capítulo O3
葉 cobra kai
𝐀𝐍𝐓𝐈 - 𝐇𝐄𝐑𝐎 ❛ temporada 01 ❜

❛ ━━･O3. overthinking･━━ ❜

HARLEY LLEVABA UN PAR DE DÍAS SIN PODER CONCILIAR EL SUEÑO DE MANERA NORMAL, su mente no dejaba de repetir una y otra vez las cosas que habían sucedido en la fiesta de Halloween, y para colmo, no había visto a su padre sobrio desde entonces y apenas se dirigían la palabra.

Algo había pasado entre la rubia y Eli, no podía ser solo la cabeza de Harley creando escenarios falsos. La chica podría jurar que la vibra con su mejor amigo había cambiado durante el baile y por lo mismo, había estado ignorando sus mensajes y pasando más tiempo de lo normal en la biblioteca. No tenía cabeza para entablar una conversación como si nada con él, al menos no sin dejar que todo lo que sentía por Eli saliera de su boca como vómito verbal y arruinara todo. Harley se había vuelto experta en fingir que todo iba bien en su vida y aquella situación no sería diferente.

Lamentablemente, había situaciones que eran más complejas que sus enredadas emociones y sabía que ignorarlas no era lo más sensato. Harley había estado reuniendo todos los deberes para Miguel luego de que este haya sufrido otra golpiza por parte de Kyler y los idiotas que se juntaban con él y lo habían dejado momentáneamente postrado en el sofá de su hogar.  Aquello no había hecho más que desencadenar una reacción en cadena, pues Johnny parecía que no se había tomado para nada bien lo sucedió con su único estudiante y las palabras que Carmen Diaz le había dedicado ──y que no habían sido agradables, precisamente──, terminaron de convencerlo para cerrar Cobra Kai.

Luego de darse una ducha bien fría, Harley tomó su bolso y salió de su casa. Su padre permanecía durmiendo en el sillón y probablemente seguiría así por un par de horas más hasta que se le pasara el adormecimiento producido por la cantidad de alcohol descomunal que había bebido estos días. Caminó el par de metros que separaba su hogar hasta la casa de su vecino con cierto nerviosismo, pues la última vez que había estado allí su presencia no había sido la mejor. Alzó una de sus manos y tocó la puerta un par de veces y escuchó un murmullo desde adentro y un ya va, luego de unos minutos la puerta se abrió y Harley sonrió con incomodidad al ver a la madre de Miguel.

──Hola, señora Diaz──murmuró la chica mientras sujetaba con fuerza la tira de su bolso. No pudo evitar fijarse en la cabeza que se asomó detrás de la madre de Miguel, cuyo rostro no mostraba simpatía. Se trataba de la abuela de este y eso la calmo un poco, ella había sido la única que se mostró de acuerdo con las clases de karate de Miguel.

──¡Miggy se pondrá tan feliz de ver a una amiga!

No entendía muy bien la discusión que mantenía las mujeres de la familia Diaz en español, pero Harley podía estar segura de que se referían a ella. Carmen Diaz era una mujer muy expresiva y la rubia estaba segurísima de que no se encontraba precisamente feliz de verla allí.

──Te traje algunos deberes──dijo Harley mientras se acomodaba en el sofá junto a Miguel. Este último se veía terrible, tenía algunos hematomas en el rostro y mantenía una bolsa con hielo en la cabeza. Detesto a los imbéciles que son rudos cuando están en grupo, estoy completamente segura de que si hubieses estado solo con Kyler le habrías pateado el trasero.

──Fue mi error, no estaba listo y nunca lo estaré. Mi madre no quiere que vuelva entrenar karate.

A Harley no le sorprendió en absoluto la decisión de la señora Diaz, había sido bastante clara que no quería que Miguel vuelva a salir lastimado y había sido aún más clara con Johnny, no lo quería cerca de su hijo.

──Creo que a Johnny le afecto bastante la paliza que te dieron──murmuró ella mientras veía sus manos. Harley estaba segura de que su padre estaba más decepcionado de sí mismo que de Miguel y lo conocía bien después de todo. Había terminado de agregarle otro fracaso a la lista.

──Lo suficiente como para querer cerrar el dojo──agregó Miguel, ambos jóvenes soltaron un suspiro frustrado.

La abuela de Miguel miraba a su nieto con una sonrisa pícara, sin embargo estaba muy lejos de entender la relación de ambos adolescentes, sobre todo cuando una estaba perdidamente enamorada de uno de sus mejores amigos y el otro mantenía un enamoramiento hacia la novia del chico que lo haba dejado en esa situación.

──Mi niña, quédate a cenar──pidió la abuela Diaz.

Harley miró a la señora un tanto insegura, luego a la madre de Miguel y por último a su amigo. No sabía si era buena idea y sobre todo, algo le decía que quizás a Carmen Diaz no le agradaba tanto.

──Quédate a comer, por favor──pidió Carmen mientras miraba a la niña. La mujer aflojó su ceño al ver la inquietud en los orbes azules de la muchacha. El arrepentimiento comenzaba a ebullir dentro de su cuerpo, pues había sido demasiado dura con aquella chica por cosas que ni siquiera habían sido su culpa.

──Esta delicioso, señora Diaz──musitó Harley mientras le daba otro sorbo a la sopa y se tragaba otro bocado del pan amasado que había preparado la abuela. Eran pocas las veces que probaba comida casera y su paladar le pedía a gritos más.

──Dime Rosa, niña──murmuro la señora mientras sonreía, luego miro a su hija y movió las cejas──. Será una gran nuera, Carmen.

Miguel abrió los ojos sorprendido por la palabras audaces de su abuela y luego comenzó a toser, lo suficiente para que después soltara un quejido de dolor y terminara sujetándose el costado de su abdomen.

──¡Abuela! ──gritó este con las orejas rojas. Harley sonrió con algo de confusión y miró a las dos mujeres sin comprender muy bien porque estas se reían──. Harley es mi amiga. Agradezco que tu español no sea tan bueno y no logres entender lo que dicen.

Harley solo sonrió, cualquier incomodidad que sentía hacia Carmen Diaz había desaparecido en el mismo instante en que ella sonrió y le agradeció por traerle los deberes a Miguel y preocuparse por este. La mujer se había disculpados por los dichos hacia su padre y también por no haberla tratado con amabilidad desde el principio y viceversa. La chica se había sentido bien, en casa y querida, muchos sentimientos a los cuales poca costumbre tenía.

El nombre de su hermano mayor pocas veces era mencionado en su hogar. Johnny evitaba mencionar a su hijo gran parte del tiempo y a Harley, no parecía interesarle saber acerca de su él y su vida. Sin embargo, no siempre había sido así.

Harley era muy pequeña para entender bien la situación de su padre y la madre de su hermano mayor, pero a ella no parecía importarle mucho y solo quería pasar mas tiempo con Robby. Saber sobre la existencia de su hermano la había alegrado bastante, sobre todo porque sentía que así podía apaciguar aquella soledad que se apoderaba de su yo de 11 años, sin embargo, pocas veces había podido coincidir con él y a Johnny, por más que le insistía de ver a su hermano, no parecía lo suficientemente interesado.

Esta vez sería diferente, Harley había ahorrado el dinero suficiente para comprar una bolsa llena de golosinas y para poder costear el taxi desde su hogar hacia el de Robby. Johnny siempre solía dejar dinero desparramado por el suelo o en su auto y la rubia había aprovechado la oportunidad de hacerse con ellos para una buena causa.

Miró por última vez a su padre, quien estaba estirado sobre el sillón soltando ronquidos bastante fuertes. Harley estaba completamente segura de que no notaria su ausencia pronto y no sabía como sentirse al respecto con eso, después de todo su padre había olvidado nuevamente su cumpleaños.

Cuando llegó al edificio donde vivía su hermano, Harley se ajustó su mochila e ingreso con cierta determinación. Había venido solo una vez a este lugar y ya se había olvidado del número de la puerta donde vivían los Keene, sin embargo, el conserje del lugar abia sido lo suficientemente amable para indicarle el numero y presionar en el ascensor el piso donde debía bajarse.

Harley estaba nerviosa y emocionada a la vez. Realmente deseaba pasar una tarde junto a su hermano mayor, poder compartir con él y establecer de una vez por todas, su hermandad, pero había pasado bastante tiempo desde la última vez que se habían visto y no sabía como Robby se tomaría su llegada, no eran extraños pero a veces se sentía así y Harley quería cambiar eso. Se ajustó su mochila y sujeto con fuerza la bolsa de papel llena de chucherías y tocó el timbre del departamento. 

La puerta se abrió casi al instante y Harley ladeó su cabeza algo confundida al ver a un señor que no conocía y no a Shannon Keene.

──No queremos galletas, mocosa──gruñó él mientras miraba a la pequeña rubia con desdén.

──¡Vengo a ver a mi hermano Robby!──exclamó la pequeña antes de que aquel hombre cerraba la puerta. Harley se encogió de hombros algo intimidada con el tono de aquel tipo.

──¡Shannon, hay una mocosa aquí que dice que es hermana de tu hijo!

Tras unos minutos de que aquel señor haya gritado, Harley comenzó a sentirse un poco asustada y con ganas de llorar. Sin embargo, sintió un poco de alivio al ver a la madre de Robby asomándose por la puerta, esta última se veía un poco sorprendida al ver a la niña de Johnny en la entrada de su casa y más aún, sin compañía de su padre.

──Hola, señora Keene──saludo la pequeña con una sonrisa tímida──. Vine a ver a Robby, es mi cumpleaños y quería pasarlo con él. ¡Traje golosinas!

──Harley...──murmuró Shannon Keene, confundida──. ¿Dónde está Johnny?

──¿¡Que haces tu aquí!? ──Robby Keene lucia exactamente igual a como Harley lo recordaba. Tenía su cabello lacio corto y unos lentes que lo hacían ver tierno a los ojos de su hermana menor. Lo único diferente en él era que había crecido unos cuantos centímetro mas que la rubia y que en su cara faltaba una sonrisa.

──¡Bobby! ──se apresuró a decir ella mientras trataba de sonreír y abrazar a su hermano, sin embargo este la empujo con brusquedad──. Traje golosinas...

──¡No me interesa y no me toques! ──gritó el pequeño, molesto.

Harley sintió como le temblaban los labios y miró a la señora Keene en busca de respuestas. ¿Por qué su hermano mayor actuaba de aquella manera? ¿Acaso había dicho o hecho algo para molestarlo?

──Bobby──susurró Harley a punto de llorar. Cuando era aún más pequeña, llamaba a su hermano así porque no podía pronunciar bien su nombre, él había sonreído en aquel entonces. ¿Por qué ahora era diferente?

──¡Me llamo Robby, niña tonta! ──volvió a gritar él──. ¡Y no me interesa que sea tu cumpleaños! ¡Ya le dije a Johnny que no somos hermanos, ahora vete y déjame en paz!

Harley dejo caer la bolsa de golosinas al mismo tiempo que sentía el portazo de Robby y corrió hacia la salida del departamento, a lo lejos escucho como Shannon Keene gritaba su nombre, pero no le importaba. Lloró todo el camino de vuelta a casa. En la entrada estaba Johnny sacudiendo su cabeza mientras sostenía su teléfono con una mano y bebía una lata de cerveza con otra.

──Hals...──murmuró Johnny, sin embargo, su hija ni siquiera lo miró y se fue directo a su pieza.

Tres años después, Harley sabía exactamente porque su hermano había actuado así, él no la quería cerca, no la consideraba parte de su familia y por mucho que eso la había dañado, por fin lo había comprendido. Daba lo mismo todos sus intentos por querer establecer una relación con él, Robby Keene no la quería, no era su hermano y ya no podía hacer nada para cambiar eso.

Así que, cuando Johnny Lawrence le había pedido el favor de acompañarlo a la casa de su hijo mayor tras un llamado de que este no había asistido a sus clases hace bastante tiempo, esta se negó. Le dolía admitir que le afectaba lo que pasaba en la vida de Robby, pero ya había aprendido la lección con él y no permitiría que la dañara más. Su padre podía intentar todo lo que quisiera con tal de recomponer su relación padre e hijo, Harley ya había tenido suficiente.

(🥋)

Harley se había sentado justo al lado de Eli y frente a Miguel y Demetri en la biblioteca, sin embargo, era ajena a lo que estos hablaban, su mayor preocupación era resolver los ejercicios de trigonometría. No se consideraba un cerebrito, pero si tenía muy buenas notas y se destacaba en algunas materias, le gustaba estudiar y ser responsable con sus estudios, pero detestaba todo lo relacionado a las matemáticas y sabía que si no terminaba de resolver los malditos ejercicios y mejorar sus calificaciones en aquella materia, su promedio se vería afectado y no quería eso. Así que soltó un gruñido y miró a sus amigos con cierto fastidio.

──¿Pueden cerrar la boca? ──musitó con molestia. Se ganó la mirada sorprendida de los tres chicos ──. No logro terminar estos ejercicios y con ustedes sin parar de parlotear, se me dificulta aún más.

──No me molestaría hacerlos por ti, sé que detestas esta materia── murmuró Eli mientras le sonreía en modo de disculpa. Harley lo miró y mordió su labio algo insegura, no quería aprovecharse de él y de su cerebro bueno para los cálculos, sin embargo, no tenía más energía, su cerebro se había frito──. Enserio no me molesta, pecas.

Eli tomo el cuaderno de la chica y se puso a hacer los ejercicios con demasiada facilidad. Sin embargo, no logro terminarlos ya que Kyler y el grupo de idiotas que eran sus amigos, se acercaron ellos. Los 4 amigos se levantaron de golpe y comenzaron a alejarse con rapidez, pero Kyler logró atrapar a Eli e hizo que todos se detuvieran.

──¿Adónde van? Mierda, miren a este bicho raro──se mofo Kyler mientras tomaba a Eli de la mandíbula. Harley apretó los puños con rabia──. Carajo, ¿Qué chica sería capaz de besar esta mierda?

Harley se aproximó a Kyler con rabia, estaba harta de que se metieran con sus amigos y sobre todo con Eli quien no hacia daño a nadie, estaba harta de que siguieran incrementando las inseguridades en él, así que no dudo en defenderlo.

──¡Déjalo en paz, imbécil! ──gruñó la rubia mientras empujaba a Kyler lejos de su amigo──. Apuesto que hay más chicas que desearían besarlo antes que a ti.

Kyler soltó una carcajada y volvió acercarse a la chica, esta vez de manera desafiante y aquello no le gusto a Harley. La mirada de asco que este le estaba dando, le dio escalofríos.

──Cuándo hablas de chicas ¿te refieres a ti? ──se burló él, Harley se encogió un poco en su lugar──. Porque yo no veo a ninguna por aquí. Tu no cuentas.

Harley estuvo a punto de abrir la boca y responderle, sin embargo fue Miguel quien interrumpió la tensa situación. A la rubia le ardían los ojos de pura rabia.

──Déjanos en paz, Kyler──pidió Miguel con tono cansado. Esta vez el imbécil fue tras él y lo empujo. Aun así, Miguel no cayó en sus provocaciones y decidió irse, Eli miro a Harley y la tomo del brazo mientras la apartaba de aquel lugar.

Miguel se había ido junto a su madre en auto y Harley no le apetecía irse en autobús, prefería caminar y calmar sus enredados pensamientos, pero al perecer Eli no quería que esta estuviera sola, así que la acompaño. Demetri se había marchado en el autobús molesto porque al final Kyler y su séquito de idiotas habían ido a por él y le habían lanzado su mochil al basurero y esta había quedado con un olor horrible y llena de yogurt.

──Gracias por defenderme, pecas──murmuró Eli mientras tomaba la mano de la chica. Harley paro de caminar y observo a su amigo, se puso nerviosa y pudo notar como el sonrojo se hacía presente en su rostro──. Prefiero que Kyler la tome conmigo y no contigo, no debió decir eso. Es un imbécil.

──Me da igual lo que pueda decir o pensar de mi ese idiota──dijo Harley encogiéndose de hombros, lo único que le provocaba era rabia──. Solo me interesa que los deje en paz, sobre todo a ti, Eli. Y sabes que lo que dije era enserio, hay muchas chicas que si te conocieran te preferirían mil veces a ti que a ese idiota. Yo te prefiero, cosa 1.

Eli Moskowitz se había puesto rojo con las palabras tan sinceras de Harley, recordó su primer beso que justamente había sido con la chica que tenía enfrente y quien era nadie más y nadie menos que una de sus mejores amigas. Era el secreto de ambos, ni siquiera a Demi le habían dicho y no pensaban hacerlo, habían llegado a un acuerdo de que aquella situación no admitiera un fin a su amistad o la confianza que se tenían. Sin embargo, para Eli era una tortura pensar en eso, porque solo era un recordatorio de su cobardía.

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⋆ ── lizzie's note:
hola, arriesgándome a que esto sea un completo flop, les doy la bienvenida
al tercer capitulo de ANTI-HERO.

Quería mostrarles un poco lo quebrada que esta la (inexistente) relación de Harley y Robby :c y como la quiero ir desarrollando durante la historia y como esto afectara el futuro de Harley y las relaciones con sus cercanos.
¿Les gusto? cuéntenme.

No se olviden de dejar un voto y comentar
(no a los lectores fantasmas)
Nos vemos en el siguiente capítulo, xoxo.