diecisiete
Viernes de entrenamientos.
Ayer no salí ni un solo minuto de la habitación del hotel en el que estoy, no sabiendo que charles ya está aquí en el hotel y que me lo puedo encontrar en cualquier momento. Todavía no estoy preparada para ello. Carlos me trajo la comida a la habitación y estuvimos aquí hasta que él se tuvo que ir a hacer las entrevistas y reconocimiento de pista andando con parte de su equipo y también tenía reunión de equipo al ser nuevo.
Ósea que el día de ayer se resumió en estar encerrada en estas cuatro paredes, en estar en la cama y ver películas, series y pasar bastante tiempo con el teléfono móvil. Algo aburrido vaya que sí.
Pero hoy no pienso hacer lo mismo, porque he venido hasta aquí para ver a Carlos y a mis amigos, y no pienso no hacerlo porque en el mismo lugar se encuentre él.
Estoy terminando de peinarme cuando escucho muchos golpes en la puerta y algunos gritos.
- Zoeeeeeee - y si, esa es sin duda la voz de Lando.
- Que ya voy. - abro la puerta y están Lando, Carlos , Max , George, Pierre y Daniel. - No me dejáis ni un momento tranquila, joder.
- Ay chica que carácter - dice Max y lo miro mal.
- Bueno vino a hablar. - digo y todos se ríen.
- ¿Te falta mucho? - pregunta Pierre.
- Solo dejadme soltar el cepillo - digo sujetandolo y asienten con la cabeza.
Lo suelto y voy donde están todos. Salimos del hotel y doy gracias a dios porque todavía no he visto a Charles.
Llegamos al circuito y nada más bajar del coche ya hay miles de cámaras alrededor de los chicos. Entramos por el paddock y Carlos va saludando a casi todo el mundo, yo estoy como algo perdida por ver tanta gente por aquí pero tendré que irme acostumbrando si iré a todo y cada uno de los grandes premios.
- Estoy un poco nervioso - comenta Carlos, a medida que vamos avanzando.
- Tranquilo todo irá bien ya lo verás.
- Eso espero, no quiero defraudar al equipo.
- Concéntrate en dar lo máximo que tú puedas, y sobre todo, disfruta, Carlos.
- Lo intentaré.
Llegamos a el box de Ferrari y suspiro muy fuerte antes de entrar.
- Estás como un flan. - me avisa Carlos.
- Lo sé, me tiembla todo pero no hay más remedio. Así que vamos y que pasé lo que tenga que pasar. - digo y agarró la mano de Carlos para entrar.
- Que bien verte de nuevo por aquí, Zoe - me dice Matías Binotto, que me recibe con un gran abrazo.
- Gracias.
- ¿Estás preparado Carlos? - le pregunta a mi mejor amigo.
- Estoy ready.
Estamos hablando con algunos de los mecánicos de Carlos y también con Matías, hasta que decido irme a por un café porque ahora mismo ahí no pinto demasiado.
- Zoeee - grita Lando y me llevo la mano al corazón, porque no me lo esperaba para nada.
- Lando, ¿puedes dejar de darme estos sustos? Te lo agradecería bastante mi corazón, gracias. - digo riendo.
- Lo siento - se disculpa haciendo una pequeña mueca. - ¿Qué hacías?
- Ir a por un café, ¿quieres uno?
- No gracias, pero te acompaño.
Ya con mi café en la mano me siento al lado de Lando.
- ¿Crees que vas a estar bien? - me pregunta.
- ¿Por qué lo dices?
- Porque en cualquier momento lo vas a ver.
- Ah bueno, te diría que no me voy a poner algo nerviosa pero te estaría mintiendo. Pero oye, que yo he venido a estar con vosotros y a animaros eh.
- Di que si, pero debes de animarme a mi más que soy el más chiquito - dice y rio.
- No te prometo nada, que Carlos se enfada conmigo.
- Está bien.
- Cambiando de tema, ¿cómo te encuentras para comenzar la temporada?
- No sé, estoy algo ansioso pero voy a dar lo mejor de mi para llegar a lo más alto posible y voy a pelear mucho.
- Claro que si Lando, verás como más de una vez estarás en el podio.
- ¿Tú crees?
- Por supuesto que si. - miro mi reloj y veo que faltan treinta minutos para la primera práctica por lo que debemos de irnos ya. - Lando, vamos que llegarás tarde si tardamos más.
- No llegar tarde a mi primer entrenamiento de la temporada no, vamos Zoe acelera.
- Voy.
Veo como Lando entra por su box como un cohete, y yo desaparezco para irme al de Ferrari.
- Hasta que al fin llegas Zoe, por el amor de dios, ¿dónde estabas? - me pregunta Carlos, nada más poner un pie dentro.
- Con Lando tomando un café.
Siento una mirada sobre mi, y miro a Carlos quien me hace gestos con la cara, pero no sé lo que me dice por lo que me doy la vuelta y maldigo en el momento que lo hago.
Sus ojos y los míos se encuentran y esto parece una guerra de miradas, lo ojeo y no ha cambiado mucho, la barbita un poco aunque de seguro que lleva tres días. Pero físicamente no ha cambiado nada de nada, sigue estando igual de jodidamente guapo.
Dejo de mirarlo y miro al frente para encontrarme con la cara de pánico de Carlos.
- ¿Estás bien? - pregunta en un susurro.
- No, no lo sé.
Juro que ahora mismo tengo ganas de ir corriendo y abrazarlo, pero por supuesto que no lo voy a hacer.
- Vamos Carlos tienes que subir ya, el primer entrenamiento empieza en tres minutos. - Matías llama a Carlos.
- Vale, Zoe quédate aquí - me dice y asiento.
- Suerte y a darlo todo chico Ferrari. - digo y me guiña un ojo.
Antes de que se monte en el coche nos damos un abrazo, y cuando ya está dentro cruzó mis dedos.
@zoegarcia
El primer entrenamiento termina y abrazo a Carlos cuando llega.
- Para ser el primero nada mal, Chily.
- Un octavo puesto, no está mal no.
Y aunque no lo quiera admitir ahora mismo, también he estado echándole una ojeada a los tiempos de Charles, quien ha terminado quinto en el primer entrenamiento. Es un deporte de riesgo y aunque haya pasado lo que ha pasado nunca le desearé nada malo.
En el segundo entrenamiento las cosas salen mucho mejor: Max liderando, seguido de Lando, Lewis y en cuarto lugar Carlos.
- eso es Carlos. - lo animo, cuando ya se ha quitado el mono y está con el polo del equipo.
- He disfrutado mucho.
- Genial.
- Y ahora vamos que tengo hambre.
Nos dirigimos al comedor y nos sentamos en una de las mesas largas, donde también nos acompañan Lando, Max, George, Daniel y Pierre.
- ¿Puedo sentarme? - pregunta Charles, haciendo acto de presencia. Todas las miradas recaen en mi, yo suplico tierra tragame.
Solo asiento con la cabeza y se sienta en frente, genial.
- Zoe ¿cómo nos has visto en los primeros entrenamientos? - pregunta Daniel.
- os he visto bien, a algunos mejores que otros, pero bien si.
- ¿Crees que alguno de nosotros puede hacer podio? - pregunta Lando.
- Todo es posible.
- si yo lo hiciera te lo dedicaría - susurra Charles, haciendo que solo yo lo escuche y me ahogo con el agua que en ese instante estaba bebiendo.
- Que la niña se nos ahoga ayudaaaa - grita Lando y Charles ríe.
La madre que lo parió.
Nuevo capítulo!!
Vaya carrera la de ayer, nuevo doblete de max y checo!!
P4 para charles ❤️.
espero que os guste y nos vemos pronto ✨!!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro