Podía asegurar que la gente cambiaba cuando se daba un baño y se ponía decente.

Estaba tan acostumbrado a su ropa casual en la cafetería que verse en el espejo usando el uniforme del casino fue como haber visto un fantasma en una casa abandonada a las tres de la mañana para Anne.

Llevaba una camiseta de botones blanca junto con una chamarra roja con detallas negros y botones dorados, una falda a cuadros roja y negra, un par de medias blancas y unas zapatillas bajas de color negro.

Bueno, en resumen: rojo, negro y blanco.

« Me veo como una chica en Kakegurui, bien puedo hacer cosplay subirlo a TikTok » bromeó consigo misma.

La tarde anterior alguien había tocado la puerta de su apartamento y le había dejado el uniforme junto con la tarjeta de los empleados que Anne había visto en el casino.

Aún no estaba muy segura de qué se suponía que tenía que hacer, pero Sasha había prometido que le mandaría una guía especializada para que le diera un recorrido y le explicara cómo funcionaban las cosas en el casino.

Debía aceptar que había disfrutado bastante haberle mandado una carta de renuncia a Simón, pero también debía aceptar que extrañaría a Simone.

Pero estaba alegre de que ahora su tendría un buen sueldo, así que eso sobrepasaba el sentimiento de culpa que tenía por abandonar a su mejor amiga en el trabajo.

Su teléfono vibró en la cama, sus cejas se hundieron con confusión pero creyó que probablemente sería la chica de cabellos rojos preguntando por como iba su día en el casino.

Lo tomó y se sorprendió un poco al ver un número desconocido en la pantalla.

Número desconocido:

¿Estás libre hoy?
Soy Marcy, por si acaso :)

No preguntaría cómo había conseguido su número.

Anne:

Lamentablemente tengo trabajo 😔

Marcy:

La cafetería consume mucho tiempo, ¿No?

Anne tomó su bolso y se levantó de la cama, sería mejor ir saliendo de su casa, no quería llegar tarde a su primer día de trabajo.

Se colocó un abrigo y tomó las llaves de su departamento.

Llamó al ascensor y una vez que estuvo dentro, sacó su teléfono y entró a su conversación con Marcy.

Anne:

Bueno, ahora trabajo en otro lugar.

Marcy tardó unos segundos en responder, pero seguía en línea, seguramente respondiendo mensajes mucho más importantes que los de Anne.

Pero finalmente, la palomita del mensaje se pintó de azul y un "escribiendo" apareció debajo de su nombre.

Marcy:

¿Enserio?
Me alegro por ti :)

¿Con qué se respondía a eso?

Anne:

Gracias :)

Anne guardó su teléfono en su bolsillo y salió del ascensor.

Saludó a la señora encargada del mostrador en su bloque de apartamentos, su cabello era bastante divertido y no parecía un corte que alguien de su edad podría tener y usaba unas grandes gafas de color rojo.

Siempre estaba acompañada de su mascota, un gato negro bastante leal, ya que nunca se alejaba de su lado durante toda la jornada de trabajo que tenía.

Anne la saludó con la mano y una sonrisa apareció en el rostro de la señora mientras le devolvía el saludo amablemente.

Aguardó en la acera de la calle a que pasara un taxi, pero la calle estaba vacía y ni siquiera habían autos en esta.

Soltó un suspiro de cansancio y se resignó a tener paciencia.

♠♥♠

Anne escuchó como una mujer un par de años mayor que ella le explicaba como funcionaba la mesa de apuestas.

Sus manos repletas de anillos caros y brillantes iban de un lado a otro mientras ella hablaba, su cabello rojizo estaba recogido en una coleta alta y sus ojos negros y profundos pasaban de Anne a la mesa y las fichas esparcidas por esta.

Mikaela O'Connor era la guía de Anne y al parecer, la segunda mano de Sasha Waybright y Marcy Wu.

Mika, como ella había querido que Anne la llamara desde el primer momento, trabajaba para ambas familias y sus integrantes, pero tenía una clara preferencia y muchas más responsabilidades con las dos hijas menores de estas.

Resultaba que sus padres no tenían problema con esto, ya que creían que Sasha y Marcy eran simplemente dos adolescentes inmaduras que necesitaban escuchar una parte moral de vez en cuando.

Mika dejó de hablar cuando su teléfono comenzó a sonar en su bolsillo, esta soltó un resoplido y se excusó con Anne para luego alejarse un par de metros y contestar la llamada.

-¡Mika linda de mi corazón!

-Hola, Marcy.

No era nada sorprendente escuchar a Marcy usar ese tono al sólo responder, ella solía hacer eso cuando quería algo y estaba dispuesta a hacer de todo por conseguirlo.

-¿Sabías que eres la mejor mano derecha que he tenido en mi vida?

-Soy la única mano derecha que has tenido.

-¡Por eso mismo!

-No te alargues tanto y dime qué es lo que quieres.

-¿Qué no te puedo hablar bonito solo porque te quiero de vez en cuando?

Marcy se quedó un par de segundos en silencio.

-Bien, ¿Has recibido a alguien llamada Anne Boonchuy? — terminó cediendo.

Mika observó de reojo a la chica parada detrás de ella.

-No, no he recibido a nadie con ese nombre.

-¡Te daré el doble de lo que ella te ofreció!

-Te escucho.

Mientras tanto, Anne observó el resto del lugar con curiosidad.

No era una fanática de frecuentar este tipo de lugares, nunca se imaginó que terminaría trabajando en uno.

Los caminos de la vida dan vueltas inesperadas al parecer.

-¿Donde está la estúpida de Mika?

Anne dió un saltito al escuchar una voz detrás de ella pero se calmó al sólo reconocer a la dueña de esta.

Sasha sonreía abiertamente a pesar de haber usado un tono firme y molesto, un lindo labial de un rojo cereza decoraba sus labios finos y llamativos, un delineado bien hecho te obligaba a centrar la atención en aquellos ojos azulados y brillantes.

-Está contestando una llamada por allá — Anne señaló a la chica.

Sasha hundió las cejas para luego abrir aun más los ojos con sorpresa como si hubiera notado algo.

La rubia se acercó a Anne y tomó su mano para llevarla con ella, la castaña se dejó llevar simplemente porque era imposible negarse a sentir la piel de Sasha contra la suya.

Pasaron entre el río de gente y esta vez Sasha no se detuvo a saludar a nadie, una que otra vez tiró al suelo la bebida de alguien pero luego se disculpaba y le ordenaba a una de las meseras que les llevara un trago gratis.

Anne estaba confundida, le costaba entender la forma repentina en la que Sasha había tomado su mano.

« Seguramente me va a quitar los riñones »

Llegaron a un manojo de escaleras hasta el fondo del casino, las subieron rápidamente y la rubia se tropezó de vez en cuando gracias a sus altos tacones rosas.

Sasha empujó a Anne a una habitación y se volteó para cerrar esta con llave.

-No malpienes esto — fue lo primero que la rubia dijo.

-¡No lo estaba malpensando! — Anne chilló en respuesta.

Sasha rodó los ojos y se dejó caer en la cama mientras Anne le daba un repaso a toda la gigante habitación.

Estaba repleta de pósters de diferentes bandas de las cuales Anne solo logró reconocer al rededor de dos, la castaña no se sorprendió al ver que había montones de maquillaje en el tocador, sin duda, esta era la habitación de Sasha.

¡¿Pero ella que mierda estaba haciendo en esta?!

♠♥♠

Perdonen el Click Bait no tan Click Bait, yo sé que ustedes solo tienen sexo en la cabeza. Vayan a terapia por amor a Sasha Gaybright, digo, Waybright 😔

No estoy poniendo notas de autor en la mayoría de mis historias últimamente, ¿Me extrañan?, Díganme que si porque si no lloro y no vuelvo a poner una nota de autor en mi vida 👿

Como sea, opiniones por aquí junto con las teorías para tomar inspiración 😘

Nos vemos ♡︎

♠♥♠