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[...]

Kisame iba al lado de Emilia en la carreta mientras Subaru charlaba con Otto que conducía.

Kisame: Estoy un poco nervioso...

Emilia: ¿A qué te refieres?

Kisame: Si Rem está aquí, yo estoy aquí y Ram está en el santuario, es obvio quién está en la mansión en este momento...

Emilia: ¿Eso no es algo bueno?

Kisame: Si ella viera el estado en el que me encuentro, sería catastrófico...

Emilia: Hablando de eso... ¿Felix dijo algo sobre tu ojo?

Kisame: No tiene arreglo, es un daño irreversible, aunque ya me acostumbré...

Emilia: H-Hablas... ¿Hablas en serio? ¿Y cómo te encuentras con las heridas de tu cuerpo?

Kisame: Después de la batalla contra la Ballena y el Culto las más grandes se abrieron un poco pero Felix las pudo contener así que ya no sangraré por un tiempo.

Emilia: Saber eso me alivia un poco. Nunca te había visto tan mal como ese día en el duelo con Julius...

Kisame: No me encuentro en mi mejor momento pero... intentare ser util para ti y Subaru cuando todo esto acabe...

Emilia: Kisame... ¿De qué hablas?

Kisame: ?

Emilia: Durante este poco tiempo que he estado aquí, has intentado hacer todo lo posible para defenderme de todo... pero puedo ver que todo esto te ha estado haciendo mucho daño, veo que no eres feliz Kisame... ¿Qué sucede?

Kisame comenzó a recordar los momentos que pasó con sus familias, y luego sus muertes. Luego escuchó la voz de Fortuna pidiento que salve a Geuse.

Kisame: Pondre la felicidad de los demas por delante de... por delante de mi felicidad.

Esto ultimo lo dijo dudando.

Geuse: 'No creo que esos sean tus verdaderos deseos...'

Emilia se acercó un poco a Kisame y tomó sus hombros.

Emilia: Kisame, a mi me importa como te sientes, has hecho mucho por mi, ¿Por qué no dejas que te ayude? Dimelo...

La cara de Emilia reflejaba preocupación y un poco de tristeza.

Kisame: Creo que he visto a tanta gente morir que... ya no quiero perder a nadie más... aunque me cueste la vida, los protegeré a todos.

Emilia: Sabes lo que pienso? pienso que no estas siendo sincero. Cada palabra que estoy escuchando en este momento, suenas preocupado, se siente como si cargaras con un gran peso tu solo, ¿no puedes dejar que los demas te ayuden?

Kisame: No. No involucraré a nadie. He visto a mucha gente morir por tratar de protegerme.

Emilia: ¿Pero ahora las cosas son distintas, no?

Kisame se volteó y miró en dirección a Rem con una expresión de derrota.

Kisame: Nada ha cambiado. No he podido proteger a nadie.

Emilia tomó la mano de Kisame y este se volteo a verla.

Emilia: Rem vivirá, Subaru y tú encontraran la forma de ayudarla, mientras tanto, debes velar por tu felicidad y la de los demas por igual.

La expresion de Kisame cambió a una de tristeza y miro al suelo.

Kisame: Pero-

Emilia: Sin peros, si no cambias esa rara idea, no te dejaré seguirme en el futuro.

Kisame levantó la cara y vió como Emilia se cruzaba de brazos y lo miraba con una expresión molesta.

Kisame: Ahh... lo intentaré.

Emilia comenzó a sonreir.

Emilia: Gracias, Kisame.

[...]

Otto: ¿Asi que Astaroth-San, me ayudaras a hablar con el Marqués?

Kisame: Después de lo sucedido con el Arzobispo de la Pereza y viendo tu situación, ademas de ver tu potencial; no se te resultará dificil quedar en buenos terminos con mi Amo.

Otto: ¿"Buenos términos"? ¡¿Con esto te refieres a la baja probabilidad de que hagamos un trato?! -Otto no paraba de lloriquear viendo su situación -

Kisame: Es eso o nada, tú decides.

Otto: Tus palabras no son nada alentadoras Astaroth-San...

Kisame: Por eso dicen que soy bueno para alentar a la gente. - Dijo Mientras soltaba unas carcajadas -

Otto: ¡Me referia a todo lo opuesto!

Después de largas horas soportando a Otto, todos llegaron al pueblo a salvo y descubrieron que los demas aldeanos no volvieron de "El santuario" terminando en que nadie sabía la ubicacion del Santuario a exepción de Kisame aunque nadie lo sabía por el momento.

[...]

Otto llevo la Carreta de Dragones atras de la mansion mientras que Emilia, Kisame y Subaru con Rem en sus hombros fueron hasta la puerta de la mansión

Mientras Emilia y Subaru hablaban de la posibilidad de que Beatrice abra la puerta, Kisame estaba sufriendo dentro suyo pensando en lo que sucedería a continuación.

Subaru tocó la puerta - Si, un momento por favor. -y una voz desconocida para él respondió del otro lado. La sangre de Kisame se heló en ese instante y poco a poco caminó hasta la espalda de Subaru y se escondió.

La puerta se abrió revelando a... una maid rubia y... ¿tetona?

Kisame en su mente estaba gritando a más no poder.

Emilia: ¿Frederica?

Frederica levantó la vista y sonrió mostrando sus característicos dientes filosos soprendiendo a Subaru.

Frederica: Si, soy yo, Freder-

Subaru: ¡Su boca da miedo!

Provocando una reprimenda por parte de Emilia.

Frederica fijó su vista en un chico detras de Subaru con características únicas.

Frederica: ¿Kisame?

Kisame dio un saltito del susto y comenzó a temblar.

Kisame: F-Fre-Frederica...

Frederica: ¿Por qué no te acercas y me saludas? Ese actúar no es normal en tí.

Subaru: ¿Se conocen?

Emilia: - en voz baja le contestó a Subaru - Frederica es la hermana mayor de Kisame

Kisame lentamente se acercó a Frederica y con la cara mirando al suelo habló.

Kisame: Hola, hermana...

Frederica vió el estado de Kisame y pudo percibir olor a sangre haciendo que lo mire de una manera acusatoria.

Frederica: Pasen.

[...]

Frederica: Permiteme presentarme. Soy Frederica Baumann. Estuve empleada aquí en el pasado.

Subaru: Ahora que lo mencionas, me dijeron que otra sirvienta renunció antes de que yo llegara.

Frederica: Solo me retiré por razones personales. volví por petición de Ram y encontré la mansión desierta. Por suerte encontré una carta del señor en su oficina y me dio una idea de lo que pasaba.

Emilia: ¿Una carta?

Subaru: ¿Y por qué Ram te pidió que volvieras?

Frederica: Cuando vine, la cocina y el jardin estaban en mal estado. Fue terrible.

Subaru: ¡Eso es muy serio!

Emilia: Es raro. Ram siempre trabajó duro por nosotros mientras no estabas. ¿Por qué en unos días...? - Emilia se quedó callada al darse cuenta de la razón -

Kisame: Error. Rem siempre trabajó duro.

Subaru: Osea que al no tener a Rem, le pidió ayuda a Frederica.

Frederica: ¿Podrian explicarme quién es esa chica tan parecida a Ram?

Kisame solo una punzada en su corazón al darse cuenta de que Frederica no recuerda lo que sucedio con Rem aquella noche.

Subaru: Es Rem, la hermana de Ram. Es una buena chica. Amable, fuerte y muy trabajadora. Hasta yo sabría que era muy cercana a Ram. Seguro que también era amiga tuya. - Hizo una pausa y vió la cara de Frederica - No haz de recordarla, ¿verdad?

Frederica: Lo siento, pero no. Me pregunto como reaccionarán Ram y el señor cuando regresen.

Subaru: No me imagino qué hará Roswaal y no quiero pensar en lo que hará Ram.

Frederica miro al joven con cierto semblante de tristeza y luego miró a Kisame..

Frederica: ¿Y bien? Cuando me miraras al rostro y me explicaras que te pasó.

Kisame: - Kisame abrió los ojos y miró a Frederica. - Yo... dí todo para salvarlos. - Y luego miró a la cara a Frederica -

Frederica: - Se sorprendió al ver el ojo de Kisame, luego pudo ver marcas de cicatrices y heridas abiertas asomandose por su ropa - ¿Por qué estas tan mal?

Kisame: Perdí mis poderes... se abrieron viejas heridas del recuerdo de mi verdadero yo y perdí mi ojo frente a un caballero imperial. - Volviendo a bajar la cabeza, Kisame concluyó su respuesta -

Frederica se acercó a Kisame y lo abrazó fuertemente.

Frederica: ¿Y en ningún momento pensaste en hablar conmigo o decirme lo mal que la estabas pasando?

Kisame sujetó a Frederica alargando el Abrazo mientras en su mente se disculpaba por todo.

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Si no lo subo ahora, no lo subo nunca XD, perdonen por el cap tan cortito pero me aburrio quedarme estancado en esta parte y no lo continué.

1368 Palabras.