Christian seguía marcando,  y José solo me miraba con arrepentimiento, no por haberme besado, sí no por los problemas que eso había causado.

Por fin, el teléfono dejo de sonar, parecía que Christian se había dado por vencido. Lo único que me preocupaba ahora eran las fotos de los reporteros. Seguía tan metida en mis pensamientos tratando de encontrar una solución a todo esto, cuando José puso su celular enfrente de mi cara, era la página de un periódico amarillista que en su titular ponían:

"HASTA AL  EL EMPRESARIO DEL AÑO SU ESPOSA LE PONE LOS CUERNOS"

Ahora si estaba pérdida, mis lágrimas empezaron a salir y ni siquiera podía  imaginar lo que me esperaría cuando regresará. José puso su brazo en mi cintura e intento abrazarme, pero me aleje lo más rápido que pude no quería unas nuevas fotos mías circulando en periódicos amarillistas.

Sin decir nada y sin voltear a ver José salí de ahí lo más rápido que pude, tenía que encontrar un lugar donde ocultarme por lo menos por unos dias, hasta que a Christian se le bajara un poco el enojo. Pero cuando di vuelta en la primera esquina Luke o cómo sea que se llamará mi guardaespaldas estaba  junto a  Teylor enfrente del auto.

Empeze a retroceder unos pasos, tal vez sí corría podía escapar, pero lo que sí tenía claro es que no quería estar con Christian hoy, en especial cuando sabía cómo se ponia con cualquier cosa.

Pero antes de poder hacer algo sentí como alguien me jalaba del brazo, y sin ninguna consideración me empujó adentro del carro,  cuando pude enfocar al tipo que me había jalado, estaba segura que mi rostro se puso palido, Christian estaba ahí sentando mirándome de una forma que nunca había visto.