Los siguientes días apenas tuve tiempo de practicar para el torneo que Adam organizó y que claramente entré.

Aunque no se lo dije a nadie ya que conociendolos... me dirían que lo dejara.

Ya que... competir contra Adam sería de locos pero ese tipo me tiene harta.

Además... si es de idiotas pero... a veces son divertidas esas clases de idioteces.

-____ ¿Puedes quedarte un momento luego de la hora de salida?-

Dejé los pedidos de unos clientes frente a ellos y miré a la gerente.

-Claro, no hay problema- Dije.

Ella asiente sonriendo.

Aunque su sonrisa era un poco apagada...

¿Pasará algo?

Reaccioné cuando escuché a otro cliente llamándome.

-Voy enseguida- Dije y fui casi corriendo hacia allí.

El día fue bastante lento ya que no hubieron tantos clientes como suelen haber pero aún así, cuando llegó la tarde, fui donde la gerente y vi a todo el personal reunido.

-¿Qué sucede?- Pregunta una compañera.

-Si ¿Qué pasa?- Pregunté.

La gerente agacha la cabeza y suspira.

-Vamos a cerrar... -

Todo se quedó en silencio por bastante tiempo pero no tardamos en preguntar y alarmarnos.

-Lo siento chicos... las deudas subieron y... perdimos clientes así que no hay forma de pagarlas... por eso... vendí el lugar- Dice -Debemos desalonar todo para mañana-

-¡¿Mañana?!- Dije alarmada.

-Si... lo siento-

Nosotros suspiramos y volvimos a guardar silencio.

¿Ahora que haré?

Tengo que pagar mis cosas, me costará encontrar otro trabajo.

Resoplé.

No quedaba de otra... debería empezar a buscar un trabajo nuevo.

En lo que quedaba de la noche ayudamos a la gerente a guardar todo.

Pero al terminar, agarré mi patineta, me despedí de todos y salí.

Caminaba con mi patineta bajo el brazo y mirando al suelo pensativa.

Llegue hasta la plaza y me senté en el medio de esta abrazando mis piernas y tratando de pensar en algo.

-Ya no creía encontrarte aquí- Miré hacia el frente.

-Hola Kojiro- Dije tratando de sonreír pero mi preocupación me ganó.

-¿Qué sucede?- Pregunta sentándose junto a mi.

-Hm... no es nada por lo que preocuparse-

-Tu mirada dice otra cosa-

-No me hagas caso- Sonreí y miré al cielo.

-____... no soy tan idiota como Kaoru cree que soy... sé que sucede algo-

Suspiré.

-Puede ser... pero lo solucionaré- Dije rápido -Aún... no sé como pero lo haré-

-Sé que lo harás pero... quiero que me digas... tal vez pueda ayudarte-

-No te preocupes... enserio Kojiro-

-Ya, no me hagas insistir más- Dice.

Yo bufé y aparté la mirada.

-La cafetería en la que trabajaba cierra para mañana en la mañana, tengo algunas cuentas atrasadas así que planeaba pagar terminando el mes pero... ya sabes-

Suspiré.

-Necesito encontrar un nuevo trabajo... -

Kojiro se queda en silencio pero luego lo vi sonreír y mirar al frente.

-Bueno... te dije que podría ayudarte ¿No?- Se levanta y me tiende la mano para que haga lo mismo -Ven-

Me jala y ambos comenzamos a caminar.

-¿A dónde?- Pregunté.

-A mi restaurante. Voy a contratarte-

-P..Pero... -

-Tienes experiencia como mesera, le pregunté a Reki que tal lo haces y me dijo que era la que mejor atendía, así que... creo que ya aprobaste mis requisitos para ser mesera en mi restaurante-

Yo me quedé en silencio, sorprendida.

-¡¿Ah?!-

Llegamos al lugar y entramos.

-Bien, ponte esto- Dice pasándome un uniforme y yo confundida me fui al baño.

Tardé un poco en cambiarme pero luego, al regresar abrí los ojos de par en par al ver a los chicos.

-Hola ____-San- Saluda Langa siendo el más animado.

-¿Qué hacen aquí?- Dije pero les sonreí.

-Esta será tu prueba para poder contratarte- Dice Kojiro y los chicos van a sentarse en diferentes mesas.

-Seremos tus clientes y cada uno te tratará de una manera diferente, a ver como lo tomas- Dice Kaoru.

-Huh... - Asentí comprendiendo pero luego sonreí. Me dieron un momento para aprenderme el menú y luego ya estaba lista.

-Bien, puedes comenzar-

Al primero que atendí fue a Kaoru, él fue formal y pidiendo cosas de alta calidad, mi forma de atenderlo fue de "usted" y de forma elegante.

Me acerqué luego a la mesa de Langa y a él lo atendí como siempre lo hice desde que empezó a ir a la cafetería con Reki, sonriendo y siendo más suelta y no tan estricta.

Ahora que lo pienso... ¿Dónde está Reki?

Dejé de pensar y me acerqué a Miya y a Shadow, ellos hicieron como si me trataran mal y trataran de poner a prueba mi paciencia.

Yo sonreía y me calmaba para tomarles la orden y luego ir a donde Kojiro para darle los pedidos.

Mientras él cocinaba yo atendía a las necesidades de cada uno y hasta ahora me iba bien.

Esta prueba no se compara a mis días en la cafetería, y menos cuando era de mañana.

-Y listo- Dice Kojiro colocándose a mi lado.

-Estuvo bien... me sentí como en la cafetería- Dije sonriendo.

-Si lo hiciste bien, además de que no respondiste a los malos tratos de esos dos- Dice apuntando con la cabeza a Miya y Shadow.

-Si... en la cafetería habían muchos de ese y otros tipos así que estoy algo acostumbrada- Dije pero luego recordé algo y me reí -Aunque la primera vez que sucedió... le tiré la comida encima al cliente-

Kojiro se ríe.

-Aunque casi me despiden pero tuvieron piedad porque era nueva, Ah... lo que me costó no responder a los clientes... -

Kojiro me abraza por los hombros y yo me sonrojé un poco.

-Bueno, ahora sí le tiras el pedido encima al cliente... tendrías un motivo ¿No?-

Asentí.

-Aunque un motivo por algo que enserio me haya llevado al límite-