Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Décimo Segundo.

Entonces, ¿Que haría?

Estando encerrada poco podía hacer y si gritaba... le iba a dar mucha vergüenza contar el porqué de su dilema.


Cuando iba a empezar a hiperventilar del nerviosismo, la puerta del cubículo fue golpeada estruendosamente.

"Vamos tonta, quiero orinar." La voz de Rodríguez inundó todo el baño vacío y sinceramente no sabía si su presencia era buena o mala. Así que opte por la buena.

"Uh si, pero tengo un problemita... ¿Podrías prestarme un tampón?" Susurré muy avergonzada. Pero nada se escuchó.


Se había ido, y ¿por que no lo haría? Yo no era de su agrado.

Entonces empecé a pensar que lo único que podría hacer es salir y afrontar las consecuencias.


"Apurate que no pienso orinar en esa mierda de hombres." Y luego un tampón cayó sobre mi cabeza.

Oh, bueno...

Tal vez Rodríguez era buena porque de verdad quería hacer pipi.

Me apuré y salí rápidamente para darle las gracias, y para que pueda... ya saben.

"Gracias, te lo compensaré, lo juro." Le sonreí.

"Ja, no. No pienses que me caerás bien ahora, sólo te ayude porque de verdad quiero orinar. Pero, aún no quiero verte, sal de mi camino." Ingresó al baño luego de lanzarme una mirada muy despreciativa.

"Bueno... Gracias igual." Me encogi de hombros y salí. Si algo había aprendido en todos mis años de vida era que no le podías gustar a todos.

Creo que lo aprendí a la fuerza por que en realidad, no le gustaba a mucha gente.

Ni siquiera a mi familia.

Lo que me traía sentimientos de culpa. Porque en cierta forma, había explotado en contra de mi hermano.

Agache la cabeza pensando en que podía hacer, no es que fuera mala pero mis hermanos, en especial Troy, eran muy pesados.

La mayoría del tiempo se burlaban de mi o hacían que se burlen de mi.

Entonces, ¿Perdonar o no perdonar?

Arg, me mataba pensando y seguro que a el ni siquiera le importo, sólo debo relajarme y pensar que Troy Tieszen está muy lejos de aquí.


Troy.


"Ven, rápido." Dijo Justin al pasar, estirándome de la camiseta.

Solté mi sándwich muy a mi pesar, pero Justin ya estaba ahorcandome con el cuello de mi remera. Él estaba apurado y su semblante era de pura preocupación.


"Oye, tranquilo viejo." Susurre con una sonrisita tirando de mis labios.

"No me digas que me calme, no ahora." Respondió mientras entrábamos a la secretaría, él tomo unos cuantos papeles y los sujetó a la tabla.

"Woa, pareces una mujer haciendo sus rabietas, sólo te falta poner los ojos como perritos." Le dije riendo.

Justin tenía una caja en sus manos ahora, la cual lanzó al escuchar lo que dije.

"Soy un hombre, un macho, y sí, estoy haciendo una rabieta." Espetó con sus manos en la cintura.

Lo miré con los ojos bien abiertos, y luego me eché a reír.

"¿En serio? ¿Y por que estás haciendo una rabieta? Claro, si es que tu hormonas te permiten decírmelo."


Abrió cajones, cerró cajones, movió estantes, y todo lo que había en el escritorio, me miró indignado.

"Estoy haciendo una rabieta porque el maldito teniente volvió, y por lo que vi, esta bastante enojado."

"¿Que? ¿La zorrita de turno no lo satisfizo lo suficiente?" Reí.

Se acercó y se quedó frente a mí, mirandome con demasiada seriedad.

"No me interesa que mierda haya pasado, lo importante es que no nos tire su mala leche a nosotros." Agarró la caja de mis manos y salió.

"Bueno, pero por qué tanto apuro, ¡oye! Hey, te estoy hablando." Dije corriendo cuando sus pasos se hicieron más rápidos.

"Deberías lavarte los oídos, es un buen hábito." Espetó de espaldas.


Bufe, una de las cosas que no me gustaba de Justin era su actitud cuando estaba bajo presión. Nadie lo soporta.


Entró en lo que sería una oficina privada, en la cual yo no había entrado antes, se dio la vuelta y me hizo el signo de silencio con el índice en la boca y luego se volvió a girar. Me puse a su lado mientras tocaba una de las puertas de la sala; me miró e hizo una cara de disgusto, pasó sus dedos por su lengua y acomodo mi cabello.


"Oye que demonios te suc..."


"Sh." Me interrumpió y se giró de nuevo hacia la puerta.


Ésta se abrió dando lugar a un señor que de cerca se podía decir que era el hermano de Rambo.

Pero gordo y con menos músculos.


"Teniente Woods" Justin elevó la palma extendida hasta la frente en forma de saludo. El señor asintió. Y luego me miró.

Levanté mi mano al igual que Justin.


"Eh, Teniente Boods" saludé.

Justo en ese momento sentí un codazo que me quitó el aire.


"Woods." Añadió Justin entre dientes.

"Woods." Repetí apenas.

El señor asintió, no tan convencido, y miró a Justin; el cual se apresuró a sacar la tabla.

Empleadito.


"Aquí tenemos el informe, las estadísticas y los preliminares de las clases de aeronáutica señor." Justin le mostró todas las hojas pero el teniente no dejaba de mirarme.

"¿Quien es... este?" Prosiguió el teniente después de lanzarme otra mirada acusadora, que terminó en mi cabello con gel.

"Bueno... él es el comandante interino de Fort Carson, Troy Tieszen." Justin hace una mueca.

"¿Tieszen..?" Woods elevó una ceja.

"S-sí..." Justin me lanzó una mirada inquieta.


"Así que eres pariente de nuestra nueva cadete."

Creo que se está desviando del tema.

"Eh si, vengo a traer encomiendas para usted señor." Esperé a que Justin me golpee o algo así, pero él sólo me miro y luego asintió hacia el teniente.

"Ah entonces pasen, no tengo todo el maldito día." Porque debo pensar en cómo follar con alguna infeliz. Obviamente eso lo pensé y reí, Justin movió los labios susurrando un 'mala leche' que sólo yo escuché y volví a reír.

"Así que las encomiendas cuentan chistes, ¿Como ha avanzado la ciencia no?" El teniente se coloca las gafas en el puente de la nariz y nos mira sarcásticamente; yo trato fuertemente de no reírme, así parece un viejecito cascarrabias.

Justin tose, y por fin la caja pesada llama la atención del teniente cascarrabias.

"¿Esas son las encomiendas?" Ajusta sus lentes mientras hojea la carpeta que Justin le había dado unos minutos antes.

Justin iba a abrir la boca, pero yo le toque el antebrazo y con mimicas le dije 'dejámelo a mí'

"Sí, señor, si me lo permite, me gustaría contarle los sucesos que me han traído aquí, a pesar de las obvias encomiendas." Justin frunce el ceño y me mira confundido, yo enarco la ceja hacia él mientras que el teniente no se da cuenta de nuestro vaivén de miradas; ensimismado en las carpetas y los millares de hojas en el escritorio.

Me pongo serio, de verdad.


"Señor, usted sabe que el cuartel de infantería de Fort Carson es uno de las principales sedes de academias militares, es por eso que diariamente contamos con las visitas de renombrados profesores y obviamente maestros en el aérea militar. Pues bueno, hace unas cuantas semanas recibí, bueno recibimos en realidad, la visita de un miembro bastante importante del gobierno estadounidense, y me temo señor, que las noticias que nos dieron nos ponen en una situación bastante incómoda a nosotros los soldados de Fort Carson."


El teniente suelta su carpeta y su ceño fruncido es el más profundo que jamás he visto.

"¿En que parte de la historia entra Fort Bragg?"


"Los aviones son parte fundamental de esta misión, señor."

"Aún así no comprendo el problema Tieszen, hable claro, que no tengo todo el día."

Tragando mis ganas de responderle incorrectamente, abro la caja y saco un folleto de más de 200 hojas y lo pongo en el escritorio.

"Es el comienzo de algo bastante malo señor."

Y tanto el teniente como Justin se alarman.

No era nada bueno.










Oh, que bonito te ves en multimedia Troy.





Im back.









Con cariño.











S.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro