Antes de terminar el año escolar el director paso un listado de las chicas que serian ingresadas en la escuela en todos los años, ellas estarían semi internas en este lugar o sea: hasta las 4 e la tarde y eran las que tenían la mejor nota de las chicas del Orquídeas Doradas y otras extranjeras que se habian postulado para el programa piloto, estas chicas eran pocas que habían sido elegidas porque era un programa piloto, incluso él personalmente me dio la noticia en privado en su despacho.

— Creo que ya no hará falta que estés vestida de chico por ahora — dijo el director y a su lado estaba William sonriéndome orgulloso —por lo visto el viejo perdió la apuesta y yo también, me demostraste que eres una chica con unas ganas de luchar y quisiera la verdad quiero gente como tú en este lugar,— yo me sentí emocionada por la forma que me hablaba aquel estricto hombre — Quisiera saber si no te gustaría formar parte un tiempo mas extra como coordinadora de las chicas luego que te gradúes ya que te faltan 2 años para eso ¿ no? ¿Tendrías 16 no? ¿ o son 18? No ...— dijo buscando entre los papeles y Willliam se acercó y le susurro al oido — Si casi 18 años, ¿No quieres esperar un año y medio hasta que cumplas los 19 estar para nivelada con la universidad, sería interesante que hagas eso por los momentos, y asi cuando llegue el momento de postularte a la universidad con una muuy buena recomendación de mi parte lo tomarías como unas pasantías remuneradas y lo puedes equivaler como tu trabajo comunitario, unos cuantos créditos y te gradúas rápido y no es pérdida de tiempo si eso te preocupa, solo elige la universidad y yo me encargo de todo- agregó sonriéndome.

-¿Ya no dormiré en la habitación con Inred ? Pregunté sorprendida.

- no podrás, lo siento... además lo siento por no darte una habitación para ti sola, hubiera sido algo sospechoso eso ¿No estas molesta por eso? — yo negué la cabeza sonriendo, Inred era realmente un buen amigo — pero aún sigo sin creer como lograste cambiar 200 años de tradición. eres demasiado ... —

— Demasiado ¿ terca? si lo dice mi madre—. Me sentí un poco triste por un momento debido a esto —Yo. ¿iré a mi casa?.

—No, usted señorita no, ya es el primer año que serán semi internadas en el lugar, pero luego se quedarán aquí y tú seguirás siendo delegada de la junta ya que ese es el puesto que solo usted se ganó por voto, solo tú puedes ejercerlo, si no quieres seguir arréglalo con ellos —Agregó el director.

— está bien, pero quisiera al menos este año seguir siendo chico por los momentos , pero en otra habitación diferente sería extraño ... — dije mientras jugaba con mi cabello— No quiero que todo cambie poco a poco pero no tan rápido, no pensé que sería así tan rapido.

— ¿ Estás segura? — preguntó William.

— Si, quiero que lo sepan poco a poco, ¿me entienden? — no quiero aparecer y decir "holis, saben.. fui una chica los engañe" -

- te entiendo tiene lógica y me alegra saber que pronto tu hermana podrá cursar en este lugar, todo gracias al maravilloso trabajo que hiciste todos estos años.— agrego el director.

— si mi hermana ingresara con 13 años, un poco mas grande que yo, pero ella trabajo duro para nivelarse en su colegio, ya que estuvo enferma por mucho tiempo , ella es muy inteligente pero si no hubiera sido por su condición, hubiera saltado varios años y ingresado creo que mas pequeña que yo y quiero ayudarla, si puedo permanecer un tiempo en este lugar junto a ella significaría de mucho para mi, una oportunidad de compartir con ella—

— Eres una muchachita inteligente ojala mi tonto hijo hubiera sido como tú a tu edad y pensar que si perdías te terminarías casado con él, ya que él era el favorito del señor Torphon para ser tu prometido y sabía que se llevarían bien- respondió el director con carcajadas.

— aún está a tiempo ¿o no?— insinuo William y lo vi sorprendida.

-yo la verdad. no sé qué decirte— respondi tragando en seco. -¿puedo retirarme?— Pregunte mientras retrocedía por la conversación que teníamos, estar hablando estos temas con William y su padre, siendo el director y peor.. .. William parecía estar ¿Declarándose? el director sonriendo me dio permiso para retirarme y Sali huyendo avergonzada.

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—¿ Por que lo tengo que ocultar? yo quiero estar con ella me agrada lo suficiente para decir que me gusta, pero ella es tan terca. ni siquiera sabe que quiere en este momento — se quejó William irritado.

— ella es una niña aún, puede ser tu hija — se burló el director, encendiendo y fumando un cigarrillo.

— No son tantos años de diferencia como otro, tu le llevabas 20 años a mamá cuando se conocieron y las chicas maduran mas rápido, en casi dos años y medios ella tendrá 18 — y su padre empezó a reírse de su hijo que había perdido la cabeza por una adolescente.

— estas bastante sensible por este tema — y William se retiró molestó con su padre por el comentario, para ver si podía alcanzar a Ange decidido.

(...)

— ¡ Angeline, Angeline.! me llamo corriendo rápidamente detrás de mi y yo me gire hasta que llegara y se detuviera frente a mi.

— ¿qué pasó? Pregunte preocupada y él me abrazo con fuerzas.

— no me olvides en estas vacaciones, lo que te digo es verdad me agradas Ange— me dijo suavemente al oído mientras me abrazaba con fuerza, esas palabras me hicieron revolverme confundida, me aparté avergonzada y me fui a la habitación dejándolo en el pasillo.

Si le gustaba, era extraño, demasiado extraño ¿ era posible que todo lo que me decía era verdad? En el tiempo que estuvo aquí estudiando y ahora dictándome clases... No entendía como podía decir eso, pensaba sacudiendo mi cabeza estresada.

Hoy era el día cuando empezaban oficialmente las vacaciones y arme mis maletas, decidida le conté toda la verdad a Inred, él solo asentía con la cabeza y al terminar toda mi historia me miró y empezó a reírse ¿Reirse?

— ¿tú crees que soy idiota?— pregunto soltando una carcajada.

— te he visto dias del mes manchar las sábanas y levantarte a lavarlas rápidamente en todo este tiempo, incluso una vez me pico la curiosidad y te levanté la blusa para ver que había lo siento por eso... no vi mucho, es que tienes un sueño tan profundo que hablas dormida como una niña, por eso jamás quise cambiar de habitación con otra persona por tu condición de mal hábito del sueño y si... vi tu cuerpo- respondio en una pausa con una sonrisa malvada yo me sorprendí y me cubrí con las manos.

— yo... des.. — y él asintió sonriendo

— nada del otro mundo- se burló— además cuando estábamos esa vez en la playa podía ver claramente que eras una chica. no se como el idiota de Andy piensa que es homosexual. pero hay que dejarlo así, que él descubra por su misma cuenta que eres una chica. —

¿Andy Homosexual? Me pregunte y no entendía bien lo que decía

- ¿En verdad lo sabías todo?—

- Angel, fue fácil descubrirlo: tu colgante es de chica, te vi en la fiesta con él, también en tu casa tienes varias fotos tuyas en vestidos... pocas fotos, pero tienes y jamás he visto alguien con ropa de niño y cabello largo y rostro de niña eso es extraño —

- tu, ¡pedazo de idiota! dije lanzándome a llorar a sus brazos. — no me quiero separar de ti, eres como mi otro hermano asi seas un patán — me quejé llorando.. –

— no lo hagas puedes decir que eras mi prima y así nadie sospechara nada.. le diré al director esa idea ¿sí? si te cambian te voy a extrañar demasiado— dijo abrazándome con fuerza.

- yo tengo que acostumbrarme... pero te visitaré — sonreí y con unas tiernas palmaditas en mi cabeza me consoló.

Y así antes de despedirme de mis compañeros con la maleta en mano, me encontré con Andy en la entrada principal, yo le sonreí y me dirigí hacía él para explicarle todo y al menos disculparme por lo que habia pasado, se que no habia sido mi culpa pero se sentía traicionado y tal vez todo lo que ocurrió fue un error, él me miró con seriedad.

— Nos veremos el próximo año, me iré a Europa estas vacaciones así que no estaremos juntos este verano ¡lárgate!. — me gritó y se fue, me dolía su actitud y su mirada fría evitando mirarme me lastimaba.

- . ¡Andy!... amigo no te vayas sin hablar conmigo—. Le grité, pero no me escuchó o si lo hizo no le dio la gana de voltearse a responderme.

(...)

Al llegar a mi casa este cambio fue algo muy importante para mí, dejaría de usar ropa de chico este verano y como regalo por finalizar el año el señor Torphon me regalo varios vestidos hermosos, estaba demasiado feliz por tener piezas tan hermosas en mi closet, seguía siendo una chica y por eso tenía una debilidad por las cosas hermosas.

Me encontré un par de veces con irned luciendo con los vestidos que me habían regalado, ganar la apuesta en tan poco tiempo hizo que el viejo estuviera más que feliz conmigo, él no se esperaba que yo lo lograra... Ni yo misma llegue a pensar que ganaría.

Mi cabello lo dejaría largo, pero apenas si me llegaba a las orejas y estaba sin forma, tenía que buscar un corte bonito por así decirlo, pero en mi interior si quería tener el cabello largo... algo de vanidad, siempre que llegaba a casa del señor Torphon, me encontraba con William.

A pesar de nuestra diferencia de edad, me sentía cómoda a su lado, él me llevaba siempre a algún restaurante a comer y se podía decir que eran "citas" Williams era un caballero y cualquier chica estuviera tan solo hipnotizada por estar a su lado, pero había algo que me producía un vacío... y ese vacío tenía nombre.

Esas tardes en la playa con William comiendo helado sentía ese hueco en todo mi corazón: extrañaba su risa, sus bromas... su presencia:

- Andy...pensé inmediatamente en él y me encogí sintiéndome mal.

Poco a poco esas salidas o citas se volvieron regulares, la primera vez que fui a su casa me sentía temerosa ya que él había olvidado su billetera y según Inred y George mi compañero esa técnica era la mas común para llevar a la cama a una chica.

William vivía cerca de la costa en una casa de verano ubicada en la parte exclusiva ,era una pequeña casa tipo chalet con vista al mar y al entrar allí me sentía nerviosa pero al ver la enorme cantidad de libros me enamoré del lugar olvidándome de las anécdotas de mis compañeros, pero no ocurrió nada esa tarde de lo que me decían los muchachos que ocurriría estando una chica en una casa de un soltero, William entro a su habitación y salio con la billetera en la mano y nos fuimos rápidamente, no sin yo fijarme en su colección de libros, por lo que decidi visitarlo mas seguido no por él, si no por los libros.

Hasta pasar casi todo el día en el sillón o en la playa leyendo filosofía humana, ya que él estudiaba educación o algún relato de novelas policiales negras que estaban en la mitad su estante.

Siempre nos sentábamos en la orilla a mirar al atardecer y era algo relajante porque me olvidaba de todo lo que me volvia ansiosa: en Andy, en la universidad, en mi familia.

(...)

Sentada en la entrada sentí la mirada fija de Williams, apartando la mirada de mi libro sonrojada, sonreí sonrojada

.... Yo—