24. Junto a ti
— ¡JIMIN! llegaron justo a tiempo, el ensayo pronto comenzará - exclamó Jungkook entusiasmado y corrió a abrazarlo.
— ¿Y cómo creías que me lo iba perder, pequeño? El padrino tiene que estar presente.
— ¡Qué emoción!, el padrino también ya llegó - se soltó de JiMin y luego me abrazó a mí — Que gusto de verte Taehyung, que bueno que sí viniste, por cierto, tú y yo tenemos una conversación pendiente - señaló y yo lo miré asustado, pero él me sonrió.
— Primita, por favor, déjame abrazar al hombre que por fin ha hecho sentar cabeza al casanova de mi primo - dijo HyoJong sonriendo y Jungkook se apartó, me sentí tan pequeño envuelto en esos musculosos brazos — Que gusto volver a verte y más de saber que eres novio de JiMin, pensé que se nos quedaba solterón el muchacho - se separó y puso sus manos en mis hombros — Ya ves lo que dicen Taehyung, primo saltado, primo quedado - añadió en tono divertido.
— HyoJong, compórtate, ¿qué va pensar Taehyung de tus afirmaciones? - Intervino la mamá, que me dio una tierna sonrisa y también me abrazó — Bienvenido pequeño - añadió amablemente.
— Pues, es la pura verdad, yo ya hasta estaba pensando en rifarlo, no sabes el susto que me dio cuando Jungkook anunció su boda y este primo mío sin pareja, no, no podía haber un solterón en la familia, ¿qué iban a pensar de él?.
- HyoJong, ya basta, por favor - dijo seria la mamá después de soltarme.
— No se preocupe señora, es mejor ir conociendo la personalidad de cada uno.
— Sora, por favor, dime Sora, hijo.
— Está bien, me costará trabajo, pero lo intentaré...Sora.
— A mí también dime Leetuek, por favor, no me gusta que me hablen de usted, me hace sentirme viejo y aún no lo estoy - señaló y también me abrazó.
— Gracias por el recibimiento - dije abrazándolo todavía.
— No tienes nada que agradecer, eres el novio de JiMin y es lo menos que podemos hacer para agradecerte que estés aquí en un evento tan especial para la familia.
— Al contrario, gracias por la invitación.
— No tienes nada que agradecer Taehyung, yo quería que estuvieras aquí y eso que aún no estabas con mi hermano, pero tuve un presentimiento y no me equivoqué - dijo Jungkook y después soltó una risita traviesa.
Hyuna se acercó y me saludó de beso en la mejilla al igual que HyoJong, que lo hizo después que ella y luego tomó a Jungkook de la mano. HyoJong abrazó a Hyuna y la miró como pidiéndole permiso para hablar y ella le sonrió asintiendo.
— Pues ya que está toda la familia completa, mi esposa y yo tenemos que hacerles un anuncio - exclamó de lo más feliz y le dio un beso en los labios — Diles, mi amor.
— Bueno, el lunes pasado fui al médico y me confirmó mis sospechas, estoy embarazada, tengo ocho semanas - anunció y HyoJong puso su mano sobre su vientre.
— ¡Felicidades!, hasta que le atinaste primo, ya tres años de casados y sin bebés, estaba empezando a creer que te habían dado un golpe mortal en el americano - exclamó JiMin y lo abrazó.
— Es que quisimos prolongar la luna de miel y además estuvimos practicando mucho para que nuestro primer hijo saliera perfecto.
— Entonces se parecerá a Hyuna porque tú de perfecto no tienes nada.
— ¡Envidioso! Cuando adoptes niños con Taehyung espero que no te quieran.
— Creo que es un poco apresurado hablar de hijos HyoJong, apenas iniciamos nuestra relación - dije sonrojado ante tal idea.
— Cierto, todavía te puedes arrepentir de compartir tu vida con este hombre.
— Chicos, ya estuvo bueno de sus comentarios, harán que de verdad Taehyung se arrepienta, pero de haber venido - los regañó Leeteuk, pero ellos sólo se rieron.
Yo estaba más que sorprendido por la calidez de la familia, jamás me imaginé el recibimiento que me darían ni mucho menos la forma en que se llevaban entre ellos, se notaba la unión y el amor que se tenían.
Jungkook dio saltitos de alegría y los abrazó efusivo, HyoJong hasta la levantó en el aire mientras ella se reía. Leetuek abrazó orgulloso a Sora y le dio un beso en la frente, después de haber abrazado y felicitado a su sobrino y su esposa. SeokJin también los felicitó y les dijo que era el mejor regalo de bodas que podrían darle. JiMin me abrazó y me dio un beso en los labios.
—¿Ya se te pasaron los nervios?
—Sí, tienes una hermosa familia.
— Y ahora es más hermosa porque tú ya perteneces a ella - dijo y me guiñó un ojo.
Le respondí con una gran sonrisa, no pude decirle nada más, me emocionaba la idea de pertenecer a esa familia, era como siempre había deseado tener una.
Jungkook anunció que en una hora iniciaría el ensayo, así que apenas teníamos tiempo para arreglarnos. JiMin me tomó de la mano y subimos las escaleras hasta el tercer piso, la última habitación era la suya. Tenía las paredes blancas, la enorme cama estaba pegada a la pared del lado izquierdo, al frente estaba el tocador y al lado había un par de puertitas que supuse eran el armario, del lado que entramos había un mueble con un moderno aparato de sonido, varios libros y cd's, y otra puerta que debía ser el baño, lo más bonito era el gran ventanal así que me asomé y luego salí al balcón, el mar en todo su esplendor lucía tranquilo. JiMin me abrazó por atrás.
— ¿Te gusta?
— Mucho, la vista es preciosa.
— Y contigo aquí lo es mucho más - con su mano movió mi cabeza para poder besarme en los labios - como tenemos poco tiempo es buena idea bañarnos juntos.
— Precisamente porque tenemos poco tiempo, no es buena idea, ya te conozco, así que mejor nos bañamos separados.
— Prometo portarme bien.
— Eso dijiste la otra vez y llegué tarde a mi trabajo, así que hoy no me arriesgaré - le di un ligero beso en los labios y me separé.
Me di una rápida ducha y salí envuelto en una toalla, JiMin tenía puesto solo su bóxer y me miro pícaramente, pero yo moví negativamente la cabeza, él cambió su mirada a súplica y yo miré hacia el techo, pero aún así me abrazó.
— JiMin, basta, por favor - dije mientras me besaba el cuello — tenemos que estar listos en 35 minutos - repliqué mientras mi temperatura se elevaba.
— Es suficiente tiempo, podemos hacerlo rápido como en el avión - respondió metiendo su mano por debajo de la toalla para masajear mi miembro.
— No, tengo que arreglarme bien, quiero verme lindo - refuté quitando su mano.
— Tae, ya eres lindo, no necesitas hacerte mucho - dijo acariciando mi mejilla — Corazón, por favor, un mes de abstinencia fue mucho tiempo, estoy muy ansioso por ti.
— Yo también JiMin, pero no podemos dejar que el fuego nos nuble la razón, no podemos hacer esperar a tu familia, además, recuerda que dormiremos juntos.
— Corrección Tae, compartiremos la cama, pero ni creas que te voy a dejar dormir y menos si me dejas con las ganas ahora.
— Está bien, no dormiremos en la noche, pero ahora tenemos un compromiso que cumplir, por favor, piensa en Jungkook... además, ¿no vamos a ensayar la canción?.
— Está bien, sólo porque cantarás conmigo me meteré a duchar en este instante.
— Y de preferencia con agua helada.
— Que cruel eres conmigo, pero en la noche me desquitaré.
Moví la cabeza sonriendo mientras sacaba mi ropa de la maleta, me puse la interior y encima un short sencillo color beige, una camisa blanca y un sueter beige con líneas azules en el cuello, unas sandalias de color negro y después cepillé mi cabello, empezaba a ponerme las balerinas en la frente cuando Hoseok salió del baño y se me quedó viendo.
— ¿Qué?, ¿hoy tampoco podía usar algo así y de este este color?.
— No es eso, levántate por favor - dijo extendiéndome sus manos, yo las tomé y me levanté mirándolo extrañado, me hizo darme una vuelta — wow, te ves hermoso.
— Pero, aún no termino de alistarme.
— No lo necesitas, ya eres hermoso.
— Adulador.
— Encantador.
— Ya date prisa, anda.
Me dio un beso en los labios y empezó a vestirse mientras me explicaba las instrucciones para la canción. Yo estaba muy nervioso por eso, no sé cómo pude aceptar, empecé a hacer respiraciones con los ojos cerrados y JiMin me abrazó por la cintura y me aseguró que todo saldría bien, abrí los ojos y fue mi turno de asombrarme, JiMin se veía bellísimo, con un short beige, una camisa blanca abierta de su pecho, y su cabello negro peinado perfectamente que hacían resaltar sus hermosos ojos, notó la expresión en mi rostro y me sonrió para luego darme un pequeño beso en los labios, entrelazó mi mano y bajamos.
Atravesamos un gran salón en el que había varias personas corriendo de un lado a otro arreglando unas mesas y unas sillas, salimos a la enorme terraza que ya estaba prácticamente lista para la boda, había un pasillo en medio de una cantidad considerable de sillas y una chica le estaba dando unas indicaciones a Jungkook, supuse que era la organizadora. Habían otras parejas además de la familia y cuando Jungkook se desocupó me los presento, eran la madrina, las damas y sus respectivos novios, así como los papás de SeokJin y YoungSun. El sacerdote llegó y nos acomodamos en nuestros lugares para ver el ensayo que dio inicio, tanto SeokJin como SeokJin tenían ropa de color durazno. Sus votos fueron muy conmovedores y en cuanto terminó pasamos al salón.
Sólo había dos mesas preparadas y en ese momento me invadieron los nervios y me mordí el labio inferior. En una nos sentamos la familia y en la otra las amigos de Jungkook, y nos sirvieron la cena. HyoJong estuvo bromeando casi todo el tiempo y acariciando las mejillas de Hyuna quien sólo se reía por las ocurrencias de su marido. Jungkook y SeokJin derramaban miel y casi podría estar seguro que no sabían de qué estábamos hablando. Sora y Leetuek estaban sonrientes mirando felices a sus hijos y yo entré en pánico cuando sentí la mano de JiMin recorrer mi muslo por debajo de la mesa y lo miré casi fulminándolo, en cambio, él me sonrió mientras me apretaba suavemente el muslo casi a la altura de la ingle y lo miré aún más serio, pero contrariamente a lo que quería lograr, él estaba de lo más divertido deslizando su mano por mi pierna hasta que afortunadamente la madrina dijo que era el turno de que hablara el padrino y entonces JiMin tuvo que ponerse de pie, levantó la mano y en ese momento entraron cuatro personas con un piano.
— Bueno, como la verdad no soy muy bueno para los discursos y como sólo tengo el oficial, hoy haré algo diferente - anunció y fue a sentarse frente al piano y probó el micrófono - pero, para esto necesito la ayuda de mi querido Taehyung, mi hermoso novio, por cierto, un aplauso, por favor.
Yo sentí que me ardían las mejillas por el intenso rubor que había en ellas mientras todos los presentes aplaudían y yo me ponía de pie mucho más nervioso que en un principio y camine hacia él que me esperaba con una gran sonrisa, me senté a su lado y puso la hoja con la letra de la canción sobre el piano.
— Esta canción es dedicada a los novios, espero que les guste, creo que refleja lo que siente cada uno por el otro - empezó a tocar y en la nota precisa comenzó a cantar.
Junto a ti no conozco el miedo,
No hay camino que yo no pueda andar
Junto a ti,
Junto a ti es tanto lo que siento
Que mi pecho está a punto de estallar
Junto a ti.
Y es tan lógico que mi corazón
No me pide ninguna explicación
Me indicó mi entrada:
Junto a ti yo me siento libre,
Sé que puedo crecer cada vez más
Junto a ti.
Junto a ti nada es imposible
Porque todo se ve con claridad
Junto a ti,
Y es tan lógico que mi corazón
No me pide ninguna explicación.
Ambos:
Este amor es tan real,
Como ver y respirar
Y nos hace fuertes
Más allá de toda la gente
Y del qué dirán.
Este amor es tan real
Como el agua y como el mar
Y nos da respuestas
Sin dudar a cada pregunta
Con seguridad.
Yo:
Junto a ti no conozco el miedo,
JiMin:
Porque todo se ve con...
Ambos:
Claridad.
Fuimos acercándonos mientras cantábamos y al terminar estábamos tan juntos que nuestras narices se rozaban, me olvidé de todo, sólo estaba concentrado en la letra de la canción y en su mirada fija en la mía, creo que hasta me había olvidado de respirar.
— Junto a ti quiero estar el resto de mi vida - musitó JiMin en mi oído.— soy capaz de cruzar el Atlántico nadando sólo para llegar a ti, estoy profunda y totalmente enamorado de ti, Taehyung - añadió y me quedé sin habla.
Los aplausos fueron los que me devolvieron a la realidad y sonreí recordando donde y con quienes estábamos. JiMin me dio un dulce beso en los labios ante el grito de todos los presentes y nos levantamos y regresamos a la mesa.
Nos felicitaron por la canción, Jungkook estaba sumamente emocionado y nos abrazó agradeciéndonos el momento, yo estaba en shock por las palabras de JiMin, no me las esperaba. Estuvimos hablando un rato más y Sora nos dijo que a la mañana siguiente nos esperaban a las 9:30 para desayunar.
Poco a poco se fueron yendo todos hasta que nos quedamos solos JiMin y yo.
Me tomó de la mano y caminamos al piano, nos sentamos en el largo banquillo. Empezó a tocar una dulce y sensual melodía mientras yo lo miraba, al terminar me besó humedeciendo primero mis labios hasta que su lengua alcanzó la mía y se unieron en una sincronía perfecta de movimientos, en tanto su mano desabrochaba mi short y me los bajaba. Metió su mano por debajo de mi playera y empezó a acariciar mi torso y unos de mis pezones al tiempo que su lengua recorría mi cuello. Cerré los ojos sintiendo como mi pulso y mi respiración se elevaban.
— JiMin alguien puede vernos - dije al sentir su mano en mi entrepierna.
—Eso tiene solución.
Se levantó y puso el seguro en ambas puertas y corrió las cortinas del lado que daba a la terraza. Volvió a sentarse a mi lado con sus piernas a los costados del banquillo me rodeó por la cintura y comenzó a besar mi hombro.
— JiMin, estamos en tu casa y tu familia también.
— Tranquilo, nadie se dará cuenta te lo aseguro, pronto estarán dormidos.
— Mejor vamos a la habitación.
— Después iremos, te dije que esta noche no dormirías - susurró en mi oído mientras con la punta de su lengua recorría mi oreja.
Su mano acariciaba mi muslo hasta que llegó a la ingle y en automático abrí las piernas, él comenzó a frotar mi sexo encima de mi ropa interior excitándome lo suficiente para querer sentirlo ya dentro de mí, así que me levanté y me senté sobre él con mis piernas a sus costados. Besó la base de mis pezones en tanto nuestros sexos se rozaban.
Me pidió que me levantara y eso hice, me cargó y me colocó sobre el piano, subió mi playera y después me quitó la ropa interior, hundió su cabeza entre mis piernas y comenzó a recorrer mi falo con su lengua, empecé a jadear mientras me sostenía de mis antebrazos con la cabeza hacia atrás.
Mis jadeos parecían impulsarlo a seguir recorriéndome, pues lo hacía sin cesar aumentando y disminuyendo la velocidad de sus movimientos, pasando su lengua en toda mi masculinidad como si se tratase de una paleta, yo tenía abierta la boca y me lamía los labios sintiendo como mi cuerpo ardía por sus húmedos besos que seguía proporcionándome en cada rincón. No pude evitar soltar un gritito cuando sentí que me introducía un dedo y luego lo sacaba y volvía a meterlo en un acompasado ritmo que me estaba enloqueciendo hasta que sentí alcanzar al éxtasis y me mordí un dedo para no gritar.
Me ayudó a bajar del piano, mis piernas me temblaban y me besó apasionadamente en tanto su mano me quitaba por completo la playera. Desabroché su camisa y se la quité, volvimos a besarnos mientras nuestros pechos se unían y el recorría mi columna vertebral con las yemas de sus dedos hasta llegar a mis nalgas que acarició.
Se desabrochó el pantalón y se lo quitó mientras yo lamía uno de sus pezones y el otro lo acariciaba. Cuando estuvimos desnudos nos recorrimos con la mirada, en ambos cuerpos se notaba la excitación, mis pezones estaban firmes al igual que mi miembro y el suyo, de pronto fijo sus ojos en el lado izquierdo de mi abdomen.
Me pidió que me hincara en el banquillo y después me hizo apoyar las manos en el mismo, él se colocó detrás y entró en mí de un tirón, sentí como mi cuerpo se contrajo hacia él y me tomó de las caderas para iniciar con su delicioso vaivén. Después, una de sus manos bajo por todo mi pecho hasta llegar a mi erección y empezar a masturbarlo, en tanto continuaba con sus certeros movimientos que me fascinaban cada vez más. Posteriormente, se aferró a mis caderas moviéndose a mayor velocidad hasta que sentí su orgasmo dentro de mí acompañado de un gruñido que me hizo llegar a mí también. Se quedó unos instantes sin moverse, aún dentro de mí, exhaló fuertemente y después se separó y me ayudó a ponerme de pie y me abrazó efusivamente.
—La noche apenas empieza corazón y juro que no te daré tregua - dijo en voz baja.
También me emocioné escribiendo esto jsjsjjsjsjjsjsjshshahhsjs
VIVAN LOS NOBIOOOOOOOOS
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