ALEGRA

Me observa por unos segundos, no puedo creer que de verdad esté considerando irse a dormir con Félix.

Bueno, tal vez lo estoy presionando demasiado, todos tenemos tiempos diferentes y... Bah, a la mierda con todo, la erección en sus pantalones me dice que él tiene los mismos tiempos que yo.

Finalmente después de lo que parece una eternidad se quita los pantalones y se mete en la cama conmigo.

— ¿Puedo solo abrazarte? — pregunta volteando hacia mi lado y quedando frente a frente.

— ¿Quieres solo abrazarme? — toma un mechón de mi cabello y lo aparta de mí rostro.

— Hoy sí, solo quiero dormir sintiendo tu aroma y tú calorcito.

Es lindo, ningún chico me había dicho algo como eso y aunque también es una sucia artimaña para rechazarme creo que caeré de todas formas.

Pasa su dedo por el tatuaje que tengo bajo mi pecho delineándolo suavemente.

— ¿Qué significa? — pregunta mientras la caricia de sus dedos se me hace muy agradable.

— Serendipia, es un hallazgo muy afortunado cuando estabas buscando otra cosa.

Él se ríe y me atrae a su pecho envolviéndome con su brazo.

— ¿Como cuando estás buscando el control remoto y encuentras dinero bajo el sofá?

Suelto una pequeña risa mientras muerdo mi labio inferior.

— Sí, o como cuando solo buscas sexo casual con un chico lindo y te terminas enamorando.

Elevo mi cabeza y lo veo sonreír.
— ¿Es una indirecta?

— No, es una directa. Estoy hablando de ti, obviamente.

— Entonces también eres mi serendipia, buscaba darte una lección y caí en tus redes.

Me aparto suavemente para verlo a los ojos.

— ¿Buscabas darme una lección?

Él aclara su garganta y vuelve a abrazarme para no tener que verme mientras lo dice.

— Bueno, tal vez escuché algunas cosas sobre ti... Como que te divertías creando estrategias para tener sexo con chicos difíciles y luego los hacías a un lado, supuse que eso hacías conmigo y quise redoblar la apuesta... pero no funcionó.

Podría bien enojarme u ofenderme, pero lo que le dijeron era verdad.

— Sí hacía eso contigo, pero luego empecé a sentir cosas y ya lo olvidé.

Nos quedamos en silencio por unos segundos en los que todo lo que escucho es el ritmo tranquilo de su corazón, comienza a darme sueño...

— Descansa... — murmura y deja un beso en mi frente.

— ¿No me darás ni un besito? — cuestiono haciendo un puchero.

— En realidad tengo muchas ganas de besarte, pero...

No lo dejo seguir hablando y lo callo con un beso, de otra forma va a seguir poniendo excusas toda la noche.

Apoyo mis manos en su pecho desnudo y él me toma por la cintura juntando nuestros cuerpos.

Dios, cuanto lo extrañaba, cuanto extrañaba esta forma en la que me hace sentir...

Gira mi cuerpo para dejarlo sobre el suyo y el beso se torna muy intenso. Al parecer alguien estaba conteniendo las ganas porque yo solo planeaba besarlo.

Abro mis piernas haciendo que su erección se presione contra mí enviando una oleada de deseo a todo mi cuerpo. Pone sus manos en mis muslos y las lleva lentamente hacia mi trasero para presionarme más contra él provocando que suelte un gemido muy pequeño.

Sus besos bajan por mi cuello, libera uno de mis pechos del sujetador y lo ataca con su boca.

Mierda, me encanta eso...

La puerta de la entrada se abre, escuchamos el sonido y Lucas lleva su mano a mi boca para que no me escuchen pero no se detiene.

Obviamente es Félix, pero no viene sólo y está discutiendo con alguien.

Lucas no tiene la intención de detenerse si no de ser más silenciosos, pero eso es hasta notar que la persona con la que Félix discute es su hermanita.

Félix, mira que te quiero, pero puedes irte bien a la mierda.

— ¡Está bien si no me quieres, lo entiendo! — no está gritando pero sí está un tanto exaltado.

— ¿Y entonces por qué me traes aquí? Me quieres exponer con mi hermano por salir con un chico...

— Sabes que no es por eso... — no escucho qué más dice porque Lucas habla sobre su voz.

— ¿Puedes salir y averiguar qué sucede? — me pide bajándome de él.

— ¿Por qué no vas tú? — sus ojos bajan a su erección que parece que va a estallar y hace un gesto de obviedad — De acuerdo, recuérdame que mate a Félix.

— Lo haré yo — murmura con fastidio mientras me pongo de pie y busco la camiseta que me había dado.

Félix sonríe al verme.
— Estás aquí... — murmura.

— Sí, y estaba teniendo un muy buen momento hasta que llegaste gritando — jalo la camiseta para que cubra bien mi trasero y me acerco a donde están — ¿Qué pasa?

— Está saliendo con el hermano de Max.

— Ay no... — alcanzo a decir suavemente justo cuando Lucas sale de la habitación.

Valeria lleva un dedo a sus labios pidiéndome complicidad, pero no puedo hacerlo. No cuando conozco tan bien a Nate, no cuando sé cuánto daño puede hacerle.

— Te odio — le dice Lucas a su primo al salir de la habitación —. Ya me arrepiento de vivir contigo.

— Yo también te quiero — responde Félix con sarcasmo.

La tensión se siente en el ambiente, alguien tiene que hablar y no quiero ser yo, pero si Félix no lo hace tendré que hacerlo.

— ¿Qué pasa? — pregunta Lucas que aún trae alcohol en su cuerpo y se nota.

— Dile — murmura Félix y Valeria parece molesta.

— ¿Así pretendes conquistarme? — lo increpa rodando sus ojos.

— No, así pretendo cuidarte porque te quiero.

Awww, Félix sabe ser una cosita tierna cuando quiere.

Lucas mira a su hermana buscando una explicación, ella intenta evitarle la mirada pero finalmente suspira y lo enfrenta.

— Félix está celoso porque salí con otro chico.

Él siente la necesidad de defenderse de inmediato.
— No es eso. Bueno, sí estoy celoso pero no es por eso que quiero que lo sepas, ella está saliendo con el hermano de Max.

Él me ve a mí buscando referencias del chico.

— Hace unos meses salió de la cárcel, tiene problemas con las drogas, ha arruinado por completo a su familia, él y Max ni siquiera hablan…

Lucas frota su rostro con gesto cansado.
— Dime que es mentira, Valeria…

— ¡No es así como ella lo dice! Él ya consume esas cosas, ha cometido errores pero quiere cambiar.

— ¡Como puedes ser tan ilusa! ¿De verdad, Valeria? ¿Cuál es tu problema? — Lucas está molesto y el alcohol no ayuda, obviamente no es momento para hablar de esto.

Lo arrastro al pasillo jalando de su brazo y le hablo en voz baja para que los demás no escuchen.

— ¿Cómo le hablas así? ¿Que no ves que tiene problemas con las figuras masculinas porque su padre la abandonó? — Lucas intenta comprender lo que le digo pero al parecer está más borracho de lo que demuestra — Deja que yo me ocupe, duerme con Félix en tu habitación y yo dormiré con ella en la de Félix.

Hace un puchero muy tierno.
— Yo quería dormir contigo, con tu aroma y tú calorcito.

Me hace sonreír, creo que lo emborracharé más seguido.
— Mañana, lo prometo.

Unos minutos después estamos las dos en la cama de Félix mirando el techo, debería estar gimiendo en  el oído de Lucas pero esta es mi triste realidad.

— Sabes que soy la primera en apoyar que seas libre, pero no conoces a Nate...

Ella se escucha molesta, conmigo y con el mundo.
— Tal vez seas tú la que no lo hace.

— Yo estaba allí cuando lo metieron a la cárcel por apuñalar a un chico, y también estaba allí cuando le robó el dinero de la comida a su mamá para comprar drogas, y también estaba allí cuando usó y desechó a cada chica con la que salió.

Ella se queda en silencio por varios minutos.

— Tú saliste con Max.

— Max es un bebé de pecho al lado de Nate.

— Nate quiere cambiar, todos merecemos una oportunidad — no sé si me está convenciendo a mí o a ella misma.

Voy a mentir un poco aquí, sé que es manipulación, pero desde mi punto de vista manipular a alguien que quieres para protegerlo es absolutamente válido.

— ¿Por qué crees que terminé con Max? — nunca fuimos novios, pero es un dato que omitiré.

— Porque no lo querías lo suficiente.

— No, porque la gente como ellos no cambia. Son delincuentes, ese es su estilo de vida, no tienen escrúpulos, ese no es tu mundo Vale.

Mentira, Max no es un delincuente, sí ha hecho cosas no tan éticas, pero no dañaría a nadie en el camino solo por beneficio personal, esa es su mayor diferencia con Nate.

No lo diré, necesito que piense que yo la entiendo, que viví lo mismo que ella.

— Él me quiere de verdad, me dijo que podía dejar ese mundo por mí...

— Max me dijo lo mismo, y el jefe de su pandilla, mi papá, le dijo lo mismo a mi mamá. Pero nunca lo hizo, no pueden hacerlo porque es su realidad, ellos aman ese estilo de vida y dejarlo es dejarse ellos mismos.

— ¿El jefe de su pandilla es tu papá? — pregunta sorprendida.

— Es el papá que me crió.

Nunca le he dicho padrastro, me parece una palabra fea y él ha sido mi papá sin ninguna duda.

— Mira, podemos hacer esto. Llamaré a mi papá, le diré que necesito que Nate esté lejos de ti, él le dará la orden de no volver a hablarte y si obedece verás que tengo razón y le vales mierda.

Ella no responde hasta la mañana siguiente, luego de pensarlo me dice que sí quiere que lo haga y solo necesito una llamada de un minuto con mi papá para que haga lo que le pido.

Las palabras de Max resuenan en mi cabeza haciéndome sonreír.
"Eres nuestra reina, solo que aún no lo aceptas".

Mientras esperamos a ver si Nate responde sus mensajes aprovecho para hablar con ella con más calma.

— ¿Qué pasa con Félix?

Ella se encoge de hombros con indiferencia.
— Somos amigos.

— Está enamorado de ti — creo que a esta altura eso no es una novedad.

Rueda sus ojos mirando su teléfono.
— Eso dice.

Suelto una risita sentándome en la cama.
— No te lo crees ¿Verdad? No crees que un chico como Félix pueda quererte de verdad, sientes que no te lo mereces.

Sus ojos se llenan de lágrimas de pronto, he tocado una fibra sensible al parecer.
— He hecho cosas malas...

— No has hecho nada malo más que ser ingenua y confiar en personas equivocadas, y déjame decirte que estás cometiendo otra vez el mismo error.

No dice nada. Solo avienta el teléfono a la cama y se deja caer hacia atrás.

— Me bloqueó — bufa, parece molesta pero no herida, al parecer lo único que la hiere es aceptar que yo tenía razón.

— Vale, no te olvides de que aceptamos el amor que creemos merecer, y tú eres increíble, mereces a un chico increíble.

Las voces de Lucas y Félix llegan desde la cocina, me pongo de pie y abro suavemente la puerta para escuchar de qué hablan.

LUCAS

Es tan frustrante como triste el hecho de que de verdad terminé durmiendo con Félix. Caí muy pronto en las redes de Alegra otra vez, pero de verdad la extrañaba.

Es la segunda vez que mi hermanita y sus dramas me arruinan un momento con Alegra, la próxima vez que lo haga me vengaré cruelmente.

Estoy en la cocina por desayunar con Félix, las chicas aún duermen, tal vez podría hacerle el desayuno a Alegra y luego darle su postre, pero primero tengo que tener una conversación muy seria con mi primo.

— ¿La quieres? — pregunto sin rodeos.

— La amo — responde de igual forma.

— Sí sabes que ella está muy herida ¿Verdad? No será fácil, es caprichosa, inmadura y desconfiada.

Félix piensa por un minuto, moja galletas en su chocolatada y come hasta que por fin habla.

— Sé que su corazón está roto, y yo... estoy dispuesto a buscar cada pedacito y armarlo otra vez con toda mi paciencia.

Que tierno, lástima que lo conozco tanto...

— ¿Y si no lo consigues?

— Entonces puedo darle el mío.

Ocurrente, demasiado cursi, pero prefiero a Félix que al otro que ni siquiera sé cómo se llama.

Suspiro antes de decir la idiotez que estoy por decir.
— Está bien por mí, pero si le haces daño te mataré.

— Si le hago daño dejaré que me mates sin ni una protesta, porque entonces me lo mereceré.

— Ajá, ahora lárguense los dos que quiero quedarme a solas con Alegra. Inventa cualquier cosa, no sé, pero no regreses en un par de horas.

Rueda sus ojos y asiente, eran las reglas de la convivencia y él lo sabe.

— ¿Y qué haremos con lo de Nate?

Supongo que habla del idiota que sale con mi hermana.
— Ella dijo que se ocuparía.

— ¿Y ya? ¿No te interesa?

— Claro que me interesa, pero confío en ella. ¿Tú no?

— Alegra es muy inteligente, pero Valeria es muy convincente con sus ideas, no creo que sea tan fácil, además...

Deja de hablar porque ambas salen de la habitación, no me sorprendería pensar que estuvieron escuchando todo lo que hablamos.

Alegra se sienta sobre mis piernas para robarme el desayuno.
— Chismosa... — murmuro en su oído.

Mi hermana ha dejado su actitud caprichosa, de hecho besa a Félix en la mejilla y se sienta a su lado muy cerca. Supongo que tiene mucho que ver con que escuchó todo lo que él dijo recién, y con qué Alegra estuvo manipulando sus emociones.

— ¿Te preparo algo? — pregunta él con dulzura.

Supongo que de verdad le importa, nunca lo había visto así.

— Nos vamos... — me dice Alegra tomando una galleta y poniéndose de pie.

Mierda, y yo que quería quedarme solo con ella.

— ¿A dónde?

— Hay problemas... Max me llamó, dice que es urgente ¿Me acompañas?

Mis ganas de ver a ese idiota en este punto se reducen a cero, pero mis ganas de que ellos se vean a solas son incluso menores a eso.

— Okay... ¿Problemas con qué?

— ¿Recuerdas los dos tipos que me amenazaron en la pizzería? — le doy un asentimiento.

Claro que lo recuerdo, los golpeé a ambos, solo que ella no lo sabe.

— Sí.

— Bueno, supongo que con su jefe. Es que mi papá a veces pierde la cabeza, y entonces me llaman para que lo baje a tierra.

Busco las llaves de mi auto y le abro la puerta para que salga.

— Espera que iré a cambiarme — murmura y frente a mis sorprendidos ojos toca en la puerta de enfrente a la mía, una mujer que ni idea quién es le abre y ella la saluda con un beso en la mejilla.

— Mamá, él es Lucas, vive con Félix enfrente — señala la puerta de mi apartamento y estoy que no entiendo nada.

Necesito explicaciones.

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Hola gente bella ❤️

¡Es mi cumpleaños! Felicitenme ❤️

Sé que esperaban capítulo ayer, pero creanme que no es tan fácil como parece, lo siento por la espera creanme que hago mi mejor esfuerzo.

Mañana no habrá actualizacion porque estaré en la playa tomando unas mini vacaciones, así que tendrán que esperar hasta el lunes.

El capítulo de hoy está dedicado a itzlemaris porque si Lucas tenía su salmo, Alegra también lo merecía.

Síganme en Instagram, a mí y a nuestros bellos personajes.

@ineskyblue
@lucasdelsolar.tp
@alegrabennett.tp
@maxserrano.aaf
@felixdelsolar.aaf

(Sí, Max y Félix ya tienen perfiles, vayan a dejar su rastro de baba por allí)

Los quiero ♥️

Besos, mil besitos 💋