• 3 •
-____-
-...-
-____...-
-...-
-¡____!-
-Ay, ya no me grites- Lloriqueé luego de reaccionar.
-Es que no me haces caso- Dijo Jin -¿Qué es lo que te tiene tan distraída que ni siquiera puedes concentrarte en el trabajo?-
-Hm... No es nada... -
Solo que... ver a ese chico Langa patinar como anoche... fue genial.
Yo también quiero experimentar eso...
Se le notaba como se divertía y la adrenalina por todo su cuerpo...
Yo también quiero experimentar eso... como sucedió con Joe cuando...
-¿Eh? ¿Estás bien? Te pusiste roja ¿Tienes fiebre?-
-¡¿A..Ah?! N..No, no, no es nada, estoy bien-
Regresé a intentar concentrarme en trabajar cuando la puerta se abre y entran Reki y Langa.
-Hola Reki y... tu eres Langa ¿No?- Sonreí mientras los guiaba a una mesa libre.
Langa tenía heridas en el rostro.
-Si, es él- Responde Reki antes que el propio Langa.
-¿Puedo preguntar que le sucedió?-
-Me caí- Responde Langa simplemente.
-Estaba patinando y no lo hizo muy bien que digamos- Dice Reki.
Eso sí me sorprendió.
-¿Eh? ¿Cómo? Pero si ayer... no entiendo-
-Lo que pasa es que él hacia Snowboard cuando vivía en Canadá así que sabe poco-
-Entiendo- Sonreí y miré a Langa -Fue genial-
Él me mira y sonríe un poco y estando un poco sonrojado.
-Bueno, tengo que seguir trabajando, decidan que van a ordenar y me llaman-
-¡Claro ____-San!- Dice Reki.
Les sonreí y me fui a seguir trabajando.
-____-San ¿Puedo preguntarte algo?-
-¿Huh? ¿Qué es?- Pregunté mientras dejaba el pedido de un cliente en su mesa.
-¿Aún tienes la tabla que te hice?-
-¿Eh?- Lo miré un momento y sonreí, caminé hacia su mesa -Claro que si, aunque no la use... me gusta mucho, porque lo hiciste tú-
Le revolví el cabello mientras él reía y seguí con mi camino hacia la barra.
-¿Huh? ¿Una tabla?- Pregunta Langa.
-____-San fue la que más me apoyó en esto del Skate y como a ella también le gusta, decidí que le haría una para que lo intentara- Dice Reki.
-Si, pero nunca conseguí ni estabilizarme en una tabla así que... dejé de intentarlo y me centré en mi trabajo y prioridades- Dije desde la mesa que estaba atendiendo.
Langa asiente.
Aquellos chicos se quedaron hablando por bastante tiempo mientras yo trabajaba, de vez en cuando me incluían en la conversación hasta que tuvieron que irse.
-Nos vemos ____-San-
-Adiós chicos- Me despedí sonriendo y los vi irse.
Suspiré y ayudé a mis demás compañeros con los últimos clientes y luego a cerrar.
-Eso es todo por hoy, nos vemos mañana- Dije saliendo.
Ellos se despiden de mi y yo voy a mi casa.
Estando allí, miré la patineta y me la quedé viendo fijamente hasta que suspiré.
-Nop- Salí de mi habitación y cerré la puerta.
Dudé y regresé a por ella para luego salir de casa nuevamente e ir a la plaza.
Era de noche así que tendría el lugar para mi.
Ver a Langa patinar me regresó la curiosidad y ganas de aprender.
Yo también quiero sentir eso y divertirme...
Pero primero... debería aprender a estabilizarme en la tabla...
-Hm... okey... okey, okey, yo puedo- Dije dejando la tabla en el suelo y apoyando un pie.
Comencé a balancear la tabla y mentalizarme para poder levantar la otra pierna pero cuando sentía que la estaba por levantar, me temblaba y la volvía a apoyar.
-Agh... -
¿Por qué será que tengo tanto miedo...?
Si me caigo ¿Qué importa?
Fruncí el ceño decidida y levanté mi pie para luego apoyarlo en la tabla, me tambaleé un poco pero conseguí quedar de pie.
Sonreí pero luego dejé de hacerlo cuando mis piernas se fueron hacia atrás de golpe y yo caí al suelo.
-¡Agh!- Me agarré el brazo al sentir el dolor en mi codo -Kuso... Tsk-
Suspiré y agaché la mirada, miré la patineta y la agarré.
-Quiero hacerlo... - Murmuré y me levanté nuevamente dejando la tabla en el suelo y subí un pie.
Caí varias veces más.
No conseguía mantenerme y eso comenzaba a frustrarme.
-Está bien... una vez más, si no lo consigo, no sirvo- Dije levantándome decidida.
Volví a apoyar mi pie en la tabla y luego suspiré. Levanté el otro pie y lo apoyé en la tabla pero antes de quedarme por dos segundos ya estaba cayendo.
¿Enserio... ?
¿No puedo hacerlo... ?
-¡Huh!-
Abrí los ojos de par en par cuando sentí unas manos grandes y fuertes atraparme antes de chocar contra el suelo.
-¿Qué es lo que intentas hacer?-
Me lo quedé viendo, su sonrisa y mirada de curiosidad me hacían quedarme idiota y se me habían olvidado las palabras.
-Y..Yo... etto... - Reaccioné y me levanté sonrojándome -N..No hacía nada-
-Eso no es lo que he visto- Dice levantándose ya que para atraparme tuvo que arrodillarse -Llegué hace rato y te vi intentar subirte a la tabla-
Ambos miramos a la tabla junto a mi pero y aparté la mirada.
-¿Me has visto?-
-Así es- Dice.
¡Que vergüenza!
-Y... supongo que crees que soy patética y que no debería de intentar hacer esto... - Murmuré sin mirarlo.
-¿Por qué creerías eso? En realidad, me da curiosidad que quieras aprender, no lo sé... me gusta-
Abrí los ojos de par en par y me sonrojé aún más.
Nos quedamos en silencio pero él camina hacia mi patineta y apoya un pie y luego se sube, comienza a patinar por todos lados y por mi alrededor.
Yo sonreía mientras lo observaba ya que quería hacer lo mismo y me parecía genial.
Hace un salto y luego se estaciona frente a mi.
-Puedo enseñarte- Dice y tiende la mano hacia mi.
-¿Por qué no harías?- Pregunté entrecerrando los ojos.
-Porque me parece admirable que quieras aprender sabiendo que muchos ven el Skate como algo de criminales o delincuentes-
Yo negué.
-El Skate es para cualquiera que esté dispuesto a aprender y divertirse, eso lo sé-
Él sonríe y asiente estando de acuerdo conmigo.
-Entonces... ¿Aceptas que te enseñe?-
Miré su mano y suspiré, levanté la mía y lo sostuve.
-E..Está bien... - Murmuré.
Él sonríe y se baja de la tabla.
-Oh... por cierto, no sé tu nombre- Dijo.
-____... soy ____- Dije.
-Es un placer- Hace una corta reverencia y sonríe.
Yo igual sonreí divertida.
-Y por cierto... Dime Kojiro- Me mira y guiña un ojo.
Yo me sonrojé nuevamente y asentí.
-Bien, súbete- Dice.
-Me voy a caer de nuevo- Dije suspirando.
-No lo harás, confía en mi-
Resoplé y apoyé un pie en la tabla, subí el otro pie pero la tabla fue hacia atrás.
Una de las manos de Kojiro me sujeta la mía y la otra me rodea la cintura para dejarme en el suelo de pie.
-¿Estás bien?- Pregunta.
-Si... gracias- Murmuré -No creo que esto vaya a funcionar-
-Te estás rindiendo muy rápido-
-Hm... créeme que lo he intentado por varios años... solamente no me sale-
-Bueno, entonces déjame guiarte. Tus pies los pones muy al frente y juntos, debes se colocarlos más separados pero no tanto en los extremos-
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro