《Especial 2 parte 1, versión 5》.

Versión 5- Claude ama a las gemelas, ignora a zenit, pero tiene un amor mas profundo por su segunda hija dando asi el resultado de un amor incestuoso.

-"Cuando abrí mis ojos lo primero que vi fueron dos gemas color rosa que me miraban con amor y suavidad, pero esa mirada desapareció en segundos.

Era mi madre.

Diana, una bella bailarina de shiodona.

Reencarne en una novela, Princesa encantadora, como la hermana gemela y menor de Athanasia. Soy caliope, segunda princesa imperial de obelia".

Sus pequeños ojos brillantes color rosa miraron a su hermana mayor que estaba tomando el té con su padre.

-"Resulta ser que claude, mi padre, tuvo interés por nosotras cuando nos extraviamos y fuimos a parar a su palacio, atthy trataba de ser tan brillante como el sol para hacerlo caer en sus encantos sin embargo yo era tan fría y neutral como la luna aunque a veces no niego que dejaba ver mi brillo.

Aún asi llamé la atención de claude solo por haberlo ignorado.

Todo es raro, Lucas jamás apareció hasta ahora y Atthy no tiene ninguna debilidad en su cuerpo, y lo más raro es...".

-cali! -sonrió levemente ante el llamado de su hermana y se acercó a ella dejando de lado las flores que estaba observando.

Se sentó en una de las sillas mientras Athanasia le daba de probar uno de los dulces, caliope le sonreía con suavidad dejando salir su belleza a la luz.

Pero aún cuando no lo miraba sentía esa sensación de ser observada por claude.
Esos ojos tan brillantes como el cielo pero al mismo tiempo tan peligrosos como el mismo lucifer la miraban con interés, suavidad y...raramente confusión.

Siempre era esa mirada.

Esa mirada que confundía a la pequeña caliope.

No podría descifrar al 100% la mirada de claude pero sabía que él siempre la estaba mirando.

Era acaso su interés por tener los ojos de su madre?, sería el reemplazo de ella en el corazón del emperador?.

Caliope no lo sabía pero no quería ser el reemplazo de nadie.

.

.

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Los meses pasaron y las gemelas tenían 11 años.
Todo iba normal, claude estaba rendido ante sus hijas pero su mayor debilidad era caliope y eso, todos en el palacio lo sabían.

Lo que las gemelas no sabían es que caliope siempre fue observada por claude, desde que era una bebé.

《Flashback》.

El emperador entró con cuidado al cuarto tan desierto como los pasillos, había cosas de oro y muy pocos juguetes, para dos pequeñas bebés era un gran cuarto muy vacío.

Caminó hasta las dos cunas blancas, miro detenidamente a la mayor de las gemelas, estaba mordiendo la sabana.

Era normal.

Luego miro la otra cuna, la menor estaba tapada con una manta azul, atthy con una color rosa, estaba durmiendo serena y apretaba sus pequeños puños de vez en cuando.

Frunció su pequeño entrecejo a diversión del rubio.

Toco su mentón al notar lo que hizo y luego poco a poco tocó le mejilla de la bebé oji rosa.

Lo recordaba, la menor cuando estuvo a punto de asesinarlas a las dos fueron protegida por lillian York y la pequeña oji rosa lo miro neutral.

Ni una pisca de miedo en sus ojos.

Esa fue la primera vez que tuvo curiosidad por ella, luego de dos meses no aguanto su curiosidad por la pequeña y fue a verla a escondidas.

Algo lo llamaba de ella.
Era como si su alma no quisiera alejarse del lado de Caliope.

-...Caliope....bella voz...me gustaría escucharte cantar en el futuro -sin pensarlo susurro sus deseos viendo con una leve sonrisa a la nombrada cuando ella apretó su dedo con fuerza aún dormida.

Pero él no se dio cuenta que un par de ojos cerúleo más pequeños lo miraban de reojo con curiosidad.

-"acaso claude está interesado en caliope?....esa mirada"- la pequeña Athanasia se quedó sorprendida al ver esa mirada en los ojos del emperador.

No había duda.

Esa mirada estaba llena de....Amor.

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.

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Luego de ese momento claude siempre iba a ver a caliope por las noches, Athanasia se daba cuenta de eso pero no hacía nada para llamar su atención ya que ella no quería hacer eso, ella quería escapar.

Era de día y caliope estaba en su cuna esperando que lily la cambiará, mientras esperaba suspiro y miro sus piernas.

Era increíble la flexibilidad de los bebés.

Ella no se daba cuenta pero esos pequeños gestos infantiles eran muy adorables para su acosador.

-".....que linda" -un leve casi impredecible sonrojo se instaló en las mejillas del emperador al ver que la pequeña oji rosa mordía sus pequeños pies.

Luego de 1 año, caliope ya sabía caminar, hablar levemente y leer.

No cabe decir que claude estaba más que orgulloso de ella, la pequeña era una caja de sorpresas.

Ahora caliope tenía un libro de magia ante ella, el cual era sostenido por una de las sirvientas mientras ella leía tranquila.

-??? -miro curiosa la torre -mada (Mara) -miro a la mujer que hizo un gran esfuerzo por no caerse desmayada ante tanta ternura.

-s-si? -pregunto con una sonrisa y un fuerte sonrojo tapando su nariz.

Caliope la miro con una gotita pero ignoró eso.

-tode (torre) de mados (magos) -señaló la torre de los magos dándole a entender que quería saber más de ellos.

-en seguida traeré más libros -dejó con cuidado el libro en el suelo e hizo una reverencia para luego ir a buscar más información.

A pesar de no hablar muy bien la pequeña daba a entender lo que quería.

Tras unos árboles.

-así que le gusta investigar -susurro con una mano en su mentón mirando fijamente a la pequeña que seguía leyendo.

-m-majestad por qué no se acerca? -pregunto el pelirrojo viendo con una gotita al rubio acosador.

. . .

-acaso quieres que muera por la belleza del ángel? -miro neutral a felix que se quedó mudo ante tal respuesta.

-un ángel -susurro sin comprender.

-si me acerco a ella moriré por la luz del ángel -susurro pensativo y muy serio con una extraña gema verde en su mano que brillaba cada 2x3.

Era una gema fotográfica.

-"le está sacando fotos a la princesa?!... No me quiero imaginar en dónde las guarda" -el oji gris solo negó con la cabeza ante tal emperador acosador.

Quién se imaginaría que dicho hombre tan frío como el hielo sea un acosador de su pequeña hija.

Y sí, claude tenía una habitación privada de fotos de caliope con cuadros de oro y algunas cosas que la pequeña caliope ya no le daba importancia.
Como el primer sonajero que uso.

Claude era un verdadero acosador.

Espiaba a la pequeña oji rosa casi todas las mañanas, tardes y noches, a veces dejaba su trabajo de lado para espiarla.

Felix, y los sirvientes que se habían dado cuenta de que claude espiaba a la pequeña, no sabían si eso era amor u obsesión.

Lo único que sabían es que la mayor debilidad de claude era la bella caliope.

《Fin Flashback》.

-cali~ por favor -rogó la rubia mayor en el suelo y mirando bajo la cama.

-... No.

-oh vamos no puede estar para siempre bajo la cama! -hizo un puchero enojada viendo a su gemela oculta bajo la cama y sin mirarla.

-....No quiero.

-....Ya sal de ahí! -con todo su enojo la agarro de las piernas tratando de sacarla de allí abajo.

Qué pasaba?.
Resulta ser que Athanasia debía de aprender a bailar para su futuro debut pero la profesora se había enfermado y la rubia se entero que la mejor persona que le podía enseñar a bailar era caliope.

Eso no sería problema si las dos estuvieran solas o con lily pero claude se entero, como todo acosador de la pequeña oji rosa, que la pequeña princesa iba a bailar y quería estar presente en todas las prácticas de sus hijas.

Así que caliope estaba tratando de ocultarse de todos pero le fue imposible ya que atthy la conoce como la palma de su mano.

Luego de ser arrastrada por su hermana a la sala de baile.

Miro de reojo con vergüenza a su padre que estaba sentado en un sillón mirando atento a sus hijas (caliope) apoyando su codo en su rodilla y su mentón en su mano.

Atrás de él estaba Felix, a su lado lily, y algunas sirvientas estaban ocultas fuera del lugar espiando a las princesas por la ventana.
Rara vez se veía bailar a la princesa así que no querían perderselo.

-princesas pondré la música -aviso lily sacando de sus pensamientos a la oji rosa.

Athanasia tenia un vestido rosa mientras que caliope tenia una vestido celeste.

La menor suspiro sacando sus nervios y cuando abrió sus ojos estos estaban mas relajados.

-atthy relaja todo tu cuerpo y déjate guiar por la música -tomó con suavidad las manos de su hermana a su confusión.

-Eh... b-bien -se sonrojo un poco ya que caliope estaba muy cerca de ella.

Los primeros pasos a corde a la música eran lentos e iguales, las dos no dejaban de mirarse a los ojos. Estaban relajadas y se dejaban llevar.

Cuando alzaron levemente sus faldas y quedaron tomadas de las manos la oji rosa de golpe la hizo girar tomando la de la cintura posando su boca cerca de su oreja.

-ahora te dejare liberar tus alas...se libre -susurro suavemente dejando desconcertada a athanasia pero asintió y su hermana la soltó.

Las dos empezaron su danza cautivando por completo a los presentes.

Parecía como si un aire celestial las rodeada.

Un aire llena de libertad que dos de ellos conocían muy bien.

Eran almas libres como Diana.

-"princesas" -lily sonrío con los ojos cristalizados al ver la imagen de su amiga reflejada en las pequeñas.

El pelirrojo solo sonrió al ver que eran iguales a su madre, al mirar al emperador abrió sus ojos en shock.

Esa mirada tan brillante como el mismísimo cielo, esos sentimientos que brillaban a través de esos ojos.

Felix conocía esa mirada, era la misma que cuando vio bailar a Diana.

No podía ser posible.

Acaso el emperador amaba más que como una hija a caliope?.

.

.

.

Los años pasaron y llegó la fiesta del debut de las princesas, las dos estaban hermosas, tan relucientes como el sol.

Luego de que athanasia bailará con su padre, caliope la esperaba con una mirada fulminante.
Tantas horas le enseño a bailar y al final terminaba pisando a claude.

-lo siento cali!, deja de mirarme así -hizo un puchero mirando con leve temor a su hermana menor que estaba de brazos cruzados.

-ahh muy bien, pero luego tendrás que darme la mitad de tus dulces -sonrió maliciosa haciendo que un aura emo rodea a su hermana.

-caliope -las dos miraron al rubio que extendió su mano hacia la oji rosa la cual se sonrojo sin poder evitarlo.

Atthy solo sonrió al ver eso y empujó a su hermana hacia su padre.

-luego nos vemos -los saludos sonriente y yéndose a bailar con las demás chicas.

Los dos rubios la vieron irse y luego tomados de la mano se posaron en medio de todos los nobles.

Ellos los miraban atentos, a pesar de que el emperador se caracterizaba por ser frío como el hielo ahora había algo de suavidad en sus ojos.

Cuando claude la tomo de la cintura ella se exalto sonrojada.

-"maldición!, no te sonrojes es claude, tu padre" -no lo entendía, por qué le pasaba eso ahora.

Aceptaba que el rubio era alguien muy apuesto pero jamás le había pasado eso.

Por qué ahora le pasaba eso?.
Acaso fue a causa de que le dijo que estaba hermosa o cuando estuvo tan cerca de ella como para sentir su fragancia a menta que hacía su corazón latir como loco?.

Cuándo fue?.

-caliope -miro esos ojos cerúleo que la miraban atentos -qué sucede? -los dos dieron una vuelva majestuosa cautivando a los demás por el brillo que los rodeaba.

Aún cuando estaban en sus mundos bailaban a la par.

-...nada..solo estoy un poco distraída, lo siento -susurro sonriendo levemente -...!!! -abrió levemente su boca cuando él la alzo por los aires de la cintura dando una vuelta para luego seguir bailando con naturalidad.

-céntrate en mí -ella se sonrojo al sentir su aliento en su oreja, ante eso él sonrió.

Cuando el baile termino los dos se miraron aún tomados de la mano y aún cuando ninguno de los dos lo querían aceptar sentían una calidez que recorría sus cuerpos al estar unidos.

Una calidez que hacía latir con fuerza sus corazones y que provocaba un extraño sentimiento en ellos.

Sus almas estaban rebosando de alegría al estar tan cerca.

Por qué?.

Cuando se alejaron, claude guió a caliope al jardín.

-papá...qué sucede? -pregunto curiosa al ver que claude le daba la espalda.

Cuando se giro miro con sorpresa el collar en sus manos, era de oro y plata con joyas zafiro.
Ante la luz de la luna brillaba con intensidad.

-yuanfen...-abrió sus ojos en shock cuando escucho esa palabra, él se acercó a ella y con cuidado puso el collar en su delicado cuello -es una joya que las mujeres más valiosas del imperio deben de usar -acarició la mejilla de su hija con suavidad.

Viendo satisfecho que ese collar hacía resaltar la belleza de caliope.

-p-pero y...

-es mi decisión, cumple mi deseo -habló sereno tocando con suavidad el collar.

No todos reciben ese collar.

Debías de ser muy valiosa para el emperador de obelia para recibir dicha joya.

-ve y disfruta de tu debut -le sonrió levemente para luego irse siendo visto por la princesa.

Cuando quedó sola tocó el collar con suavidad y tragó saliva.

Yuanfen.

Persona destinada.

Acaso claude sabía de ese significado?.

Quien recibía esa joya era solo la única y eterna yuanfen del emperador de obelia.

.

.

.

Cuando la noche paso, las gemelas estuvieron charlando hasta ya muy tarde gracias a que, a pesar de que zenit las veía desde lejos junto a Roger Alfierce en ningún momento se acercó a ellas.

El único que se acercó fue Kiel al momento de bailar con athanasia.

Tal parece que Kiel quedó cautivado por la princesa athanasia.

-aún no lo entiendo, tal vez nuestra presencia cambio el orden de las cosas -susurro Atthy con seriedad, al no recibir respuesta miro a su hermana.

Las dos iban a dormir juntas, estaban con su camisón blanco y su cabello suelto.
Estaban acostadas mirándose una a la otra aunque caliope desde hace minutos que estaba mirando un punto fijo en el rostro de su hermana.

Estaba perdida en sus pensamientos.

-cali, qué sucede? -susurro curiosa haciéndola reaccionar.

-nada solo...-dejo de sonreír y suspiro cerrando sus ojos decidiendo contarle a su gemela lo que le pasaba -cuando...baile con claude me paso algo extraño, cuando tomó mi mano y luego mi cintura tuve un sentimiento que solo había tenido en mi vida pasada.

Tal como en el pasado.

Ella cayó ante esos ojos esmeralda que la miraron con amabilidad y ahora estaba cayendo ante esos ojos cerúleo azul.

Pero no podía.

Estaba prohibido.

-no lo entiendo....no debería de pasar...no quiero asustarte y no sé si sea cierto lo que estoy pensando pero... -apretó sus labios aún sin abrir sus ojos.

Apretó la sabana en sus manos y soltó el aire que contenía.

-...creo que me gusta claude.

El silencio reinó la habitación.

Cuando notó el silencio de athanasia, abrió sus ojos con temor para luego mirar con sorpresa a su hermana.

La estaba mirando con burla.

-hasta que te diste cuenta -susurro a confusión de caliope -desde que eramos bebés claude te espía o cuida como lo quieras llamar, por más que suene tonto y loco sé que él siente algo más que amor fraternal hacia ti -comento sonriendo con suavidad.

Por fin su hermana de daba cuenta de los sentimientos de claude.
Por más que suene totalmente descabellado ella sabía que el rubio amaba más como una hija a su hermana y la inconsciencia de caliope sabía eso pero ella prefería ignorarlo.

Solo que nadie puede negar los hechos de la vida y era hora de que su consciencia acepte lo que estaba sucediendo a su alrededor.

-de qué hablas?! -se sentó se golpe en la cama con un sonrojo haciendo reír a su hermana .

-no me importa si ustedes están juntos, es más, me hace feliz ya que con papá estarás segura y sé que él a pesar de ser frío te amará bien....

-es mi padre!.

-oh vamos, en las antiguas generaciones se casaban entre familia, hermanos, primos, madre e hijo, qué puede pasar si se casan padre e hija? -comento rodando los ojos ante la dramatización de su hermana.

Caliope no podía creerlo, quien pensó que iba lanzar gritos al cielo actuaba con total naturalidad ante lo que dijo.

-p-pero....

La oji cerúleo miro a su gemela y vio con sorpresa que sus ojos que siempre demostrando seguridad y confianza, ahora estaban demostrando temor y tristeza.

-y...si solo me llega a amar por mis ojos?, por mi parentesco con nuestra madre?....si solo soy un remplazo? -sus susurros iban bajando poco a poco mientras apretaba las sabanas.

-cali -ella se sentó mirando con tristeza a su hermana, la abrazó con suavidad y acaricio su cabello -no tengo respuestas para eso, tal vez debas de esperar y el tiempo te dará las respuestas pero de lo que sí estoy segura es que....claude te ama no como hija sino como su yuanfen -susurro a sorpresa de caliope.

-lo sabes?.

-claro que sé la leyenda, tal vez él sepa ese significado o tal vez no, no lo sé, pero mientras el tiempo te da las respuestas yo estaré a tu lado para apoyarte -le sonrío alegré haciendo sonreír a su hermana.

-gracias...aunque quién imaginaría que supieras dar consejos -sonrio burlona haciendo que Atthy haga un puchero.

-sé dar consejos!, mohhh -se quejó como una niña pequeña haciendo reír a la menor.

Sin importar las circunstancias las dos estarían juntas.

.

.

.

Dejó de mirar los papeles en sus manos y suspiro apoyándose en su sillón.

No podía dejar de pensar en caliope.

Su sonrisa.

Su cabello.

Su voz.

Su baile.

Esa mirada feroz y brillante.

Todo de ella era perfecto.

Cuando era bebé la espiaba ya que le parecía divertido el verla crecer día a día pero poco a poco algo fue creciendo en él.
Ella provocaba cosas que ninguna mujer hizo, incluso Diana.

Diana....la mujer que lo rescató de su perdición y luego lo abandonó por salvar a las gemelas.

Diana lo rescató y le dejó una nueva oportunidad de amar, no solo como padre sino como hombre.

Casi cae en la locura cuando su consciencia le empezaba a dar indicios de que su obsesión por mirar desde lejos a caliope no era otra cosa que amor.
No lo aceptaba.

No podía ser cierto, no podía amar a su hija como una mujer.

Pero no podía negar lo que su corazón gritaba a los 4 vientos.

Se sentía impotente, era el gran emperador de obelia con un gran poder mágico, nadie lo detenía, derroto a miles de enemigos y al final.
Fue derrotado por una pequeña de ojos rosa que lo miro sin temor.

A medida que ella crecía fue aceptando más y más su amor por ella, pero no podía decírselo, no quería que se alejara de él.

Aunque su cuerpo siempre reaccionaba por si solo y terminaba demostrando su amor.

Como ayer a la noche cuando le entregó el collar yuanfen.

-qué estas haciendo en mí -abrió sus ojos y cuando miro el papel anteriormente en blanco ahora con un dibujo sonrió de lado.

Por dios, ni siquiera podía perderse en sus pensamientos porque su cuerpo, no, mejor dicho su alma, siempre recordaba a caliope.

Pero, los dos podrían estar juntos al final?.

Los años pasaron y las princesas tenían 18 años.
Las dos eran hermosas, todo el imperio y los demás imperios y reinos vecinos amaban a las princesas.

Eran amables, inteligentes y siempre elegantes.

Eran perfectas.

Roger jamás consiguió que zenit entrará al corazón del emperador ya que claude solo amaba a las gemelas, zenit se podía reunir con sus primas solo en reuniones o cuando Kiel iba a visitar a athanasia.

Esos dos habían formado una gran "amistad".

Zenit se había enterado, gracias caliope, que ella era hija de Athanasio el anterior emperador y hermano de claude, ella lloró por la historia de sus padres pero ahí estuvieron sus primas para apoyarla.

Ella no tuvo rencor por claude o las gemelas, ya que ella amaba a su familia y su corazón amable no podía culparlos.

A pedido de las gemelas zenit se pudo mudar de la casa Alfierce y vivía en el palacio rubi mientras que las princesa vivían en el palacio esmeralda.
Fue un paso lleno de temor ya que las gemelas no querían que la historia que ellas conocían se repita.
Pero nada sucedió.

Aún cuando zenit estaba en el palacio rubi o estaba con las gemelas la atención completa de claude estaba en sus hijas o la mayoría de las veces en caliope.

En cuanto a los dos rubios, claude le daba indicios a caliope de sus sentimientos pero ella los ignoraba por temor.

A medida que fue creciendo su parentesco con diana era enorme y ese temor en su corazón, de que solo era un remplazo de su madre para claude, creció con fuerza.

Además de que tenía miedo de pasar lo mismo que en su vida pasada.

Después de todo el pasado jamás la iba a abandonar y con la aparición de Eithan su temor se profundizo.

Eithan, ese apuesto hombre de cabello rubio y ojos esmeralda que la había tratado con amabilidad en el pasado.
El primer hombre que amó luego de la muerte de su padre, la muerte de su mejor amiga y la traición de su madre y hermano.

Le entregó todo, su corazón, su cuerpo, su alma.

Se casaron y luego de años de vivir felices, ella recibió la noticia de que estaba esperando el fruto de su amor pero cuando fue emocionada a decirle la noticia los vio y se le rompió el corazón.

Nuevamente la habían traicionado.

Resulta que, no sabía cómo, Eithan había reencarnado en ese mundo como un príncipe de un reino vecino.
Con el mismo nombre y los mismos rasgos.

Se encontraron en la celebración de sus 18 y todo se desmoronó para caliope.

El pasado volvió a atormentarla.

《Flashblack》.

Luego de bailar con su padre, con Kiel y Felix, que fue obligado por las gemelas y por su esposa, lily.

Cuando las princesas estaban con Kiel, zenit y claude alguien se acerco a ellas.

-felicidades a los dos soles de obelia -esa voz hizo detener por completo a la oji rosa.

Se dio vuelta con lentitud y al verlo quedo en shock.

Era él.

-soy el príncipe Eithan del reino de kouka, mucho gusto su majestad, princesas -hizo una reverencia sonriendo amable a los tres rubios.

-muchas gracias -le sonrió athanasia con amabilidad pero al mirar a caliope la preocupación se instaló en sus ojos ella estaba apretando la copa entre sus manos con fuerza y se notaba un poco pálida.

-usted debe de ser la princesa caliope, escuche mucho de usted -la miro atento el oji verde -en verdad es hermosa -la halago sonrojado.

Ignorando el aura oscura que rodeaba al emperador.

Zenit y Kiel sonrieron nerviosos ante los celos de claude.

-s-sí, mucho gusto...no quiero ser descortés pero debo de retirarme no me siento muy bien -se disculpó sonriendo nerviosa.

-eh, necesita que...

-la acompañaré a tomar aire -se apresuró Atthy tomando la mano de su hermana y saliendo del salón.

Los tres quedaron en silencio y zenit miro preocupada la espalda de caliope.

-princesa -susurro mirando la palidez de su amiga.

Eithan no dijo nada y luego de una reverencia hacia el emperador se fue hacia donde estaban unos nobles que conocía.
Claude dejo a zenit y Kiel solos caminando hacia donde se fueron sus hijas.

Llegó al jardín más alejado del palacio y se ocultó tras los arbustos viendo a athanasia que abrazaba a caliope, la cual temblaba con fuerza.

Qué le sucedió para estar así?.

Jamás imaginó verla en ese estado.

-cali, dime qué sucede -susurro la rubia con suavidad.

-era él...era Eithan, el hombre que me traicionó con mi amiga y el padre del bebé que jamás pude tener -dejó escapar sus lágrimas dejando en shock a los rubios.

-"qué...de qué está hablando?" -el rubio miro atento a sus hijas.

-cali...no te preocupes, estamos en otra vida, no pasará lo mismo -abrazó con fuerza a la menor mientras ella sollozaba en su pecho.

Cuando la oji rosa se durmió, el rubio se acercó a ellas y athanasia supo que era momento de contarle la verdad a su padre.

-así que renacieron en este mundo y supieron todo lo que iba a pasar ya que esto es una novela? -afirmó el emperador ante la inquietud de su hija.

-papá...

-no te preocupes -acarició su cabello con suavidad y luego alzo a caliope en sus brazos -aún si renacieron en este mundo y recuerdan su vida pasada siguen siendo mis hijas -le sonrió levemente a sorpresa de la rubia.

Ella le sonrió con suavidad y miro a su hermana.

-cuídala mucho, sé que la harás feliz -sonrió alegré dejando sorprendido esta vez a claude que luego le sonrió.

Ella lo sabía, siempre lo supo.

.

.

.

Cuando llegó a su propio cuarto dejó a la princesa en su cama y acarició su mejilla.

-no dejaré que nadie te haga daño -besó su frente con suavidad.

No le importaba que el mundo entero los vea con asco, que todos se pongan en su contra, él no iba a dejar de amarla.

《Fin Flashback》.

Luego de algunas horas, caliope se despertó y notó que estaba en el cuarto de claude.
Se sentó confusa al no verlo ahí.

Se puso sus zapatos y camino hasta la ventana.

No podía más.

No quería ser herida.

No quería sentir eso.

No podía.

Negó por años su amor hacia claude pero no podía negarlo más, lo amaba pero tenía miedo.

Y ahora que Eithan apareció el miedo creció más.

-caliope -se exaltó al tener a su lado al rubio el cual estaba con su ropa normal mirando atento a la oji rosa.

Ella esquivó su mirada y él apretó sus labios.

-no podemos seguir negandolo, yo te...

-no lo digas -ella apretó su vestido haciendo que él la mire con tristeza -estás confundido, solo dices amarme por mi parentesco con Diana....tú...

-basta.

-tú no...no me amas, es mentira -se negaba a creerlo, no lo iba a creer.

El rubio apretó sus labios con fuerza y la tomó de los brazos haciendo que lo mire.

-caliope te amo!, no me importa si te pareces a Diana tú eres mi yuanfen, eres mi destinada desde el momento que vi tus ojos cuando eras una bebé lo supe solo que lo negaba pero...no puedo negarlo más!, eres mi amada, no me importa si eres mi hija...te amo.

Sus lágrimas cayeron, el gran emperador, el hombre mas frío de la historia, su padre....la amaba.

Y ella a él.

-yo...no...

-déjame amarte -susurro secando sus lágrimas con suavidad -déjame mostrarte que en verdad te amo -pego su frente con la de ella.

Y ante esos ojos que brillaban con suavidad y amor ella sintió su corazón estremecerse.

No podía negarlo ante esa mirada.

Cerró sus ojos con suavidad y esa fue la señal para claude.

Los dos se fundieron en un beso ante la luz de la luna.

No les importaba la opinión de los demás iban a luchar por su amor.

.

.

.

Cuando los demás se enteraron del romance entre ellos dos se hizo una gran revolución pero no pudieron poner peros ya que claude era su emperador.

Athanasia estaba feliz por ellos dos, zenit y Kiel estaban igual, los sirvientes, felix y lily los felicitaron ya que dijeron que eso era algo predecible desde hace años.

Todos en el palacio sabían que eso tarde o temprano sucedería, solo era cuestión de tiempo.

Luego de meses de relación claude le propuso matrimonio a caliope y luego de semanas se casaron.

Ahora ella era Caliope de Alger obelia, Esposa de Claude de Alger obelia y Emperatriz del gran imperio Obeliano.

Luego de su casamiento pasaron meses hasta que luego fue athanasia quien se casó con Kiel, claro que bajo amenazas de claude y un poco de caliope.
Ellos dos le dejaron bien en claro que si dañaba a Atthy la pasaría muy mal.

Los emperadores daban miedo cuando se trataba de la hermosa athanasia.

-cali estás bien? -pregunto athanasia tocando la frente de su hermana al notar el sonrojo en sus mejillas.

-no se preocupen solo debe de ser un resfriado -sonrió ante la preocupación de athanasia, zenit y lily.

Las tres estaban tomando el té mientras que felix y Kiel jugando con Elías, hijo de Felix y lily, de 5 años.

-no se preocupen solo será algo temporal -le resto importancia haciendo que las tres mujeres se miren y luego miren a la oji rosa.

-Cali, tú....

-caliope -el emperador había llegado de golpe junto a varias sirvientas y doctores.

-c-claude, qué sucede? -pregunto con una gotita al ver la extrema seriedad del rubio.

-desde ahora no puedes hacer ningún esfuerzo -declaró ante la curiosidad de todos.

Todos miraron al doctor que sonrió amable.

-felicidades majestad está embarazada!.

*pum!*

Fue lo único que se escucho para luego ver el cuerpo desmayado de caliope en brazos de lily.

-mohh cali no te duermas....un momento, voy a ser tía! -reaccionó athanasia abrazando de golpe a zenit que estaba igual de eufórica que su prima.

-majestad despierte -lily le hacía viento a caliope mientras reía divertida.

Claude solo tomó en brazos a su esposa y sonrió divertido al verla desmayada.

Tal parece que su diversión jamás terminaría con caliope a su lado.

Los años habían pasado.

-por qué me tengo que poner esto? -se escuchó la voz serena y masculina de un pequeño niño.

-así te verás apuesto para mamá! -esta vez se escucho la voz de una niña, era alegré pero al mismo tiempo serena.

Cabello rubio.

Ojos rosas.

Ciel y Celine de Alger obelia, el príncipe y princesa de obelia.

-niños! -una bella mujer de largo cabello rubio y ojos espinela, con un vestido celeste, se asomó por los pasillos del palacio sobando su enorme vientre.

Los dos pequeños miraron a su hermosa madre y sonrieron.

Muy pronto tendrían un hermanito.

-ya vamos! -grito la pequeña terminando con ayuda de su hermano la corona de flores.

Caliope solo sonrió y miro de reojo a su esposo cuando éste apareció tras suyo abrazándola por la cintura y posando sus manos en su vientre.

-parece que está feliz de que estés cerca -susurro sonriendo alegré al sentir a su hijo moverse dentro suyo.

-mmm~...creo que es otra cosa -susurro claude apoyando su mentón en su hombro.

Después de todo, sus dos hijos habían heredado sus celos por caliope y tal parece que el nuevo integrante iba a heredar dichos celos.

Ella solo rió divertida y él la la miro con una sonrisa.

Cuando lo miro de frente acarició su mejilla ante su curiosidad.

-te amo -susurro sonrojada sorprendiendo a claude.

Por más sorprendente que sea, el más demostrativo era claude ya que caliope era muy vergonzosa y a la vez tsundere, cosa que le encantaba a claude.

Él sonrió y besó con suavidad labios.

-mamá es mía! -los dos se interpusieron entre ellos abrazando posesivamente a caliope haciendo suspirar a claude.

Tenían que heredar sus celos.

Mientras ellos tres peleaban por caliope, ella los miraba con una sonrisa.

Sin importar que tan descabellado fuera su amor por claude ella aceptaba que lo amaba, ella no era el reemplazo de nadie.

Ella era Caliope de Alger obelia.

La yuanfen de Claude de Alger obelia.

Su padre y esposo.

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No sé por qué pero le agarré mucho cariño a estos dos últimos especiales de cali y claude xD.

O sea, sé que es incesto pero son hermosos juntos ♡♡♡♡.