♡

Melissa les recordó a ambos que debían de ir pronto a la escuela, así que Scott se despidió de su madre con un abrazo y tomo con suavidad la muñeca de Lydia para guiarla a la salida.

—No sé qué paso... estaba tan segura —dijo la chica en un susurro una vez que se alejaron.

—Yo tampoco fui de mucha ayuda —admitió Scott en un intento de hacerla sentir mejor porque percibió un tono de frustración en la voz de la chica—. Pero no importa si él está bien —agrego.

Lydia asintió, pero de repente se detuvo, su cuerpo se tensó y se giró como buscando algo con la mirada.

—¿Lydia escuchas algo? —pregunto el moreno.

—No. No escucho nada —dijo, aunque Scott noto claramente que mentía.

♡

Salieron al estacionamiento del hospital y caminaron juntos en silencio hasta el auto de la pelirroja, Lydia se detuvo con Scott tras de ella. El moreno no iba a presionar a Lydia para hablar, pero le preocupaba el estado emocional de la chica, temía que ella de alguna forma se sintiera culpable y que perdiera la confianza en sus poderes o peor en ella misma.

—¿Está bien si te acompaño a casa?

—No —respondió Lydia tal vez demasiado rápido como si ya se hubiera anticipado a esa pregunta—. Scott estoy bien, no quiero molestarte.

—Oye, no es ninguna molestia. Al contrario, me sentiré más tranquilo al saber que llegaste a salvo —aseguro Scott.

Lydia medito por unos segundos la propuesta de su amigo, con la mano aun en la puerta de su vehículo, pero solo al ver la expresión de genuina preocupación en el moreno, en el reflejo de su ventana, termino por aceptar, le dio a Scott las llaves y ella subió al lugar del copiloto.

Scott encendió el auto y Lydia hizo un gesto por el fuerte rugido del motor en sus oídos, el moreno espero un momento sin mencionar nada y cuando Lydia asintió con la cabeza, se puso en marcha rumbo a la casa de la familia Martin. La chica no se dio cuenta lo cansada que estaba hasta que se quedó dormida, en un sueño ligero pero reparador.

—Lydia ya llegamos... —dijo la voz suave de Scott.

Abrió los ojos de inmediato parecía que solo había parpadeado, le tomo un segundo recordar donde estaba, y lo que había sucedido, pero sentía un zumbido constante como si se hubiera alojado en su cabeza, aunque parecía más tolerable ahora que estaba con Scott.

—Gracias...

—No tienes que agradecer. Sabes que si necesitas hablar con alguien...

—¿Cómo puedes estar tan tranquilo? ¿Por qué no estas molesto conmigo? No te das cuenta que Stiles pudo morir por mi culpa.

—Lydia fue una noche difícil para todos, pero esto no es tu culpa —dijo en tono conciliador —También estoy preocupado por Stiles y sabes que todos hicimos lo mejor que pudimos, te prometo que siempre haré mi mejor esfuerzo para poner a todos a salvo, puedes confiar en mi —dijo Scott y Lydia le creyó, pero no quería poner más peso sobre los hombros del moreno, así que le aseguro que estaba bien y se despidió con un beso en la mejilla para entrar a su casa intentando ignorar el sonido en que se acentuó en cuanto se separaron.

♡

¡Hola! amo la forma en que Scott se preocupa por todos en su manada, gracias por leer.