13. Allí voy Valencia
💞💞Sábado💞💞
Pau no dejaba de mirar el anden por donde se suponía que entraban los viajeros para coger el tren que los llevaría a su destino. Estaba nervioso. Tenía la esperanza de que Violeta apareciera, pero a medida que pasaban los minutos se iba desilusionando cada vez más. Faltaban sólo 15 minutos para que saliera el tren y sus ánimos estaban ya por los suelos. Lena le puso la mano en el hombro y se la apretó con cariño.
- ¿Crees que vendrá? -le pregunto Pau bastante triste y aún sin haber perdido la esperanza
- No lo sé Pau. Es muy cabezona cuando quiere, y cuando se le mete una idea en la cabeza...
- Anoche estuve a punto de subir a su casa, pero es que luego pienso que ya estoy harto de ir detrás de ella
- Te entiendo Pau. Y tienes todo tu derecho a sentirte así -Lena lo miró desolada también. Su amiga era una puta cabezona cuando quería que era, siempre
- Joder. Es que me encantaría que viniera y si no lo hace creo que ya está todo dicho entre nosotros -Pau miró de nuevo hacia las escaleras mecánicas cada vez más resignado
- ¿Y si viene?
- Si viene querrá decir que siente algo por mi y pienso ir a saco a por ella, ya estoy harto de tantas excusas con mi edad
- Bueno, espero que sepas bien como convencerla -le dijo Lena riéndose.
Se apartó de Pau y volvió junto a Manu quien la recibió con un beso en los labios. Pasaron los minutos y los chicos fueron subiendo al tren, sobre todo cuando por megafonía anunciaron su inminente salida. Pau volvió a mirar de nuevo hacia las escaleras y muy desilusionado, subió al tren. Fue a sentarse en su sitio junto a la ventanilla mirando apesadumbrado el asiento vacío a su derecha. Al otro lado del pasillo, Manu le dio una leve sonrisa y él se la devolvió sin muchas ganas. Las puertas del tren se cerraron haciendo que las ilusiones de Pau se hicieran añicos. Miro por la ventana con la vista perdida pensando que este iba a ser un cumpleaños bastante triste por no tener a Violeta a su lado.
- ¡Joder! Casi me quedo en tierra. Puto tráfico. Mi taxi no avanzaba -la voz de Violeta caminando por el pasillo del tren hizo que Pau se enderezada al instante. Creía que se le iba a salir el corazón del pecho al ver a la morena avanzar entre los asientos
- ¡Has venido! -le chillo Lena poniéndose en pie y abrazándola
- No tenía ganas de morir gracias -le respondió ella separándose de su amiga
- Te hubiera matado el lunes
- Lo sé -Violeta se giro buscando su asiento cuando vio que era justo donde estaba sentado Pau. Alzo sus ojos por encima de sus gafas de sol y lo saludó- hola
- Hola -le contestó él muy nervioso- estoy en tu sitio
- No pasa nada
Violeta puso su maleta en las estanterías de arriba, bueno, lo intento porque pesaba bastante. Pau se levantó con rapidez y se puso a su lado para ayudarla. Sentir los brazos del chico tan cerca hizo que Violeta sintiera un cosquilleo por todo su cuerpo y que su corazón se acelerara. Pau alzo la maleta sin ningún problema y la puso en la estantería. Bajo su cabeza y ambos se miraron a los ojos durante unos segundos que les parecieron eternos.
- Fran, siéntate conmigo ¿quieres? -la estridente voz de Sandra asomada a uno de los asientos de más adelante les interrumpió
- Te reclaman -le dijo Violeta sentándose ahora ella en el asiento de ventanilla.
Pau alzo una de sus cejas para ver como la morena sacaba sus auriculares y se los ponía en las orejas ignorándolo completamente. El chico no sabía que hacer. Para nada quería pasar las tres horas de viaje al lado de Sandra, sobre todo porque no quería que ella pensara que entre ellos podía haber algo, por más que ella se lo hubiera insinuado en cuanto se vieron en la estación. Por otro lado, Violeta estaba recostada en su asiento bostezando y estaba claro que no tenía muchas intenciones de hablar con él. Pero, su parte racional siempre ganaba.
- Estoy bien aquí Sandra -le contestó Pau sentándose al lado de Violeta.
La rubia lo miró enfurruñada y se giró para sentarse. El rubio miró a la morena que había a su lado la cual había esbozado una ligera sonrisa al percatarse de la decisión del chico. El viaje no se les hizo muy pesado, sobre todo porque Pau y Manu estaban separados por el pasillo y estuvieron hablando casi todo el rato. De vez en cuando se levantaban y hablaban entre ellos. Parecía que Violeta estaba dormida o se lo hacía porque no participaba en ninguna de las conversaciones. Hasta que Ferrán se dio la vuelta en su asiento y le levantó las gafas de sol.
- Bella durmiente -le dijo el chico a Violeta. Ella alzo sus ojos y lo miró riéndose
- ¿Quéee? -le contestó ella bostezando de nuevo
- ¿Vas a seguir dormida el resto del viaje?
- Violeta se marea cuando viaja -dijo Lena al otro lado de la fila de asientos- ¿te has tomado la biodramina?
- ¡Pues claro! Sino ahora mismo estaría potando con la velocidad a la que va el tren -le respondió Violeta
- ¿La que te da sueño?
- Efectivamente. Pero voy bien, tranquila. Además, ya sólo queda media hora para llegar -Pau comprendió entonces porque Violeta se había acurrucado en su asiento sin hablarle a nadie
- Me debes una salida nocturna -le dijo Ferrán- ¿ya tienes pensado donde me vas a llevar?
- ¿Dónde vais a ir? -Sandra se levantó de su asiento y se acerco a Pau para apoyarse en el posabrazos. Estaba muy cerca del rubio, algo que irritó a Violeta
- Por ahí -le contestó Ferrán. Sería la prima de Juan, pero no la soportaba. Era una entrometida
- Eso ya lo has dicho Ferr, sólo quiero saber donde vais
- ¿Para qué? Si no vas a venir
Sandra frunció el ceño enfadada. Violeta se dio la vuelta mirando por la ventanilla conteniendo la risa.
- Tranquilo Ferr -le contestó Sandra- ya nos hemos dado cuenta todos de que quieres estar a solas con Violeta. Ya nos iremos Fran y yo por ahí, ¿verdad?
Violeta alzó sus ojos por encima de sus gafas de sol para ver a la rubia acariciar el brazo de Pau. Sintió que su corazón latía con fuerza y una rabia en el cuerpo que no podía con ella. Miró al chico el cual rodo sus ojos sin contestarle a la rubia oxigenada. Giró su cabeza para encontrarse con los ojos de Violeta. Se miraron unos segundos, lo suficiente para que ambos se pusieran nerviosos. Violeta volvió a colocarse sus gafas de sol y miro hacia el frente para seguir hablando con Ferrán.
- Pues que te aproveche bonita -le contestó Ferrán riéndose de ella- que seguro que de los dos, yo lo disfrutaré más
- Uy, si Ferr. Está claro que a ti las de tu edad no te gustan, que ya sabemos todos que te gustan mayores... -Violeta se enderezó en su asiento dispuesta a soltarle cuatro frescas a la niñata esta. Lo que le faltaba hoy es que encima le recordaran su edad
- Mira, en eso coincido con Ferrán -le contestó Pau- también me gustan mayores y que sean inteligentes, no sé si lo pillas Sandra
Ferrán soltó una carcajada que resonó en todo el tren. Sandra soltó un jadeo furioso y se levantó del reposabrazos para volver a su asiento. Ferrán levantó su mano y la chocó con la de Pau haciendo que Violeta sonriera por dentro. Siguieron hablando un rato más hasta que por megafonía anunciaron que estaban llegando a su destino. Se fueron levantando para coger sus maletas. Pau cogió primero la de Violeta y se la dio. Ella esbozó un agradecimiento casi en un susurro y él le sonrió. Que ella hubiera venido al final, le daba muchas esperanzas. Es que hasta le había cambiado la cara cuando la vio venir. Y si, estaba nervioso, muy nervioso porque quería decirle muchas cosas y no se atrevía. Se prometió a si mismo que encontraría el momento y el lugar perfecto para hablar con ella.
Por la tarde...
Habían dejado las cosas en el albergue en cuanto llegaron a Valencia. El sitio donde pasarían la noche estaba muy cerca de la playa. Se habían repartido las tiendas de campaña y después de cambiarse de ropa habían comido en le propio albergue, pues tenían pensión completa, excepto la comida de mañana a mediodía. Violeta se había echado un rato a dormir después de comer. Compartía tienda con Lena. Aunque sabía que su amiga tarde o temprano acabaría con Manu, el cual, dormía con Pau.
Violeta se despertó pasadas las 5 de la tarde. Se desperezó y vio que Lena ya no estaba. Miró su móvil y su amiga le había mandado un mensaje diciendo que estaban en la playa y que no había querido despertarla. La chica se puso sus zapatillas y cogió sus cosas para irse. Salió de la tienda y sonrió. Ferrán acababa de despertarse también.
- Y luego soy yo la bella durmiente... -le dijo Violeta riéndose
- No, si al final todos hemos dormido siesta, lo que pasa es que yo tenía más sueño
- Están todos en la playa -le dijo ella. Ferrán se puso a su lado y enlazo su brazo con el suyo
- Lo sé. Me alegro mucho de que hayas venido Violeta. Pensábamos que no lo harías, y Pau estaba bastante desilusionado...
- Casi ni vengo Ferrán. Pero sé que Lena dejaría de hablarme y que bueno...tampoco quiero estropearle el viaje a nadie con mis arranques...
- Creí que lo hacías por Pau... -Ferrán levantó una de sus cejas mirándola fijamente
- ¡No me líes Ferrán! Que tengo la cabeza como un bombo ahora mismo y lo que menos me apetecen son dramas
- A mi tampoco me apetecen dramas cariño. Aquí hemos venido a pasarlo bien, y punto
- Exacto
Llegaron a la playa y divisaron a sus amigos. A Pau no le pasó desapercibido como Violeta y Ferrán llegaban juntos del brazo.
- Pues si, creo que a tu amigo le gusta tu profe -le dijo Sandra chichando a Pau. La rubia de bote se había fijado que al rubio le gustaba la chica morena
Pau los miró llegar hacia donde estaban ellos y dejar sus cosas en el suelo. Violeta se quito el vestido quedándose en bikini. Se dio la vuelta para ir a bañarse, pues Lena estaba ya en el agua. Sus ojos se cruzaron con los de Pau que la miraban de arriba a abajo. Llevaba puesto el traje de baño que se probara hacia unos días en el centro comercial, y ahora que se lo estaba viendo puesto, estaba todavía más sexy. Violeta tragó saliva con fuerza al ver la mirada de Pau en su cuerpo. Tembló de deseo al sentir sus ojos que la miraban igual que hacía ella. El chico alzo sus ojos para mirar los de ella y volvió a pasar, estuvieron segundos mirándose como si no existiera nadie en toda la playa más que ellos.
- ¡Violeta! Ven a bañarte, el agua está buenísima
La voz de Lena reclamando a su amiga hizo que Violeta dejara de mirar a Pau, algo muy difícil teniendo en cuenta lo buenísimo que estaba el rubio en traje de baño. Violeta se dio la vuelta dirigiéndose hacia el agua. Se metió del tirón soltando una maldición al sentir el agua golpear su cuerpo, aunque tenía que darle la razón a Lena, estaba buenísima.
- ¿Has descansado dormilona? -Lena abrazó a su amiga en cuanto llego a su lado
- Uy, si. Las pastillas me dejan muy tonta
- Me alegro tanto de que hayas venido. Creí que no lo harías. Y Pau también...
- He estado a punto de no venir Lena
- ¿Y que te ha hecho cambiar de opinión?
- Pues una conversación con Tasi y bueno, tú, que si no vengo me matas
- Es que...no te entiendo amiga, de verdad. Por más que lo intento, no te entiendo
- No me entiendo ni yo. Pero bueno, vamos a ver que va pasando y ya está, ¿vale? y tú céntrate en tu enamorado y deja los dramas de las demás, que bastante tienes con lo tuyo
- Pues tú échale un polvo a Pau y relájate bonita, que tienes cara de perrito abandonado
Violeta rodo los ojos mirando a su amiga y siguieron bañándose. Salieron del agua al poco rato. Se cruzaron con Pau y con Sandra que iban a bañarse también. La rubia de bote se pego a Pau mirando a Violeta con una gran sonrisa triunfal. La morena cogió su toalla para secarse y después la tendió encima de una de las esterillas. Miro hacia el agua viendo como Sandra no dejaba de pegarse a Pau y él, tampoco es que la rehuyera mucho.
Violeta resoplo frustrada. Se dio la vuelta y se tendió en la toalla para tomar el sol harta de lo que estaba viendo. Ella no había venido para esto, para ver como Pau le restregaba en las narices a la rubia de bote. Cerró sus ojos resoplando pensando en miles de formas de asesinar lentamente a Sandra. Al cabo de unos minutos, la voz estridente de la rubia la hizo darse la vuelta. La vio venir con Pau y como él se sentaba y ella se ponía entre sus piernas dándole su toalla para que la secara la espalda. Violeta se levantó bastante cabreada. Lo que menos necesitaba ahora mismo es ver a los dos tontear. Se puso sus chanclas, sus gafas de sol y cogió su monedero.
- ¿Dónde vas? -le preguntó Ferrán el cual se había percatado del enfado de Violeta
- A emborracharme hasta vomitar -le contestó ella- ¿vienes
- Uy, si
Ferrán se levantó cogiendo sus cosas y salió detrás de Violeta en dirección al chiringuito que había detrás de ellos. Pau apretó los labios al verla irse con su amigo. Ferrán le había dicho que estuviera tranquilo, que a él no le gustaba Violeta, la consideraba solamente una amiga. Pero no dejaba de sentir algo de celos de ver como ella pasaba su tiempo con Ferrán en vez de con él.
Los dos amigos se sentaron en la barra. Violeta se puso las gafas de sol en la cabeza y se giró para ver como Pau se reía de algo que había dicho Sandra. Volvió a mirar hacia el frente resoplando cada vez más enfadada.
- Estás súper-graciosa celosa
- No estoy celosa
- Pues poco te falta
- Vale si. Estoy celosa. Estoy entre arrancarle los pelos a Sandra o ahogar al otro en la playa, ¿alguna sugerencia más?
- ¿Qué os pongo?
Ambos amigos se giraron hacia el camarero que acababa de hablarles. Violeta lo miro de arriba a abajo y pensó que estaba bastante bueno, aunque no era Pau, claro. Ferrán se relamió los labios al ver al moreno. En la vida había visto un tío tan buenísimo como este. Tenía el pelo rubio oscuro y unos ojos color café que lo miraban muy intensamente. Era de alto como él, y estaba bastante fuerte. De hecho, la camiseta blanca se le pegaba a los músculos del antebrazo de una manera muy seductora.
- Yo quiero un Hard Seltzer -le dijo Violeta mirando como el camarero y Ferran se comían con los ojos
- ¿Y tu novio? -le pregunto el camarero. Violeta se río porque este chico era tremendamente directo
- No es mi novio -respondió Violeta
- Perfecto -respondió el camarero haciendo que Ferrán se sonrojara- ¿qué te pongo guapo?
- Pues... lo mismo que ella
El camarero se dió la vuelta dándole otro repaso a Ferrán. Los dos amigos abrieron mucho la boca sorprendidos e hicieron gestos nada discretos abrazándose como dos colegiales que acaban de ver un concierto de Pablo Alborán.
- ¡Madre mía Ferr! Creo que has ligado
- ¿Tú crees?
- Joder que si. ¿Tú has visto lo bueno que está este tío?
- Si que me he dado cuenta si. Pues si que empezamos bien el viaje
- Pues tú mejor que yo
El camarero volvió con sus bebidas y se las puso delante. Ferrán le sonrió al chico y él se dio la vuelta para dejarles. Los dos amigos chocaron sus copas y les dieron un trago bastante largo.
- Joder, esto está de muerte -dijo Violeta- bueno Ferr, por lo menos que alguno de los dos eche un polvo este finde
- Tú aún puedes Violeta
- No pienso tocar a Pau hasta que tenga 18 años
- ¡Venga ya tonta!
- Que no. Que va en serio. Que no quiero ir a la cárcel -Violeta le dio otro trago a su bebida y sintió como estaba más animada
- ¿Y porqué ibas a ir a la cárcel? ¿Tú es que eres tonta?
- ¡Porque es menor idiota! Y podrían detenerme
- Ay, dios, eres más tonta de lo que pensaba -Ferrán abrazó a su amiga y volvieron a brindar. Se bebieron su copa con rapidez y pidieron una segunda. El camarero se las puso mirando de nuevo a Ferrán
- ¿No sois de aquí, verdad? -les preguntó él aunque dirigiéndose al chico
- No, somos de Madrid. Hemos venido a pasar el finde -le respondió Ferrán más animado
- ¿Vais a ir al festival de esta noche?
- Esa es la idea
- Lo mismo nos vemos por ahí...
- Otra buena idea entonces -Violeta abrió los ojos como platos y se aguantó la risa como pudo- por cierto, me llamo Ferrán, y esta es mi amiga Violeta
- Encantado chicos. Yo me llamo León, León Goretzka
*** Uy, Se me ha olvidado presentaros a la "pandilla de Pau"
Manu Sánchez
Ferrán Torres
Juan Miranda
Y como estrella invitada...
Leon Goretzka
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