Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

13

— Cállense ya.

— No jodas, Raditz. Si vas a dormir hazlo en tu habitación. — reclamó Nappa.

— La sala es de todos. — respondió el mencionado, con fastidio.

— No me interesa.

Vegeta miraba la escena con fastidio. Apagó su cigarrillo con rudeza y suspiró. No le gustaba que Raditz y Nappa se pelearan solo porque uno de ellos estaba ebrio.

— Raditz, no seas estúpido. — le dijo.

— ¿Qué? No te metas.

— Solo no lo seas. Cálmate ya.

Lo entendería. Era tremendamente idiota de su parte pensar que lo que Nappa le decía estando tomado era en serio. Baboso.

Ese día todos se estaban llevando mal, y si era honesto, no tenía idea de por qué. Sea cual sea la razón, lo desesperaba. Tarde o temprano se le acabaría la paciencia a alguno.

Al parecer todo empezó desde que Nappa despertó diciéndole a Raditz que lo dejara solo porque no quería ver a nadie, así que básicamente lo echó del cuarto. Se desquitó con él y Goku, así que terminaron peleando entre los tres.

Después, a Kakarotto se le dio por andar todo el jodido día diciéndole que dejara de fumar. Volvieron a discutir, pero le importó un bledo su opinión y siguió haciéndolo. Incluso en ese preciso momento, aunque Goku estuviera ebrio, raramente.

En algún momento del día se le unió a Nappa. Ahora estaban hablando sobre cosas bastante depresivas, lo cual hacía más extraña la situación.

— Es que somos terribles, Goku.

— Dejamos hijos en la calle porque no teníamos idea de que existían. Es lo más horrible que he hecho.

— Esa niña debe odiarme. Fasha igual.

— Al menos solo era una. Yo dejé dos niños y a una chica siendo maltratada. Todo porque no tenía ni puta idea de lo que estaba pasando.

— No entiendo. ¿Qué pensábamos cuando nos corrimos dentro de ellas? — dijo Nappa. Vegeta hizo una mueca de asco, aunque ya se esperaba ese tipo de comentarios considerando el estado de ambos.

— No tengo idea. Yo quiero a Gohan y Goten, en serio, pero aún así no comprendo. ¿Por qué lo hice?

— Ya está hecho. No me arrepiento, porque adoro a Natsuki. Eso es lo que importa.

— Eras mayor de edad. Yo no. — contradijo Goku.

— Eso es otro tema.

— Y para empeorarlo, sigo sin serlo.

— Dentro de poco lo serás. — le respondió Nappa.

— Raditz, Vegeta, ¿ustedes no han dejado a nadie esperando un hijo suyo, no? — preguntó.

— No. — respondió su hermano.

— No. No recuerdo haberlo hecho. — habló Vegeta.

— "¿Recuerdas?" ¿Te refieres a que usaste condón?

— Con Bulma no, pero el hijo es de Yamcha. Me da igual, porque es la única persona con la que no lo usé.

— ¿Fue dentro?

— Sí.

— ¿Por?

— No lo saqué.

— ¿La explicación?

— Ya, Kakarotto. No hay, así como tú tampoco tienes una.

— Qué imbéciles. ¿Por qué hacen eso? — intervino Raditz de repente.

— Ah, perdona. Nosotros no fuimos gays desde un principio. — contradijo Vegeta, con sarcasmo.

— Vegeta, basta. — dijo Nappa, tratando de defender al susodicho.

— Calla, que él hable.

Raditz se puso de pie y se le acercó.

— ¿Quieres que te diga a cuántas prostitutas me tiré? Porque si es así, no terminaríamos hasta el otro mes.

— No me importa. — le respondió Vegeta.

— Como sea, esa es la razón por la cual siempre usé preservativo.

— No me gusta hacerlo con prostitutas. Están acostumbradas y lo arruinan todo, pero sé que obviamente no es el lugar para buscar una conexión con alguien, así que lo entiendo. Además, a estas alturas no podemos conseguir otra cosa.

— Exactamente. — intervino Nappa.

— No sé, no he visto la diferencia. Tuve novias en la escuela, pero nunca nos acostamos. — Raditz tomó un sorbo de la botella de vodka que su hermano tenía.

— ¿Y tú, Kakarotto? ¿Has visto la diferencia?

— Yo solo lo hice con Milk, así que no.

— ¿Y ella?

— También. Cuando vino dio a entender que no lo hizo con Broly ni nadie más.

— Y... ¿No quieres ir a descubrir aquella diferencia?

Raditz y Nappa miraron a Vegeta con cierto horror. Cruzó la línea.

— Estás demente. — habló el de cabello largo.

— No te enojes conmigo por querer defender a tu hermano. — explicó Vegeta.

— No es eso. Es que es una locura. — intervino el mayor de todos.

— Por favor, Nappa. — le dijo con incredulidad —. ¿Y bien, Kakarotto?

— No me gustaría hacer eso sabiendo que tengo dos hijos.

Estaba siendo una mala influencia y lo sabía perfectamente. Por alguna razón le dio igual y siguió con sus habladurías para persuadirlo.

Goku aún conservaba un poco de inocencia a pesar de todo lo que tuvo que pasar. No es que Vegeta estuviera intentando arruinar esa cualidad al querer llevarlo a un prostíbulo para probar hacerlo con las mujeres de ahí, pero lo quiera o no eso influiría en él de alguna forma.

— En algún momento tendrías que saberlo. No te obligaré, así que es decisión tuya.

— ¿Recomendación?

— Que lo hagas para averiguar cómo es. Debes de estar harto de usar tu mano. Yo sí, y es un buen momento para ir. Han pasado meses desde que no nos cogemos a nadie. Mucho más para ti.

— No lo sé.

Miró a sus dos compañeros y ellos suspiraron.

— Es tú decisión. Soy tu hermano, pero es cosa tuya. — finalizó Raditz. La verdad es que prefería que no fuera, pero sabía que no podría detenerlo si decidía lo contrario, entonces simplemente lo dejó pasar.

— ¿Aceptas? — siguió Vegeta. Sacó varios preservativos de su bolsillo y se los mostró.

— ¿Ustedes nos dan permiso de llevarnos un poco de dinero? — preguntó Goku.

— Ehh... Sí, supongo. — respondió Nappa, aunque aún seguía en duda.

— ¿Ves?

El susodicho se quedó pensativo un momento.

— Al diablo, vamos.

— Genial. Apenas son las once, así que debe de estar abierto. — regresó los preservativos a su bolsillo, tomó las llaves y el dinero, luego se dirigieron a la puerta. — ¿Ustedes no vienen?

— No. — negó el de cabello largo.

— No lo necesitamos. — completó Nappa.

— Eso.

— En fin, regresaremos a la medianoche. Nos vemos. — dijo Vegeta.

Salieron del apartamento. Raditz suspiró.

— No puedo creerlo.

— Ahí va a perder la virginidad otra vez... Qué diablos.

— A lo mejor dudaba tanto porque quería que Milk siguiera siendo la única. Sabes que aún le sigue doliendo el asunto de Broly y eso. — explicó Raditz.

— Ya se largaron, así que ya es muy tarde. De hecho, es suficientemente tarde como para que tú y yo hagamos lo mismo que ellos van a hacerle a esas prostitutas.

— Estás ebrio.

— Pues mejor.

No sabían si todo eso contaba como una decaída. Se supone que las cosas les estaban saliendo bien, pero al parecer ya se había acabado la suerte y la rutina volvió. No se darían cuenta hasta más tarde.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro