CAPÍTULO DIEZ        ☆☆
CONECTADOS.

Over my heels and fallin' on my head but all of my feels we're already dead. And if I could rewind ir for you, if you could remind me of what I felt before I fell for your idea of love out here — Mona Lisa, Dominic Fike.

   (☆)   MIGUEL SE HABÍA ARREPENTIDO DE DARLE PERMISO deliberadamente a Abril de desobedecer las órdenes y desviarse directamente a Miles. Tenía ganas de encender sus monitores y buscar el Universo 1610 para ver lo que pasaba, en especial, lo que Abril estuviera haciendo con su amiguito. Miguel alejó esos pensamientos de su cabeza mientras avanzaba por los pasillos repletos de reclutas en busca de Jessica. A la lejanía, la melena rebelde de Jess se movía directamente hasta él, la mujer hizo un sonido de alivio cuando lo vió llegando con un archivo en sus manos.

──¿Puedo preguntar para que pediste el ADN de Abril?──. Jessica cuestionó deslizando el archivo en las manos de Miguel. El solo asintió empezando a caminar──. ¿Es por lo que le pasó en la misión del Universo-65?

──También es por eso──. murmuró como respuesta──. ¿Los Spider doctores ya tienen los resultados del ADN de la sustancia?

──Sí... y no te van a gustar.

Miguel la miró de reojo con una expresión indescifrable hasta que ambos llegaron al cuartel general. Las luces neones se encendieron sintiendo los pasos de Miguel en la sala, Lyla se materializó frente a las pantallas escuchando los pasos de Miguel y Jessica hasta que subieron a la plataforma. Vex también ya se encontraba ahí, su melena pelirroja en una trenza descabellada, ojeras visibles debajo de sus ojos. Miguel le dió una mirada rápida, desconcertándose por el estado de la hechicera.

──¿Para que me solicitaste? Tengo más cosas que hacer que atenderte ¿sabes?──. se quejó la pelirroja, sus ojos puestos en las pantallas con desinterés.

──Quiero que me digas la verdad de una vez──. Miguel exigió, ignorando la presencia y confusión de Jessica, observando la escena desde una esquina con sus cejas levantadas por encima de su máscara──. Sobre Abril.

Vex despegó sus ojos oceanicos de las pantallas, por un momento se tardó en llevar su atención a Miguel hasta que lo hizo, el hombre alzó una ceja esperando su respuesta y al ver que no llegó, dejó salir un brusco sonido de frustración llamando a Lyla hasta que la inteligencia artificial apareció sobre sus hombros. Al cabo de los segundos las pantallas fueron alumbradas por el archivo de Gabriella O'Hara, Universo-928B, claramente incompleto.

──Quiero la verdad──. exigió de nuevo, sonando más cómo un comando que cómo una opción. La hechicera se pellizcó la nariz en señal de frustración, algo que había aprendido de él──. Elysia.

Al uso de su verdadero nombre Vex alzó sus orbes, una tormenta de rabia llena en ellos pero no dijo nada más que lo se le solicitaba.

──Es tú hija──. le confirmó. Jessica detrás de ellos dejó salir un sonido de sorpresa, moviendo sus manos frente a ella para decir nada hasta que Miguel tomó una de las máquinas detrás de él partiéndola a la mitad, sonidos casi animalistas saliendo de su garganta.

──¡Me estás diciendo que durante un año mi hija estuvo aquí!──. Miguel gritó, callando las palabras de Jessica detrás de él antes de que pudiera hablar y haciendo a Lyla desaparecer──. ¡Tuviste años para decírmelo!

──Entiendo tu reacción-

──Deberías, tú más que nadie debería entenderla──. la interrumpió con otro gruñido──. ¿Siempre supiste eso? ¿Por eso es que me restringiste el acceso a sus archivos?

──Jamás existieron los archivos de Abril Moreno──. Vex corrigió, manteniendo su tono de voz severo, tratando que la ira de Miguel no la contagiará.

──¡No! ¡Porque siempre ha sido Gabriella!──. gritó de nuevo, apretando sus puños a su costado──. ¿Cómo es que pasó? ¿Cómo mi hija terminó en otro Universo?

──Tú me lo pediste hace años.

Miguel frunció el ceño negando con su cabeza levemente, su cabeza tratando de recordar pero nada venía a su mente. Sus ojos rojizos cayeron en las pantallas, en las fotos comparando a Gabriella O'Hara con Abril, ahora ante sus ojos siendo una misma. Esa corazonada que trató de ignorar desde que la encontró por primera vez una año y medio atrás, el leve sentido de reconocimiento que sintió desde que la vió por primera vez, ahora todo empezaba a tener sentido en su cabeza.

──Es imposible, tú y yo no nos conocemos desde hace tanto, mi hija murió...──. Miguel detuvo sus palabras corrigiéndolas──. Desapareció hace quince años. Nosotros-

──Me pediste ayuda. Pasaste meses buscando maneras de proteger a tu familia después de que Tyler Stone matará a Dana, sabías que iría detrás de tu hija y fue cuándo nos encontraste, a los hechiceros de Madame Web que conceden deseos a las personas arácnidas──. Vex empezó a relatar──. Fui la que respondió a tu llamado, me pediste que buscará una manera de proteger a tu familia. Y la única era sacarlos de este Universo, después de que lo hice me pediste que borrará tu memoria pero no pude hacerlo... Así que te hice creer que habían muerto.

Miguel pareció pensativo por unos minutos. Sintiendo la intensa mirada confundida de Jessica, la mujer permanecía callada analizando las palabras de la hechicera.

──¿Y por qué no la protegiste de volverse una anomalía?──. Miguel preguntó lentamente, su mirada directamente en los ojos azulados de la pelirroja──. ¿De que perdiera a su tía gracias a eso? ¿Sabes lo que eso significa? ¿Que ella sea una anomalía ahora gracias a esa araña? No se suponía que fuera mordida.

Miguel aplastó la plataforma debajo de él con sus puños, dejando salir sonidos de frustración, su garganta empezando a arder de la furia. No podía culpar a nadie más que a él mismo, de nuevo, la pesada carga de sus acciones volvía a abatirlo sin piedad. Tenía preguntas, para Vex y para Abril, aunque lo único que quería hacer era llamar a su hija inventándose alguna excusa y mantenerla alejada de todo lo que se avecinaba.

──No, lo que quieres decir es que no se supone que sea heroína──. Vex dijo firmemente, atrayendo los ojos crepúsculos llenos de emoción del hombre a ella──. Sé que ya viste todos los archivos, lo que les pasa a las Gabriella O'Hara... el destino de Abril-

──El destino de Abril fue interrumpido──. Miguel comentó, cortando las palabras de Vex antes de que pudiera decirlas. No quería oírlo, suficiente con todo lo que había visto en los archivos. No dejaría que eso pasará.

──El destino de Abril era crecer bajo la tutoría de Tyler Stone, él la iba a atrapar y tú no podrías hacer nada. La darías por muerta pero ella estaría viva, siendo doblegada al gusto de tu padre, convirtiéndose en todo lo que él siempre quiso para ti──. Vex prosiguió, manipulando las pantallas con sus poderes para mostrar lo que relataba. Cómo en más de 1 Universo eso pasaba──. Hecha una villana, ustedes dos se batirían en un duelo, tú sin saber que te estás enfrentando a tu hija no medirías tu fuerza. Ya que no sigues la regla de no matar, y Gabriella moriría en tus brazos.

Miguel se forzó a mirar las pantallas. Los hologramas de sus variantes sosteniendo en sus brazos a las variantes de Abril luego de lo ocurrido, más de diez, los contó a todos, miró a detalle cada uno de sus rostros, las miradas perdidas de Gabriella, la sangre, las lágrimas de sus variantes y la culpa que sentirían después luego de esa atrocidad. Miguel sintió su garganta cerrarse poco a poco, alejando su mirada se maldijo en lo bajo. A él no le pasaría eso, Abril estaba lejos de Tyler, todo estaría bien.

Todo estaría bien. Todo estaría bi-

──Gabriella O'Hara solamente sirve para el desarrollo de los Miguel O'Hara y nada más, otro evento canon que no puedes evitar──. Vex concluyó, una mirada vacía mientras lo miraba. Estaba enojada, Miguel lo sabía, pero era mejor que la dejará así──. Yo la salvé, y a tu hermano junto con Mary Jane. Pero no soy todopoderosa, solo evité con tu deseo que no murieran en el Universo 42 por no pertenecer. Era el único universo donde no existen los O'Hara todavía, ya que Conchata tu madre apenas nacerá en unos años y tus abuelos aún siguen en México. Era el mejor lugar para ellos, hasta que pasó lo de la araña.

Jessica se encontraba sin palabras detrás de ellos pero antes de que su conversación pudiera proseguir y escalar a otra pelea, la cuál ella no evitaría, avanzó hasta ellos con los resultados del ADN que había estado leyendo y leyendo repetidas veces desde que los obtuvo.

──No estoy entendiendo nada de tu drama familiar, Miguel, pero ahora que sé sobre tu conexión con Abril estoy segura que te interesará ver esto──. La mujer hizo una mueca antes de cederle los resultados──. Pero te advierto, no te gustarán nada los resultados.

Miguel le dió una leve mirada a los archivos, no teniendo ganas de saber nada más sobre el trabajo, su mente únicamente pensando en Abril y en la manera en que tendría que decirle todo. Solo quería decirle, saber lo que ella sentía, esperaba que lo aceptará, que lo perdonará por dejarla sola a ella y a su hermano en otro Universo. Y una parte egoísta, esperaba que lo quisiera.

Necesitaba que lo quisiera. Que lo dejará actuar cómo su padre después de tantos años separados.

──¿Que demonios estoy viendo?──. bramó saliendo de sus pensamientos. Su mirada leyendo los resultados en su computadora. Jessica detrás de él soltó un suspiro──. Puta madre, me lleva la-

──El ADN de Abril y Spot están relacionados──. Jessica comenzó a explicar, aunque no era necesario, Miguel ya estaba leyendo lo que ella estaba diciendo pero parecía no creerlo──. Estuvieron dentro del Colisionador cuándo explotó, aunque Spot fue el que más sufrió una alteración en su genética, Abril salió antes y solo le afectó un poco.

──¿Un poco? ¿A eso le llamas un poco? ¡Carajo! Solo eso me faltaba──. Miguel se talló la longitud de su cara con mala gana──. Mi hija no puede estar conectada con él, no sabemos que significaría eso.

──Spot es una amenaza multiversal, Miguel, que tú hija tenga poderes paralelos a los de él es una buena señal──. Vex intentó calmarlo pero solo logró exadperarlo más──. Si Spot incrementa sus poderes tendremos que decirle a Abril la conexión, si no es que ella ya la sabe, te dijo que lo vió cuándo entró en trance ¿No?

──No voy a dejar que la usen de carnada──. Miguel advirtió, vagando su mirada crepúsculo entre ambas mujeres apuntándolas con su dedo, las garras ya visibles en ellas al igual que sus colmillos──. Haré lo que tenga que hacer para mantener a Abril alejada de todo esto.

Miguel les dió la espalda avanzando hasta la plataforma para bajar, se detuvo en seco cuando Vex lo llamó nuevamente pero no le regresó la mirada, solo la escuchó.

──Lo que sea que pienses hacer no evitará que el nuevo evento canon de Abril suceda──. Vex advirtió detrás de él──. Lo que creíste saber de Gabriella O'Hara ya no existe, Miguel. Solo una anomalía más... justo cómo Miles Morales.

Miles debía estar soñando. No, sus sueños jamás habían sido tan buenos. Tenía miedo de abrir los ojos y que todo fuera producto de su imperativa imaginación, si lo admitía no sería la primera vez que soñaba con besar a Abril, muchas veces lo hacía en el salón de clases. Incluso Ganke lo molestaba con eso, diciendo que la baba se le escurría cada vez que pensaba en ello pero tenerla ahí, enfrente suyo y no sólo eso, con sus labios sobre los de él podría ser lo mejor que le pasó en todo el año.

Que decía en todo el año, en toda su existencia cómo Miles Morales. Amaba ser Spider-Man, en verdad lo hacía, pero antes de eso siempre sería un chico. Y a uno que le gustaba mucho Abril, era evidente que ella siempre sería su prioridad.

Ante ese pensamiento, una cadena de preguntas se le vino a la mente. ¿Eso ya los hacía novios? ¿O ella se iría de nuevo sin decirle nada? Porque lo quería, ella se lo había dicho. ¡Lo quería! Debió grabarlo para restregarsélo en la cara a Espectro, oh cómo esperaba decirle que se equivocó, ahora le tocaba a él burlarse.

──Espera...──. Abril murmuró sobre sus labios, el movimiento mandando escalofríos a Miles, la castaña se separó poniendo sus manos sobre el pecho del moreno──. ¿Ahora somos novios, no?

Miles quería gritar. No sabía que le estaba impidiendo no hacerlo, tenía toda las ganas de salir por todo Nueva York y gritar mientras se columpiaba de edifico en edificio. Que todos supieran que Abril Moreno era su novia. Su estrella, su girasol, su inspiración, su-

──Pues yo digo──. Miles respondió, dándose una cachetada mental ante sus palabras. ¿Por qué tenía que ser un idiota cuando menos quería hacerlo?──. Digo, estaría ofendido que solo me uses para besarte aunque no me quejo.

Miles alzó sus hombros con confianza, aunque realmente estaba sudando frío debajo del traje, su corazón latía como caballo o peor, cómo cuando su mamá se ponía a gritar por el final de una telenovela. Pero al ver la sonrisa burlona de Abril su corazón se detuvo, juro que caería muerto ahí en sus pies. ¿Por qué era tan dramático? Pero como Taylor Swift alguna vez dijo, él ya había conseguido a la chica.

──Si somos novios... yo quiero ser tu novio──. Miles se apresuró a decir, poniendo ambas manos sobre la cintura de Abril mirándola con una sonrisa ladina en su rostro──. ¿Me permites ser tu novio?

Abril solo le sonrió tímidamente asintiendo con su cabeza un par de veces acercándose para cerrar la distancia entre ambos. A Miles le gustaba verla así, sonrojada por él y nerviosa por tan solo unas palabras, no sabía de dónde había sacado tanta seguridad pero le gustaba que los papeles habían cambiado. Aunque en el fondo el también estuviera temblando de nerviosismo.

Miles acunó el rostro de Abril con intenciones de volver a besarla, sus labios rozaron los de la pelinegra por unos segundos hasta que un sonido provocó que ella se separará de inmediato, sus ojos se agrandaron llevando su atención al reloj en su muñeca. Miles no le había prestado atención antes. ¿Siempre lo había tenido? ¿Eso era lo que la ayudaba a viajar entre universos?

──¿Que fue eso?──. Miles preguntó observando con curiosidad a Abril mientras ella apagaba el aparato, alejándolo de la vista de Miles y sonriéndole con nerviosismo. ¿Por qué estaba tratando de esconderlo?

──Es mi alarma──. respondió con una risita nerviosa, escondiendo su muñeca detrás de su espalda──. No me queda mucho tiempo aquí.

Eso lo preocupó, frunciendo el ceño se acercó a ella tomándole las manos.

──¿Te pasará algo si te quedas más tiempo? Porque si es así entonces debemos apurarnos, quiero enseñarte mi nuevo lugar favorito──. Miles le tomó una mano y con la otra se colocó su máscara──. Tenemos que tomarnos muchas fotos, así tendré que ver cuándo te vayas.

Abril asintió soltando una risa nasal, imitó el gesto de su novio, y avanzó detrás de él para salir del subterráneo.

Abril se sentía mal por ocultarle cosas a Miles aunque en realidad no sabía cómo decírselas. Albergaba esperanza de que Miguel después de esa misión, si es que salía bien, le quitaría la restricción a ese Universo y la dejaría visitar a Miles. Aunque eso sonaba más un mundo perfecto que a la realidad, conocía el desagrado de Miguel a Miles, aunque no tenía ni idea porqué. Cada vez que le preguntaba cambiaba el tema o la ignoraba poniendo la excusa de que estaba trabajando para no responder.

Pasaba lo mismo si le preguntaba a alguien más, Pavitr genuinamente parecía no saber nada, lo único que conocía sobre Miles era lo que ella le contaba cada vez que se juntaban a tomar Chai en su Universo y ponerse al día con sus chismes. Hobie siempre que estaba a punto de responder era interrumpido por Gwen, y ella jamás le decía la razón, Peter mucho menos. Siempre evadían el tema.

¿Miles había hecho algo malo? ¿Qué podría ser? Hasta donde sabía era un buen Spider-Man, después de salvar el multiverso lo menos que podían hacer era premiarlo invitándolo a la sociedad arácnida pero eso no era suficiente en los estándares de Miguel. ¿Entonces por qué le desagradaba tanto? ¿Tenía que ver con el Colisionador?

──¿Entonces hay una sociedad secreta con toda la mejor Spider gente?──. la voz de Miles detrás de ella la hizo regresar a la realidad, dándose cuenta que estaban deslizándose por la ciudad con sus telarañas. Abril solo asintió esquivando un camión de FedEx en el camino──. ¿Y tú has estado ahí un año?

Abril le echó un vistazo a Miles, impulsando sus pies en el carril de un trailer para saltar en el aire y deslizarse detrás de ella nuevamente. Presumido, pensó la pelinegra mientras avanzaba delante de él, llevando la delantera aunque no supiera a dónde iban.

──Ajá, más de un año, desde que vine aquí la primera vez ya trabajaba para ellos──. Abril le respondió con un grito, tomando la delantera──. De hecho conocí a un Spider-Man súper cool, es el líder...

Y también mi papá. Pero eso ya lo reservaría para decirlo después.

──He aprendido mucho de él──. continuó, dejando atrás al moreno. Miles frunció el ceño debajo de su máscara, ignorando sus celos. Quizá el hombre era lo suficientemente grande para ser abuelo de los dos.

──Yo también he estado aprendiendo cosas──. Miles le respondió alcanzándola minutos después──, ya hasta me columpió mejor.

──¡Pues presumelo!

Abril se deslizó a una altura mayor, dejándose caer pero antes de tocar el suelo alzó su brazo con una telaraña en su muñeca quedando invertida, Miles imitó el gesto alzando una mano para tocar la de Abril pero ella la retiró, soltando una carcajada por la reacción que obtuvo. Miles la siguió de nuevo, corriendo detrás de ella encima de una azotea.

──Se llama Miguel, él fue quién creó todo──. Abril prosiguió, gritando sus palabras mientras corría.

──¿En serio?──. Miles ladeó su cabeza, lanzando una telaraña para deslizarse hasta el otro edificio──. ¿Y quién es Miguel?

──Es cómo un Spider-Man, ninja, vampiro copia barata de Edward Cullen pero mexicano──. Abril se burló, soltando una carcajada. Probablemente Miguel la estaba monitoreando con una de sus cámaras y la había escuchado.

──¿Un vampiro bueno? Pagaría por ver algo así──. Miles le respondió, burlándose igual que ella──. ¿Y desde cuándo te invitaron?

Abril se quedó pensativa, girándose para darle la cara a Miles mientras se transportaban con ayuda de sus telarañas.

──Pues ya te dije, hace unos meses, un año-

──Un año es mucho tiempo──. murmuró el adolescente, observando a Abril dar una vuelta en la esquina que seguía tomando de la mano de un vendedor un hot dog. Miles hizo lo mismo, lanzándole al hombre con una telaraña un billete──. ¿Y que es lo que hacen?

──Mira a ese menso──. Abril apuntó a un hombre caminando en la acera debajo de ellos. Miles bajó su mirada, quedándose al margen cuando Abril se deslizó hasta el civil, quitándole la bolsa que robó y regresandola a su dueña──. Ah, pues, nos hacemos cargo de que el multiverso no colapse.

──Pensé que ya habíamos hecho eso──. Miles se deslizó hasta un nuevo objetivo colgandolo de cabeza en una de las lámparas de la ciudad y quitándole la billetera que robó.

──El otro día, en una dimensión acuática, Hobie y yo peleamos contra un hombre con un nombre gracioso que parecía pescado──. Abril dijo, parada detrás de él en la lámpara antes de dejarse caer con su telaraña y gritar──. Creo que se llamaba Namor.

──Esperate... ¿Y quién es Hobie?──. le gritó pero Abril ya se había ido. Cuándo la alcanzó, ambos comenzaron a correr en un invernadero sobre la azotea de un edificio.

Hobie debía ser su supuesto compañero. ¿Y pasaban mucho tiempo juntos? ¿Que tanto? ¿Era atractivo? Nah, nadie con ese nombre podría ser atractivo, además, ya era su novia. No del tal Hobie. Tómala, Miles se burló en su cabeza siguiéndole los pasos a Star Spider.

──¡Te va a caer súper bien!──. Abril le aseguró llevando la delantera──. A veces me deja quedarme en su dimensión.

Miles se detuvo a mitad de camino, totalmente pasado por alto por la castaña quién siguió corriendo──. Ah, caray... ¿Te quedas a dormir o cómo?

Abril lo ignoró impulsandose para caer encima del subterráneo que pasaba por la calle, mirando de reojo a Miles quién aterrizó detrás de ella.

──Son muy estrictos con los lugares a donde voy, sino, te hubiera venido a ver antes──. Abril le confesó, dándole un leve apretón a su mano antes de volver a deslizarse lejos de él.

──Lo entiendo──. Miles le respondió con confusión──. Pero... ¿Por qué veniste ahora? ¿Abril?

«¿Pero que demonios hace aquí? ¿No se supone que vive a millones de años luz lejos de aquí?» las palabras de Abril 1610 empezaron a sonar en la cabeza de Miles, confundiéndolo más de lo que ya estaba. «No es por bajarte de tu nube, Romeo, pero ¿No se te hace raro?»

Miles la buscó con la mirada pero no había rastro de Star Spider por ningún lado, Miles tomó una dirección distinta gritando el nombre de Abril hasta que ella dejó de escuchar. Star Spider detuvo su camuflaje, encendiendo su reloj cuándo notó que Miles ya no estaba en el perímetro. El holograma de Gwen se proyectó encima de su muñeca, mirándola con una expresión de aburrimiento y cruzada de brazos.

──¿Ya terminaste tu velada romántica o esperarás a qué tu papi venga a buscarte y llevarte de la oreja?──. Gwen se burló, aunque de forma amargada, seguro estaba enojada por haberla dejado──. Encontré a Spot, pero no pude seguirlo, debes de regresar ya. Te mandaré mi ubicación, debemos detenerlo antes del anochecer.

Abril solo asintió con un gruñido, haciendo reír más a Gwen y antes de que la rubia pudiera decirle que se parecía a Miguel, apagó el reloj retomando su camino hasta encontrarse con Miles nuevamente. Le tocó el hombro apareciendo a su costado, Miles aún estaba confundido pero no quería hacer preguntas que la hicieran sentir incómoda, si algo le pasaba estaba seguro que ella le diría. ¿No? Porque confiaba en él... ¿No?

──Ah, ahí estabas──. Miles le dijo cuando ella apareció frente a él──. ¿Dónde andabas?

──Pensé haber visto a Ned y a Liz pero me equivoqué──. le mintió, dándose la vuelta para encararlo──. Quería decirles "hola".

──Porque es súper normal que una nueva heroína arácnida vaya a decirles hola en medio de la calle──. Miles se burló, no comprándole lo que le dijo, pero lo pasó por alto. No quería arruinar la cita con sus inseguridades, menos sabiendo que tenían pocas horas juntos.

Ambos aterrizaron en el lado lateral de un rascacielos. Abril se quitó su máscara, dejando que el aire le pegará en la cara un rato, cerró sus ojos pero aún así podía sentir la mirada confundida por parte de Miles a su costado. Debía tener muchas preguntas, y ella no tenía las respuestas para todas, tampoco el tiempo para hacerlo.

──Que bonito lugar para venir a pensar──. Abril rompió el silencio, empezando a caminar de manera lateral en la copa del edificio.

──¿Verdad? ¿Quién quiere una caminadora cuando puede usar el techo del Banco Williamsburg.

Abril soltó una risa, alzó sus brazos a sus costados tratando de mantener el equilibrio mientras saltaba los bordes del techo, sintiendo los pasos de Miles detrás de ella hasta que ambos se detuvieron poniéndose derechos y sentándose en el borde del lugar.

──Tengo una idea, siempre he querido hacer algo, ven párate──. Miles se levantó de repente ofreciéndole sus manos para levantarla. Abril frunció el ceño levantándose del suelo y tomando ambas manos del moreno──. Quédate ahí... ándale, yo haré algo, espera...

Abril lo esperó, entrecerrando sus ojos con sospecha cuándo lo vio colgarse de cabeza con ayuda de una telaraña haciéndole una señas con su mano libre para que se acercará. Abril lo hizo quedando a simples centímetros lejos de él, Miles sonrió con anticipación parpadeando un par de veces cuándo sintió la sangre empezar a subir a su cabeza.

──Te vas a marear... ¿Estás loco? ¿O me querías ver invertida para darte cuenta que no estoy tan bonita cómo dices?──. bromeó la pelinegra, confundida por las acciones del chico.

──Nah, algo mejor, acércate más──. Abril nuevamente hizo una mueca de confusión cerrando la poca distancia entre ambos, alzó una mano para tomar la mano libre de Miles cuándo él se la ofreció──. Ahora bésame.

Abril abrió sus ojos con sorpresa. ¿Eso quería hacer? ¿Dónde había visto eso? Evitando sonrojarse, la pelinegra carraspeó su garganta, dejando los nervios irse pero las manos comenzaron a temblarle. Miles se quedó en silencio acercando su rostro cuándo notó el nerviosismo de Abril, él debía ser el nervioso, la telaraña podría romperse y humillarlo enfrente de su novia, no ella. Así que se acercó, balanceándose levemente hasta que Abril le tomó el rostro en sus manos.

Miles sonrió satisfecho hasta que sintió, por segunda vez en el día, los labios de Abril sobre los de él. Cerró sus ojos ante el contacto, sintiendo como su corazón empezaba a latir cómo un loco en su pecho pero aún así no se alejó. Y podría quedarse así todo el día, pero por un momento se olvidó del tiempo y disfruto el ahora.

Yo con Miles y Abril, Miguel y sus eventos canon me hacen los mandados, viva el amor entre anomalías:

A partir de aquí las cosas ya se pondrán serias, bueno no taaaanto pero con Miles en la Sociedad Arácnida ya sabemos cómo se pondrán las cosas, todo se va a complicar y será puro dolor y bronca😪 Claro, Miles y Abril ya son novios oficialmente pero ¿A que costo? Aún estoy indecisa en algunas cosas por ahí, en especial todo el drama de traición, aún no sé si darles drama de más o moderado 🤓

Se me olvidó comentarles que ahora pondré un horario para actualizar porque me da amsieda actualizar todos los días (actualizó cada que terminó un capítulo porque soy floja) así que ahora los días de actualización serán: martes, jueves y sábados. Aunque solo quedan cinco capítulos más y se termina el acto😰 pero apenas me acordé que se suponía era una trilogía así que probablemente subiré el fic de Gwen, quizá el de Vex y Miguel, aún no es seguro la verdad, también quiero hacerle uno a Hobie que esté conectado con este.

¿Que les pareció el capítulo? ¿Que quieren ver en un futuro? Ya se viene la angst y el sufrimiento 😇😇

Ya podemos decir oficialmente que Abril y Miles:

Ps. El desarrollo de personaje que se le viene a la Abril: