo para acabarlo con una vez por todas, pero este se recuperó de inmediato dando un salto detrás.
—¡Ahora sí me hiciste enojar desgraciada!
Krista se dio la vuelta enseguida y apenas logro bloquear el ataque de su cuchilla con su espada recibiendo un corte en el brazo
Krista gruñó del dolor provocado una sonrisa en Poh al ver que le estaba costando trabajo cosa que aprovecho, Krista para poder escapar dio una barrida a sus piernas tomándole por sorpresa generando que la ira en Poh cada vez hacía que se encendiera más y más
—¡Pagarás por lo que hiciste a todos! ¡No te lo perdonare!
Poh grito de irá y corrió hacia Krista con su cuchilla lista, lo que no se esperaba era que una especie de cuchilla atravesara su mano
—¡Eres mío! — Krista le había arrojado una cuchilla de arpón
La chica jalo de la soga con una gran fuerza haciendo que Poh soltará su arma y cayera al suelo
—Esto es por el... Técnica secreta de la familia Andersen — los ojos de Krista comenzaron a brillar en un tono azul
Poh se levantó quitándose el arpón de su mano en eso noto que su enemiga comenzó a emanar una gran cantidad de energía. Krista dio un gran salto en el aire para asestar el golpe final contra Poh el cual grito emanando una energía oscura.
Ambas estaban a punto de llegar al choque cuando paso una gran estela de luz blanca. Los dos aterrizaron en el suelo, Poh había tenido un corte en el brazo haciéndolo sangrar Krista sintió mucho frío en su cuerpo, su visión se estaba haciendo borrosa, después le entró una sensación cálida como si se estuviera siendo acurrucada, su mirada cambio cuando noto que en su estómago había sido empalada por el cuchillo de Poh que aún lo traía en su estómago y lo siguiente que escucho fue su espada tocar el piso y después de ella su cuerpo
—¡Krista! — Gritaron Liena y sus compañeros y amigos con desesperación
Krista empezó a escupir sangre de su boca y una lágrima de sangre comenzaron a caer, Poh ignoro su herida y se dirigió a donde estaba Krista
—Pfff no me hagas reír maldita escoria ¿En verdad creíste que tuviste oportunidad? — Violentamente tomó su cuchillo de su estómago haciendo que empezará a sangrar
Krista con las fuerzas que le quedaban levantó su mano con dirección hacia el cielo
—Al final... lo logré... —Dijo con una sonrisa.
Poh se disponía a darle el golpe final a la chica cuando un jugador de ALO con vestimentas de tonalidades negras y moradas hizo retroceder al antiguo líder de Ataúd Risueño.
—¿Ahora quién eres tú?
El rostro del jugador pertenecía nada más y nada menos que a Eiji, un jugador de Ordinal Scale y Sword Art Online perteneciente a la Hermandad de Caballeros de la Sangre. Eiji comenzó a atacar a Poh usando su agilidad como ventaja lanzando cortes y patadas cuando podía.
A pesar de esa ventaja Poh logro esquivar sus ataques y asestar un golpe mandándolo a volar unos cuantos metros lejos de él.
—Es un sucio japones, no perdonen a ningún hacker — El aura que Poh desprendía era de una gran magnitud de odio y maldad que comenzó a controlar a varios jugadores rojos para que hicieran su voluntad
De repente una pequeña hada similar a Yui se acercó rápidamente al chico peligris transformándose con un rayo de luz morado en la famosa idol de realidad aumentada Yuna.
—Aquí estoy Eiji — Dijo la chica causando una confusión en los jugadores rojos — En marcha
La chica comenzó a cantar mientras diversos potenciadores se aplicaban al avatar de Eiji.
—Segunda ronda
Eiji ahora atacaba con mayor precisión y velocidad dándole problemas a Poh. Yuna por su parte con su canción logro quitar el aura maligna de los jugadores rojos los cuales comenzaban a entender que se trataba de un servidor japones.
—¿Quién eres tú? — Decía Poh enfrentando al chico
—Yo soy un Caballero de la Hermandad de Sangre ¡Nautilus! — Sus ropas cambiaron al uniforme de dicho gremio mientras volvía a dar un corte fallido a Poh.
—No te conozco nada
—En aquel entonces, yo era débil pero tu mataste a otros jugadores y compañeros en Aincrad y eso ¡No te lo perdonare!
Los cortes se acercaban cada vez a su objetivo recordándole cómo fue su infancia y como comenzó el odio a los japoneses y el desprecio por la vida humana. Cuando él era más joven, su madre era una persona adicta al alcohol que siempre lo llamaba "Hijo del demonio" diciéndole que ella no viviría en la miseria si él no hubiera nacido, después de ello su en aquel entonces ya no desaparecido padre llego a su vida con el fin de encontrar un corazón para su hermanastro (el cual era japones) chantajeándolo con dejar sin un sustento económico a su madre, años después fue cuando conoció el mundo de Aincrad comenzando su cacería de japoneses.
Esto le dio la suficiente ira para arremeter al igual que su contrincante recibiendo únicamente un corte en su mejilla mientras que Eiji perdió ambos brazos.
—¿De verdad creíste que al igual que esa mocosa serian capaz de vencerme a mí? — Poh hizo un corte horizontal en el cuerpo de Eiji y posteriormente lo pateo cerca de donde Klein y los demás estaban.
—Estas precioso sucio japones, es hora de que desaparezcas — Eiji en una medida desesperada arremetió contra el mordiéndolo violentamente en el cuello.
—¡Ya no soy el mismo de antes! — Esto enfureció más a Poh el cual como si fuera carne golpeo la espalda del muchacho para después darle un rodillazo y arrojarlo.
Yuna angustiada y con su apariencia de Aincrad corrió a socorrerlo.
—Hice lo que debía ¿Verdad? — Decía débilmente el muchacho.
—Te esforzaste mucho Ei — Contesto la chica con lágrimas en los ojos.
Ambos comenzaron a brillar comenzando a convertirse en polvo que se elevaba al cielo. Moonphase y Mei alcanzaron a ver su tatuaje que simbolizaba su gremio de Aincrad y mientras los demás comenzaban a cuestionarlo el aura que había eliminado Yuna comenzó a presentarse nuevamente provocando que entre jugadores rojos se atacaran y mataran entre si generando una risa macabra en el causante el cual nuevamente se acercó a su viejo rival.
—Espera un poco, enseguida te despertare, si te quedas durmiendo todo el mundo morirá.
Mientras tanto Sinon tenía un duelo de francotiradores como si GGO se tratara. Sus segundos disparos parecían descargar al mismo tiempo.
Balas disparadas por dos rifles antimateria de francotirador pasaban rozándose unas con otras, luego se desviaban enormemente en sus trayectorias y desaparecían en el cielo.
Sinon no perdió su balance esta vez; estampó los dos pies en el aire, suprimiendo el retroceso. Frente a sus ojos, Subtilizer también estaba parado firmemente en la parte posterior de la criatura alada, que movía furiosamente sus alas.
Era la primera vez que Sinon experimentaba un espacio donde todas las direcciones estaban extremadamente abiertas, y una batalla entre dos rifles de francotirador antimateria. Un juego como GGO naturalmente no soportaría vuelo entre los jugadores; por otra parte, el Hecate estaba supuesto a ser disparado con su bípode y una postura de tirador acostado. El retroceso por disparar mientras estaba en el aire estaba mucho más allá de sus expectativas.
Cualquiera que fuese capaz de controlar su retroceso y disparar la siguiente ronda antes de que el enemigo lo hiciera, incluso por sólo un instante, ganaría. Sinon pensaba esto mientras retiraba el cerrojo.
Subtilizer probablemente tenía la misma idea. Mientras Sinon volaba a la derecha para intentar rebasarle, él comenzó a volar a la izquierda para contrarrestarla.
Al mismo tiempo virtualmente, ambos comenzaron a moverse a una velocidad de vértigo.
Bajo la condición de que no perdiera el balance, maniobró en ángulos agudos en direcciones arbitrarias. Mientras capturaba firmemente a su enemigo con el cañón de la pistola, tenía que ser cuidadosa en no dejar que el cañón del enemigo se centrara en ella.
Pero el Barrett alzado de Subtilizer se movió repentinamente a una velocidad apenas perceptible, por lo visto prediciendo los movimientos de Sinon antes de que ella pudiera hacer lo mismo.
—¡Ya viene! — Sinon apretó los dientes y abrió mucho sus ojos mientras las llamas brotaron del cañón del Barrett.
Sinon voló tan rápido como pudo mientras torcía su cuerpo hacia la izquierda. La bala mortal rugió más allá de su pecho, lo suficientemente cerca como para quemar la piel de su pecho. Su armadura azul se partió con un crujido.
Esta era su primera y última oportunidad. ¡Debía disparar en el instante que Subtilizer había dejado de controlar su retroceso!
Sin embargo, al momento en que Sinon había levantado su Hecate. Vio otra bala volando directamente hacia ella.
—¡¿Fuego repetido... por qué?!
A diferencia del Hecate, cuyo cerrojo necesitaba volver a ser arrastrado hacia atrás con cada disparo, el Barrett era semiautomático. Cuando este pensamiento flotó en su cerebro, la pierna izquierda de Sinon fue desgarrada por encima de su rodilla.
En ese momento, el miedo en el corazón de Sinon era más por su incapacidad de volar libremente que el dolor producido por toda una pierna despedazada.
Antes, Sinon había volado libremente al pisar sobre el aire. Pero ahora sólo era capaz de evadir rápidamente con su pie derecho, el cual se convirtió en un rápido descenso mientras giraba caóticamente.
Sinon apretó sus dientes, cambiando sus movimientos por la única maniobra que podía seguir realizando... volar hacia atrás sin detenerse. La sangre que emanaba de su pierna izquierda dibujaba una brillante línea roja en medio del aire.
Incrementó su distancia entre ella y Subtilizer a la máxima velocidad que pudo, mientras apuntaba hacia él y disparaba un tercer tiro.
Pero, el enemigo se acercó a ella fácilmente, y el rifle de francotirador en sus manos también emitió el brillo de un cañón, disparando una cuarta vez.
Las dos balas corrieron en dirección a la otra en la misma línea recta, emitieron un agudo ruido disonante e hicieron chispas en el momento en que se arañaron, y luego se desviaron de sus caminos y volaron en el aire.
Sinon arrastró hacia atrás el cerrojo, descartó su interminable miedo expandiéndose junto con el cartucho de balas vacío y disparó su cuarto disparo.
Dos estruendos de trueno se solaparon el uno al otro. Dos balas explotaron en un inmenso monto de energía al hacer contacto una con la otra, luego cada una se salió en espiral y desapareció.
El quinto tiro. El sexto tiro.
Los resultados fueron iguales. Subtilizer obviamente estaba coordinándose a propósito y disparando al momento que Sinon disparaba, haciendo que las balas colisionasen entre ellas sin parar.
Tal habilidad no podría existir en GGO, sin mencionar a este mundo. Pero en este mundo, la imaginación precedía a todo. No sólo Subtilizer, quien estaba creando este resultado intencionalmente, se había dado cuenta de esto, incluso Sinon lo había hecho; por eso era que este bizarro fenómeno en el que balas supersónicas chocaba entre si interminablemente seguía pasando.
Incluso así, aparte de las tres acciones de arrastrar hacia atrás el cerrojo, apuntar el enemigo y jalar el gatillo, Sinon seguía incapaz de hacer algo más.
El séptimo tiro soltó un intimidante rugido, se desvió en una gigantesca curva a la izquierda, y se desvaneció.
Expulsar el cartucho. Apuntar.
Cuando el dedo de Sinon se retrajo, el gatillo emitió profundo sonido de clic.
La capacidad del cargador del Hecate II era de siete ondas. Ella no había pensado en los cargadores. Por el contrario, la capacidad del magazine del Barrett XM500 era de 10 rondas. Quedaban dos más.
Sinon podía ver claramente la fría sonrisa surgiendo en el rostro de Subtilizer a más de 100 metros de distancia de ella.
Llamas surgieron violentamente de su rifle de francotirador alzado. Siguiendo su pierna izquierda, la pierna derecha de Sinon explotó también. Esto impidió que volara en una línea recta, y comenzó a descender lentamente.
Controlando el retroceso, Subtilizer presionó su ojo derecho contra la mira, preparándose para disparar el tiro final. Ese ojo similar a un cristal azul se apoderó de todo el lente, dirigiendo su visión con precisión al corazón de Sinon.
—Lo siento. Lo siento, Asuna, lo siento Yui, lo siento Kirito, lo siento Saga...
Preparada para recibir el impacto final un segundo estruendo se escuchó a la redonda provocando que Sinon abriera los ojos mientras caía. A unos 150 metros una especie de planeador se acercaba mostrando a un chico con ropas negras acercarse a ella.
Saga logro disparar su cañón oculto desviando el disparo del hombre rubio y con ayuda de su maquina atrapo a la chica que caía y la llevo nuevamente a la piedra redonda.
Rápidamente se puso frente a ella sacando su espada del Edén y recitar su dominio absoluto.
—Considera esto un regalo — Una voz resonó en la cabeza el chico mientras una descarga eléctrica salía de su espada derribándolo.
Esa descarga eléctrica provoco que el asesino casi se desmayara, su respiración comenzó a ser errática, en su rostro se hizo evidente el dolor que le causó aquel impacto, pero algo en el comenzó a resurgir de lo profundo de su mente, sus recuerdos.
Aparentemente, esa onda de energía que lo golpeó ayudó que sus memorias volvieran a él.
—¡Saga! ¡¿Estas bien?! — Aquella voz desesperada que lo llamaba y que él conocía perfectamente lo obligaron a retomar el sentido.
Al querer recobrar la compostura de manera apresurada, sintió como su cuerpo aún estaba aturdido.
—Sinon... — murmuró su nombre mientras intentaba ponerse en pie — ¡Sinon! — grito el chico al ver aquellos ojos azules que tiempo atrás había encontrado en un juego de armas — Estas aquí...
—Saga... — lo mira llorosa colocando sus manos sobre su boca sorprendida — ¡Dijiste mi nombre! Eso significa que tus recuerdos... — La chica no dudo un segundo extendió sus brazos hacia él hundiéndose en el más cálido abrazo que había añorado volver a sentir — Sabes... eres un tonto estaba muy preocupada por ti.
—Sinon no debiste venir esto es peligroso. — Al ver la ausencia de sus piernas saco rápidamente el sudario del edén y se lo coloco — Tengo que ir tras él, quédate aquí no tardare.
—Ni hablar — Sinon lo tomo de su gabardina con firmeza — Lo haremos juntos
—No estás en condiciones de ir, no te expondré innecesariamente.
—Pero...
—El sudario te ayudará a curar tus heridas más rápido que las artes sagradas — Saga antes de emprender nuevamente su viaje tras vector, le dio un fugaz beso en la frente de la peli azul — Estaré bien.
El asesino corrió rápidamente y volvió a emprender vuelo con su maquina dejando a Sinon sin poder refutar su decisión
Por su parte Leafa por el momento era incapaz de gastar tiempo removiendo las filosas cuchillas perforando su cuerpo. Todo el dolor de su cuerpo se unió, como si agujas perforaran directamente sus nervios expuestos.
Algunas de sus heridas eran claramente letales. Cada vez que se movía, las dos espadas desgarrando directamente su abdomen dañarían sus órganos internos, y la espada que entraba en su espada y salía por su pecho había pasado directamente a través de su corazón.
Pero Leafa no paró de moverse. Mientras una gran cantidad de sangre salpicaba mientras rugida ferozmente, activó una Habilidad de Espada que había activado quien sabe cuántas decenas de veces... o cuantas centenas de veces.
La catana "Verdurous Anima" se deslizó horizontalmente en dirección a nada con un brillo verde. Después de concentrar poder por un momento, la curva de luz a su alrededor se expandió silenciosamente, y los cuerpos de incontables soldados enemigos fueron mandados a volar.
Unos cuantos enemigos aprovecharon la oportunidad de su tiempo de espera después de que activó tan grande habilidad, cargando contra ella. Ella saltó hacia atrás al último momento, pero a pesar de que se las arregló para esquivar la mayoría de los ataques, una gran alabarda consiguió atravesar su brazo izquierdo.
Ella estampó con fuerza ambos pies en el suelo para estabilizar su cuerpo, el cual casi se había caído por el impacto Su espada cortó horizontalmente una vez, y tres hombres caducaron al instante.
Leafa recogió su brazo que había caído al suelo, lo junto con su herida, y pisoteó con fuerza el suelo con su pie derecho. Flores y hierba emergieron del suelo con un destello de luz verde, luego desaparecieron. Su salud había sido restaurada a lo normal y a pesar de que sus repugnantes heridas seguían presentes, su brazo izquierdo fue reconectado.
En este tipo de situación, la regeneración infinita concedida a la cuenta de Terraria ya no podía ser llamada la bendición de un dios.
En su lugar, maldición sería una palabra más apropiada. No importaba cuantas heridas sufría, que tan intensa era la agonía que probaba, a ella nunca, nunca, se le permitía fallar. No era capaz de morir, aunque no era invencible; estaba afrontando una inimaginable tortura.
La única cosa que hacía continuar a Leafa era la fe.
—Ellos nunca se rendirían por sólo estas heridas. Así que no me puedo rendir tampoco. Sólo son tres mil personas, por supuesto que me voy a deshacer de ellos yo sola. Porque... yo soy.... del "Espadachín Negro" Kirito... y del... "Asesino Negro" ... ¡Su hermana!
Una luz carmesí se disparó de la punta de la catana que sostenía.
La catana irrumpió hacia delante con un bajo sonido metálico, disparando una gigantesca lanza de luz que perforó directamente a través del campo de batalla de cientos de metros en anchura. Los cuerpos enemigos fueron retorcidos, y finalmente desaparecieron.
Sus rápidas inhaladas se convirtieron rápidamente en bocanadas de sangre. Leafa limpió su boca, se sacudió, y una lanza llegó rugiendo, golpeando la derecha de su ojo izquierdo y saliendo a través de la parte trasera de su cabeza.
Se tambaleó unos cuantos pasos; pero Leafa no cayó, agarró el mango de la lanza con su mano izquierda y la quebró de una vez. Una sensación que no era dolor surgió en el interior de su cráneo.
Ella gritó, estampando su pie violentamente para recuperar HP. La temporalmente perdida parte izquierda de su visión se regeneró en un chasquido. En un vistazo, antes de que hubiera dado cuenta, sólo quedaban alrededor de cien enemigos.
Leafa sonrió, extendió su sangrienta mano izquierda, apuntó su palma hacia arriba; y movió sus dedos cerrados. Contra la legión que llegaba como una tormenta en su dirección, emitiendo aullidos totalmente desesperados. La espada destelló.
La sangre roció el aire mientras Leafa se precipitaba sin temor dentro del obstruido centro de la legión enemiga.
Aproximadamente tres minutos después, después de que el último enemigo había caído, el cuerpo de Leafa había sido desgarrado por otras diez piezas de metal.
Sus extremidades perdieron toda sensación mientras se tambaleaba y caía hacia atrás, entonces fue suspendida en medio del aire por las espadas y lanzas penetrando su espalda que habían alcanzado el suelo.
Escuchando a Rillpilin y los otros gritando su nombre, así como las pisadas corriendo hacia ella, Leafa cerró sus ojos y murmuró suavemente:
— Yo... hice lo mejor que pude, ¿cierto?... hermano...
Mientras tanto A través de una cortina de lágrimas, Asuna contemplaba la figura de su amado, rezando.
—Por favor, Kirito. Estoy dispuesta a dedicar mi corazón, mi vida, mi todo. Así que, por favor, despierta.
—Kirito. — Pensaba Sinon desde las piedras en las que se había quedado
—Hermano — Pensaba Leafa tirada en el piso
—Vamos idiota — Dijo el asesino que se encontraba en vuelo con el fin de alcanzar a Alice
—Ahora... Kirito...
Poh levanto a un soldado del Imperio Humano amenazándolo con matarlo si Kirito no despertaba, Asuna quería que actuar. Ella tenía que levantarse y balancear su espada para detener la ejecución de Poh.
Pero ni sus manos ni sus pies tenían fuerza en ellos. Cada vez que tomaba aliento, las innumerables heridas que la atormentaban empezaban a palpitar, debilitando su conciencia apagada.
—No... No puedo levantarme. — Asuna exhaló débilmente, permaneciendo arrodillada en el suelo seco.
Ella lentamente se encogió. Su pelo sucio y despeinado cayó sobre sus hombros, oscureciendo su visión.
—Todo está bien. Puedes hacerlo, Asuna. Levántate. — Una voz débil, pero firme, entró en sus oídos. —Vamos, Asuna. Levántate. Debes proteger lo que es importante para ti.
Dicha voz pertenencia a Yuuki que después de un largo combate su cuerpo no podía mas y se encontraba con su gremio y los demás sobrevivientes de la guerra.
La mano derecha de Asuna se contrajo, se arrastró por el suelo y agarró algo que había caído al suelo.
Alzando su rostro, vio al asesino de negro levantando su cuchilla en alto, mientras emitía un sangriento brillo rojo. El caballero carmesí capturado se quedó congelado por el miedo. La conmoción había cesado y todos los ojos estaban concentrados en esa daga, desprovista de misericordia.
Contuvo la respiración, apretando sus dientes, concentrando el último pedazo de fuerza que tenía ... Asuna pateó con fuerza del suelo.
Tiró de la espada en su mano derecha con un grito que parecía estar escupiendo una bocanada de sangre. La punta afilada expulsó un destello blanco. Una habilidad de espada básica que había utilizado miles de veces, incluso decenas de miles de veces en el pasado.
Poh notó el ataque sorpresa de Asuna con una asombrosa velocidad de reacción. Emitió un gruñido y tiró la parte superior de su cuerpo hacia atrás. Asuna frenéticamente empujó su mano derecha hacia la oscuridad de esas ropas.
Sintió cierta resistencia. Un mechón de pelo rizado negro voló hacia el cielo y gotas de sangre se deslizaron de esa piel gris.
Ya sea en Underworld o en Aincrad, activar una habilidad de espada crearía una gran apertura. Al instante, Asuna se sumergió en un fatal estado de rigidez y la cuchilla de Poh ya estaba dirigiéndose hacia ella, cortando el aire a medida que se acercaba.
Pero al mismo tiempo Asuna concentró su imaginación bajo los pies de Poh. Una luz floreció ligeramente del suelo y desapareció. Asuna usó el poder de Stacia la Diosa de la Creación para levantar el suelo bajo Poh, con sus pies como el centro, a pocos centímetros en el aire.
Era sólo un poco de manipulación geográfica, pero su cabeza fue apuñalada por un fuerte dolor. Después de haber pagado ese precio, el cuerpo del asesino perdió el equilibrio y la cuchilla sólo cortó un pedazo de la ropa de Asuna.
Poh levantó su cuchilla de carnicero directamente delante de él, girando su poncho. Un golpe a una velocidad divina se encontró ferozmente con una estocada inflexible, soltando chispas de color blanco puro y rojo carmesí.
Asuna invocó todas sus fuerzas para repeler el choque de la espada mientras reclamaba con voz ronca:
—¿Qué demonios... quieres? — Pregunto Asuna furiosa
—¿Tengo que explicarlo detalladamente? Quiero a esos chicos... Desde que intenté matarlos en el quinto piso de Aincrad o que se me unieran viendo el potencial del otro, es todo lo que he querido. — La esquina en la boca expuesta de Poh bajo su capucha se elevó en silencio, y él respondió con voz ronca:
—¿Por qué odias tanto a Kirito-kun? ¿Qué te ha hecho?
—¿Odiar? — Poh repitió, sonando muy en desacuerdo. — Pensé que tú, de entre toda la gente, entendería cuánto lo amo. Es el único hombre en el que puedo confiar incondicionalmente en este mundo lleno de mierda. No importa cuánto dolor le ponga, él no se rompe, y no importa lo mucho que lo tiente no se hunde. Él me trae esperanza y alegría sin importar que hora del día sea. Así que... no puedo permitirle que esté justo así cuando no estoy allí. Ten por seguro que lo haré despertar. Por eso, no me importa a quién o a cuántos miles... decenas de miles tengo que matar.
Esas palabras petrificantes salieron de la boca del asesino, transformándose en un aura negra que rodeó el cuerpo de Asuna, tratando de privarla de su voluntad para pelear.
—¿Esperanza...? ¿Alegría...? Lo que hiciste, ¿¡Sabes cuánto Kirito-kun ha... ha.........!?
Quería refutarlo, pero el punto de intersección donde la cuchilla y el estoque chocaron, de repente y explosivamente expulsó chispas, presionando cada vez más y más cerca de Asuna.
La voluntad para pelear de Asuna no se movió ni un centímetro. La hoja demoníaca de la Mate Chopper, empuñada en la mano derecha de Poh, vibraba y crecía en grosor como un organismo vivo. Poh pareció notar el asombro de Asuna: se burló profundamente dentro de su capucha.
—Finalmente entiendo cómo funciona este mundo. Aquí, la sangre derramada y las vidas perdidas se convierten directamente en energía. Como cuando esa "Flor dorada" lanzó ese láser y prendió en llamas al ejército del Territorio Oscuro.
Antes de que Asuna hubiera hecho inmersión, también había escuchado una explicación del sistema que formaba parte en la fundación de Underworld. Eran los
"Recursos Espaciales", pero requerían un encantamiento complicado o un equipamiento capaz de absorberlos. Incluso si la expansión del tamaño de la Mate Chopper se debía a Recursos Espaciales, Poh no había recitado el comando, y la Mate Chopper debería ser meramente un remanente de una cuenta de SAO convertida, por lo que no debería tener la capacidad de absorber Recursos en Underworld.
—En Aincrad, la " Mate Chopper" se debilitaba cuanto más matabas monstruos con él, pero cuanto más matabas jugadores... humanos, más fuerte se volvía. Sí, parecía que esta maldición se rompería después de matar un montón de mobs, convirtiendo su hoja en una catana con un nombre similar, pero no estoy interesado en eso. Lo importante es que su capacidad original de absorber vida humana y aumentar el poder funciona en Underworld también. Las vidas de todas esas tropas americanas que mataste y los japoneses asesinados por los chinos y coreanos están dando vueltas alrededor de este campo de batalla. Si los chinos y los coreanos comienzan a matarse unos a otros, entonces aún más vidas se filtrarán.
Mientras el asesino murmuraba, la Mate Chopper empezó a emitir gruñidos y se hinchaba sin parar. El equipamiento GM de Asuna "Radiant Light" chirriaba contra la cuchilla, como si ya no pudiera soportar más la resistencia. Todo a su alrededor poco a poco se desvanecía mientras sus orejas se llenaban con el sonido de su propia respiración y el martilleo de los latidos de su corazón.
—Después de que absorba todas sus vidas, mataré a cada uno de los Fluctlights Artificiales de este mundo. No sólo a esos chicos que cubren la espalda por allá... también a los monstruos del Territorio Oscuro y a los humanos del Imperio Humano. No sé cuántas decenas de miles hay, pero en ese momento, él despertará. Si es el "Espadachín Negro" confiare
El viento frío sopló contra el poncho negro, exponiendo por un instante los ojos profundos dentro de la oscuridad. Eran ojos brillantes de un rojo apagado. Era un demonio. Inhumano. Un verdadero demonio.
Esta era la verdadera naturaleza del hombre llamado Poh. No importa si llevaba la máscara falsa de "Incitador Alegre" en Aincrad, o la máscara falsa de un "comandante Severo" en este campo de batalla, todo era falso. El verdadero Poh era un frío vengador, deseando la tortura y el tormento de la humanidad, deseando sólo matar.
Las rodillas de Asuna cedieron. Su estoque chirreó de nuevo y la hoja de la cuchilla apretó hacia su garganta.
—Relájate. No voy a matarte. Sólo me aseguraré de que no sigas molestándome. Porque tengo que dejarte que veas... que veas como despierta, y que lo veas morir por mi mano.
La Mate Chopper se había hinchado hasta el doble de su tamaño normal. Radiant Light dejó escapar un chillido agudo y penetrante cuando las fisuras aparecieron en su cuerpo.
Con una rodilla contra el suelo, la visión de Asuna fue bloqueada por el aura negra que brotaba de la capucha. En la oscuridad, las únicas cosas que existían eran la hoja monolítica de acero y sus ojos brillantes de color carmesí.
—¡Tu puedes Asuna yo siempre estaré a tu lado para apoyarte! — Yuuki grito mientras mandaba sus pocas energías a su mejor amiga
Una clara luz azul salió del pecho de Asuna y desgarró la oscuridad ante sus ojos. Reflejadas en Mate Chopper, vio alas de color blanco puro extendiéndose ampliamente detrás de su propia espalda.
Todo el sonido regresó y escuchó las voces de sus camaradas mezclarse entre el bullicio del campo de batalla.
—¡Asuna! ¡Mátalo, Asuna!
—¡Asuna-san! ¡Asuna-san!
—¡Levántate, Asuna!
—¡Asuna!
Lisbeth. Silica. Agil. Klein.
No sólo sus camaradas. Las voces del grupo superviviente de ALO, incluso a Sakuya y Alicia, Siune y el resto de los Caballeros Durmientes, Renly y el resto del Ejército de Defensa del Imperio Humano, Tieze, Ronye, Sortiliena y muchos otros Guardianes y Ascetas, entraron en los oídos de Asuna.
—Gracias a todos. Gracias, Yuuki. Todavía puedo luchar. Todos ustedes me han dado fuerzas. No puedo perder nunca puedo perder contra alguien como tú, ¡Quien sólo sabe cómo odiar! — Cuando Asuna gritó, ondulaciones blancas surgieron de todo su cuerpo, lanzando Poh hacia atrás de sus pies.
Se levantó, haciendo retroceder la espada en su mano derecha con toda su fuerza. Destellos de color lavanda se descargaron y corrieron a lo largo de la hoja, asemejándose a bulbos y pétalos de las flores de tomillo, tiñendo el mundo del mismo tono.
Al dirigirlo al cuerpo del asesino, éste trataba de recuperar su equilibrio, ahora se encontraba muy expuesto. Asuna activó la Habilidad de Espada Original que había recibido de "La Espada Absoluta" Yuuki.
Empezando desde la parte superior derecha clavó cinco golpes ultrarrápidos, grabando cinco puntos de luz diagonalmente hacia abajo. Cinco golpes que comenzaron desde la parte superior izquierda se interceptaban con la trayectoria de su hoja en este momento, grabando otros cinco puntos de luz.
Incluso mientras escupía el aire mezclado con sangre, la cuchilla gigantesca en el puño derecho de Poh seguía brillando en carmesí. Si Asuna era golpeada por el gran contraataque de él, su HP restante se agotaría de seguro.
Pero el ataque de Asuna aún no había terminado.
Concentrando cada último pedazo de su energía restante en la punta del estoque, y soltando en el centro de las trayectorias cruzadas de la espada, el ataque final más fuerte.
Habilidad de espada original de once golpes," El Rosario de la Madre".
El resplandor violeta atravesó el pecho de Poh como un meteoro. El asesino en el poncho negro fue lanzado al aire y cayó inactivamente en el suelo lejano. Ahora, después de haber agotado la última cantidad de energía que tenía, Asuna volvió a caer de rodillas, gritando en su corazón.
—Gracias, Yuuki.
Ella nunca debería haber sido capaz de usar la habilidad en Underworld para empezar. Incluso si Higa y Kikouka hubieran importado las viejas habilidades de espada de SAO junto con La Semilla, quien había heredado dicha técnica había sido Asuna la Undine en ALO. Sin haber convertido su personaje y en su lugar usó la cuenta de Stacia, Asuna no debe tener esos datos en ella.
Pero la habilidad todavía se había activado con ese efecto de iluminación especial. Si éste era el poder de la imaginación. Sus recuerdos cuando conoció a Yuuki y aun pensando que ella iba a morir de no ser por la ayuda de su cuñado y su hermandad de asesinos fue lo que la impulso a seguir adelante
El avatar de Poh permaneció inclinado sobre el terreno. Pero después de haber sido golpeado directamente por un combo de once golpes de un arma GM, no había ninguna posibilidad de que sobreviviera. A diferencia de otros jugadores, debería usar un STL, lo que significaba que incluso si muriera, su cuerpo probablemente no se desintegraría y permanecería intacto en la escena como un residente del Imperio Humano o del Territorio Oscuro.
Apoyándose en su estoque y haciendo un esfuerzo significativo para pararse, Asuna giró para mirar a Klein. Su abdomen todavía estaba atravesado por espadas, pero los tres jugadores que lo sostenían se habían alejado de su lado y miraban a Asuna sin habla, junto con un cuarto caballero que vino tratando de ayudar a detener la ejecución.
A pesar de que ella quería llegar al lado de Kirito lo más rápido posible, primero tenía que sacar las espadas del cuerpo de Klein y tratar sus heridas, y justo cuando Asuna estaba a punto de caminar hacia él, sintió que el suelo temblaba ligeramente. Asuna contuvo el aliento y volvió a mirar hacia atrás.
Poh permanecía inmóvil en el suelo. Pero un desviado resplandor rojizo y negro florecía de la cuchilla Mate Chopper empuñada en su mano derecha. Mirando más de cerca, Asuna se dio cuenta de que el aire en el campo de batalla estaba formando lentamente un vórtice giratorio, concentrándose en la cuchilla.
—No... ¡Está absorbiendo el Poder Sagrado! — La Líder Guardiana Sortiliena gritó desde el frente del ejército del Imperio Humano. Asuna apretó los dientes y corrió hacia delante para destruir la hoja demoníaca.
Pero a un paso más rápido que ella, el cuerpo del asesino negro se levantó del suelo como si fuera arrastrado por Mate Chopper, el cual había flotado en el cielo.
Un enorme rasgón había aparecido en la parte delantera del poncho, exponiendo su cuerpo descubierto tras una ajustada ropa de cuero. Había un gran agujero en el pecho donde había sido golpeado por el ataque final de la OSS, y el espacio detrás de él era visible a través de él.
Observando a Poh, incluso mientras todo su corazón habías sido arrancado, los residentes de Underworld dejaron escapar quejidos de miedo. Una violenta conmoción incluso pasó por los chinos y coreanos que pensaban que este era un mundo VRMMO normal.
Parecía que la Mate Chopper había absorbido una gran cantidad de Recursos Espaciales y los había convertido en HP para Poh. Incluso mientras hacía esta suposición, Asuna se encontraba temblando incontrolablemente por todas partes.
Poh estaba haciendo inmersión con un STL.
Si ese fuera el caso, entonces él debería estar sufriendo el mismo nivel de dolor que lo haría en el mundo real. Asuna ya había probado el dolor casi lo suficiente para hacerla desmayar cuando las lanzas la habían penetrado; era imposible imaginar qué clase de agonía vendría al tener un agujero enorme abierto en el pecho de uno.
Pero los labios del asesino, goteando sangre, sonreían sin decir nada - y luego gritó con un rugido absolutamente ensordecedor lo suficientemente fuerte como para sacudir todo el campo de batalla:
—¡Camaradas! ¡Esta es la verdadera naturaleza de los japoneses! ¡Maten a cada uno de los traidores débiles... y a los inmundos japoneses también!
Había gritado claramente en coreano, pero por alguna razón Asuna entendió lo que quería decir.
El aura negra y rojiza brotaba de la altamente elevada Mate Chopper de Poh, extendiéndose hasta los fines del desierto.
La mitad de los chinos y los coreanos también levantaron sus espadas en alto, emitiendo un rugido feroz.
Comenzaron a atacar a los moderados que habían intentado persuadirlos... y algunos de ellos empezaron a atacar a los jugadores japoneses restantes y a las tropas de Underworld también. Pero Asuna no encontraba la forma de detenerlos.
De repente, alguien la empujó bruscamente por detrás y Asuna se desplomó al suelo. Su estoque fuertemente dañado salió volando de su mano y rodó sobre la tierra seca.
Muy lejos, el joven de pelo negro estaba desesperadamente extendiendo su brazo izquierdo hacia ella.
—Kirito-kun.
Asuna murmuró, extendiendo su propia mano derecha hacia su amante, esperando sus últimos momentos.
Mientras tanto en la mente de Kirito.
Mi cabeza se sentía de plomo. Se sentía como la fatiga que tuve después de terminar una muy larga... una película insondablemente larga. No podía recordar nada de la historia, pero los restos de incontables emociones permanecían en mi mente. Sacudí mi cabeza con fuerza.
Desvié la mirada de mi compañera de clase, que me miraba de un modo extraño, y di un paso hacia la puerta trasera del aula, murmurando suavemente:
— Qué... Fue un sueño...
Sólo me había dormido un poco en el salón de clases, pero sentía que había soñado un sueño muy largo.
Un sueño agradable, doloroso y triste. Traté de recordar los detalles mientras caminaba por el pasillo vacío, pero no podía recordar nada en absoluto. Me rendí y cambié los zapatos en la entrada.
Después de salir de la puerta de la escuela, una brisa fría y seca del otoño sopló mi flequillo muy ligeramente largo. Coloqué mi mochila en mi hombro izquierdo, introduje mis manos en los bolsillos de mi uniforme, y caminé hacia adelante con mi cabeza ligeramente baja.
Directamente delante de mí, mis compañeros de clase conversaban animadamente el uno al otro. Para bloquear esas conversaciones llenas de ensueño, llenas de esperanza, llenas de compañerismo, inserté los auriculares de mi reproductor de música profundamente en mis oídos, me encorvé y me dirigí a casa.
En el camino de vuelta, me detuve en la tienda de conveniencia y revisé todas las revistas de juegos de la semana, eligiendo y comprando la que tenía más páginas dedicadas a «Sword Art Online», que debería publicarse en un mes. Tomé la oportunidad para cobrar un par de puntos en mi billetera digital de juegos en línea también.
De repente me detuve. En algún momento en el tiempo la hierba baja bajo mis pies se había convertido en losas azuladas.
Miré hacia arriba y me di cuenta de que ya no estaba en el bosque del piso 1 de Aincrad; Ahora estaba en un pasillo ligeramente oscuro y sin nombre. Esto debería ser algún lugar en un Laberinto... pero no podía ubicar el piso en el que estaba solo con su apariencia. Sólo podía seguir adelante.
Casi sin notar, todo mi equipo de cuerpo completo y la espada en mi espalda habían cambiado mientras caminaba silenciosamente por el recto corredor. Seguí caminando, y caminaba, como si estuviera persiguiendo mi propia sombra reflejada en la pared por las lámparas de aceite. El laberinto más grande de Aincrad tenía 300 metros de ancho, por lo que un corredor recto no debería existir, pero no me detuve, ni miré hacia atrás. Sólo seguía moviendo mis pies.
Finalmente, vi una entrada rectangular en la pared a mi izquierda, de la cual un cálido resplandor amarillo se derramaba. Moví con ferocidad mis pies, que por alguna razón se habían vuelto pesados, y llegué a la entrada.
Mirando a través de la puerta, vi una habitación moderadamente amplia. Cuatro jugadores estaban frente a la pared del fondo, a espaldas de mí. No necesitaba mirar sus apariciones para reconocerlas inmediatamente.
El portador de la lanza con el cabello turbulento que llevaba un sombrero extraño era Sasamaru.
El alto y delgado portador del escudo llevando un mazo era Tetsuo. El pequeño usuario de dagas que llevaba el gorro era Ducker.
Y finalmente, la chica de pelo corto equipada con una lanza pequeña era... Sachi.
Todos eran miembros del mismo clan que yo. Mientras que su líder Keita negociaba el precio de una casa de gremio, habían llegado a este Laberinto para ganar algo de dinero y comprar muebles.
Maravilloso... Todo el mundo estaba a salvo.
No sé por qué ese pensamiento apareció en mi mente justo cuando estaba a punto de hablar con ellos, pero mi boca tampoco pude abrir mi boca esta vez. Mis pies estaban inmóviles, aparentemente pegados al suelo.
Mientras estuve congelado en el lugar, los cuatro estaban inclinados, mirando hacia abajo un enorme cofre del tesoro colocado al lado de la pared. En el instante en que me di cuenta de esto, un vil escalofrío recorrió mi espina dorsal.
Ducker, el ladrón, se acercaba complacientemente a él, tratando de desactivar la trampa del cofre.
—No. Detente. No. — Grité en mi cabeza, pero no pude articular sonido alguno. No importaba cuánto quisiera irrumpir en esa habitación, mis pies no se movían.
Ducker abrió rápidamente la tapa del cofre.
En un abrir y cerrar de ojos, sonó una alarma y dos puertas ocultas en las paredes a su izquierda y derecha se abrieron. Innumerables monstruos sanguinarios salían de dentro.
— ¡Ah...AH! — Mi garganta emitió un grito ronco y agrietado.
Eso era todo lo que podía hacer. Incapaz de mover hasta un dedo, sólo pude ver como mis compañeros estaban rodeados por los monstruos.
El primero en morir fue Sasamaru. El siguiente fue Ducker, y luego Tetsuo siguió el ejemplo y explotó en partículas azules que volaban en todas direcciones. Ahora sola, Sachi giró la cabeza para mirarme.
Sus labios, entreabiertos en una sonrisa triste, vacilaron ligeramente.
En el siguiente momento las armas y las garras de los monstruos cayeron sin piedad, y su delgado cuerpo estaba envuelto en luz azul.
Mientras gritaba en silencio, Sachi se transformó en innumerables trozos de vidrio y volaba en el aire justo delante de mis ojos.
Las decenas de monstruos también desaparecieron, casi derritiéndose en el aire, y la habitación estaba envuelta en la oscuridad.
Siendo finalmente capaz de moverse, caí de rodillas. Suficiente. No quiero caminar más. No quiero ver más.
Arrodillado en el suelo helado, tapé mis oídos y cerré los ojos lo más fuerte posible. Pero los recuerdos eran como agua helada, que brotaba de mí sin fin y me devoraba totalmente.
Los dos años de batalla a diario dentro del castillo flotante de acero. El cielo sin límites al que me había dirigido en el reino de las hadas. Las balas carmesíes interceptándose en su vuelo a través del desierto de perpetuo anochecer.
No quiero recordarlo nunca más. Tampoco quiero saber qué sucederá luego. Rezaba desesperadamente, pero el torrente de recuerdos seguía asediándome sin fin.
Repentinamente fui desplazado del mundo real. Despertando en un claro rodeado del espeso bosque.
Caminando hacia adelante como si fuera guiado por el sonido del hacha, y llegando a las raíces de un árbol gigantesco, lo conocí. La lucha contra los duendes. El árbol ya talado. El largo viaje hacia el centro del mundo. Los dos años de entrenamiento en la academia.
No importaba cuándo, él estaba siempre a mi lado. Con esa sonrisa tranquila de la suya. Con él, puedo hacer cualquier cosa, no importa lo que sea.
Hombro a hombro mientras corríamos por la torre de mármol, derrotando a un enemigo fuerte tras otro enemigo fuerte.
Alcanzando la cima de la torre por fin, Luchando contra la gobernante del mundo, Y al final de una lucha larga y sangrienta. Él su vida
Agarré mi cabeza con ambos brazos, gritando con la parte superior de mis pulmones.
Era yo. Mi inutilidad, mi estupidez, mi debilidad hicieron que muriera. Hice derramar sangre que no pretendía ser derramada, hice que se perdiera una vida que no pretendía ser perdida.
Yo debería haber muerto. Mi vida aquí es temporal. No habría pasado nada si solo hubiéramos intercambiado papeles.
Rugiendo y retorciéndome en agonía, busqué la espada que debería estar en mi espalda. Lo usaría para atravesar mi propio corazón y cortarme la garganta.
Pero mis dedos no tocaron nada. La busqué a mi alrededor, pensando que lo había dejado caer, pero lo único que vi era un líquido negro viscoso.
Abrí la parte delantera de mi camisa negra con las manos descubiertas. Los dedos de mi mano derecha, enroscados en forma garras, penetraron en mi esternón delgado y huesudo.
Mi piel se rompió y mis músculos se rompieron, pero no parecía sentir ningún dolor. Seguí penetrando mi propio pecho con mis propias manos. Para arrancar mi corazón y aplastarlo.
Esto es todo lo que puedo hacer por él... y por todos los que he traicionado y abandonado hasta ahora... este final...
—Kirito — De repente, alguien dijo mi nombre.
Mis manos se detuvieron y elevé mis ojos vacíos.
Detrás de la oscuridad, en algún momento, una niña de pelo castaño estaba de pie allí. Sus ojos marrones llenos de lágrimas permanecían fijos en mí.
—Kirito...
Con una segunda voz a mi derecha, apareció otra persona. Una chica con gafas. Sus ojos también estaban repletos de lágrimas tras de sus gafas.
—Hermano...
Entonces apareció una tercera persona.
Una niña de cabello negro y recto, con lágrimas fluyendo sin parar de sus grandes ojos.
—Kazuto
Un chico con una extraña vestimenta negra de cabello castaño y ojos grises me observaban con tristeza.
La voluntad y las emociones de estas cuatro personas se transformaron en luz, proyectándose desde ellas, fluyendo en mi cuerpo.
Un calor, como el de la luz del sol, curaba mis heridas, derretía mi dolor.
—Pero.
¿Cómo podría tener el derecho a ser perdonado así?
—Lo siento.
Oí la palabra caer de mi propia boca.
—Perdóname, Asuna. Perdóname, Sinon. Perdóname, Sugu. Perdóname Iori Ya... no puedo levantarme más. Ya no puedo pelear. Lo siento...
Entonces, me preparé para triturar el corazón que arranqué de mi propio pecho.
Mientras tanto en el mundo real Higa había logrado conectar a sus amigas y familiares inmersos en Underworld esperando el momento de que Kirito despertara el cual no llegaba.
—¿Por qué... qué pasó, Kirito?
Higa Takeru gritó con voz ronca, agarrándose desesperadamente sosteniendo su conciencia, la cual estaba disminuyendo por la sangre que fluía de la herida de bala en su hombro derecho.
Ya había enviado una enorme cantidad de datos mnemotécnicos de las tres STL's de Yuuki Asuna, Asada Shino, Iori Kirigaya y Kirigaya Suguha en el dañado Fluctlight de Kirigaya Kazuto para restaurarlo. Incluso Higa, que había realizado innumerables experimentos en su carrera, quedó totalmente impresionado por el volumen de datos, lo cual en sí mismo podría llamarse un milagro.
Pero el diagrama 3D que mostraba el dinamismo del Fluctlight de Kazuto en la pantalla de su teléfono se había detenido por debajo de la línea que indicaba la restauración funcional.
—¿Incluso esto... no es suficiente...?
A este ritmo, el casi restaurado "cuerpo general" de Kirigaya Kazuto, su autoimagen, no podrá volver a la realidad, conectándose sólo con los recuerdos dolorosos que lo torturaban, y no serpa capaz de volver de ese punto. Lo que le esperaba sería una pesadilla que se repetía sin cesar. En esa situación, se podría decir que ser acabar funcionalmente sería un destino mucho mejor.
Necesitaba al menos una persona más.
—¡Si sólo hubiera otra persona que tenga profundos lazos con Kazuto, que poseyera fuertes impresiones de él!
Pero según el Teniente Coronel Kikouka Seijirou, las tres chicas conectadas actualmente parecían ser las que entendían y amaban más a Kirigaya Kazuto de entre todo el mundo. Además, no había más STL' s utilizables en la sede de RATH en Roppongi o en Ocean Turtle.
—Maldición... Maldita sea...
Higa apretó sus dientes, apretando el puño derecho al punto de golpearlo contra la pared del conducto.
— ¿Qué es esto? ¿Esta conexión? — Higa murmuró, acercando sus gafas manchadas de sangre y sudor a su teléfono.
No lo había notado antes, pero en ese momento se había dado cuenta de que en la ventana que mostraba el estado de Fluctlight de Kirigaya Kazuto, aparte de las tres líneas de conexión procedentes de las STL de las chicas, había una cuarta— una línea gris muy débil en color, alcanzando la parte inferior del diagrama y más allá.
Como si estuviera siendo absorbido hacia él, Higa puso su dedo índice derecho en el panel táctil, y lo movió hacia arriba. La imagen se desplazó hacia abajo, revelando la fuente de la línea gris.
—Es... ¿¡Es del Visualizador Principal!? ¿Por qué?
El visualizador principal era el inmenso centro de almacenamiento de datos situado en el corazón del Cúmulo de Light Cubes, que recogía todas las almas de los residentes de Underworld.
Sólo la geografía, arquitectura, objetos de apoyo y objetos relacionados de Underworld deberían estar almacenados allí, sin almas humanas.
—Objeto... Memorias como objetos... — El cerebro de Higa alcanzó su máxima capacidad mientras murmuraba inconscientemente. — Los recuerdos de los Fluctlights y los objetos de Underworld, su formato de datos es el mismo... En ese caso, si alguien marca su voluntad y sus pensamientos sobre un objeto... ¿ese objeto mostraría una función similar... a la de un Fluctlight?
Incluso mientras llegaba a esta conjetura, Higa permaneció medio dudoso. Si tal cosa fuera posible, entonces en Underworld la mera voluntad de una persona sería suficiente para controlar un objeto inanimado.
Pero creyó que esta única y delgada línea de conexión era su única esperanza.
—¿Qué es lo que va a pasar? — Higa era incapaz de predecir si la situación mejorara o empeoraba, pero endureció su determinación y abrió el camino entre el Visualizador Principal y el STL de Kazuto.
De regreso en la mente de Kirito un chico rubio de traje azul y ojos verdes lo observaba
—Kirito. Kirito.
Mientras lentamente, lentamente levanté la cabeza, miré. Estaba de pie firmemente en donde había estado una oscuridad sin fin hace apenas un momento.
No había una sola mancha en su ropa azul. Su desordenado cabello rubio brillaba intensamente incluso en la oscuridad, y una sonrisa tranquila descansaba en sus labios.
Sus profundos ojos verdes estaban, como siempre, llenos de un suave y fuerte resplandor.
Mis manos soltaron mi pecho imperceptiblemente curado y se acercaron a él mientras yo estaba de pie.
Una voz baja suavemente dijo su nombre desde mi boca temblorosa.
—Eugeo ¿Todavía estás vivo, Eugeo?
Mi mejor amigo, mi mejor compañero, Eugeo Silenciosamente sacudió la cabeza, una pizca de dolor en su sonrisa.
—Estos son tus recuerdos de mí en tu corazón. Junto con los fragmentos de recuerdos que dejé atrás.
—Re.... recuerdos....
—Sí. ¿Lo has olvidado? ¿No habíamos estado convencidos de eso en aquel entonces? Recuerdos... — Eugeo extendió su mano derecha y la presionó contra su propio pecho.
— Están aquí. — Seguí sus movimientos como el reflejo en un espejo, y luego dije:
─Siempre, justo aquí. —Eugeo sonrió, y en ese momento Asuna dio un paso a su lado:
─Nuestros corazones están siempre conectados con los tuyos, Kirito-kun. — Caminando hacia adelante desde el otro lado, Sinon asintió, las coletas a los lados de su cara temblaban.
—No importa que tan lejos que nos separemos... incluso si un día tengamos que despedirnos. — Viniendo a su lado, Suguha continuó con una voz llena de energía
—Nuestros recuerdos y sentimientos siempre estarán conectados. ¿No es así? Un líquido caliente y transparente finalmente empezó a fluir de mis ojos.
Iori se acerco y hablo poco, al fin y al cabo, hombre de pocas palabras en ocasiones
—Los recuerdos y el amor es lo que nos mantiene unidos
Di un paso adelante, devolviendo con seriedad la mirada de mi amigo más cercano.
— ¿Puedo hacerlo Eugeo? ¿Puedo seguir adelante una vez más?
—Por supuesto, Kirito. Hay muchos que te esperan. Vayamos juntos, y no importa dónde, estaré siempre a tu lado.
Nuestras manos extendidas se tocaron. Las manos de Asuna, Sinon, Iori y Suguha se superpusieron con las nuestras también.
En un instante, las cuatro personas ante mí se transformaron en rayos blancos de luz y fluyeron en mi cuerpo.
Mientras tanto Asuna hacia un esfuerzo sobrehumano arrastrándose para llegar al lado de su amado mientras Poh reía sin parar, su arma Mate Chopper como si de una esponja se tratara absorbía toda la energía sagrada.
—Kirito...— El avance de Asuna fue frenado por un jugador rojo que se disponía a dar el golpe final cuando un extraño olor llego a la nariz de Asuna — ¿Huele a rosas?
Poh detuvo su risa mientras sonreía con sadismo, el momento que tanto deseaba había llegado mientras una voz muy reconocida por el se escuchó a lo lejos.
—Enhance Armament.
Una disculpa a todos los seguidores de esta historia, la escuela y el bloqueo que tuve no ayudaron mucho pero por ello les hice un capitulo bastante largo que espero hayan disfrutado, use el anime y las novelas para hacer un mejor capitulo con mas detalles. Quiero también decirles que con el siguiente capitulo terminamos el arco de la guerra Underworld, usare los juegos de SAO Rising Steel y Lycoris para detallar mas sobre Moon Cradle e igual veré como puedo hacer la parte de progressive ya cuando salga aquí en Mexico el manga y salga la pelicula obviamente aqui en la parte de Moon Cradle sobre todo incluiré mas cosas de AC Origins y Valhalla y el mundo de AC en general y conforme vaya actualizando lo verán(obviamente tengo que terminarlos asi que denme algo de tiempo).
Un agradecimiento especial a mi joven padawan SpartanKenway87 por el apoyo que me brinda en los capitulos.
Nos veremos pronto en una actualizacion nueva ya sea de este fic o en el final de Siempre te Elegire a Ti
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