019 (Final)
"¡No! ¡No! ¡No!" alguien gritó, y no supe si era dentro o fuera de mi sueño.
Abrí los ojos cuando no encontré a nadie en mi subconsciente; Taehyung estaba en casa. Lo escuchaba en el segundo piso. Luego el sonido de algo quebrándose y apreté más la almohada contra mi cuerpo. El que temblaba. Escuché pasos, la puerta se abre y cerré los ojos.
"No, no..."
"Taehyung, soy y-yo..." pronuncié con voz queda, no quería verlo más alterado. Claramente era mi culpa; yo no había avisado que estaría aquí.
Se hizo silencio.
"¿T-Taehyung?"
Sentí un peso extra en la cama y luego las sabanas fueron levantadas un poco, cayeron de nuevo. Taehyung se había metido dentro de ellas conmigo. No volteé a verlo, se daría cuenta. Su mano llegó a mi brazo y lo acarició suavemente. Su cuerpo también temblaba y decidí topar mi espalda a su pecho. Su nariz estaba en mi oreja, con la respiración un tanto acelerada.
"Estás mo-molesto..." comencé a llorar.
"No. El que entres cuando quieras no me molesta si tú eres mi hogar."
"E-estás t-temblando" me junté más a él. "Di lo que piensas..."
"¿Está bien que duela mi pecho al encontrarte así? ¿Cómo se supone que deba consolarte cuando yo estoy destruido?" su rostro se hundió en mi nuca. "Pero si estás triste y yo destruido, debo cuidarte. Porque si tú estás bien, el dolor disminuye..."
Mi nuca estaba húmeda. Estaba llorando y giré mi cuerpo para verlo. Nuestras respiraciones mezclándose, junto al calor de nuestros cuerpos tan cerca, el frío de afuera no existía.
"Me sentí más seguro aquí..."
"¿Por qué?" preguntó. De un momento a otro, nuestras voces se habían vuelto susurros, como si tuviésemos miedo de que alguien escuchara nuestros secretos.
Caí en la cuenta de que Taehyung no sabía sobre mi visita a esa habitación.
"Jimin..." empecé. "Jimin me dijo algo..."
"Algo..."
"Sí, él... Habló sobre verte sufrir y que eso lo alegraba..."
"Eso te asustó."
"Sí..." nos abrazamos.
"No tienes que estar asustado."
Escondí mi rostro en su cuello tratando de digerir lo que había pasado, lo que había pasado y lo escuché hablar a mi oído.
"Estamos aquí, Jungkookie..."
"Estabas llorando" lo miré. "¿Qué sucedió?"
"El abuelo se está muriendo."
Cerré los ojos.
"Le quedan tres semanas" me abrazó más fuerte. "Nam y Yoongi me llevaron al hospital."
"Lo siento tanto..."
"Todos morimos, Jungkookie, pero no estoy listo para perderlo..."
"Estaré contigo."
"Tengo miedo de no poder estar con él los últimos días al igual que con mi abuela."
"No te preocupes, TaeTae, haremos lo posible para que estés con él."
Días después, Namjoon me había citado a un parque cercano de la academia. Dijo que era de suma importancia el que yo llegara y el tema a tratar. Últimamente, luego de mi visita a la habitación, todo me asustaba. Todo lo relacionado con el pasado de Taehyung.
Cuando llegué al parque, me encontré a Nam sobre unas piedras fumando. Vaya, el señor inteligencia suprema fuma. Me acerqué y nuestras miradas se conectaron.
"Hola, cuñado" saludó.
"Hola, ¿de qué quieres hablar?"
"Mi abuelo morirá pronto, lo sabes, ¿no?"
"Tae me lo dijo" ladeé la cabeza. "Te ves cansado."
"Preocupado, harto, triste e irritado. Y, sin embargo, no he tenido tiempo para digerir la noticia sabiendo como un huracán se acerca. Hasta mi abuelo está preocupado y enojado."
"Eso es malo, debemos morir tranquilos."
"Pues, bueno, la muerte para mi abuelo significa problemas. Más específicamente para Taehyung."
Su cigarro se acabó y al instante sacó otro de su abrigo y lo encendió.
"Lo siento" habló luego de una calada. "Es que me siento menos ansioso cuando fumo."
Me encogí de hombros.
"No importa. Hablaste de un huracán..."
"Sí, porque cuando mi abuelo muera, toda la herencia recaerá en Taehyung."
"¿No estaba dividida para ustedes dos?"
"Claro que sí, eso era lo planeado mas luego mi abuelo recordó que mis padres podrían ordenarme pasar mi dinero a ellos. Mi abuelo no quiere que ellos toquen un solo centavo."
"No veo el problema..."
"Que ellos ya saben que Taehyung tendrá toda la herencia."
Oh, mierda...
"Eso significa..."
"Sí, que mis padres irán tras Taehyung" botó el segundo cigarro en la cubeta y me miró. "Y no de la mejor forma."
"Namjoon..."
"Ahí se forma el huracán, y mi hermano va a estar en el ojo."
"Estaré ahí" aseguré sin miedo ", con él."
Namjoon expuso que debería ir a visitar al abuelo Kim porque él tendría que hablar conmigo. Cuando llegué a casa, le hablé a mamá sobre el abuelo de Taehyung y ella aprobó el que yo fuese al hospital.
El viernes, el día de la visita, me sentía nervioso, tanto por conocerlo como por lo que iría a decirme. Luego de ponerme algo decente, la puerta fue tocada y mamá me gritó para bajar. Una vez en el primer piso, la encontré tomando el rostro de mi novio y dándole palabras de aliento. Una sonrisa triste y de agradecimiento era la respuesta.
"Nosotros estamos para ti, ¿sí?"
"Y yo para ustedes, mamá" pronunció él.
Me quedé estático y casi lloro de la emoción. Mamá lo abrazó una última vez y no pudimos ir. En el tren mis nervios aumentando hasta el hospital. Él fue por la cita y nos adentramos al ascensor. En el tercer piso, en la habitación 309, Tae iba a abrir la puerta cuando lo detuve por el brazo.
"¡Espera!" me miró "¿Qué le digo? ¿Qué puedo hablar con él?"
"Cualquier cosa, él habla de todo."
"Me siento nervioso" arreglé mi cabello. "¿Me veo bien?"
"¿Por qué?"
"Quiero que tenga una buena imagen."
"Eres muy guapo y hermoso, ¿por qué deberías preocuparte?"
Me sonrojé.
"Me refiero a que quiero que sepa que soy bueno para ti."
"Eres perfecto."
No pude más y lo abracé para sentirme más seguro. Y entramos. En la habitación, en una camilla estaba un anciano con un poco de las facciones de Nam, conectado a esas máquinas de películas. Estaba leyendo un periódico y masticando su comida. Me quedé pegado a la puerta mientras Taehyung se acercaba a la camilla. El señor levantó la mirada y le dio una sonrisa grande, cálida y paterna. Abrazó a Taehyung y mi novio correspondió muy contento. Sonreí.
"¿Es él?" preguntó al verme luego del abrazo.
"Sí."
Él anciano me sonrió.
"Ven aquí muchacho."
"Hola..."
Una vez cerca, soltó una carcajada y me abrazó.
"No te pongas nervioso, te quiero desde que Taehyung me habló sobre ti" mira a mi novio. "Borreguito, ve afuera, quiero hablar con Jungkook."
"Está bien" se levantó y se fue.
"Bien, Kookie, ya me quedan 10 días. Yo me siento bien, pero debo decirte lo necesario sobre mi hija y su esposo."
Asentí y lo observé acomodarse en la camilla y arrojó el periódico a un lado.
Mi familia siempre fue una basura, no te voy a mentir. En un principio yo llegué a ser así, porque ya sabes, a veces, la familia siempre influirá, aunque no lo quieras. Para bien o para mal. Un día conocí a Hyejoon, ay, mi hermosa Hyejoon, pronto volveré con ella. Lástima que deba dejar a Taehyung y Namjoon. Cuando me enamoré de esa sencilla, humilde y bondadosa mujer decidí contraer matrimonio con ella y luego nació Nayoung. Creí que todo estaría bien. Sin embargo, en una zona oscura, si no eres fuerte, te vuelves a ese lado perdiendo tus principios. Mi hija se volvió lo que es hoy en día. Pero empeoró al conocer a Kim Heemin, otra escoria de la vida. El resto de la historia la sabes ya. Y se volvieron locos al encontrarse con la "enfermedad" de mi nieto.
A ellos solo les interesa el dinero y en resumen, porque ya me estoy muriendo, quieren la herencia de Taehyung, lo que preocupa aquí es que mi niño tiene un corazón de oro. Y ellos lo saben. Saben perfectamente que, si llegaran a él a pedirle ayuda, él nunca se negaría. Taehyung no sabe cuándo alguien le miente. No hasta que lo compruebe. Él les dará el dinero sin dudar.
Me lo dejarán sin nada y cuando eso ocurra, mi borreguito seguirá sufriendo. Mi deseo es que Nam y tú lo protejan, pero no se confíen tanto ustedes. La maldad se acerca por cualquier lado y método, no lo olvides. No seas inteligente, se sabio. Los demonios hablan con azúcar cuando tienen un propósito, no dejes que te influencien.
Y sé que sus padres no serán el único problema ya que existe el odio de Taehyung hacia su persona. Segundo, la familia Kim les dará la espalda, no los busques. En mi casa, busca unos papeles en mi oficina que te ayudarán cuando sea necesario.
No te rindas y no tengas miedo. Taehyung no lo hará mientras estés con él. Sé fuerte. Todo lo que te he dejado, te será entregado el día de mi entierro por manos de mi abogado.
Ahora, váyanse, los doctores dijeron 10 días, pero Dios va a llevarme cuando Él quiera.
"¿Qué te dijo mi abuelo? Estás muy pensativo."
Miré a Taehyung mientras caminábamos a la estación del metro luego de haber ido a almorzar. Le eché los brazos al cuello.
"Que te cuide y te mantengas a mi lado."
"Lo haré."
"No más dudas Taehyung."
"Sí."
"Y mucho amor, ¿de acuerdo?"
"También en la cama" dijo sin pena.
"¡TAEHYUNG!"
"¿Ya no más?"
"No, no me refiero a eso, no lo digas al público. Es algo nuestro."
"Lo siento."
Llegamos a la parada del tren, veinte minutos después, íbamos de camino. Estaba lleno y abracé a Taehyung mientras él me abrazaba con brazo y se sostenía con el libre. Mi corazón latía rápido y el de él también.
Yo sabía por qué.
Ambos estábamos asustados. Asustados de lo conocido y lo desconocido. Se venía ese huracán que Namjoon tanto me habló y ambos lo sabíamos.
Las pesadillas estaban a la vuelta de la esquina, esperando junto a los obstáculos para tratarnos y destruirnos. No íbamos a permitirlo. Para arrancar nuestras esperanzas y debilitarnos. Tratando de cubrir la luz.
Mas Taehyung y yo los enfrentaríamos, no huiríamos.
La puerta se abre.
Taehyung y yo nos defenderíamos.
Bajamos del tren y caminamos.
Taehyung y yo seríamos fuertes.
Llegamos a su casa, hay un auto en la acera.
Taehyung y yo lucharíamos.
En la puerta están ellos.
Taehyung y yo veríamos la luz.
Ambos nos sonríen.
Taehyung y yo teníamos miedo.
"¡Taehyung, amor mío! ¡Papá te ha extrañado!"
Miedo a volvernos uno sin haber
enfrentado nuestros demonios.
El segundo libro de Asperger se llama Si Alguien Nos Creyera, no está en mi perfil aún, se encuentra en borradores y espero poder traerlo lo más pronto posible, cuando pueda publicarlo, se los diré mediante este libro, así que no se preocupen.
Gracias por todo, los amo abejitas.
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