Cita
¡Hola, hola! Es un honor volver a este lugar y escribir para ustedes, y pues, aprovechando el momento y que se están tomando la molestia de leer esta notita les confieso, desde el fondo de mi corazón que, sinceramente es muy bonito regresar (wO) Hoy les traigo, junto a mi buen amigo, ¡chan, chan, chan!, ¡Ezeroblack32¡ Este nuevo y meloso cuento XD Espero que lo disfruten y... que no caigan en un coma o mueran por sobredosis de tiernolindad* (palabra inventada por la presente chiflada y además, perdonen lo sádico de la notita al final) Ya sin más que agregar, ¡Adelante! Espero que vuestra estancia entre estas palabras sea satisfactoria y también, disculpen si es tediosamente larga.
Comencemos.
Cita.
Hay algo en el mundo que de verdad da miedo, y no, no se asemeja a cuando rompes por accidente el jarrón favorito de tu mama o le arruinas el peinado que llevo tres horas a tu novia la toxica, no, esto, en el mejor de los casos no es como en las otras situaciones anteriormente descritas aquí no importa si eres hombre o mujer o un alienígena del espacio exterior, o si eres el peor de los villanos, incluso ello no escapa de las preferencias que tengas, da el mismo miedo, los mismos nervios, ya que...todo depende de una respuesta, todo se puede venir abajo o incluso puede construir un enorme castillo de pura ilusión en pocos segundos dependiendo de la respuesta que varía entre el sí, y el no... y créanme, es una horrible sensación, pero bonita a la vez.
Y bueno, hoy estoy aquí, a punto de invitar a la nube más esponjosa y adorable a una cita, si señores, yo Lincoln Loud hare algo histórico en mi vida, invitare a Natusha a salir en una cita romántica, una verdaderamente romántica el día de hoy... para el día de mañana por supuesto, soy valiente pero no un paracaidista.
Y para aclarar esto no es como una salida "casual" ni mucho menos tampoco es una invitación a jugar videojuegos, quiero hacer de este momento para ella algo completamente especial, algo...memorablemente lindo. Digno de un premio al novio del año, bueno, no para que todos lo sepan, sino solo para ella, porque ella es lo mejor del mundo, y bueno, ella es mi mundo...
El día que me preparaba para, y solo para, poderla invitar me trate de peinar lo mejor y más galante posible, aunque solo dio como resultado una especie de lengüetada de vaca hecha por... bueno, una vaca. Y al no tener más tiempo que escasos minutos para arreglarme, mi "inusual" tardanza causo un lio de lo más grande en mi casa , ante esto, no prestaba mucha atención, tenía mejores cosas por las cuales preocuparme además de diez hermanas enojadas haciendo fila para el baño...si, ya lo pensé mejor, es mejor que me apure.
Desistí de peinados y cosas estrafalarias y me vestí normal, recordándome de que lo mejor, si ella aceptaba, seria para mañana. Al salir del baño, como era de esperarse, más de una mirada enfurecida y colérica me vino a dar los buenos días, solo les sonreí y mientras pasaba dejando la estela de vapor caliente les avise, mas por maldad que por pura cortesía me acabe el agua caliente ¿y saben algo? Adivinen a quien le toco correr como loco los últimos dos metros hasta su pequeño cuarto, bueno, se los dejo como acertijo...
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En el autobús, me encontré con ella... con mi chica, jeje...nunca había pensado lo lindo que es decirle "mi chica" a una chica, se siente, de verdad, increíble. Bueno, ya, ando desvariando desde hace mucho. No me di cuenta que Naty estaba saludándome hasta que Clyde, me dio con el codo en un costado, según él me puse en modo estrella solo al verla, y este comentario, viniendo de parte de él, sé que es más que seguro que solo minimiza el hecho de que parezco estar en otra galaxia muy, muy lejana en la que me encuentro. Le despedí y me dirigí rápidamente hacia el puesto que ella me guardaba con media sonrisa en su cachetona carita, ¿puedo agregar que es la persona más bonita en el mundo solo por hacer ese pequeño movimiento muscular? ¿Ya lo dije? Oh, bueno, se queda para la posteridad entonces.
Hola, veo que hoy estas en una galaxia diferente el día de hoy— me dice Naty mediante lenguaje de señas, sinceramente me dio un poco de gracia y vergüenza lo que dijo, fácilmente lo notó viendo mi obvio sonrojo y haciendo un pequeño gesto divertido me dijo: ¿Puedo saber dónde se ubica?
Claro—respondí con una sonrisa y aun con mi sonrojo— solo... —ay Dios, espero que no se ría por lo que diré a continuación—mira un segundo, cuando tengas tiempo, a cualquier espejo, y entonces sabrás que la nebulosa blanca que rodea aquella galaxia es tan bella que deja como simple chatarra a las piedras preciosas más exquisitas que se podrían encontrar en esta tierra, a su vez, hay dos elipses que son tan azules que el mismo mar siente celos y los cielos al saber que nunca serán así, lo único que les queda es admirar tan precioso color... Y que además, no solo por ello es increíble, sino que es tan única y asombrosa que en su interior pareciera, por más loco que suene algodón de azúcar. Y no conforme con ello, tiene un secreto guardado en su interior, y la única forma de averiguarlo es haciendo algo aún más loco: Hay que hacerla reír para que muestre la máxima belleza; una curva levemente rosada, adornada por miles de estrellitas, que provoca la mejor de las sensaciones, felicidad y, por sobre todas las cosas, amor.
Al terminar de comunicarlo, espere por algunos segundos aquella sonrisa, más lo único que encontré fue a mi nubecita con dos pequeñas lagrimas a punto de resbalar por sus lindos ojos. ¡Ay Dios, lo arruine!
¡N-no llores por favor!—dije un poco nervioso al mismo tiempo que iba acercando mis manos—disculpa, no pensé...
Natusha no me dejo terminar, su método tan efectivo como un disparo fue un beso tan tierno y apasionado que en ese instante, pensé que podría morir de pura felicidad. Aquel tierno arrebato ocasiono que varios comenzaran con silbidos y uno que otro "iagh" pero, la verdad, los mande a comer chimichangas. Cuando Naty termino el beso, digo que ella lo termino porque yo no quería, volvió a su lugar y con una cara más roja que, asumo, la mía aunque lo dudo, me dijo
¿De verdad sientes eso por mí?, ¿todo eso?
Su rostro era la combinación más tierna entre nerviosa y... no sé, no sé cómo descifrar esa carita, pero sé que me gusta, y mucho. Le sonreí y me acerque nuevamente para darle un beso, pero esta vez, en su mejilla, ya que...si era en sus labios me volvería loco o caería desmayado como Clyde con mi hermana mayor.
Claro que sí, ¿apoco te parece que mentía, linda nube?— al recibir de parte de ella una linda sonrisa y otro tierno abrazo tome un poco de valor para pedirle que saliera en una cita con este atontado servidor. Sin embargo, tal valor se desvaneció en menos de un segundo cuando me percate que estábamos a poco de llegar a nuestra cárcel educativa...
Al salir del autobús he ingresar al edificio ambos tomamos caminos separados debido a nuestro horario. Ella tenía clase de dibujo, yo... entraba en una especie de capacitación psicológica autoimpuesta para darme ánimos y así morir y caer directamente a uno de los infiernos descritos por el mismísimo Dante debido a mi condición física la cual no era muy buena, además de esto, también le podríamos sumar el hecho de que hoy tenía ganas de hacer muchas cosas, excepto, educación física. Creo que Clyde también estaba en las mismas que yo... o peor, ya que, después de veinte minutos entre correr y trotar seguido de un pequeño circuito que según nuestro profesor era la cosa más fácil (una cruel mentira, por supuesto) tocaba la ultima hora un bello (para los más fuertes) pero terrible ( para las personas como yo...ya me entenderán) deporte, si es que a esta contienda en donde no se muestra piedad por más que se ruegue, solo por la sutil y errada creencia de que así se forja un carácter digno de ganadores, se le puede denominar deporte. Bueno, basta de rodeos, lo que haremos a continuación serán: QUEMADOS. Si no sobrevivo díganle a mi nube que siempre la recordare.
Para el final de la clase estaba con una mejilla colorada he inflamada. Pasaron otras clases y no pude casi hablar con Natusha, ni siquiera a la hora del almuerzo logramos hablar, solo un encuentro de miradas a la distancia debido a que ambos andábamos ocupados, creo que hoy no se va a poder... rayos.
Para el final del día todos andábamos un poco cansados aunque aún con energía, al ver a mi Naty la abrace los más fuerte posible, claro, sin hacerle daño, por supuesto, al subir me pregunto qué tal mi día, se lo conté, acabado el cuento, le pregunte por el suyo, me conto con lujo de detalles como una compañera se había tirado, por accidente, medio bote de pintura amarilla sobre sí misma y que tardo más en sacarlo de su pelo que de su ropa. Además, hoy tuvo un examen de matemáticas sorpresa, según ella, salió todo mal aunque irónicamente de la misma forma en que aseguró su fracaso descomunal en esta prueba con la misma simpleza me dijo que fue una de las primeras diez que lo entrego completo. Ni yo, que trato de esforzarme como nunca siempre termino con una nota más que regular, incluso, rosando lo pésima...
Le dije que todo saldría bien, que de seguro tendría una buena calificación, ella agradeció el gesto con un beso, pero no en la mejilla sino en los labios fue rápido, pero efectivo para dejarme en las lunas de Plutón. Ella estaba con un lindo rubor, sin embargo, la notaba tensa, algo nerviosa.
Oye... te quiero preguntar algo— me pregunto después de dejar de jugar con uno de sus bancos mechones
Oh bueno, sí, no hay problema, pero, respóndeme una sola cosita, ¿sí?—le dije con una sonrisa— ¿Por qué estás tan nerviosa?
Es por lo que os voy a preguntar— mientras decía esto el rubor perdido volvía a sus mejillas y evito por momentos mi mirada en una mueca súper linda— es que yo...yo... quiero invitarte a una cita para mañana, aprovechando que no tenemos horario de clases por la tarde...me gustaría que fuéramos a un lugar que conozco que...creo que te gustaría
Definitivamente quede en shock, mi asombro fue evidente. Tarde unos segundos en responder con una sonrisa de oreja a oreja
Por supuesto que quiero salir en una cita contigo mi nube—dije— aunque...jeje...yo quería invitarte también a una cita para mañana
Ahora es ella quien está igual de feliz o más que yo.
Entonces... vamos a nuestras dos citas, primero al lugar que escogiste y luego al lugar que yo escogí, ¿te parece?—me comunico Natusha con una linda sonrisa
Me encantaría—le respondí, para después hacer con mis manos la señal de: "Te quiero"
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Al día siguiente no fuimos a clases, nadie fue... Era 4 julio. Pero eso no importa, lo que importa es... ¿Dónde está Natusha? Llevo media hora esperándola en nuestro lugar acordado, la parada de autobús... no la veo, será que...¿se arrepentiría? Porque eso puede suceder, ¿cierto?
Pasaron diez minutos más y allí fue cuando la vi, estaba con un hermoso vestido amarillo con puntitos blancos, una cinta algo gruesa de color blanco que se ajustaba a su cintura y unas zapatillas del mismo color que el vestido. Estaba hermosa, y corriendo en mi dirección.
No le di tiempo de llegar, corrí a abrazarla, diciéndole que gracias al cielo no se había arrepentido, ella, después de tomar aire me pido más de una docena de disculpas, pero yo las ignore todas, más me alegraba que hubiera aceptado. Ella me pregunto cómo se veía, sonreí por tan tierna pregunta, le respondí que muy bonita pero que le hacía falta algo, ella asustada me pregunto qué era lo que faltaba y desde que nos fuimos caminando al lugar donde la quería llevar me comunico una seria lista que abarcaba desde el pelo, peinado y demás hasta el color del vestido. Le hice impacientar cuando no le respondía, pero, me parecía divertido. Después de varios minutos de muchísimas variables de las cuales ni yo me había percatado le dije, que lo único que le hacía falta era un buen acompañante en esta linda ocasión. Sorprendida me pregunto a donde iríamos, más aun con sus ojitos de cachorrito no le respondí.
Caminábamos tranquilamente, sin hablar, Naty de vez en cuando me preguntaba a donde iríamos pero a pesar de todos sus intentos no le dije ni di ninguna pista. Cortamos por el patio de una casa abandonada, lo sé, tétrico, pero allí no íbamos a tener nuestra cita. Por si las moscas también le dije a Naty que no íbamos, por ninguna circunstancia aparente, a tener nuestra cita aquí, eso sería extraño...no soy loco.
Nos adentramos a un pequeño bosque, me preocupe demasiado por mi nube al caer rápidamente en cuenta de su vestimenta, pero, de su pequeño bolsito, saco un potecito de color blanco se la hecho en sus piernas, manos y cuello. Me dijo, que esta servía para correr a los mosquitos, mujer prepara vale por dos dije para mis adentros con agrado, me ofreció un poquito y por supuesto acepte.
Caminamos por unos diez minutos, Naty estaba más que asombrada por la belleza de la naturaleza que nos rodeaba... gracias al cielo que pensaba eso ya que estaba rogando a Dios porque no hubiera chacos de lodo por ningún lugar, no quería que ella se ensuciara, está demasiado bonita y creo que le tomo mucho tiempo, aprecio que se hay tomado todo ese tiempo solo para esto. Es un ángel.
Llegamos a un claro el cual, en ese instante parecía una hermosa foto la cual, además de su belleza natural tabien estaba adornado por una manta de terciopelo rojo vino, algunos vasos de vidrio y en centro un ramo de rosas rojas con un cesta de picnic debajo en donde nos esperaba Clyde un poco nervioso, cuando nos vio la mirada de felicidad fue tanta que me dio pena haberlo dejado una hora y algo más (creo) esperando, cuidando que las cositas que traje no fueran robadas por algún pillo o animalito que pasara por allí, Natusha le vio y le saludo, Clyde hizo lo mismo pero se retiró un breve instante más tarde.
Naty al ver tan arreglada escena se sonrojo de tal manera que creo que parecía una fresita
Es hermoso, dios, que hermoso...
Esto fue lo que me dijo antes de abrazarme, yo le respondí que había más, con cuidado la invite a sentarse y le pedí que cerrara los ojos. Me fui hacia unos arbustos que se encontraban a unos metros y saque lo que estaba escondido. Naty aun esperaba, pero escuchaba atentamente. Cuando comencé a tocar las primeras melodías abrió los ojos, aquel tierno sonrojo volvió.
No pensé que sabias tocar la guitarra acústica— me comunico
No sé mucho, pero estuve practicando gracias a una de mis hermanas mayores, ella, comparada conmigo es como una deidad de música, yo solo soy un simle aprendiz
Igual, es una hermosa melodía
Gracias, por favor, siéntete libre de tomar lo que desees de la cesta de picnic
La mañana fue más que hermosa, ella estaba muy atenta a todo lo que le decía, le encantaba escucharme, pero a mí, me encantaba verla bailara y sonrojarse, puse en esa mañana todo mi conocimiento en aquel instrumento solo por verla reír y bailar al compás. Intente solo dejar que la melodía fuera la reina de la ocasión, pero, ella me pregunto, naturalmente, si sabía cantar. Solo sonreí, obvio no sé, pero... lo intente. Según yo, soné mas horrible que cucaracha de agua pero ella, ella me dice que todo lo contrario, que lo hice muy bien...
Hoy fue perfecto...
Cuando ya eran las doce con treinta minutos le pregunte si y nos íbamos, ella me dijo que quería estar allí, más tiempo. No les voy a mentir, me dio justo en el corazón saber que le encantaba todo aquello que le prepare, las flores, la música, los bocadillos... me alegra saber que le encanto.
Hoy, definitivamente, hoy, es el mejor día de mi vida...
La otra cita...también la tuvimos pero... ese será un cuento para después, nos vemos.
Fin
Nota:
¿Qué tal, os gusto? Eso espero de todo corazón, gracias por leer, nos vemos en otra ocasión
Nota del Ezeroblack:
Antes que nada, le agradesco a MariLover1234 por participar juntoa mi en esta pequeña historia, si quieren leer mas de ella, vayan a su perfil y denle apoyo xd y bueno, ahora me toca a mi pero no se preocupen, pronto ella volvera a traer mas capitulos para esta historia ;)
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(Continuara...)
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