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Taehyung carraspeó por segunda vez cuando su delineado en su ojo derecho no salió igual al izquierdo, suspiro tratando de calmarse porque odiaba que nunca se vieran iguales ¡Tenía apariencia de niña de 5 años maquillándose con las cosas de su madre!
Guardo todo el maquillaje enojado y lleno de aire sus pulmones meditando con ojos cerrados sobre su maquillaje. Abrió los ojos y peino sus cabellos rosas pastel ignorando su maquillaje de ojos horrendo e hizo gestos coquetos seduciendo a su reflejo en el espejo.
Miró su divino reflejó; llevaba un crop top negro con una calavera blanca y alas fucsia en medio y una falda rosa pálido que caían a mediados de sus llenitos muslos, sus hermosas piernas estaban cubiertas por una medias negras largas que terminaban sobre sus rodillas y un ligero rosa entre estas y su hermosa falda. Sus rudos zapatos pastel de tacón cuadrado le hacían ver más alto y sentirse poderoso.
Siguió observando su outfit completo y para terminar se colocó sus anillos y gargantilla en conjunto a sus aretes largos de cruces y calaveras; ahora sí se veía bien y tenía que admitir que aunque no era mujer se veía como una Diosa. Se sobre salto cuando escucho la puerta del departamento abrirse; sonrió y dio una última mirada al espejo alisando su perfecta ropa antes de correr a los brazos de su baby.
Jungkook volvía de un agotador viaje de negocios, en donde estuvo una semana incomunicado con su niño por lo que supo que le esperaba un delicioso castigo. Tata salto sobre él y desprevenido, lo recibió en brazos cargando su diminuto cuerpo sin importar de su traje negro se arrugara. Compartieron un dulce beso de bienvenida que poco a poco fue subiendo de tono haciendo a ambos gemir cuando se separaron. Juntaron sus frentes con los ojos cerrados y sus manos enlazadas.
— Te extrañe — Habló el de ojos miel, besando el rostro de su hermosa pareja mientras esté reía y caminaban hacia el gran sofá, creando un ambiente muy conocido por ellos. —Me pongo celoso de imaginar que todos te miran como yo lo hago—.
El mayor sonrió escuchando las palabras de su niño; cayendo sentado en el sofá con este encima besando su cuello haciendo marcas notorias. Llevo sus manos a los glúteos del pelirrosa, amasando sus nalgas y sus muslos carnosos sintiendo como cierto amigo se despertaba y su amo gemía.
—¡Joder, quiero follarte! — Solto el pelinegro de repente ganándose una carcajada de su pareja.— Me encanta cuando te pones perra pasiva—. Kookiie se mordió su labio inferior reteniendo la queja cuando su dulce novio dejo de atender su cuello para mirarlo juguetón y darle una fuerte cachetada haciéndolo gemir agudamente; Joder amaba lo tóxico que podía llegar a ser.
— Parece que se te olvidó una de las reglas— Lo tomó fuertemente de sus mejillas mirándolo con un brillo en sus ojos — Sabés que odio que alguna grosería salga de esa boca de puta que tienes— Soltó sus mejillas y dió un giro rápido quedando abajo del mayor, quien ahora gemía como desesperado.
Rompió la camisa azul marino del mayor dejando caer los botones por doquier y uso la corbata como correa cortándole un poco la respiración. Jungkook solo podía gemir sintiendo sus lágrimas de placer resbalar por su rostro disfrutando de las caricias placenteras mientras movía sus caderas en busca de más.
—Tú eres el único chupapollas. — Tiro de su cabello con fuerza haciéndolo chillar. Lamió su cuello bajando hacia su pecho lamiendo uno de sus roados pezones escuchando los gemidos de placer y deleitándose de su delicioso novio. Sentía la erección de su niño restregándose contra la suya con furia provocándole cada vez más como si le retará a pecar de forma peculiar.
Se levantó con dificultad cargado a su pelinegro llevándolo a su habitación con cuidado de no caer por sus hermosos zapatos; quería devorarlo, someterlo y dejarle claro los roles de su relación de forma exitante. El mayor observaba con una sonrisa lujuriosa los ojos ahora negros de su amo mientras lo provocaba con pequeños movimientos mientras era llevado a la habitación para ser devorado como el platillo favorito de su Tae.
Llegaron a la habitación en cuestión de segundos, sus pieles sudorosas rozaban entre sí, sintiendo el calor del otro. La habitación con estampados rosa y negro, fue testigo de la manera tan salvaje en la que se quitaban las prendas, lucían como animales. Jungkook le saco el crop top a su novio casi rompiendolo y la falda la arrancó, dejando ver las hermosas braguitas blancas con encajes rosas que cubrían inútilmente la gran erección del menor. Sonrió con grandesa porque amaba la forma de vestir de su niño, fue empujado hasta la cabecera de la cama con sábanas negras y miro como Tae no lo había desnudado pero lo ataba a la cama.
Tae le daría un castigo a su novio por tres simples razones; por decir groserías cuando no estaban haciendo el amor, por decir que era un pasivo y la más importante: Por no haberlo llamado mientras estaba de viaje.
—¡No me llamaste mientras estabas de viaje! —. Jungkook lo miro con ojitos de conejo, buscando en su mente la respuesta pero no pudo articular palabra ya que una corriente de excitación en su cuerpo se hizo presente cuando Taehyung colocó vibradores en sus pechos estimulandolos. Taehyung había aprovechado el despiste de su mayor para sacar la maleta especial debajo de su cama y quitarse los zapatos.—¡No me has respondido! —.
—¡Ngh!—Kookiie chilló de placer cuando las vibraciones aumentaron al punto de empezar a doler. Miró a su novio y se sintió pequeño, su baba se deslizaba fuera de su boca, su cara roja como un tomate y su cabello despeinado dándole una apariencia exitante.
—N-No…Aaaah~bia se~señal — Estaba haciendo un gran esfuerzo por retener los gemidos para responder a su novio. Tae desconforme le quitó toda la parte inferior del traje incluyendo boxers y zapatos dejándolo con apariencia destruida. Jungkook gemía mientras las lágrimas comenzaban a deslizarse por sus lindas mejillas.
Tae tomó el bote de lubricante de uva y vertió una cantidad considerable en sus dedos para llevarlos a la entrada de su novio y dilatarlo mientras que con su otra mano tanteo la piel de su ahora esclavo, sintiendo como está es realmente suave como el algodón. Observó cómo su novio empezaba a lubricar por lo que tomó en su mano el miembro impidiéndole correse.
—Ah~ ¡N-no p-por~ favor! —.
—¿Porfavor qué? —. Sonrió con malicia viendo cómo se removía desesperado.
—¡AMO! —Gritó desesperado sumergido en el dolor y placer.—Ah~ ¡mgh!—.
Taehyung sonrió victorioso y sacó los debos de la entrada del mayor; más no liberó su miembro, pues ese era su castigo. Miró hacia la maleta tendida en el suelo y vió un anillo por lo que rápido lo tomó y colocó en el miembro del contrario. Jungkook sentía que moriría, porque ahora se arrepentía de no llamar a su pequeño demonio aunque no fuese su culpa, realmente no había señal, pero ahora no podía suplicar porque sus propios gemidos se lo impedían.
—No llores, en un momento tendrás tu recompensa ¿Donde me necesitas? —. Preguntó besando las lágrimas de kook y luego se besaron de manera pasional, sus lenguas bailaban al compás de la pequeña lucha, en la cual Tae resultó ganador.
— Aquí…y-yo te necesito— Suplicó mientras movía sus caderas. El pelirosa se quito sus lindas bragas blancas y miro su miembro, sonriendo por como casi le llegaba al estómago de kookiie cuando estaba entre sus piernas.
Kookiie jadeaba ante el rudo trato de su niño, Taehyung sabía lo exitante que era para él este tipo de tratos y siempre lo usaba en su contra.
Porque Taehyung parece un ángel y Jungkook un demonio. A la vista de el mundo es así pero la realidad es muy diferente.
—Ah~ m-más ¡mgh!—. Tae comenzó a frotar su miembro en la entrada del mayor para penetrarlo de golpe. — Aah~ s-si—.
En la habitación resonaban los gemidos de ambos y el choque de sus pieles como una exitante melodía. Taehyung mordía al mayor causándole marcas en su piel de durarían en ser borradas, tomó el cuello del mayor dejándolo casi sin respirar mientras las duras embestidas subían de nivel. Desató al mayor y rápidamente esté ya estaba saltando en su polla.
—Eres una puta necesitada —. Nalgeo a su baby repetidas veces dejándole manchas en esa zona. Jungkook saltaba sobre el como desesperado, hasta que se le ocurrió algo. Abrazo a su menor y comenzó a gemir en su oído, viendo al menor deleitarse con éstos.
Taehyung callo en la cama y Jungkook se dió la libertad de disfrutar de lo lleno y cálido que se sentía. Los vibradores fueron retirados por Tae quien los quito rápidamente estimulando dolorosamente al mayor quien se removió aún saltando sobre su miembro.
—Mierda —Expreso el mayor sintiendo a flor de piel como el interior de su novio se volvía más cálido. Sonrió por los besos en sus clavículas, su baby estaba embobado con los pequeños tatuajes en su cuerpo.
El brusco sonido de sus pieles chocando en esa lujuriosa danza acompañada de los dulces sonidos que ambos producían inundaban la habitación. Taehyung recostó la espalda de su baby y colocó ambos piernas de esté en sus hombros sin parar las embestidas.
—¡Ahí n~no! — Gimió Jungkook cuando Tae le retiró el anillo y comenzó a masturbarlo al tiempo de las embestidas —¡Ahg!…¡Ya casi!—.
No sé pudo contener más cuando su niño tocó su punto dulce estimulandolo de más de dulce manera y otra vez atacando sin piedad para llevarlo a la locura. Se corrió ensuciando su estómago y el de Tae, viendo como esté tomaba un poco con sus dedos y lo metía a su boca para saborearlo.
—¡Increíble! Eres la mejor de las putas. A pesar de haberte venido ya, s-sigues s-succionándome— Susurro entrecortado en el oído del mayor cuando no pudo contenerse entre espasmos y embestidas por lo que terminó derramando su semen en el interior de su amada pareja.
Taehyung callo sobre kookiie agitados se acomodaron pero dieron un giro quedando este último sobre el pecho del pelirosa para comenzar con los mimos y palabras dulces.
O bueno hasta que Jungkook divisó el rostro de Tae.
—¿Y a tí que te paso?— Pregunto mirando su rostro con burla— Parece que una niña de 5 años te maquillo—.
Taehyung jadeo sorprendido en una reacción demasiado exagerada y luego empujo a su novio para levantarse rápidamente y verse al espejo con horror.
—¡Esto es tu culpa!— Grito mientras señalaba con molestia a su novio y corrió al baño para limpiar su rostro.
—Bb pero si eres hermoso— Jungkook se levantó sin intención de cubrir su cuerpo y camino hacia el baño abrazando a su novio— No es mi culpa; a penas y llegué y te lanzaste en cima de mí—.
—Porque merecías un castigo— Dijo el pelirosa viendo a su novio por el espejo mientras se colocaba una cascarilla. Jungkook sonrió y lo miro con burla al recordar algo.
—¿Sabés? Hoy me dijeron que eras el sugar baby más lindo del mundo y me encargue de contarles con detalles como muerdes la almohada— Soltó sin más viendo el rostro serio de su niño por lo que se echó a correr.
—¡Jeon Jungkook; SERÁ MEJOR QUE CORRAS!!!!!— Grito enojado y Kookiie chilló de emoción al saber que gracias a las apariencias recibirá un delicioso castigo.
Un poco kk pero esto fue lo que salió.
14/02/22.
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