Como prometió Jungkook a los dos meses se dejaría tatuar por el famoso pintor Mochi. 

Había escogido un dragón y Jimin estaba más que extasiado, amaba tatuar pero más aún le hacía ilusión la fornite espalda de Jungkook. Aunque no eran novios todavía, sentía que si en algún momento se lo pedía el arquitecto él sin duda que sí. 

Jimin era del tipo que se ilusionaba bastante rápido, viaja en las nubes del pensamiento embobado viendo a Jungkook. A veces se preguntaba cómo el chico se había mantenido soltero. 

A veces sus pensamientos se iban al lado más sin pudor, pero a veces se visualizaba como una pareja romántica, que se proclamaban amor en la torre Eiffel. Le molestaba no ser Virgen para su hombre pero que se le podía hacer, uno de joven es estúpido. 

ㅡ ¿Qué tanto piensas? ㅡ pregunto Jungkook mientras se sacaba la camiseta. 

ㅡ En lo mucho que me gustaría follarte. 

Jungkook rió nervioso ㅡ ¿no tendrías tu que estar abajo? 

ㅡ Que quiera follarte significa que yo voy a meter mi pene en tu Virgen trasero, significa que voy a tomar tu pene y me jodere el trasero como quiero. 

Jeon se avergonzó tanto que se tapó el rostro. 

ㅡ Sabes que no voy a hacerloㅡ se levantó para traer algunas cosas que necesitaba para tatuarloㅡ  no aún. Así que, prepárate corazón. 

Jungkook solo se acostó lo más rápido posible, el chico que le gustaba era demasiado para él, pero aún así lo quería. 

… 

Las sesiones en el estudio de tatuajes parecieron eternas, claro que en un solo día no harían tremendo dragón. 

Ambos estaban en un café, Jungkook ya no usaba camisetas con mangas largas, cada vez amaba mostrar sus tatuajes. 

Y Jimin pues en sus exposiciones no dejaban de abrazar ese brazo tatuado, Jungkook ya sentía que el chico tenía algún fetiche. 

Pero Jimin le fue sincero ㅡ Tienes uno musculosos brazos, tatuados y eres un Ángel, creeme que eres todo lo que quiero. 

Y lo de Ángel no sólo por su actitud, Jungkook siempre estaba al pendiente de Jimin, se había ganado el respeto y permiso de NamJoon, claro que Jimin exclamó que no era un niño pero Nam sentía que podía dejar a su hermanito con él. 

ㅡ Quiero una torta de chocolate con una moccha.

ㅡ Tanto chocolate puede ser dañino, cambiaselo por un croissantㅡ dijo Jungkook viendo fijamente a Jimin y este solo aceptó derrotado. 

ㅡ ¿Entonces qué tal volver a Seúl? 

ㅡ Ya no me interesa Corea del Sur. 

ㅡ ¿Te enamoraste de París? 

ㅡ Me enamore de ti. 

ㅡ ¡Oh! 

ㅡ Si, y se que también me amas pero no haremos nada solo han pasado dos meses, mañana saldremos a correr. 

ㅡ Ya te dije que solo daré cinco pasos y caere al suelo. 

ㅡ Bien correré cargandote, ya me estas tatuando ahora debemos correr. 

ㅡ ¿Me darás mi beso? 

ㅡ Por supuesto. 

.  .  .

Cuatro meses habían transcurrido desde que Jungkook decidió tatuarse. Y correr con el menor de la pareja.

Jimin tenía razón, no tenía nada de aguante; pero como ambos amaban pasar tiempo juntos, siempre que salían, Jimin se subía en su espalda. Al principio era complicado pero se acostumbraron a correr de esa manera.

Jungkook llevaba seis meses en Francia y por orden de su embajada debía volver un tiempo a su país, Jimin sin duda alguna no quería irse sin él, así que compró un vuelo junto al de Jeon.

Para sorpresa de ambos Tae y NamJoon regresarán con ambos, ese par era una pareja dispareja. No aceptaban los sentimientos que sentían entre ambos pero se celaban cada vez que podían.

ㅡ Solo será un par de días que tan mal puede serㅡ las palabras del pintor quedaron en el aire cuando se dieron cuenta que tanto NamJoon como Tae y él habían perdido muchos de sus derechos en dicho país.

No lo dejaban entrar a algunos lugares públicos, primero por el tatuaje en su cuello, tampoco entró a una exhibición de arte y no le creyeron cuando dijo su nombre.

Estaba siendo discriminado y más aún, lo veían horrible porque Jimin no podía evitar estar encima de Jungkook.

Pero de algo estaba feliz, y era que su amado chico parecía que las miradas ya no importaban como antes, y a pesar que los echaron de un sauna porque claramente él dejó a la vista su tatuaje y era obvio que no iba a taparle.

Pero aún así lograron tener unas lindas vacaciones, y Jungkook logró hablar con su embajada mostrando que tenía todo en regla y quería ver si podía empezar a trabajar o vivir en Francia.

Antes de irse del país, volvió a verse con aquel colega e ingeniero. Kim Yugyeom.

ㅡ Tiempo sin verte Jeon.

ㅡ Lo mismo digo, Kimㅡ habló sin muchos ánimos la reunión se dio porque chocaron en el mismo café de meses atrás.

ㅡ Seis o siete meses de no verte.

ㅡ Serían siete pero aquí estamos.

ㅡ Que serio amigo.

ㅡ No tengo una razón para hablar con alguien que me hecho culpa de todo.

ㅡ Bueno mira, perdón, sinceramente cuesta hallar buenos arquitectos. Logre tomar el proyecto del que hablamos. Podríamos volver como equipo.

ㅡ ¿Yo? Hay mejores que yoㅡ observo su reloj casi era la hora acordada.

ㅡ Realmente no he podido conseguir a alguien y tu eres muy bueno, imagino que has pasado en casa llorando y ejercitando… sino haciendo nuevos diseños.

En el pasado había sucedido algo similar, era la tercera vez que se juntaba con Yugyeom y siempre terminaba aceptando trabajar de vuelta.

ㅡ Lo siento Kim. Pero esta vez no aceptó.

ㅡ ¿Por qu..ㅡ se vio interrumpido cuando un chico con aspecto un poco desordenado pero con una gabardina Gucci, su cabello rosa, un tatuaje en el cuello y más bajo que ambos se puso enmedio de ambos y beso de inmediato al arquitecto, ignorándolo por completo.

ㅡ Aun no llegabas y yo necesitaba mi café.

Fue ahí que notó Kim, que Jungkook cargaba dos cafés en sus manos. El chico lo volvió a ver y lo ignoró.

ㅡ ¿No me vas a presentar, amigo?

Jimin lo vio de nuevo, y esta vez sin cuidado abrazo a Jungkook lo cual ambos casi se queman.

ㅡ ¡Jimin! Nos vamos a quemar.

ㅡ ¿Quién es el aguafiestas?

ㅡ Habló en serio.

ㅡ No bombón, habló de ese tipo que viste muy serio y aburrido.

Yugyeom se ofendió al escucharlo.

ㅡ Él es mi antiguo compañero.

ㅡ Kim Yugyeom, ¿tu quien eres niño?

ㅡ ¿Yo? Yo soy el futuro esposo de Jeonㅡ Jungkook se puso carmesí, también Yugyeomㅡ se quien eres, eres quien humillaba a mi hombre, bueno no te preocupes, que yo lo mantengo. Lo mantengo ocupado, verdad dulzuraㅡ había un claro doble sentido en las palabras de Jimin que solo Jungkook comprendió.

ㅡ Parece que ahora te gustan los niños.

ㅡ Para ser un niño tengo mucho éxito, preguntale a Internet, quien Park Jimin. Ahora nos vamos.

Y solo eso necesito para tomar de la mano a Jungkook, era claro que Kim Yugyeom sabría quien era el chico que estaba con Jeon Jungkook.