Rosse Leviett

– ¡Joder! – exclamo cayendo en la hierba sintiendo como el aire vuelve a mis pulmones permitiéndome respirar normalmente con el paso de los segundos.

– Eres bastante ágil para ser una chica –Reece llega cayendo a mi lado.

Lo observo detenidamente con el ceño fruncido.

– Y tu demasiado inteligente para ser un chico  – sonrió al ver su cara de falsa ofensa.

Es sábado y ha pasado los últimos cinco días de la semana matándome en su supuesto "entrenamiento".

Pero no me quejo ya que no hemos discutido ,  al contrarío nos hemos unido más lo cual no me da buena espina puesto que cada vez que está cerca de mi hace que mi mente viaje a la noche en la que "casi pasa algo" eso sin quitar que los sueños dónde me toma como cajón que no quiere ceder al igual que mis pesadillas no abandonan mi mente a la hora de dormir.

–Veamos si te quedan fuerzas para burlarte –  Reece se abalanza sobre mi sosteniendo mis manos con una de las suyas haciéndome reír inmediatamente con el tacto de su otra mano en mis cosillas.

– Ya..ya deja de .. – la risa no me deja hablar y me empieza a faltar el aire –  para Reece – me quejo pero este me observa desde arriba con su perfecta sonrisa de oreja a oreja sin la intención de parar.

Aprovecho un momento donde afloja el agarre de tanto reírse y me abalanzo sobre el haciendo que caiga aún riéndose y esta vez soy yo la que se pone a horcajadas sobre el aguantando sus manos a los lados aplicando fuerza.

– ¡Joder casi me dejas sin aire allí debajo! – le digo respirando aún con dificultad pero sin borrar la tonta sonrisa de mi rostro al detallar el momento.

Y joder..verlo así, debajo de mi riendo como un niño pequeño me regala mil año de vidas más , mis ojos se encuentran con los suyos cuando por fin deja de reír para respirar .

  Siento como mi piel se eriza con solo sentir su respiración cerca de mi rostro. Baja la mirada a mis labios y no puedo evitar hacer lo mismo cuando se muerde el suyo.

Siento unas ganas imparables de besarlo , siento que en cualquier momento voy a morir de las ganas de comerle la boca y sentir la magia de su lengua haciéndome derretir.

A veces las ganas son más fuertes que la conciencia y el orgullo , a veces solo necesitamos romper la jodida barrera acorazada y satisfacer el deseo.

– Me gustas , Rosse –  repite haciendo que mi mirada viaje a sus ojos.

– Ya lo se..

– Se que lo sabes –  me interrumpe mientras espeta una risa aún debajo de mi  – pero esto me está matando , necesito saber.. –  traga en seco y se relame los labios –  si yo te gusto también.

¿Reece ? ¿ Reece Müller me está preguntando si me gusta ? ¡ Está de broma ! ¡Pues claro que sí ! Estoy jodidamente envuelta en sus encantos , en su sonrisa coqueta , en sus besos , en su jodida forma de ser .

No quiero decir una estupidez. Pero cada día a su lado me hace flaquear y preguntarme a mi misma si.. me estoy enamorando de Reece.

– Me gustas – confieso y la jodida sonrisa que se le dibuja en el rostro es más de ¿alivio? – pero no digas nada egocéntrico o acabarás echándolo todo a perder  – sonrío yo contagiándome con la suya.

Intenta decir algo pero me levanto en fracciones de segundos arrepintiéndome de lo que acababa de hacer , se que será un poco bipolar estar sobre el riéndome y de momento tener una pelea mental por ser tan estúpida.

– Reece podrías olvidar... – Me giro para retractarme pero sus manos se sitúan en mi nuca atrayéndome a su boca , intento evitarlo (mentalmente) pero instintivamente encajamos perfectamente y un beso llena mis sentidos.

– ¿Y olvidar que acabas de decirme que te gusto ? –  joder , que diga eso aún con sus labios sobre los míos hace que la piel se me ponga de gallina - Jamás..

Vuelve a besarme pero esta vez siento nuevamente la sensación de  alivio en su beso y eso me contagia haciendo que lo tome de la nunca agudizándolo mientras sus manos viajan por mi espalda.

– Joder Rosse , deja de besarme así o no mediré el lugar , ni la gente – me mira directamente a los ojos con los labios rojos – Se mi novia , Rosse - sus palabras se quedan en mi mente por unos segundos ¿su novia ?

Me imagino entrando de la mano de Reece Müller mientras todo el colegio me mira con envidia por venir colgada de la mano de el chico más envidiado de el jodido colegio , me imagino la cara de Hanni o peor, la cara de Marcos y eso hace que una sonrisa maliciosa se dibuje en mi rostro , es matar dos pájaros de un tiro ya que quiero ver a esas dos ratas arrastrándose del dolor por mi felicidad porque si , me haría jodidamente feliz ser su novia

¿A quién no ?

Recce Müller

Su vista se queda sujeta a la nada mientras yo impaciente espero una respuesta tratando de lucir lo más confiado posible.

Ya se que le gusto , me lo confesó y logre callarla antes de que se arrepintiera . Acabo de arriesgarlo todo con la pregunta pero tenía que hacerlo ya que Rosse en impredecible y no podía seguir perdiendo el tiempo , Henrick me pregunta si progreso a diario y ya estoy hasta los huevos de sus llamadas.

Si Rosse no acepta estaré condenado y eh puesto mucho empeño durante estas semanas para acercarme a ella . Estoy consciente de que lo estoy haciendo tan jodidamente bien que aveces hasta yo me llego a creer que tengo algún sentimiento hacia ella.

Es cierto , Rosse es una de las chicas mas hermosas que eh visto en mi vida , eso para no decir que la más .

Se ha metido tanto en mi mente que no puedo dejar de pensar en sus besos , su cuerpo , sus gemidos. Creo que lo de ese día me afectó más a mi que a ella.

– Si –  suelta con  una pequeña sonrisa haciéndome reaccionar con su respuesta – si que quiero ser tu novia.

No se por que sus palabras me hacen sentir alegría , tal vez porque estoy logrando mi objetivo , o tal vez porque , creo..que en otras circunstancias esas palabras me harían jodidamente feliz.

– Mi novia – la agarro de la cintura hundiéndome en el azul de sus ojos – mi adorable y hermosa muñeca – suelto en un ronroneo notando come se tensan cada uno de sus músculos.

–Ahora ¿me debes algo verdad ? –  O si...se jodidamente a que se refiere y me doy cuenta de que tanto ella como yo no hemos podido superar ese día .

– ¿Quieres tu pago ? –  Pregunto mientras escondo un mechón de su cabello detrás de su oreja.

– No – niega con la cabeza haciendo que se vuelva a salir , una sonrisa maliciosa se forma en sus labios poniéndome a cien – Quiero mi venganza.