Me quede mirando a sus ojos color esmeraldas, pero mi mirada bajo un poco mas hasta sus labios, empezandolos a ver los con deseo, no se como ella me habrá visto, pero nos fuimos acercando hasta que movidos por el alcohol nos volvimos a besar pero esta vez no de forma tierna, el deseo me empezó a recorrer y empecé a ir mas haya, moviendo mis manos a su camiseta para desabrocharla, ella empezó hacer lo mismo pero con mucha mayor dificultad, dándome cuenta de algo bastante obvio si no fuera que ya estaba pasado de copas, ella estaba aun mas pasada de copas que yo, eso me entristeció ya que es posible que todas sus reacciones hasta el momento hayan sido provocadas por el alcohol, así que la detuve ya que no podría perdonarme sabiendo que me aproveche de ella por estar borracha.

-Mitsuri, no creo que sea buena idea-Dije mientras detenía sus manos, pero ella reaccionó bruscamente, safandose de mi agarre y empezando a golpear mi pecho mientras ella se recargaba en el.

-¿Es por qué no me parezco a ella, verdad?, o ¿no soy lo suficientemente bonita o femenina, verdad?-Empezó a decir con rabia, yo solo la abrase.

-Ja, no, no es por que no te parezcas a ella, solo que no quiero hacer algo de lo que nos vayamos a arrepent....-No termine de hablar cuando sentí como ella simplemente caía dormida, probablemente por el alcohol, así que la cargué para buscar a Tengen y preguntar donde podía dejar a Mitsuri pero cuando lo busque, me señalaron que se había ido a cierta habitación con sus novias, creo que no debo de explicar que estaban haciendo, entonces como Iguro tampoco estaba y no conocía a nadie pues llame a un Uber y la lleve a mi casa, subí con ella en brazos hasta mi departamento, con dificultad abrí la puerta, fui hasta mi cama y la deje acostada en mi cama con cuidado, y aunque no lo quiera admitir, me quede viéndola, se veía tan hermosa a la luz de la luna con la boca medio abierta, la tentación volvió a mi, pero simplemente le bese la frente-Buenas noches-saque unas cobijas que tenía guardadas y use una sudadera como almohada.

La resaca me despertó muy temprano teniendo que prácticamente correr al baño para vomitar, una vez me pude parar del retrete fui a hidratarme, y me metí a bañar ya que iba a tener trabajo ese día, me seque y cambié rápidamente, y cuando volví a mi cuarto, vi como Mitsuri estaba despertando así que fui rápidamente por algo para hidratarla.

-Toma Mitsuri necesitas hidratarte-le di un gatorade

-¿Qué paso ayer?-

-¿No recuerdas?-Pregunte nervioso.

-No, lo último que recuerdo es qué tomé probablemente mi sexto o quinto trago y ya-

Al saber que afortunadamente no recordaba todo me tranquilice-En resumen te desmayaste y cómo nadie más había ido contigo, pues no sabía donde vives así que te traje a mi departamento, te aviso, voy a salir para mi trabajo, te puedas quedar lo que quieras, solo por favor no te acerques a ese mueble-Dije señalando el mueble sobre el qué escribo.

-Perdón por las molestias-

-No te preocupes para eso están los amigos-Le sonreí, ya que mientras sea tiempo con ella nunca es molestia.

A pesar de que no estaba seguro de nada de lo de anoche me aferraba a la idea de que realmente le gustaba a ella, así que empecé a mover mis fichas, con la esperanza de que le gustara.

FIN DEL FLASHBACK

Al terminar de pensar en eso, otro recuerdo apareció, uno donde ella lloraba por culpa de Giyuu, eso hizo que se enfureciera consigo mismo.

-¿Por qué no te gusto?, ¿Qué le vez a esa zorra que a mi no?-Decía con rabia Yae, Giyuu por fin se logro deslizar del agarre de Yae, y salió a despedirce de Uzui ya que sabía que no tenía sentido discutir con una ebria,  se despidió rápidamente de Uzui y emprendió marcha a la casa de Mitsuri donde al llegar toco el timbre y tras pasar unos segundos salió Gustav, quien sonrió al ver a Giyuu.

-Buenos días, señor Tomioka.

-Buenos días señor Gustav, le podría dar esto a la señorita Kanroji por favor-Decía mientras le daba sus llaves a Gustav.

-Claro señor, ¿Algo mas?

-Nada más, muchas gracias Gustav, hasta luego Gustav, feliz año nuevo

-Feliz año nuevo.

Giyuu volvía a subirse a su moto, dirigiéndose a su departamento, donde subió rápidamente, palpando las bolsas de su traje dándose cuenta que las únicas llaves que traía se las había dejado a Mitsuri(Imbécil, mínimo tienes ropa en casa de Urokodaki), bajo rápidamente mientras sacaba su celular para pedir un Uber, que tras unos minutos llego llevándolo al aeropuerto.

Por otro lado Gustav se dirigía al cuarto de Mitsuri quien se encontraba desmaquillándose con la tenue luz dada por una lampara al lado suyo.

TOC, TOC, TOC-¿Puedo pasar, señorita?

-Claro que si, ¿Que pasa Gustav?

-El señor Tomioka le dejo esto.

-!¿QUE YA SE FUE?¡

-Si señorita Mitsuri, ¿tenía algo pendiente con el?

(Mierda, ahora tendré que esperarme a que vuelva)pensaba frustrada mientras apretaba fuertemente su mano rompiendo su espejo de mano-No, Gustav, gracias, que descanses.

-Buenas noches señorita Kanroji, que descanse también.

Al día siguiente con los haces de luz entrando por la ventana Mitsuri despertó, se baño y vistió rápidamente, para salir subirse a su coche dirigiéndose al departamento de Giyuu, al entrar un sentimiento de nostalgia la invadió aunque fue seguido por risa al ver como la maleta de Giyuu estaba sobre su cama(Hay Giyuu, tan olvidadizo como siempre)pensaba, mientras movía la maleta al piso para acostarse, viendo al techo unos cuantos segundos recordando el pasado(Todavía recuerdo el olor impregnado en sus sabanas, sus brazos rodeándome, y el calor de su cuerpo transmitiéndose al mío)pensaba con algo de melancolía y añoranza de aquel tiempo que ya no existía(Cuando pensaba que me deseaba)pensaba con tristeza mirandose así misma(¿Qué será que no le gustaba?, ¿Estaría gorda?, ¿tendría demasiado?)pensaba preocupada.

-Bueno esas plantas no se van a regar solas-Se levantaba para empezar a regar las plantas lo cual hizo rápidamente, al terminar recordó que debía de revisar algo, así que se dirigió a abrir el mueble de Giyuu, viendo que estaba vacío(¿Por qué ya no están los poemas aquí?, ¿Cómo sabía que los iba a ver?, ¿O por qué no quería que los viera?, ¿A quién van dirigidos?)pensaba algo triste, cuando al voltearse se dió cuenta que unos papeles sobresalían del colchón, así que con curiosidad se acerco y tomo una de esas hojas.

Viendo como el poema estaba dirigido a ella, así que rápidamente levanto el colchón con una mano mientras sacaba las demás hojas con la otra, empezando a leer como cada uno estaba dirigidos a ella, un sentimiento de felicidad la recorrió pero también de tristeza, y nuevas dudas surgieron, ¿Por qué nunca le había enseñado dichos poemas?, ¿Siempre sintió esto?, aun así sabía lo primero que iba a hacer cuando viera a Giyuu.

Giyuu había llegado a la casa de Urokodaki, al verla le vinieron recuerdos de su adolescencia, lo que no esperaba es que al entrar nadie contestara al preguntar si alguien estaba, así que se dirigió al comedor encontrándose con alguien conocida pero a la vez extraña para el, alguien de cabello negro y ojos azules..

Al pasar los días Giyuu regresó nuevamente, solo que no avisó a nadie, se sentía francamente mal, simplemente se quedo en su apartamento ignorando su teléfono, hasta que llego el día de ir a la universidad.

Al ir la universidad estuvo distanciado de Tengen y Mitsuri evitándolos e ignorándolos, desapareciendo prácticamente en la hora de la salida, Mitsuri y Tengen se preocuparon sobre todo este último ya que ya lo había llegado ver así, después de romper con Mitsuri, por lo que le estuvieron marcando y mandando mensajes pero este ni si quiera los veía, el día de jardinería ni se presentaba al club.

Tengen fue a buscarlo al claro todos los días pero al no encontrarlo, intento ir a su departamento pero este no respondía y tampoco había rastro de que estuviera ahí, al ir a su trabajo su jefe dijo que se había ido a otra sucursal que desconocía, así que llamo a Tamayo.

-Buenas tardes doctora.

-Buenas noches Uzui, ¿En qué te puedo ayudar?

-¿Giyuu, ha ido a sus citas?

-No, desde hace unas dos semanas.

-Ains, gracias.

-De nada, si lo ves por favor dile que venga.

-Claro, adiós.

Al terminar la llamada, le marco a Mitsuri.

-Hola Mitsuri, ¿Has visto a Giyuu?

-Ains, no, ni si quiera ha ido al taller de jardinería y se ha comportado muy esquivo cuando me trato de acercar a el.

-Ains, ¿Sabrás donde puede estar?

-¿Sabes del claro?

-He ido ahí todos los días.

-Mmmm, ¿El cerezo?

—Pues apenas está creciendo.

(No conoce ese lugar)-Creo saber donde esta, mañana te digo.

-Okay, gracias Mitsuri.

Al día siguiente Mitsuri se dirigió al claro a mitad de la noche, y subió la colina, donde al llegar a la sima vio al azabaches mirando las estrellas, perdido en sus pensamientos y ella recordando lo que le llegaba platicar de los astros.

-Hola Giyuu.

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Nos vemos en el próximo capítulo.

Recomendación oigan "Sonne"