En memoria de mi gatita que fallecio attopellada en inicios del 2023.

Descansa en paz Margaret🕊

ELISA

La luz natural del  atardecer daba directo en mi cara, rodeada de palmas y arboles en una banca de un peque;o parque al que solia ir cn mi padre...

Era reconfortante este lugar lleno de recuerdos, justamente aqui conoci a Brian una noche  muy oscura.

—Eli — dijeron a mi lado. Me asuste y fue muy notable. — Te hable antes de sentarme pero estabas tan sumida en tus pensamientos.

Lo mire a sus azules sin decir nada.

—Estas bien? estas un poco... rara. — dijo tomando mi mano.

Un lobo vestido de obeja.

—Te puedo llevar a mi casa... 

¡Él viola a las mujeres Elisa!

—Aunque si no te sientes comoda, con gusto te acompa;are a la tuya... — Se relamio los labios.

No sabia que hacer, no lo creia del todo, tal vez Brian solo estaba celoso... o  no. Y si el tiene razon?

Estaba en mi lucha mental entre si creerle a la fuerte voz de Brian rega;andome o a los ojos tiernos de Fernanddo que me veian briilantes. Volte al suelo al sentir una cosa diminuta restregarse en mi pierna.

Un pretexto perfecto para quitar la mano de Fernando.

—Ay,  que hermoso estas. — le dije al peque;o gato, lo vi y analice por un buen momento, acariciando su pelaje blanco con manchas negras y cafe. — No eres hermoso, eres hermosa, una bella nena. — Puse a la gatita en mi regazo y volte hacia los ojos que me estaban viendo. — Que?

—Soy alergico.

—Ay que pena, con lo hermoso que son los gatos...

—Si... — vi su cara de asco mirando a la animalito. — Entonces regresando a mi pregunta.  — me miro.

—Si... sobre eso — rascaba el lomo de  la gatita. — Yo creo que no.

Intento mantener su apecto iocente, vi fuego arder en sus pupilas.

—Porque no? — me pregunto delicado

—Han sido fantasticos estos dias, no me mal interpretes, pero no quiero ir a tu casa o que tu vengas a la mia.

Se rio, una actuacion perfecta.

—Eli, querida — paso susnudillos por mi mejilla para luego toar mira cara con su mano y apretar  con delicadeza — tu no entiendes — Fue aumentando la fuerza de su agarre — A mi ninguna mujerr me ha dicho que no — me sonrrio de la misma manera que lo hacia, si no m estubiera lastimando problablemente le ubiera dicho que si.

—Fernando sueltame — lo tome por la mu;eca — me estas lastimando.

—Me importa un carajo — borro sus sonrrisa — tu no seras la primera en decirme que no, ni tuu ni nadie.

No se como pero lo mordi tan fuerte que sonlto un quejido y safo su agarre. Me levante a sustada y me miro.

—No sabes en lo que te metiste... disfruta tu podrida vida mientras puedas.

Se levanto, por un momento pense que iria a mi, pero no, solo se fue.

La gatita se volvio a restregar en mis piernas en un ronrroneo calido.

Holiwiis mis inestables, como andamos?

Que les pareció? les gusto?

A mi también me cae mal Ferrrnando y yo se que a ustedes también.

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Los amooooooo.♥️