Karla.

Maldita yo y mi suerte de siempre despertarme cuando algo malo esta pasando.

—¿Por que no me dices no que te pasa? — Elisa y yo estábamos en el piso del baño, ella llorando y yo abrazándola al no saber que mas hacer.

Empezó a balbucear, no le entendía nada, solo lloraba, balbuceaba y de vez en cuando tenia que darle aire por que se le iba de los pulmones. No quería que la vieran llorar por eso se encerró en su habitación.

—Mate a mi madre... — escuche entre sus balbuceos. ¿Entonces lo que soñé si paso? — ... soy una asesina.

—No, Eli, no pienses eso de ti. Ella empezó.

—La mate...

—Ella lo hubiera hecho primero. No te culpes por lo que hiciste, fue un mal necesario, actuaste como te enseñaron. Tranquila.

No pareció tranquilizarlo, lloro aun mas, lloraba en silencio, para que no la escucharan.

—Las lagrimas no regresan el tiempo, ni corrigen lo que hiciste. Ella te hizo cosas terribles y nunca se puso así.

—La asesine.

No dije nada mas en toda la noche, dijese lo que dijese va a seguir repitiendo lo mismo, ¿Quien no se sentiría así después de matar a alguien?

Lloro, demasiado, se deshizo en mis brazos. Y no paro en unas horas, cuando finalmente se calmo se durmió y yo le seguí.

—¿Escuchaste las noticias?

—¿Que paso?

—Una casa se incendio anoche.

Voces lejanas y borrosas. Todavía no me despertaba bien, ni siquiera había abierto los ojos.

—¿Que no deberían estar en la escuela?

—¿Alguien ha visto a Elisa?

—Salimos de vacaciones.

—¿No esta en su habitación?

—Si estuviera ahí no les estaría preguntando

Abrí los ojos completamente. Ni siquiera note el peso, la tenia entre mis manos, acurrucada como una bebe. Tan tranquila, no la quería despertar, pero parece que allá afuera ya están desesperados por encontrarla.

Alguien abrió la puerta del baño de un portazo, Elisa se levanto de un salto y se puso a la defensiva, tomando lo primero que encontró, preparada para lanzarlo.

—Dios mío, Elisa. Casi me das un infarto. — Brian se agacho para abrazarla, pero al igual que con Einar, ella retrocedió, alejándose de el.

Brian se entristeció, lo pude ver en sus ojos, bajo los brazos pocos segundos después.

—¿Donde esta? — Az e Isa vinieron corriendo.

Brian seguía en shock, mirándola como si el hubiera hecho algo malo.

Isabel se lanzo a abrazarla, esta vez ella no retrocedió. Pero cuando Azriel quiso hacer lo mismo se alejo aun mas, pasando me por encima y poniéndose en una esquina.

Los tres nos miramos y la miramos excepto Brian quien miraba el suelo con tristeza.

—Brian — Isa le puso la mano en el hombro. — levántate.

Los tres se fueron dejándonos solas.

—¿Que fue eso?

Se encogió de hombros.

—No lo se, cuando lo vi acercarse me llego como un recuerdo. — Bien, ya hablaba mas. — Unos ojos azules, un hombre y una cosa que no distingo bien, a veces cambia el como yo estoy o como esta el pero siempre es lo mismo.

—¿Y por que con Isa no corriste?

—No lo se. Me paso lo mismo con Einar cuando me dio el beso en la frente o cuando fuimos a la playa.

—Nuestra playa. Hoy demasiadas memorias ahí como para que sea una simple playa.

—Creo que solo me pasa con los hombres.

Su subconsciente lo sabia, lo recordaba con temor.

Fernando la daño.

—Y ¿Por que si cedes con Einar?

—Einar... también me alejo de el, pero... el... el no tiene la reacción que tuvo Brian, el espera a que me acerque yo.

Que lindo, le da su espacio.

—Nunca borra su sonrisa de la cara, siempre esta positivo ante mi... aunque reaccione de una mala manera.

Sonreí.

—¿Que?¿Por que me miras así?

—Te estas enamorando de el.

—¿Si?

—Antes de que pasara todo esto. Cuando hablabas de el tenias esa misma sonrisa de enamorada que ahora.