—Escucha Hoseok —dijo sentándose en la cama. El rubio se giró y lo miró—. ¿Puedes sentarte un minuto?

Hoseok abrió los ojos y lo señaló.

—HyungWon... tu ropa... ¿qué...?

HyungWon se miró, llevaba puesta la ropa con la que había estado el viernes (que ya no era viernes).

—Ya descubrí cómo salto en el tiempo.

Hoseok no se movió, estaba claramente desorientado. HyungWon estaba vestido de manera diferente de como había estado toda la tarde. No entendía nada.

—¿Qué quieres decir?

HyungWon levantó la muñeca.

—Es el reloj. Agitó los papeles que había imprimido en su casa y Hoseok los tomó frunciendo el ceño.

—Esta es mi letra —dijo mirando la foto del apunte en el papel—. No entiendo.

—Este día ya pasó. Descubrimos juntos como funcionaba el reloj, esto ya lo pasamos y cuando volví a mi tiempo y regresé aquí habían pasado tres días, o sea que después de que me dijeras que tomara una siesta, desaparecí y cuando regresé, yo creí que habían pasado horas, pero aún no sabíamos cómo funcionaba el reloj y habré tocado esta perilla —alzó el reloj para mostrarle el pequeño calendario lunar— y reaparecí tres días en el futuro, o sea el viernes. —Hoseok estaba intentando asimilar lo que HyungWon le estaba diciendo— la cosa es que descubrimos como funciona el reloj, pero nos faltaba saber qué era ese calendario —le mostró la foto de las fases lunares que correspondía a 2019 y le explicó que cada dibujito de la luna representaba un día—, y cuando llegué a casa, busqué y simplemente retrocedí los tres días que me había perdido.

Hoseok se dejó caer en la cama, abrumado con toda la información. Miraba una y otra vez los apuntes que había tomado y corrió a buscar su libreta. No había nada anotado.

—Hyung, eso es porque teóricamente no pasó, yo retrocedí el tiempo a una hora específica, todo eso pasaría en tres días.

Hoseok asintió aunque aún no entendía bien como HyungWon saltaba en el tiempo con esa facilidad.

—Bien, por lo menos ahora sabemos qué debes y no debes hacer para no llevarnos sorpresas —miró su reloj—. Oh, lo siento... debo irme a estudiar, ¿te quedarás?

HyungWon movió la cabeza y negó.

—Me temo que debo irme. Mañana tengo que ir a la universidad y tengo cosas que hacer allí.

Hoseok suspiró y asintió. No quería que HyungWon se fuera.

—¿Cuándo vendrás? —preguntó poniéndose la mochila.

—No lo sé, mañana no podré, quizás el jueves.

—Acuérdate lo de los stickers...

—Claro. Entonces te veré el jueves si puedo venir.

Ambos se quedaron en silencio unos momentos. Las despedidas eran raras. Al final Hoseok se adelantó y le dió un corto abrazo.

—Vuelve. Te estaré esperando.

HyungWon sintió una oleada de afecto por su amigo. Le hizo un saludo con la mano y tocó el botón lateral del reloj.

Ya estaba en su habitación de nuevo. Su celular comenzó a vibrar. Era el chat de sus amigos.

[Joo.Hon.E]: Hey, encontré estas fotos. Hay un lugar donde venden y alquilan ropa vintage. Mañana después de clases vamos.

[King.Kai]: ¡Genial, pido ser Tommy Shelby!

[TeamWangJack]: Me voy a ver increíble en esa ropa, todas las NYX van a querer colgarse de mi cuello.

[Suga_the_rapper]: No voy a usar
moño en el cuello, desde ya les aviso.

HyungWon rio y bajó a prepararse algo para cenar. Miró el reloj de la pared, era temprano todavía y era su día libre en la empaquetadora. Quizás HyunWoo querría salir. Lo llamó, pero no lo encontró. Decidió subir a su habitación y darse un baño.

Estaba buscando ropa en su placard cuando notó la mochila que había preparado a Hoseok. Solo que, por supuesto, aún no la había llenado. Era rarísimo recordar esos tres días que en teoría no habían existido. Se metió en el baño, se duchó y procedió a juntar las cosas que le llevaría a Hoseok cuando volviera, otra vez. Se rio en voz alta de lo disparatado que sonaba todo. Descargó las dos películas de Volver al futuro, buscó y cargó el celular, preparó toda la música que pensaba llevarle, esta vez dejó los airpods porque temía que no pudieran cargarse en los '80. Miró la mochila imaginando la cara de Hoseok cuando viera las cosas. Aunque ya la había visto, pero valía la pena volver a sentir los musculosos brazos de Hoseok alrededor de su cuerpo cuando le agradeciera los regalos. Se llevó las manos a las mejillas que estaban algo calientes. ¡¿En qué estaba pensando?!

Esa noche durmió como un bebé y se despertó con la alarma. Le esperaba un largo día.

Después de clases, todos de reunieron afuera de la universidad para ir a buscar los trajes que usarían en la fiesta.

—Hey —Kai le pasó un brazo por lo hombros— te noto algo distraído, ¿pasa algo?

—No, solo estoy algo cansado —respondió intentando sonar animado.

—¿Cómo van las cosas con HyunWoo?

—Bien, salimos antenoche.

—Es un tipo genial.

—Lo es, pero —¿crees que HyunWoo sea la persona que estás buscando?

—¿Pero? —Kai lo miró frunciendo la boca.

—Me refiero a que recién nos estamos conociendo con Hoseok.

—¿Hoseok? ¿Quién es Hoseok?

—HyunWoo quise decir... —¿qué había sido eso?— que nos estamos conociendo, no quiero apresurarme.

—Si, es verdad. ¿Piensas llevarlo a la fiesta? Estará lleno de chicas y chicos.

HyungWon le dio un codazo y se echó a reír.

—¿Crees que podré encontrar a mi Romeo o a mi Julieta en la fiesta?

—Me estoy planteando seriamente eso de ser bisexual, te diviertes por partida doble.

—¡No me digas que ahora te gustan los penes! —le dijo Chang a Kai, amainando la marcha para que lo alcanzaran.

—¿Por qué? ¿Te gusto? —Kai abrazó a Chang, que era varios centímetros más bajo e intentó besarlo, entre risas.

—Ponte algo de tetas y luego vemos —dijo Chang intentando sacarse de encima a su amigo que se había colgado de su cuello.

—Hey, ustedes dos —Kihyun retrocedió— ¿se pueden comportar como personas normales? Al menos en la calle.

—Sí, mamá —Kai procedió a abrazar a Kihyun y a plantarle un sonoro beso en la mejilla.

Todos se echaron a reír y siguieron bromeando hasta que llegaron al lugar. La vendedora fue muy amable, le mostró todos los trajes que tenía basándose en las fotos que Jooheon tenía en su celular. Kai, Tae y Jooheon desfilaban por el lugar, haciéndose bromas, probándose gorros vistosos y boas con brillos.

—Miren —dijo Suga saliendo de entre una fila de percheros coloridos, se había puesto una campera de jean con un chaleco inflable rojo por encima—. ¡Soy Marty Mcfly!

HyungWon se giró tan de golpe que casi se lesiona la columna.

—Déjame probármelo, hyung —gritó Chang corriendo hasta donde estaba Suga.

Y de nuevo se vio pensando en Hoseok. Faltaba un día para verlo y ya se le estaba haciendo eterno.

Unas horas después todos tenían sus trajes para la fiesta y se despidieron para irse cada uno por su lado. HyungWon caminó hasta la empaquetadora, mientras iba mirando distraídamente las vidrieras. Hasta que vio una tienda de regalos donde había un póster de Volver al futuro. Entró sin pensárselo dos veces.

—Hola, ¿en qué puedo ayudarlo? —una chica con ojos de gato y cabello fucsia lo saludó.

—Hola, quería ese póster de Volver al futuro.

—Hay más de esos —dijo acercándole una pila de pósters con distintas imágenes de películas. HyungWon se puso a mirarlos hasta que se decidió por tres, uno por cada película.

—Oh, también tenemos funkos de Marty McFly... —la chica le señaló un estante lleno de muñecos.

—Genial, me llevaré el de la patineta. ¿Puedes envolverlos para regalo?

Salió de la tienda con una sonrisa de oreja a oreja y deseando que ya fuese jueves. Quería ver a Hoseok.