DESEOS
ELISA
Como si fuese Voldemort, un perro que cuando lo nombran corren en dirección de eso. Me detuvo con su mano en mi hombro de manera suave y delicada.
-Hola - me miró con sus ojos azules.
Mire sin decir nada, sus azules generaron un movimiento brusco de mis entrañas.
-Hola - le respondí con una voz fría.
Podría decirme dónde está el laboratorio de química? - me sonrió de una manera muy pacífica, hizo que mi estómago se volviera a girar, mis piernas temblaron ante su cálida sonrisa, sus gruesos y femeninos labios curvados...
-Bajo el edificio uno. - Señale el nombrado con un dedo que obligue a no temblar.
Retiró su mano haciendo que me de un frio en mi hombro aunque el aire sea asquerosamente caliente. Se paró frente a mí evitando que siguiera con mi camino.
-Fernando - dijo extendiendo su mano y sonriéndome de la misma forma, mis piernas volvieron a temblar.
-Elisa - dije apretando su mano para no ser descortés.
-Un gusto, Eli.
Duró su mano pegada a la mía unos segundos antes de irse y guiñarme un ojo. Volví a sentir ese frío en mis manos, aunque el sol pegara lo más que daba sobre nosotros. Quemando mis fosas nasales.
Vi su altura descomunal y su cabello tan negro como la oscuridad marcharse hacia el laboratorio de química.
Aléjate de él. No quiero saber ni enterarme que hiciste el más mínimo contacto con él.
Las palabras de Brian retumbaron entre mi cabeza. Mire mi mano y volví a escuchar mi nombre salir de su boca. Eli. Lo sentí tan cálido y suave, tan delicado...
Aléjate de él.
No quiero saber ni enterarme que hiciste el más mínimo contacto con el.
Mire hacia al frente bajando mi mano y con las piernas flaqueando me dirigí a mi salón.
Todas las mujeres me miraron con desprecio, sentí su mirada quemando mi presencia, como si quisieran asesinarme.
Celos. Olía a celos enfermizos.
-Ey - me dijo Isa tronando los dedos enfrente de mis ojos - ¿En que tanto piensas?
-En nada - negué repentinamente.
-Enserio?, ya es receso y tu culo sigue pegado a la butaca.
La mire con ingenuidad, no me di cuenta del pasar del tiempo, solo sentía la incomodidad en mi ser ante las miradas asesinas de las mujeres.
-Vámonos. - me dijo.
Mire la hora en mi teléfono y me cuenta que solo faltaban cinco minutos para que se terminara el descanso.
-Debemos ir a la historia. Despega tu culo de la silla.
-A ver, a ver, que está pasando? - llegó Karla de la nada, sudada y con un balón de básquet en el brazo.
-No se que trae esta loca, no despega su culo de la silla.
-Ya dijiste mucho culo - le dije.
-CU.LO. - dijo retándome.
-Oigan, esa maestra si nos hace falta. - anuncio Karlita
Tomé mis cosas y salí del salón junto con Isa. Las tres nos dirigimos a la clase de historia, donde nuevamente nos topamos con Fernando.
-Si es cierto - habló Karla - si somos del mismo grupo, ¿por qué no entró con nosotras a la clase anterior?
-No se - le respondió Isabel - por qué no le preguntas?
-Me da pena.
No me río porque podría ser yo.
Seguía sintiendo el veneno que disparaban por los ojos de las compañeras. Y como Fernando me veía. Y como Einar veía a Fernando. Y como Azriel e Isabel veían a Einar divertidos. Y como Karla no entendía absolutamente nada y yo menos.
Celos. Comprende a la perfección esa palabra muda que salió de los labios de Isa.
Negué confundida ante lo mencionado... Einar y yo solo éramos amigos... al menos pensaba que Einar solo me miraba así... Por que, si fuera por mi, seriamos... mas que amigos.
Pero en el fondo deseaba que me quisiera de otra manera. Que hubiera esperanza. Pero solo es eso. Un deseo. Y los deseos no se cumplen.
-Eli! - me abrio la puerta la hermanita de Isa. - Pasa, - se hizo a un lado - esta arriba, en la azotea.
-No vienes tu?
-Oh, no, estoy esperando el pastel. - Me sonrrio.
Subi a la azotea en busca de Isa.
-Y tu amor platonico?
-Todavia no llegan - me respondio mirando el paisaje. - Sientate.
-Que se siente tener diecisiete?
-Tu cumpliste diecisiete antes que yo, dimelo tu.
-Como que no estas muy feliz.
-tengo la misma la emocion que tu cuando cumpliste diecisiete.
-Tu no eres yo Isabel.
-No lo soy, pero tampoco me gustan mis cumplea;os, igual que a ti. - La mire, esperando a que dijera mas. - No odio a mi hermana, solo que mis padres me desplazaron cuando ella nacio.
-Donde esta la cumplea;era! - Az llego gritando.
La expresion triste de Isa se esfumo en cuanto vio a Az, en su lugar aparecio una gran sonrrisa y un brillo en sus ojos.
Einar se sento a mi lado.
-Ya casi llega el pastel. - Dije viendo a Einar.
-Le compraste algo? - me pregunto.
-Un collar de Harry Potter. Y tu?
-La nariz de Voldemort. - y como no vi Harry Potter no entendi. - Es que Voldemort no tiene nariz... Olvidalo - trato de explicarme. - Un Funko de Harry Potter.
-Ya llego el pastel! - Por quue todos llegan gritando? atras de Ximena llego Karla quien graciosamente mide lo mismo que ni;a de catorce a;os.
-Mandaste a hacr ese pastel? - pregunte al ver un pastel... deforme, mal forrado, con letras verdes.
-Yo te lo pude ver hecho -Dijo Az
-Ay, si Azriel. - Dijo Einar. - Primero quemarias la casa.
Nos comimos el pastel y disfrutamos del momento mientras Dancing Queen animaba el amiente.
Holiwiis mis inestables.
Que se cumpla el deseo o que no se cumpla?
Los deseos se pueden hacer realidad?
Ustedes que opinan, yo digo que a medias.
No se olviden de seguirme y votar.
Los amoooooooooooo.♥️
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