Love is a Losing Game
Todos los personajes de esta historia pertenecen a Marvel
Capítulo 21
Love is a losing game.
Suaves pasos retumbaron por todo el vacío almacén al norte de Manhattan, poniendo en alerta a Amora, quien esperaba pacientemente sentada en un pequeño trono. No le costó mucho trabajo darse cuenta de la identidad de aquella persona, inmediatamente supo que Loki era su invitado y no pudo evitar soltar una carcajada.
— ¡Lo hiciste! Ya estaba empezando a dudar—comento Enchantress sonriendo—Parecías muy enamorado...
Loki frunció el ceño, quería atacarla, mostrarle que esos comentarios no se le podían hacer al príncipe de las mentiras pero solo se quedó callado porque aun dolía pensar en Tony. Toco con cuidado el anillo sintiéndose más débil.
—Necesito escapar, ese fue nuestro trato. Me llevas con la cabala, destruimos juntos a los vengadores y después nos largamos—Hablo sin titubear.
Amora asintió—. No te olvides de la parte en que me dejas a Thor.
Otra apuñalada para su corazón, el azabache tuvo que inclinarse un poco para aguantar el dolor.
¿Qué estaba haciendo? ¡Era insano! ¿Realmente necesitaba escapar? ¿Necesitaba renunciar a sus dos grandes amores? No, pero algo le decía que estaba tomando la mejor decisión. A veces irse podía ser lo más correcto, retirarse del campo minado antes de estallar en pedazos.
—Sí...solo acabemos con esto—suspiro mientras se le entregaba la memoria con manos temblorosas.
Amora hizo aparecer una computadora en donde inserto la USB, sus ojos se iluminaron al ver todos los planos pero conforme pasaba de hoja una mueca extraña se dibujaba en su rostro—No están completos, hacen falta algunas partes.
El silencio reino, ambos parecían sorprendidos, en especial Loki quien le arrebato la laptop para comprobarlo por sí mismo— ¿¡Que!? Estoy casi seguro de que lo guarde todo—grito histérico.
—Estos errores no son comunes en ti
Otro golpe bajo para el hechicero ¿Lo peor? Es que tenía razón, ni él mismo podía explicarse como había fallado. Enojado tomo la memoria y la volvió a desaparecer
—Dame veinticuatro horas, prepara a tu equipo, mañana al amanecer regresare listo para el ataque—con un chasquido varias sombras verdes lo envolvieron y lo transportaron hacia el interior de la torre Stark.
O-o-o-o
Tony supo que las cosas se pondrían difíciles cuando Pepper empezó a servirse un vaso de Whisky, no era muy común verla tomando si estaba en horas de trabajo, pues como toda profesionista sabia separar la diversión de las obligaciones. Aquella simple acción, ese olor a alcohol genero una tensión terrible.
Tomo asiento, esperando el regaño y pensando escusas convincentes—. Ya iba a firmar, solo dame quince minutos...
Pepper negó lentamente—. No eres tú, es Loki.
Ahora sí, las cosas cambiaban demasiado, ya no estaba preocupado, ahora se encontraba molesto ¿Acaso no podían dejar su nueva relación en paz? Estaba feliz ¿Les enojaba eso? Empezaba a sentir cosas buenas, se sentía identificado con alguien por primera vez en su vida, estaba listo para comenzar algo nuevo.
Evito soltar palabras hirientes contra su amiga y se limitó a firmar los papeles.
—Hubo una fuga de información, casualmente fue cuando llevaste a Loki a tu departamento...
Tony azoto la pluma contra el escritorio—. Te puedo asegurar que esa noche no se separó de mí.
Pepper hizo una mueca, no necesitaba tanta información—. ¿Entonces como explicas la fuga? ¿Acaso tu sistema de seguridad está fallando? —pregunto dañando automáticamente el ego de Tony.
El castaño tomo aire en claro síntoma de indignación. Había dedicado tres meses en crear un sistema de seguridad eficiente, perfecto y asombroso, nada en este mundo podía penetrar la interfaz de la compañía ni sus archivos importantes, estaba seguro que su programa no fallo pero eso sería admitir la traición de Loki.
—Tony, debes comprenderlo...él es un villano, solo ha estado tres meses aquí, nadie cambia en tan poco tiempo—Pepper se acerca para abrazarlo pero él se aleja.
—No puede ser...—negó corriendo hacia la puerta—. Iré con él, pasare una noche estupenda con su compañía y fin del asunto—grito cerrando con fuerza, dejando a Pepper más preocupada que al principio, tal vez ya era hora de hablar con el Capitán.
Decidida fue en busca de Steve, no tardo en encontrarlo. Estaba junto a Thor y Banner, los tres hombres lucían serios discutiendo en voz baja, cosa rara en el asgardiano pero común en el científico. No quería interrumpirlos, más consideraba que esta era una situación de emergencia, después de todo las últimos líos amorosos habían terminado con la torre destruida.
—Hola, disculpen si los incomodo...yo quería hablar sobre Tony...
El trio soltó un suspiro, como si ya supieran lo que se venía.
—Dime Pepper ¿Ahora qué cosa va a hacer con Loki? —Steve pregunto lleno de amargura— ¿Irán a cenar? ¿Posaran para una revista? ¿Acaso ya están planeando la boda?
A Thor no le hizo gracia lo último.
—No, dios...Mira hubo una fuga misteriosa de información justo el día en que Tony llevo a su departamento a Loki a...
— ¡Demasiada información! Mujer, concéntrate, solo di lo esencial—Thor se recargo en la mesa, claramente agobiado por las cosas que su hermano y el midgardiano hicieron esa noche.
—Sospecho que Loki robó la información sobre los planos de los nuevos escudos...—suelta Pepper observando al nórdico—. Mira no estoy diciendo que Loki sea un ladrón...pero nuestro sistema de seguridad es el mejor del mundo...pudo usar a Tony solo para conseguir esos planos...
Thor no trato de excusar a su hermano, lo conocía demasiado bien como para defenderlo en esta ocasión, ya comenzaba a sospechar de su buena actitud y por otra parte esto demostraba que el supuesto amor por Stark era falso, solo había sido un medio para llegar hasta su objetivo. Eso le regreso un poco de calma, prefería pelear con Loki que perder su atención para siempre.
En cambio el capitán suspiro preocupado, Tony estaba en peligro. El corazón le dolió al pensar como reaccionaria él castaño cuando Loki revelara su plan y solo pudo odiarse más por no haber enfrentado sus sentimientos por Stark desde antes, sino todo esto se hubiera evitado...lo único que deseaba era abrazarlo, llenarlo de besos hasta desaparecer aquellos malos ratos—. Pepper ¿En dónde está?
—En su habitación.
Ambos rubios no pensaron más, solo se dirigieron a la habitación, dispuestos a terminar todo.
O-o-o-o
Loki regreso justo cuando Tony abrió la puerta, apenas le había dado tiempo de acomodarse en la cama simulando estar dormido. Sintió como el millonario se acurrucaba junto a él, buscando su calor pero sin la mínima intención de despertarlo, aun así el decidió abrir sus ojos encontrándose con la mirada más triste del mundo.
"Ya lo descubrió" pensó el azabache asustado, sin embargo decidió mantener la calma, fingir demencia, después de todo era lo que mejor hacía.
— ¿Termino los deberes, señor Stark? —le sonrío coqueto mientras pasaba sus delgados dedos por el castaño cabello.
Tony soltó una risita—. Soy un jefe responsable pero tuve un día cansado y quiero continuar con nuestra cita para darle a tus fans y a las revistas de chismes buenas fotos de ambos cenando—su voz sonó decaída por más que intento sonar positivo.
—Entonces vayamos—se levantó lentamente no sin darle antes un dulce beso a Tony. Aquel contacto fue frio, sabia a limón agrio combinado con una trágica despedida, ninguno de los dos planeo que fuera así y por más que trataron de endulzarlo con suaves caricias no pudieron cambiar su sabor.
Se separaron lentamente, había sido suficiente, ambos ya conocían la verdad.
Tony no pudo evitar soltar algunas lágrimas traicioneras— ¿Por lo menos te divertiste? —pregunto desviando la mirada, esos ojos verdes lo enterraban cada vez más profundo.
El azabache apretó sus puños hasta dejarlos rojos—. Te amo Anthony y es por eso que me voy. No puedo quedarme cuando profeso sentimientos tan profundos por ti.
— ¿¡Entonces porque demonios no te has alejado de Thor!? —Estallo furioso, levantándose para arrinconarlo contra la pared— ¡¿Qué te hace regresar?!
Loki abrió sus ojos, sorprendido ante la reacción pero un fuego furioso se instaló dentro de él—. ¡Siempre escapo de Thor! ¿Acaso no entiendes que toda mi vida siempre ha sido una constante lucha contra el gran señor de los truenos? —grito casi desgarrándose la garganta, en este momento había perdido su elegancia, lucia cansado, lucia devastado—. Es...dualidad ¿Qué sería de Thor sin Loki? ¿Y qué sería de mí sin él? —murmuró dándose por vencido, aceptando la verdad.
Tony lo soltó, no sabía definir si perdió o ganó— ¿Te iras? ¿Cómo sobrevivirás?
—La conexión acabo ayer, no necesito más de él...
— ¿Te llevaste la información?
—Sí.
Stark cubrió su cara—. Yo te hubiera dado todo, Loki—mordió sus labios reteniendo las lágrimas—. Solo necesitabas pedírmelo.
Las esmeraldas también comenzaron a llorar silenciosamente, no tenía sentido y aun así lo hacía.
—Señor, Thor y Steve vienen en camino ¿Desea que los deje pasar? —Hablo J.A.R.V.I.S
Ambos nuevamente se miraron, sellaron su despedida con ojos inundados de desesperación.
—Vete, yo detendré a los demás...
Loki no dudó en desaparecer.
O-o-o-o.
Los días pasaron y el caos no disminuyo...podría decirse que aumento. Tony en cuanto Loki se fue, salió corriendo hacia su taller sin importarle los gritos de Steve, terminó por encerrarse durante toda la semana, solo podía entrar Natasha a dejarle comida. Sin embargo, los berrinches del millonario no eran la mayor preocupación, Clint había confirmado que Loki tuvo un elaborado plan desde el principio para obtener los planos, dejando preocupados a todos, expectantes al momento en el que fueran atacados.
La torre Stark nunca se sintió tan vacía.
El capitán América quería, a pesar de todo, mantenerse tranquilo, de vez en cuando acudía al taller suplicando lo dejara entrar o a dejar en la puerta las donas favoritas de Stark.
—Tony, se lo furioso que estas...—Steve suspiro, su aspecto tampoco era el mejor pues no había dormido desde hace un par de días—. Nos tienes a nosotros, me tienes a mí, no soy él pero te juro que tomare las riendas, no huiré nunca más, permaneceré contigo hasta que me arranquen la vida—confesó sonrojado pero sin desviar la mirada de aquella cámara en la esquina, donde suponía Tony observa a las personas.
Espero algunos minutos, treinta, cuarenta y cuando fue una hora decidió marcharse.
Hoy tampoco abriría.
Con los ánimos apagados se dirigió a la sala en donde todos esperaban pacientes señales de vida de Tony o de Loki. Thor, como casi durante una semana, bebía hidromiel sentado en el balcón, no había querido hablar, solo entraba cuando Clint encontraba alguna nueva pista sobre la ubicación de su hermano.
Era muy fácil pedirle ayuda a Heimdall, claro, eso les traería problemas con Odín, pero llegando a este punto, Thor se preguntaba si su padre ya se había enterado de todo y simplemente estaba jugando a torturarlos por todas sus malas acciones. Sabía muy bien que en Asgard las relaciones entre familia se veían como algo común, incluso la poligamia estaba permitida, pero cuando el amor de tu vida era tu hermano adoptado, enemigo número uno y el ser más odiado, las cosas cambiaban radicalmente...la mitad del reino le diría que perdió la cabeza, sin embargo, eso no importaría.
Lamentaba haber acabado así, Loki era un ser brillante con heridas profundas, poco entendido, merecía mucho, si él moría las cosas dejaban de tener sentido.
Masoquista, si, ese adjetivo encajaba con su personalidad. Amaba la malicia de Loki, no intentaría cambiarlo porque así le parecía perfecto, incluso siendo travieso aun contenía dentro inocencia, seguía siendo ese chiquillo amante de los libros.
"Es...dualidad" pensó Thor "Yo soy un sol, él es la luna" "Comprendo, sin un fin no valdría el nacimiento y sin terror no habría bienestar" "Pero más importante, es que entiendo y acepto la verdad de que sin un Loki no puede haber un Thor"
— ¿Estas bien? —pregunto Steve, parando el tren de pensamientos del rubio.
—A pesar de todo, espero se encuentre bien...
— ¿Sabes? Por un momento llegue a creer que Loki se arrodillaría ante Tony—soltó de repente—. Parecía enamorado.
Thor soltó una risa amarga—. Loki suele fingir muchas cosas, amigo mío. Finge estar enojado, finge amar, finge no hacerlo, finge sentirse bien. No por nada lo llaman el dios de las mentiras.
—Ahora que lo pones así, creo que todos tenemos un poco de Loki. Nos engañamos constantemente, solo para no afrontar nuestros sentimientos.
El dios nórdico asintió—Tienes razón.
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¡Chicas, dejen sus comentarios! Nos interesa mucho saber sus reacciones a este capitulo que tanto trabajo nos costo.
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