ELISA

Los pájaros cantaban, el día era más caluroso de lo normal y la maestra Lucy no paraba de hablar de Hitler.

-Y fue así como el gobierno de Hitler concluyó - finalizó.

Recogí mis cosa sin dejar de ver la ventana y notar a dos gorriones en las ramas de los árboles.

-Elisa, yo creo que si le vamos apurando llegaremos mas rápido a nuestras casas - me dijo Karla

Rodé los ojos.

-Pues ni modo, se aguanta.

Se cruzo de brazos como toda una señora y me miraba, empecé a guardas mis cosas mas lento para molestarla más.

-A veces me estresas - se quejo

-Tu a mi siempre - le respondí

Se giró indignada y camino a la puerta, sonreí victoriosa.

-Que lenta eres mujer - me dijo Isabel.

-Que prisa tienen ¿En sus casas esta el novio o que? - les dije.

-Ojala estuviera Tom Holland - me respondió Karla con un tono de tristeza

-En tus sueños - se burlo Isabel

-Ni en esos esta - se tapó la boca con la mano fingiendo llanto

Las tres reímos por la obsesión poco sana que tenía Karla por Tom Holland, a la salida de la preparatoria nos despedimos desde lejos y cada quien tomó camino por su casa.

El día era nublado y ya empezaban a caer pequeñas gotas de lluvia sobre mi y los lugares por los que estaba caminando. Abrí la puerta y avente mi mochila sin importarme en donde callo.

Abrí la nevera en busca de agua y al tomarla subí a mi habitación, arroje la botella vacía en el bote de basura y me cambie el uniforme. Sali de nuevo de casa y me dirija a una casa que esta deshabitada desde que tengo memoria.

Entre a esa casa con maniobras, la puerta siempre se atasca. La cerré de vuelta atravesé la casa y salí al patio trasero de esta.

-Brian - le grite al notar que se había quedado dormido

El nombrado dio un respingo

-Me vas a venir matando de un infarto Elisa

-Tus adicciones lo harán antes, créeme

-Tu estas peor cállate

Levante las cejas en un gesto irónico y me senté al lado de él. Tome una botella de alcohol que estaba en sus manos y le di un trago.

-¿Sabias que eso es ilegal? - me pregunto

-¿Sabias a ti también te meterían a la cárcel por proporcionarle sustancias ilegales a un menor de edad? - le dije con ironía

El me dio una sonrisa ladeada divertida y me volteo a ver con sus ojos verdes.

-Tu nunca te callas ¿verdad?, siempre tienes una respuesta para todo.

Me encogí de hombros restándole importancia a sus palabras.

-Ten - extendió su mano y me entregó un rollo de papel.

Lo tome y lo encendí para darle una calda enorme a ese rollo de papel.

-¿Por qué tuvieron que inventar una cosa tan buena? - me pregunto Brian.

-Para personas como tu y yo.

-¿Mentalmente inestables?

-Iba a decir sin futuro, pero también.

Deje de mirarlo y me enfoque en el paisaje de la playa.

-¿Tu por que haces esto? - le pregunte

-Por imbécil - dijo entre risa

-Mentira no le veo

Podemos pasar hasta horas así, no se de donde los consigue, ni me interesa, pero es bueno tener un amigo mayor de edad que te consiga las cosas ilegales. Bueno, para no hacerles el cuento largo, duramos mucho tiempo haciendo eso, cuando el sol se empezó a ocultar en el mar ya no estábamos en este mundo, no digo que muertos, aunque no hay que descartar para un futuro próximo, digo que la mente ya estaba bastante ida del planeta tierra.

Por buena suerte mía era viernes, ósea que mañana es sábado -ni modo que domingo-, y lo bueno es que no madrugo.

Ya en un momento muy ahumado me recosté en el suelo, observando las pocas estrellas que el cielo dejaba ver, mas bien que las luces de la ciudad dejaban ver.

-¿Cuántas estrellas habrá en el cielo?

-No soy astrónomo, Elisa, y aunque lo fuera seria una pregunta imposible de responder.

-¿Por que?

-Hay infinidad de ellas

-¿Y si eso es lo que el gobierno quiere que pienses?

Me vuelvo a ver con una ceja levantada en un arco muy gracioso.

-Entonces dos más dos no es igual a cuatro, por que el gobierno quiere que pensemos eso para esconder algo, pero ¿que será lo que esconden? le tienen miedo al tres ¿o que?

-¿Y si tu no existes y solo eres un invento del gobierno? - me reincorpore en el piso

-¿Y si nadie de aquí existe?, y si solo somos historias, para las personas.

Rei, no, no, me carcajee.

-¿De que te ríes?

-Pobre de la persona que lea mi vida y que pena, seguro no tiene nada mas que hacer.

-De seguro le gusta leer como te masturbas en la noche

-Yo nunca me masturbo, puerco, cochino, asqueroso, mal pensado, mente sucia, maldito ser despreciable.

-Ay, yo si lo hago

-¡Cállate, Brian!, a mi no me interesa saber como te masturbas.

Se encogió de hombros dándole un sorbo a su cerveza.

-A muchas mujeres si - me señaló con la cerveza

-Yo no soy de esas, yo soy única y diferente.

-De esas que les gusta tomar un libro, bajo el café leyendo la lluvia - dijo con una pose dramática.

-¿Eh?

-¿Que?

-¿Que?

-Tu dijiste que primero - dijo achinando los ojos

-No, yo dije ¿eh? y luego tu dijiste ¿que?

Parpadeo un par de veces, como si se hubiera ido y aterrizará en marte.

-¿Habrá vida alienígena? - me pregunto

-Depende

-¿De que?

-De las bolas que me prendes, digo, si, probablemente una planta o una bacteria, no el famoso concepto de alienígena que el gobierno no hizo creer.

-El gobierno es malo - negó con su cabeza.

-Ya me tengo que ir, Bri, Bri.

-No me digas Bri,Bri.

Me dejé caer sobre el suelo.

-Au - exclamé cuando mi cabeza se golpeó contra este.

-Pero ¿por qué?

-Ya sabes como se pone mi madre

Hizo una mueca de asco

-Maldita vieja

-Adiós Bri, Bri

Me levanté como pude del suelo y me apoyé en las cosas que encontraba en el camino para no caerme. Las piernas me flaqueaban y la cabeza me daba vueltas y vueltas y vueltas. Bueno, salí de la casa por como entre, haciéndole maniobras a la puerta para que se dejara abrir.

Caminaba por toda la orilla apoyándome de las cosas e incluso en un momento me pare a vomitar arcoíris. Me limpié la boca con la sudadera y seguimos el camino.

1,2,3,4. 1,2,3,4.

Al fin mi frente chocó con una puerta, saqué las llaves que por milagro no se cayeron.

Y de una vez por todas di en el piso, me sorprende que mi madre no escuchara el golpazo que me di en las rodillas. Como mis piernas no podían intente gatear hasta las escaleras. Me di cuenta que era inútil cuando intenté mover la rodilla.

No se necesita una cama para dormir, solo ocupas el sueño.

Me recosté en el suelo boca arriba, mire el sillón que tenia al lado y me arrastre, literalmente, a el.

Como pude me levante y no pasaron ni cinco segundo de aver tocado el sillon y empece a soñar,osea me dormi.

Holiwiis personitas bellas, como comprenderán tuve que rescribir el libro por que cuando lo escribí era una chamaca miada, sigo siendo una chamaca miada pero con mas conocimiento en la escritura.
Prefiero mas esta versión que la anterior. Si les gusta estare actualizando cada viernes. (Menos este capítulo ya que es el primero)

Sigan disfrutando de su lectura.
(Yo no hago las imágenes, las hace una IA)
Si quieren la playlist completa dense una vuelta por mi Instagram.

Los amooooooooo ♥️