Jimin tenía tantas ganas de borrar esa sonrisa en el rostro del coronel.

¡Bah! Ahora era en esos momentos donde tenía que defenderse. De niño estuvo en clases de Taekwondo pero no fue un alumno de alto nivel, por así decirlo, pero recuerda algunas patadas así que sería bueno ponerlas en práctica de nuevo.

El menor se colocó en una posición de ataque sin quitar su mirada de la del mayor, expectante a cualquier movimiento de Jungkook.
Jeon se acercó un tanto y lanzó el primer golpe. Fue muy rápido para que Jimin lograra reaccionar y pues, su mandíbula dolía por el golpe. Estaba seguro de que un hilo de sangre salía por la comisura de su labio y corría por su quijada. Llevó la yema de sus dedos hacia su boca y en efecto, estaba sangrando. Jodido Jungkook.

--Imbécil.--...--Susurró limpiando la sangre con el dorso de su mano.--...--¿Por qué siempre me elijes para cualquier pendejada? pareciera que disfrutaras maltratarme ¿Cuál es tu maldito problema?--...--Jimin enfureció y se acercó para lanzar la primera patada justo al rostro del mayor y si no hubiera sido porque Jungkook se cubre con su mano el pie de Jimin fácilmente pudo haber llegado a impactar contra su mejilla.--

Jungkook quedó un poco sorprendido, no mentiría pero ¡Por Dios! eso no cambiaba nada y de todas formas, las patadas de Jimin eran débiles.
Park no perdió tiempo en seguir lanzando sus patadas pero Jungkook retrocedía aprendiendo la técnica de Jimin y eso bastó para en un descuido del menor, Jeon agarró el tobillo de Park en el aire. Jimin intentó zafarse pero en vez de eso Jeon jalo su pierna hacia arriba y Jimin cayó en la arena de la playa.

*Jodida mierda*

Jungkook soltó una carcajada sin ser muy escandaloso, pues no debía verse tan alegre mientras sus soldados estaban dándose de golpes a tan solo metros de él. Jimin sonrió igual que él, ver al coronel reír así era difícil y un gusto. Pero Jimin cobraría venganza por su caída así que lanzó una patada hacia el estómago del mayor.

Jeon dejó de reír.

--Jimin idiota.--...--Se acercó y Jimin se echaba para atrás sin levantarse aún.--...--Sí, disfruto verte desesperado.--...--Removió su cabello sudado.--...--Y no tengo ningún problema en lo absoluto.--

--No sabía que usted tenía un estilo sádico, coronel Jeon.--...--Se mordió el labio inferior sin dejar de arrastrarse para retroceder.--

Jungkook se agachó y agarró el pie del menor a lo que este soltó un quejido de dolor gracias a la presión. El mayor jaló el cuerpo de Jimin hacia el suyo quedando así; Jimin acostado y él arriba.

--No soy algún tipo de sádico, Jimin.--…--Susurró su nombre de manera tan sensual, mandando miles de calores a su cuerpo y especialmente a su entrepierna.--...--Pero me gusta serlo contigo. Así de simple.--

¿Jimin podría tener algún tipo de problema por ello? No lo cree.

Jungkook vio como la sangre seguía saliendo de la boca del menor y no pudo negar las ganas que tenía de besarlo y quitar todo rastro de aquel líquido carmesí. Los soldados estaban cerca, no seria bueno que lo miraran besando a otro soldado así que lo que pudo hacer fue pasar su pulgar quitando la sangre sin apartar los ojos del rostro ruborizado del menor.

Park suspiró y esa caricia fue tan suave que, inconscientemente cerró sus ojos ansiando que no terminara.

--Idiota.--...--Susurró y la punta de sus dedos fueron a rozar los abultados labios del pelinegro. Jimin abrió sus ojos, su cara se sentía arder porque a pesar de follar con Jungkook un par de veces no se acostumbraba a que este estuviera tan cerca.--

--¿Es eso acaso algún tipo de halago?--...--Dijo apenas audible. No pretendía que se oyera. Con que Jungkook entendiera era más que suficiente.--

--Bingo.--

El mundo pareció detenerse en ese momento y sus miradas conectadas se transmitían aquel sentimiento que empezaba a crecer en ambos de formas distintas pero con la misma intensidad, sentimiento al cual ninguno de los dos estaba seguro de querer descubrir.

Jimin abrió un poco su boca y Jungkook seguía acariciando los apetitosos labios de Jimin con sus dedos. Park sacó solo la punta de su lengua para apenas tocar los dedos de Jeon y tan simple acto fue suficiente para que una corriente eléctrica recorriera el cuerpo del mayor. Sintió una punzada en su polla y podría follarse al hombre ahí mismo en la arena de la playa, él podría hacerlo sin pensarlo mucho para despojar a este soldado de su uniforme hasta tener su cuerpo a su disposición, recorrerlo y enterarse en el ¡pero Joder! mucha gente.
Su mano fue hasta la mejilla tibia de Jimin y este volvió a cerrar los ojos. ¿cómo Jungkook podía ser tan malévolo pero a la vez tan cálido? algo no muy diferente a un refugio. Jimin sintió un par de cachetadas un tanto fuertes pero no para lastimarlo del todo.

--Despierta, enano.--...--Sonrió vilmente y se puso de pie.--

Jimin lo imitó y sus mejillas parecían que colapsarían de un momento a otro. Seguramente debió verse como un tonto disfrutando de la caricia del coronel cuando en realidad, tenían que estar golpeándose hasta sacarse los dientes y algo más... no haciendo cosas incitantes al sexo.

--¡DETENGANSE!--...--Todos los soldados se detuvieron; unos cuantos estaban rodando en la arena propinándose puñetazos, otros aún en posición de pelea a excepción de Yoongi y BamBam que estaba corriendo por la orilla de la playa gritando como niña mientras el piel pálida lo perseguía con un cuchillo a mano alzada amenazando con clavárselo en la espalda.--

Pero todos al escuchar el grito del coronel se detuvieron en seco.

--Por hoy doy por terminado el entrenamiento.--...--El sol ya se estaba ocultando y la noche ya estaba por arroparlos con la oscuridad.--...--Mañana continuamos. Retírense.--

--¡COMO ORDENE CORONEL!--...--Gritaron todos al unísono y acto seguido sonaron sus zapatos para adentrarse a la base.--

Jungkook le regaló una mirada recurrente al menor y cuando estuvo seguro de que todos yacían dentro se acercó a este.

--Deberías curarte eso.--...--Acercó su mano a la mejilla donde Jimin tenía el golpe. Estaba súper rojizo ahí.--

--Es muy extraño que me lo diga usted que fue el causante de ello. Me atrevo a decir que es algo estúpido.--...--Alejó su rostro. Dios, ¿que estaba haciendo? se comportaba como un abandonado y temeroso cordero mientras apenas una semana atrás hubiera dado lo que fuera para que el coronel Jeon estuviera muerto.--

¿Qué hacia hablando estas cosas? Él nunca le bajaba la mirada a Jeon pero ahora lo estaba haciendo.
Jungkook ladeo su cabeza y bajó su mano.

--Solo quiero que esa herida no se ponga peor.--...--Confesó.--...--Deja de ser tan quejoso y orgulloso. Mejor vamos, te pondré una crema que tengo en la habitación.--...--Hizo un ademán con la mano para que Jimin lo siguiera pero este ni se movió siquiera.--...--¿Qué pasa?--

--¿Puedo retirarme?---...—Park no sabía porqué, pero sentía unas enormes ganas de llorar.—

Por fin estaba recibiendo el trato que pedía pero justo ahora, luego de conocer el nivel de caricias que las manos de Jeon podrían proporcionar ya no quería que lo golpeara. Cualquiera podría hacerlo en medio de un entrenamiento y se sentiría totalmente correcto, pero del coronel no, era más doloroso.

--¿Se puede saber qué te ocurre? Si tienes algún problema puedes decirme.--...--Frunció el ceño.--

--¿Puedo retirarme?--...--Insistió Jimin abrazándose a si mismo porque ya el frío se hacía presente y la chaqueta no lo calentaba lo suficiente.--...--Por favor.--

Jungkook vaciló un poco. ¿Por qué Jimin se comportaba así tan de repente? su mirada era como una mezcla entre reproche, desprecio, temor y dolor. Finalmente, asintió torciendo su boca en una mueca.

Jimin entró a la base prácticamente corriendo. Era tan raro lo que sentía y no quería estar lejos de Jungkook, lo único que ansiaba hacer ahora era meterse bajo las sábanas junto al mayor y calentar su cuerpo con la pasión que ambos tenían para darse.
Pero Jungkook le hacia daño. Dentro de esa habitación era una persona completamente diferente a la que era fuera porque mientras dentro ambos descargaban todo su placer, afuera solo lo trataba como uno más del millón y lo peor era que lo seguía lastimando como en un principio.

Y eso dolía más que cualquier golpe físico.

Él es un soldado y este tipo de cosas deben pasar pero Jimin no cree poder soportar que Jungkook le siga haciendo daño; que esas manos fuertes que le regalaron tantas caricias y apretones posesivos puedan hacerle sangrar.

Odia sentirse así y no poder serle indiferente a sus emociones.