[HyungWon]

Los días se me hacían eternos sin él. Me encontraba en un estado de pausa permanente. No podía concentrarme ni en la universidad ni en el trabajo. Sólo quería estar con él.

—¿Vas a estar mucho tiempo más así? —Kihyun se sentó a mi lado en el parque del campus.

—¿Así cómo?

—Wow, este chico sí que te tiene como idiota.

Sonreí. Era la verdad.

—Estoy enamorado —dije dejándome caer en el césped mientras suspiraba como Julieta por Romeo.

Kihyun me imitó y se echó a reír.

—Escucha, este sábado es el cumpleaños de Joo.

Me incorporé de golpe.

—No puedo este fin de semana.

—¿Qué diablos haces los fines de semana últimamente? Dentro de poco tendremos que sacar cita para verte.

Resoplé arrancando un puñado de césped.

—Es que voy a ver a Hoseok.

Las cejas de mi amigo se elevaron hasta casi desaparecer por su flequillo.

—Es el cumpleaños de Joo. ¿En serio no irás? ¿Oye y si traes a tu chico? Matarás dos pájaros de un tiro —dijo sonriendo ante su brillante idea.

Empecé a farfullar excusas, pero cada cosa que salía de mi boca era una afirmación de que estaba ocultando algo y Kihyun además de ser buen cocinero era perspicaz.

—¿Qué es lo que pasa con este chico? —preguntó entrecerrando los ojos.

—Nada.

—Wonnie, te conozco y sé que me estás ocultando algo. ¿Él no quiere conocernos?

Lo miré y sacudí la cabeza, descartando esa idea.

—No, ¿cómo crees? Es... es algo complicado.

—¿No confías en mí? —algo en su tono me hizo sentir culpable. Kihyun era mi mejor amigo.

—Sí, claro que sí.

—Pero no puedes contarme lo que te está pasando. ¿Dejarás que crea que te estás alejando de tus amigos de a poco por un chico que apenas conoces?

Me acodé en mis rodillas.

—No es eso... Es... no sé si lo entenderías.

Kihyun se sentó y puso cara seria.

—Pruébame —dijo.

Mil veces me había imaginado la situación. El tener que contarle a mis amigos de mi aventura con un chico del pasado. ¿Cómo lo tomarían? ¿Qué dirían? ¿Me creerían? Viéndolo objetivamente, Kihyun era, por lejos, el más sensato de mis amigos. Así que en parte si debía contárselo a alguien, agradecía que fuera él la primera persona en saberlo. Sólo que no sabía cómo empezar a hablar.

—Bien. Antes que nada escucha bien lo que voy a contarte. Y antes de decirme algo te recuerdo que tú pediste saberlo.

Kihyun asintió y se apresuró a acercarse más a mí.

—Bueno... Todo empezó en la fiesta de Tae, el 8 de Junio. ¿Recuerdas que al día siguiente, cuando nos despertamos y entré a la sala, tú me preguntaste por qué tenía las manos sucias? ¿Y que tenía puesta una remera de una banda de rock?

Asintió aún confundido.

—Si...

—Bueno, no sé cómo pasó pero ese día desperté en Gwangjin-Gu.

Kihyun movió los ojos y frunció la boca.

—No. Te despertaste en el patio de Tae.

—Sí y no. Espera, déjame terminar. —Mi amigo asintió—. Bien, me desperté como a las tres de la tarde en Gwangjin-Gu y había un chico parado a mi lado intentando levantarme.

—¿Un chico? —pronto sus ojos se abrieron demasiado—. ¿Hoseok?

—Sí. Bueno, él creyó que yo había tenido un accidente porque estaba tirado en medio de un parque. Me dijo dónde estábamos y pensé que en algún momento de la fiesta había decidido seguirla en otro lado y como ahí vive HyunWoo... —frunció la boca hacia un costado, pero no me interrumpió— y yo tenía sed y me ofreció ir a su casa que quedaba a unas cuadras del parque. Y fuimos...

—Ah, no me habías dicho que él vivía allí —dijo jugando con el césped a sus pies.

—Se me pasó, pero bueno ahí no termina todo. Y esto es lo más difícil de contar.

—¡No me digas que tiene pareja y tú eres el amante! —dijo tapándose la boca ante la idea.

—¡No! ¡Déjame terminar, Ki! —dije exasperado.

—Bien, bien. Lo siento.

—Bueno, cuando entré a la casa vi que había algo raro... Todo era muy antiguo —Kihyun abrió la boca para decir algo pero lo callé con la mirada— pero él era muy agradable y lindo así que no le presté mucha atención a lo demás. Me ofreció su ropa.

—¡La playera! —susurró. Asentí.

—Me di una ducha y luego me preguntó si quería ayudarlo en su jardín. Me contó que su madre había fallecido y me mostró sus flores favoritas...

Vi que los ojos de Kihyun caían y se llevaba una mano al corazón. Kihyun era un romántico empedernido y esos detalles lo derretían.

—Si, yo también me conmoví. El tema es que estábamos trabajando con las rosas cuando dijo que iría a buscar algo para tomar y vi que tenía las manos llenas de tierra y el reloj que me regaló Chang estaba todo sucio y lo quise limpiar y... desperté en el jardín de Tae.

Kihyun se quedó en silencio, solo me miraba.

—¿No tienes nada qué decir? —pregunté.

—¿Eso es todo? —dijo.

—Acabo de decirte que desperté en otro distrito, conocí a alguien y luego volví con ustedes, ¿y me preguntas si eso es todo?

—Ya, en serio podrías haberte inventado algo menos rebuscado para decirme cómo conociste al chico de tus sueños —dijo riendo. Volví a acostarme en el césped.

—Está bien, de todas formas no esperaba que me creyeras —dije mirando al cielo y preguntándome cuánto faltaba para el viernes para así correr a sus brazos.

—Hey, sabes que yo secundo todas tus locuras, pero a veces tienes una imaginación envidiable.

No respondí. Se volvió a recostar a mi lado.

—Bien, bien. Dije que te escucharía hasta el final. Sigue contándome tu historia.

—No, no tiene sentido. Incluso a mí me cuesta asimilar lo que me pasa, así que puedo entender que parezca una locura lo que te estoy contando. Sólo quiero estar con él.

—¿En serio vive en Gwangjin-Gu?

—Si.

—¿Por eso vas todos los fines de semana?

—En la semana lo veo muy poco.

—Espera, ¿en la semana viajas allí también? Se te va a ir una fortuna en taxis.

—Si.

—¿Quieres que te cubra con Joo? Podríamos inventar algo.

—No quiero mentirle —dije.

—Eh, acabas de contarme la historia más disparatada que te escuché decir, podrás inventarte algo.

—Yo no te estoy mintiendo, Ki... Hoseok es real, tú viste las fotos.

—¿En serio esperas que creas que pudiste 'teletransportarte' a Gwangjin-gu?

—Yo sé que suena loco, pero es cierto. Lo peor es que eso no es todo.

—¿Hay más? —Kihyun me miró.

—Sí, quizás lo más loco de todo.

—Bien, no puedes dejarme así, disparate o no ahora quiero saber.

—Te reirás —dije haciendo un puchero.

—Probablement,e pero aún así tienes que contármelo.

—Si te ríes le diré a HyunWoo que mojas los boxers por él.

Kihyun se puso todo colorado y me golpeó en el estómago.

—Abres la boca y eres hombre muerto —dijo. Me eché a reír—. Ok, no me reiré.

—Em, resulta que esa noche luego de llegar a casa, mi mamá lavó la playera de Hoseok y yo me quedé dormido. A la noche me puse a estudiar y me agarró sueño y usé su playera de almohada y me apoyé en mis brazos y... aparecí a unas cuadras de su casa.

—Qué conveniente, ¿no? —dijo riendo.

Esta vez el que lo golpeó fui yo.

—¿Puedo seguir?

Agitó la mano para que siguiera hablando.

—Bueno, me ahorraré los detalles. El caso es que Hoseok no es de esta época.

—¿Eh? ¿Cómo? No entiendo.

Alcé la mano con el reloj y lo sacudí.

—Es el reloj. Puedo viajar en el tiempo. Hoseok está en 1985 —dije.

La boca de Kihyun se abrió pero no salió ningún sonido.

Hisashiburi (久 し ぶ り)

Significa "Cuánto tiempo sin verte", se puede decir cuando llevas un tiempo sin ver a un buen compañero después de haberlo saludado con anticipación. Incluso se usa cuando has extrañado mucho a alguien y quieres seguir encontrándote con él o ella.