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Capitulo 5

Thiago POV'S

-Entonces crees en el amor a primera vista? - me preguntó aún con su cabeza abajo.

-Eso no es amor a primera vista- le contesté un poco tenso.

Me miró

-Entonces que es eso? - me preguntó

-Atracción a primera vista, eso es- le contesté

-Y cuál es el problema en llamarle amor a primera vista? - me cuestionó

-Pues que no puedes decir que "Lo nuestro fue amor a primera vista" porque el amor proviene luego que ya conoces a la persona, no sientes amor por un desconocido, si te fijas se escucha cliché y también patético- le respondí simple y llanamente

Se cruzó de brazos y arrugó su nariz y su frente dejándome ver que le había molestado mi respuesta.

-Pues no es patético ni tampoco es cliché, es solo que las personas le llaman amor a primera vista a esos encuentros con quien crees que estas destinado a estar por cierta razón, aunque luego no queden juntos- me contestó

-Solo lo dices porque eres escritora y a ustedes las escritoras románticas les gusta disfrazar la vida real como una fantasía amorosa, ya es tiempo que cambien su manera de escribir- le aconsejé cruzando mis piernas y acomodándome en el sofá

-No sabes nada sobre romance y mucho menos de mis historias- me contestó molesta.

-No tengo tiempo para leer mentiras, pero sé que tu género literario es el romance- le comuniqué

Abrió su boca en forma de asombro y arrugó mucho más su frente.

-Tú no sabes nada de romance Thiago y no, por supuesto que no lees absolutamente nada de eso, ¿para que lo harás? Si tú ya vives una vida de mentira- me dijo con cierta maldad en su voz.

Tragué por aquellas palabras dichas.

- ¿Qué base tienes para decir cosas como esas Antonella? - le cuestioné tensando mi mandíbula.

-Es fácil Demon, sabes que todo esto no es real, tus lujos, tus casas, tu dinero, tus autos y todo lo que tengas es solo algo ficticio que tienes para llenar vacíos y aparentar que no te hace falta nada más, pero en realidad te hace falta todo- me contestó fría

- ¿Tu como sabes todo eso Antonella? - le pregunté poniéndome de pie

-Nosotras las lectoras cliché y patéticas tenemos el don de analizar cada características y rasgos que tienen nuestros personajes, no tengo mucho conociéndote, pero en tus ojos se refleja un pozo negro, vacío y muy frío- me contestó sarcástica en la primera frase

La miré y me dieron ganas de morderle esos labios, no porque tenía razón sino por la forma en que me hablaba y se mostraba ante mí. Sus gestos, su forma de hablar, la manera en que me miraba. Me volvía loco.

- ¿Entonces para ti soy un personaje al que puedes describir cómo te dé la gana porque eres la escritora y tú y yo somos una novela? - le pregunté levantando mi ceja izquierda con cierta burla.

-Eres un idiota, ¿sabías? - me dijo mirándome de mala manera.

- ¿Quisiera saber de dónde sacas tantas agallas para llamarme como te da la gana? - le pregunté acercándome a ella y sentándome en el borde de la cama. Se echó hacia un lado y recorrió mi cuerpo con su mirada. Sonreí para mis adentros y me crucé de brazos mirándola fijamente.

Se quedó callada.

- ¿Te hice una pregunta nena, sabias que ninguna mujer ni nadie se atreve a ofenderme? ¿Sabes que sucede cuando me llamas de esas formas? - le pregunté

-No, a ver, ¿qué sucede? - me preguntó

-Me dan ganas de partirte la boca a besos- le contesté pasando mi lengua por mis labios para humedecerlos.

Me miró y negó con la cabeza.

-Dale, te permito sonreír, no te digo que te sonrojes porque ya lo estas- le dije sonriendo porque había logrado mi objetivo.

Sonrió y agachó la mirada.

-Por favor, ya quisieras- me contestó algo nerviosa sonriendo a medias.

-A ver, ya que hemos hablado bastante de mí, me has cuestionado, llamado idiota, antirromántico y me has analizado y descrito a tu manera, ¿porque no me cuentas más cosas sobre ti? - le dije para sacar tema y obviar mi calentura.

-¿Qué quieres que te cuente de mí? ya lo sabes todo- me dijo aún sin levantar su mirada.

Odiaba cuando me hablaba y no me miraba, disfrutaba mirarla porque anhelé con mi ser que estos momentos llegaran durante cinco años.

- ¿Porque escribes sobre amor? ¿Por qué justamente escogiste el género del romance? - le pregunté

Me miró extrañada

- ¿Acaso tienes algún problema con el amor o el romance? - me cuestionó

Fuera se escuchó un gran trueno, llovía muy fuerte, mi mirada se posó en las grandes ventanas de la habitación, me levanté para cerrar las cortinas.

-No tengo absolutamente ningún problema con el amor- me defendí

- ¿Acaso estas molesto o en contra del amor por que tu otra mujer te jugó sucio y por eso hoy en día cuestionas el romance? - me preguntó cruzándose de brazos y mirándome de manera retadora.

Sentí mi sangre hervir, todos mis músculos se tensaron, la cabeza me comenzó a palpitar y sentía mis venas querer explotar.

-Por qué diablos tienes que mencionarla?! ¡Te dije que no te metas en mi pasado! - le grité

- ¿Tanto te enoja que te pregunte? ¡Cuéntame, si vamos a tener una relación quiero saber qué fue lo que realmente sucedió! - me habló con voz alta pero quieta.

-Cuando te he dicho que quiero iniciar una relación contigo? - le pregunté frío

Asombrada negó con la cabeza.

- ¿Entonces para qué diablos me secuestraste?! ¡¿Para hacerme infeliz toda la vida?! ¡Si me voy a pasar no sé qué tiempo contigo debo de por lo menos tratar de conocerte! ¡No quiero que la gente haga comparaciones sobre ella y sobre mi sin ni siquiera saber que sucedió! - me gritó

En ese momento pasé mis manos desesperadamente por mi cabello y salí de aquella habitación, sentía como ella me seguía detrás pero no me importo, bajé las escaleras muy rápido y pasé por la cocina hasta atravesarla y salir por la puerta trasera que daba al jardín, la fuerte lluvia fría empezó a recorrer mi cuerpo.

-Thiago! ¡Respóndeme! ¡Qué diablos se supone que pase conmigo! ¡Me trajiste a tu vida! ¡Yo no te lo pedí! ¡¿Qué piensas hacer conmigo?! ¿Tenerme acá encerrada hasta que se te de tu gana? ¡Sin saber nada de la persona que tengo al lado! - me gritó, dejé de caminar cuando escuché su voz y me volteé a verla. Ya estaba llorando, la lluvia la comenzaba a empapar por completo.

Tragué en seco.

- ¡Yo no puedo entregarme a ti tan pronto Antonella, aún no puedo! ¡Entiéndeme! ¡Aun no estás preparada para saber todo de mí! ¡No puedo contarte toda mi vida en unos minutos porque hay cosas que no las toco! - le grité

-No te estoy pidiendo que te entregues a mi Thiago! ¡Simplemente te hice una pregunta que tengo derecho a que contestes! ¡¿Si ni siquiera puedo establecer una conversación contigo para conocernos entonces que es esto?! Si no es relación, pero tampoco es amistad, ¡pero tampoco puedes ser mi conocido! ¿¡Qué diablos se supone que hagamos!?- me gritó desesperada

-Quiero saber si soy capaz de enamorar a una chica por lo que soy! ¡No por lo que tengo! ¡Te traje a mí porque me encantaste con esa belleza natural que tienes en un segundo! ¡Porque me dieron ganas de hacerte mía, pero porque lo que en realidad soy! ¡Quiero saber si soy capaz de retener a alguien a mi lado a pesar de mi carácter! ¡De mi yo verdadero! No por mi dinero, ni por cómo me vea. ¡Te traje a mí y te observé durante cinco años por que en verdad sentí la necesidad de tenerte! Tu ternura, tu carita bonita y sencilla, tu cuerpecito bien formado, tu color de piel, ¡TU COMPLETA! ¡Me hipnotizaste en un segundo y puedes ver que no fue algo pasajero porque me mantuve esperándote todos estos años! - le grité sintiendo las gotas de agua correr por mi nariz.

Me miraba sorprendida con lágrimas en sus ojos.

-Thia...- no la dejé hablar.

-Thiago nada, no quiero hacerte sufrir, por eso te he dicho que te dejes guiar de mi porque así las cosas serás más fáciles para ambos, no quiero que te cohíbas ni dejes de ser tú, me gusta que me respondas y que me demuestres esas agallas y que ese miedo se ha ido, me gusta que me retes y que me mires así toda desafiante. Me vuelves loco Antonella, te juro que me vuelves loco y quiero saber si ¿en el poquito tiempo que has estado aquí conmigo haz sentido, aunque sea un 1% de interés en todo esto? - le dije mirándola, soltando todo eso que llevaba dentro esta vez con una voz más baja.

Asintió con la cabeza.

-He sentido más de un uno por ciento, Thiago- me contestó pasando su lengua por sus labios.

-A la mierda la espera maldición!- dije acercándome a ella y apoderándome de sus labios ferozmente, para besarla mejor la cargué y la hice enredar sus piernas alrededor de mi cintura, la besé como si no hubiera mañana, sus labios eran los labios más suaves que había podido besar en toda toda mi vida, eran dulces igual que su apariencia, sus manos estaban en la parte baja de mi cabeza y sus brazos rodeaban mi cuello, las mías las tenía en sus glúteos de la misma forma que la cargaba.

¡Maldición! ¡Por fin!

Nos separamos por falta de aire, nos quedamos juntos chocando nuestras frentes mirándonos a los ojos. Tronaba muy fuerte así que con ella en mis brazos procedí a entrar a la casona ambos empapados de agua. Se aferró a mí completamente colocando su cabeza en el hueco de mi cuello abrazándome por completo. Sentí mi cuerpo arder, la rodeé más fuerte en su cintura correspondiendo al calor que me estaba dando, aquel abrazo y apego lo eran todo, a sinceridad nunca había sentido un abrazo como ese desde hace años, ya nadie daba abrazos que transmitían cariño, la gente los daba simplemente por darlos, pero este era el abrazo que tanto había querido sentir al igual que el beso.

Les juro que nunca he probado labios iguales a esos. ¡Maldición! Era una adición esta mujer.

La historia está completa en DREAME. La pueden buscar con este mismo nombre, espero y les guste❤️

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