Segundo impacto.

Hoy es el día, sin duda alguna hoy es el día en el que algo grande se presentaba. No era un evento, no era un concierto internacional, no iba a hablar el presidente, era una pelea. Una pelea en el cuadrilátero clandestino más famoso, se dice que esta debajo de el gran Korakuen hall, un sitio donde solo los que están dispuestos a poner su vida en la línea pueden ir.

La gente ha visto un centenar de peleas, boxeo, muay thai, taekwondo, karate, kick boxing; de todo. Pero siempre ha habido esta incógnita: ¿y si pelearán sin reglas?, todos esos tipos “fuertes”, adiestrados en algún arte marcial, ¿y si se enfrentarán sin alguna restricción?. Las artes marciales se hicieron en un principio para defenderse, en un ambiente hostil y brutal, y creo que no soy el único cuando digo que me gustaría ver tal cosa en acción. No escucharlo de que tuvieron una pelea callejera, no, sino verlo con mis propios ojos, algo que se podría considerar un combate real.

Para eso existe ese lugar, creado por el capricho de un hombre rico, que tenía el mismo deseo que muchos, la arena clandestina iba a abrir sus puertas una vez más para mostrarle al mundo la esencia de una pelea brutal. Hoy era ese día, y todos lo presentan, principalmente ellos.

Si, ellos.

Baki, el campeón indiscutible de la arena clandestina, caminaba por los pasillos del Korakuen hall, se veía calmado, pequeño, sereno, pero en el fondo estaba desesperado y curioso, sentía mucha emoción, quería ocultarlo, no quería mostrarse así ya que también tenía una expectativa pesimista sobre este tal “Ohma”. Reconoce que debe ser fuerte al derrotar a Hanayama, pero...

—¿No creé que está llegando muy lejos?

La pregunta apareció en su mente unos días atrás al saber del conflicto que se iba a generar ahí. Ohma Tokita era un tipo lleno de misterios, los yakuzas lo respetan y odian, se dice que luego de su pelea con Hanayama se metió en varios problemas en otros distritos, existen muchos rumores sobre él, pero hay uno entre todos ellos que inquieta un poco al joven Hanma, y es ese sobre la “transformación”.

Cada vez que preguntaba le decían casi lo mismo, que su piel se volvía roja, que votaba humo de su cuerpo, que hubo una explosión. No sabe que tipo de técnica es esa, no sabe que esa “transformación” y tampoco tiene alguna idea de ello. Pero, por lo visto, ese rumor debe ser cierto, lo deducia por las personas que le habían contado sobre ello y a quienes le contaron sobre eso.

Espero al ascensor, mientras lo hacía trataba de no confundirse con preguntas sin respuesta, todavía creía que era una locura el que pelearán con su hermano, pero no iba a juzgar a nadie, todavía no ha visto de lo que es capaz de famoso busca pleitos. El ascensor llegó, se abrió y se llevó una grata sorpresa al ver a Retsu ahí, ambos se sonrieron desde que se vieron.

—Supongo que no soy el único curioso.—entró.

—Yo pensaba lo mismo, hasta que te veo.—dijo.

—Tengo el presentimiento de que nos encontraremos a muchos amigos nuestros haya abajo.

—Tienes razón.—dijo.—Bueno, tampoco es que haya muchos capaces de retar a Jack.

—Ajá.—suspiro.—... Me pregunto...—Retsu lo miro, Baki sonrió de lado.—... Solo quiero saber que tan fuerte es como para hacer eso.

—...

—Escuché los rumores. Y no he podido sacame ese tema de la cabeza aunque quiera.—contó.—También está “eso” que dicen que sólo puede hacer él.

—...—Retsu dejó salir un largo suspiro.—Esa “técnica”, creo tener una idea de cual es.

—¿Uh?—frunció el ceño.—¿Lo pueden hacer ustedes también?—bromeó.

—No, eso más bien es una maldición.

—¿Qué?

—Si no me equivoco, se llama “advance”. Esa técnica o forma, utiliza los latidos del corazón como un motor. Es una técnica muy peligrosa que puede poner en riesgo la vida del usuario. Es más como un veneno que otra cosa.

—Es una locura.

Al terminar de decir eso, su cuerpo tembló un poco, la duda había desaparecido pero que alguien sea capaz de arriesgarlo todo de esa forma, era impresionante. Todos son conscientes de que estas poniendo tu vida en juego cada vez que peleas, pero aún así esto era un llegar a un extremo más extenso. Tampoco es que vayan a sorprenderse tanto por eso, pero el peso de la técnica había sido explicado, es como hacer un contrato con el diablo.

—¿Quién crees que ganará?

Preguntó Baki. El chino pensó bien su respuesta, analizó a ambos peleadores pero la información del otro no era suficiente como para dar un pronóstico.

—Quisiera decir que Jack pero... Ya veremos.

Por fin habían llegado hasta el límite, hasta la arena donde los guerreros colapsan para darlo todo de sí mismos, hoy había un montón de gente reunida como siempre, todos ellos de seguro habían escuchado el rumor del “busca pleitos”, “perro callejero” o “lobo solitario” hasta “cazador de peleadores”, habían creado un sin fin de apodos para Ohma, pero por fin, hoy, podían verlo en persona y satisfacer sus dudas.

¡¿Qué tan fuerte es Ohma Tokita?!

En el vestuario estaba sentado él, con su cabello negro hasta el cuello, desordenado, los ojos cerrados y una expresión calmada, concentrándose para la pelea que se aproxima. Tokita Ohma canalizaba todas sus emociones para enfrentarse a uno de los más fuertes de Japón, o tal vez del mundo.

Analizó sus posibilidades de ganar, no, dejó de pensar en eso de inmediato, no podía pensar en ganar ahora mismo, no podía ser tan arrogante sabiendo que se va a enfrentar contra un monstruo. Consiente de la diferencia abismal que había en capacidad física, pensó en varias opciones, estrategias, algo que podría hacerle estar a la par con él. Después de su primer encuentro, Ohma a pensando en varias cosas pero no terminó eligiendo a una, la presión fue mucha.

Y a pesar de eso, en el fondo, muy en el fondo, sentía que podía ganar. Sentía que podía enfrentarse a ese monstruo y salir ileso, tal vez. Todavía estaba dudoso del resultado; sonrió y sus brazos temblaron.

—¿Esto es la angustia?—pensó.—Que incómodo.

Una de las cosas que Ohma se había restringido, fue su arma más fuerte, el advance. Si, se prohibió utilizar esta forma, quería ganar con el estilo Niko. Todas esas peleas que tuvo en otros distritos fueron un entrenamiento, rebajandose al nivel de sus débiles oponentes y usándolos para adiestrarse más al estilo que le fue confinado. Eso se le podría considerar como un sparring en el bajo mundo, o por lo menos lo vio de esa forma.

—Niko...

La puerta se abrió, una persona entró, el manager.

—Señor Ohma.—lo miró.—Es hora de su pelea.

Asintió, sólo eso, se levantó, a diferencia de antes, se sentía más ligero, no había esa presión, esa incomodidad, esa molestia, su cuerpo entró en calor, estaba desesperado por encontrarse con él.

El hombre de mayor edad lo guió hacía la arena, una luz lo golpeó de repente, como una luz al final del túnel, cegandolo por instantes, el manager se detuvo y Ohma entró. Repentinamente, una extraña sensación de adrenalina lo golpeó por completo, eran todos los gritos de el público inundando el ambiente, rellenando el unísono de emoción. Ohma sintió la energía y el apoyo de todos.

Dejó de ser deslumbrado por la escena ante sus ojos, al observar la gran silueta de Jack adentrarse, al hacer presencia todos en el lugar estallaron de euforia. La más pura de todas.

Los dos combatientes se vieron cara a cara una vez más, esta vez en circunstancias distintas, sin nadie que los interrumpa, sin nadie que los distraiga, sólo ellos en un solo mundo donde sólo uno podrá salir vencedor. El mundo de los guerreros.

—Ha excepción de las armas, todos está permitido.—dijo el presentador.—Que tengan un buen combate, a sus posiciones.

—Ohma

El pelinegro escucho la voz gruesa del más grande, se giro y lo miró.

—Recuerda lo que te dije.

Todos los cabellos de Ohma se erizaron, recordó las palabras de Jack aquella vez, sobre que podían pelear a muerte en ese sitio. Le sonrió, amablemente.

—No te preocupes, no lo he olvidado.

Ese fue lo último que se dijeron antes de ir a sus lugares y prepararse para el combate. Ambos estaban listos, nacieron para eso, para un momento como este, el tener que enfrentarse a alguien  en ese tipo de condiciones, estaban preparados para eso.

—¡Muy bien, empiecen!

El tambor resonó por todo el únisono, dejando en claro el inicio de esta pelea tan esperada. La gente abrió bien los ojos, los peleadores reconocidos de la arena, Baki, Retsu, Shibukawa, Katsumi, Doppo, Hanayama, todos ellos estaban presentes y pendientes a lo que se iba a acontecer.

El primero en tomar una pose de pelea, fue Ohma, totalmente concentrado en el más mínimo movimiento de Jack. Antes, no sabía que estrategia usar, que método o táctica sería la mejor, así que optó por algo más razonable, esperar y observar, para después usar todo lo que pensó hasta ahora. Todo lo que sabe, todo lo que tiene, hasta sobrepasar ese límite, por fin puede hacerlo, una vez más.

Jack se agachó, tomó una postura baja, parecía un depredador apuntó de saltar contra su presa; un tigre oculto entre la maleza para saltar sobre una gacela. Tomando en cuenta este detalle, los dos estaban estáticos, porque Jack quería observar que haría Ohma, ambos han tomado la misma decisión y no moverán ni un dedo hasta que el otro lo haga; todos estaban confundidos, estaban parados, paralizados, se volvieron una pintura enfrente de un montón de gente. Parecían la obra de arte de un artista reconocido y que está enmarcado en el museo.

Sabiendo que Jack no haría su movimiento, Ohma jugó con su mente obligándolo a hacerlo; hizo una finta, fue un recto directo a su cara, Jack lo contrataco, cayó en la trampa, Ohma lo esquivo y golpeó su cuerpo con una combinación. Gancho izquierdo: al hígado, gancho derecho: a las cosillas, rodillazo: al estómago, de inmediato tomó su postura nuevamente. El más alto se sorprendió, fue rápido, afilado, duro, precisó.

—Excelente.

Sabiendo el tipo de estrategia que tomaría Ohma, que es de debilitar las zonas bajas de un oponente más grande, se abalanzó contra él, tratando de llevarlo a su estilo. Lanzó un recto, fue esquivando, un gancho amplio, nuevamente evitado, Ohma hizo una contra, golpeó el cuerpo, pero entonces, el cuerpo de Jack comenzó a girar; él había estado esperando que golpeará su cuerpo para darle una parada giratoria.

El enorme cuerpo de Jack es muy resistente, golpes así no lo detendría de hacer su cometido, Ohma se comió de lleno la patada, el sonido fue estremecedor, fue tan fuerte el golpe que voló de nuevo a la esquina de inicio. No sufrió tantos daños porque pudo protegerse a tiempo, pero Jack no lo dejaría descansar, teniendo al más bajo contra esa esquina, fue a toda velocidad para liquidarlo.

Ohma solo sonrió, anticipó lo que haría el contrario, aprovecharía la ventaja en distancia para mantenerlo ahí y golpearlo con toda su fuerza bruta, pero desde que vio el primer puño venir, ese enorme y duro puño estar tan cerca de él, lo esquivo y golpeó la barbilla del rubio pelado. Solo fueron unos mili segundos que se detuvo el mayor, más que suficiente para atacarlo.

Utilizando el iron breaker para infligir más daño, atacó con combinaciones variadas, golpeando su cuerpo con una patada media, dos ganchos nuevamente y luego un recto a su cara, que fue detenido, Ohma se sorprendió, Jack lo jalo y lanzó al suelo de cabeza. Su cuerpo se impacto contra la arena, gramos de esta volaron junto al centenar de dientes que habían ahí. Teniéndolo en el suelo, se intentó subir encima de él para liquidarlo, pero Ohma pateó sus geniales, Jack contestó a tiempo, sosteniendo su pie, aprovechando el agarré fuerte del más grande, lo uso para apoyarse y, de un empujón con su otro pie, impulsarse hacía arriba, propinandole un rodillazo en plena cara.

Comenzó con un salvaje ataque a la cabeza de Jack, pero no se inmutaba, o por lo menos no con golpes normales. Uso de nuevo el iron breaker, ahora si estaban teniendo más efecto, la nariz de Jack empezó a tener una hemorragia, pero no lo soltaba. Apretó su pie, causándole un dolor insesante, se doblegó por esto, el rubio lanzó al aire a Ohma, preparo su puño y espero que cayera, con toda su fuerza lo golpeó, Ohma se cubrió con ambos brazos y uso el adamantium kata para resistirlo aún más.

El chico voló por todo lo alto, cayendo en la otra esquina del sitio, de pie, con sus piernas temblando, estaba mareado, al ver a su oponente, este se acercaba ferozmente pero veía a más de uno, optó por la defensa una vez más y uso la misma kata, Jack lo golpeó. Cada golpe que propinaba era con una intención sanguinaria, Ohma estaba contra la espada y la pared, sus piernas se doblegaban, no podía pensar con claridad ahora. Jack lanzó un puñetazo lo suficientemente fuerte como para romper la madera detrás suya y hacerlo caer sobre el público, los espectadores se sobresaltaron.

Ohma, escupió algo de sangre, golpeó sus mejillas con las palmas de sus manos, entró a la arena nuevamente y escupió ambas manos para unirlas y aplaudir, indicando que estaba listo para seguir.

—La kata adamantium puede soportarlo un poco, pero era como si me estuviera rompiendo. Sus golpes son pesados. Ya lo sabía. Él es fuerte. Bien, todavía puedo seguir peleando. Estoy bien.

Estos fueron los pensamientos de Ohma mientras tomaba nuevamente su posición de pelea. Jack se mantenía expectante, una pequeña risilla se le escapó de los labios, cosa que confundió a Ohma.

—Tú... ¿Quieres pelear contra Yujiro Hanma?—preguntó, cosa que era cierta.

—Si.

—Ya veo.—suspiro.—Con ese nivel se te será imposible.

—Tienes razón.—contestó, sorprendiendolo.—Pero todavía no he mostrado todo lo que tengo.

—¿Entonces?

—¿Uh?

—¿Qué estas esperando?—exclamó.—Enséñame ese estilo tan conocido. El estilo Niko, muéstrame de lo que es capaz.

—Bien.

Volviendo a tomar su pose de pelea, Jack así mismo continuó su feroz ataque, Ohma uso flowing edge, una técnica que lo ayuda a predecir y analizar los movimientos de su oponente, el ataque de Jack fue un puñatazo que esquivo a tiempo y golpeó su hígado usando iron breaker, por unos instantes se paralizó, eso sí le dolió, estaba empezando a surgir efecto la acumulación de daño en su hígado.

Sin más para confundir a su oponente utilizó flash fire, creando imágenes desiguales de sí mismo. Jack atacó una de estas con una patada media, no era el verdadero, Ohma volvió a golpear el hígado con iron breaker, Jack lanzó un gancho amplió a su cara, que fue esquevado, se llevó tres contras, un upper izquierdo y un gancho derecho, para culminar con patada alta. Ohma tomó distancia.

Los peleadores del korakuen hall estaban sorprendidos por la inmediata recuperación de Ohma y como llevó de nuevo la pelea a su ritmo.

—Retomó el ritmo.—comentó Baki.—Es bueno, después de todo.

—Se recuperó gracias a que disminuyó el daño con la kata adamantine, indestructible.—exclamó Retsu.—Su destreza al usar el estilo Niko es buena.

Orochi Doppo, dios de la guerra, fundador del estilo de karate más fuerte, estando presente, sonrió de forma un tanto descarada y orgullosa de Ohma.

Pero...

—No está completo.

Estas fueron las primeras palabras del Dios de la guerra que llamaron la atención de todos.

—Todavía no esta completo.

—Puedo concordar.—dijo Gouki.—Su habilidad es buena, pero no se compara en nada a “él”.—añadió el viejo.—Pero tampoco es que este lejos de eso.

—Cierto.—sonrió Doppo.—Pero...

—¿Qué?—exclamó Katsumi.

—Hará falta más que un estilo incompleto para ganarle a Jack.

El nombrado atacaba con furia, cada movimiento era evadido como si fuese predecido, no importa lo que hiciera, en esta pelea parecía que Ohma tenía en la palma de su mano a ese Hanma.

—Jack es un monstruo. Ohma es un buen peleador, tiene corazón. Pero miren bien, ustedes saben que cualquier cosa puede pasar.—miró a Baki.—Y que Jack es capaz de lo que sea para ganar.

Ohma, quien parecía tener el control del combate, utilizando en tiempos perfecto su flowing edge, flash fire y el iron breaker, mantenía a raya a ese monstruo. Lo que lo sabía, es que Jack comenzó a leer su patrón, los golpes que recibía eran directos más al cuerpo, específicamente más a su hígado, una zona vulnerable del cuerpo humano. Jack contó las combinaciones que sólo variaban de entre 3 ataques, espero y espero, hasta que por fin llego el momento.

Una vez más lo atacaron al hígado, pero lo bloqueo a tiempo con su brazo, en ese momento pateó a Ohma en sus piernas, desestabilizandolo un poco, golpeó su cabeza, en una zona vital, mareandolo un poco, siguió con un upper que elevó al pelinegro, entonces, Ohma, mostrando su valía, tomó del cuello a Jack aprovechando la distancia entre ambos y le dio un cabezazo, cosa que recibió sonriente el más alto.

Atrapó a Ohma entre sus grandes brazos, aprisionandolo, con la fuerza de estos apretó con fuerza el cuerpo delgado de Ohma, un grito ahogado salió de su cavidad bucal. Ohma forzó para liberarse, por lo menos uno de sus brazos, cosa que no lograba, así que le dio otro cabezazo para lograr algún efecto, pero no funcionó, solo ganó un apretón corporal mucho más fuerte.

La sensación era horrible, es como estar dentro de un camión de basura y ser machacado, sus órganos y sus huesos si pudieran gritar pedirían auxilio. Que dolor más horripilante y atemorizante, sentía que moriría. Entonces, en un golpe impensable, Ohma Tokita inclino su cabeza para morder la nariz de Jack.

Todos se sorprendieron al ver tal acción por parte de Ohma. Mastico la nariz de Jack con toda su fuerza, un grito de dolor salió de sus cuerdas vocales. Continuaba mordiendo con más fuerza, sentía la sangre brotar a cántaros y caer sobre su boca. Jack, en una rabieta, tomó a Ohma y lo giro, esto hizo que un pedazo de su nariz fuese arrancado, pero eso no le importaba, comenzó a estrangular a Ohma. El joven apretó los dientes, Jack buscaba el asesinato, quería matarlo ahí mismo, hacerlo pedazos, ese es su estilo, así es su manera.

El público estaba impresionado de lo lejos que habían llegado las cosas hasta ahora, estaban acostumbrados a ver estás peleas, pero eso no significa que quieran ser testigos de la muerte de alguien menos de esa forma.

—¿Va a morir...?

—¡Lo va a matar!

—¡Oh, Dios mío!

Los comentarios dejaban en claro todo, estaban espantados, algunos no querían seguir viendo, otros simplemente no podían apartar la vista, querían ver el final o tal vez tenían esperanzas de que Ohma hiciera algo. Esas esperanzas o curiosidad fueron reducidas al ver cómo sus ojos se estaban poniendo en blanco, los gruñidos que antes producía estaban siendo silenciados, las expresiones faciales estaban calmandose y su rostro cambiaba de color.

¿Será este el final de Ohma Tokita?

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¿Será este el final del hombre araña?

Quién sabe.

Espero que les haya gustado, déjenme su opinión de cómo les está pareciendo la pelea.

Gracias por leer.