👑Capítulo 9👑
"Promesa"
Kylliam no sabe perder, odia hacerlo y se monta berrinches cuando lo hace. El día de hermanos es un éxito total y logra sacarme el día de ayer de la mente. Mi hermano y yo llevamos algunas horas cabalgando por los terrenos del palacio entre risas y bromas, algo que no hago desde hace mucho y que hasta ahora me doy cuenta de cuanto lo había extrañado.
—Entonces me lanzó un plato de sopa —Kylliam se ríe de su propia historia y yo niego con la cabeza.
—Te lo merecías por imbécil.
Me mira ofendido por ponerme del lado de Eva, pero tengo que aceptar que mi hermano se comporto como un auténtico idiota cuando se vieron en Nardinkath.
—Lo sé, en ese tiempo los problemas con Isacc parecían no tener fin y tenía un obsesión por querer controlado todo.
—Por supuesto, Eva no es alguien que se deje controlar.
Kylliam hace un ademán con la mano y luego añade:
—Esa fue una de las cosas que más me gustaron de ella —su mirada irradia amor por todos lados—. Me sacaba de quicio, pero amaba cada momento de ello.
Ambos reímos y detengo a Ocaso, mi caballo, para que coma algo de hierba, Kylliam hace lo mismo. Por un instante nos quedamos en silencio contemplando los terrenos que se expanden a nuestro alrededor. Hasta que él habla.
—Eva y yo queremos tener un bebé.
Lo miro sorprendida pero a la vez feliz. La idea de tener un sobrino me emociona demasiado. Un niño correteando por los pasillo del palacio y haciendo travesuras es algo que le vendría bien a nuestra familia.
—¡Voy a ser tía! —exclamo, pero Kylliam no está feliz—.¿Qué pasa?
—La doctora dijo que no tengo muchas probabilidades para ser padre.
La sonrisa se borra de mi rostro al ver la tristeza de los suyos.
—¿Por qué?
Su cuerpo se tensa y desvía la vista hacia otro lado.
—No quiero hablar de ello, de todos modos no planeamos rendirnos y ya hemos comenzado un tratamiento de fertilidad.
Conozco a Kylliam como la palma de mi mano y se cuando no debo insistir en algo porque no le gusta mostrar debilidad, así que solo asiento sin preguntarle que está pasando con él.
—Espero que todo salga bien.
De repente gruesas gotas de lluvia comienzan a caer y mojar nuestros cuerpos.
—Mierda, vamos.
Muevo mis pies para ordenarle a Ocaso que corra y salimos a toda prisa hacia el palacio. La lluvia comienza a caer con más fuerza y solo logramos llegar a la casa que está al final del jardín donde Jared suele hospedarse siempre que viene a Kestria. Bajamos de los caballos y entramos en silencio. Miro de un lado a otro a la espera de que en cualquier momento mi trago amargo se aparezca por uno de los pasillos.
—No se está quedando aquí —me informa Kylliam—. Tiene un departamento en la ciudad.
Asiento intentado aparantar que no me importa en lo absoluto y me adentro hacia las habitaciones en busca de toallas para secarnos mientras afuera no deja de llover. Abro la primera de las habitaciones.
—¿Qué haces aquí? —Lisandra la psiquiatra de Jared me recibe con su cuerpo envuelto en una toalla y su cabello mojado.
—¿Tú que...
—Aquí está la toa...—Jared se detiene en seco cuando me ve de pie en la puerta.
Gracias a dios, él si va vestido, pero igual de mojado que yo. Sus ojos grises me escanean de arriba abajo y me siento bastante nerviosa.
—Kayla ¿qué haces aquí?
—Estábamos cabalgando y nos agarró la lluvia, ¿tú que haces aquí? —Kylliam aparece detrás mio y responde salvándome de quedar en rídiculo porque no soy capaz de hablar.
Los recuerdos del día de ayer me bombardean la cabeza.
—Vine por unas cosas, también nos sorprendió la lluvia.
Lisandra que hasta ese momento se había mantenido callada agarra la toalla que Jared tiene en sus manos y se adentra en el baño de la habitación.
—Ve por unas toallas —me ordena Kylliam—. En cuanto acabe de llover, volvemos al palacio.
Asiento sin decir palabra y camino hasta la otra habitación, en el baño hay cuatro toallas y las tomo. Comienzo a secar mi cabello y luego de algunos minutos Kylliam entra.
—Creo que pasaremos más tiempo aquí del que pensamos.
Mis alarmas se encienden y la toalla cae de mis manos.
—¿Por qué?
—He visto las noticias, es una tormenta local y puede que la lluvia no cese hasta mañana, solo va a empeorar.
—No puedo estar aquí con él.
—Tranquila, le he pedido que se mantenga alejado.
Ni siquiera me molesto porque haya hecho algo sin consultarme porque todo mi cuerpo comienza a sentirse de forma extraña, mientras las ganas de salir de esta casa me consumen. Bajo a la cocina por un vaso con agua y me siento una triunfadora cuando no lo veo por ningún lado, tal vez le haga caso a Kylliam.
Luego regreso a la habitación y me dejo caer en la cama mientras escucho las gotas de lluvia chocar contra el cristal y ese sonido logra relajarme a tal punto de quedarme dormida.
El sonido de un trueno hace que me despierte de golpe asustada, Kylliam está sentado frente a mi con el rostro aflijido mientras sostiene su celular en la mano.
—No podremos salir de aquí hasta mañana, es una jodida tormenta y uno de los arboles del jardín ha caído.
—La lluvia ha acabado el día de hermanos —me río con sarcasmo.
—Eva está desesperada, no me gusta dejarla sola en el castillo.
Dos toques en la puerta interrumpen nuestra conversación y luego Lisandra asoma su cabeza.
—Majestad —le habla a Kylliam—. He hecho la cena, bajen a comer algo.
Mi hermano asiente y me hace una seña para que lo acompañe. Llegamos al comedor donde Jared permanece en silencio y ni siquiera me mira. No sé que le dijo Kylliam pero ha funcionado.
—Espero que le guste, majestad —Lisandra toma asiento al lado de Jared—. Y a ti, Kayla.
—¿Por qué con mi hermano usas honoríficos y conmigo no?
Le suelto con molestia, porque me parece estúpido que después de lo que me dijo en la academia esté actuando como un angelito.
—Creí que...
—No creas nada, no te he dado la confianza para llamarme por mi nombre, ni siquiera me conoces.
—Kayla —me regaña Jared
—Tú no me hables —le pido.
Lisandra se pone de pie aclarándose la garganta y desaparece por un pasillo dejando una gran tensión en la mesa.
—No tienes por qué tratarla así, tú problema es conmigo —me dice Jared con molestia.
—Basta ya, los dos —ordena Kylliam y yo ruedo los ojos.
Jared se dispone a pararse para buscarla pero ella aparece por el pasillo con una botella en sus manos.
Maldita sea, no.
Al instante todo mi cuerpo se congela, mi garganta comienza arder y las manos a picarme. Trago en seco y Kylliam me mira con preocupación antes de agarrar mi mano y sostenerla con fuerza.
Mantente alejada de las bebidas alcohólicas por un tiempo, puedes recaer.
—Espero que con esto bajen las tensiones —dice Lisandra con una estúpida sonrisa en su rostro.
Todo lo que pasaba por mi cabeza era aquella botella. El vino es dulce y deja una sensación exquisita en la boca luego de que lo pruebas, cuando tomo no hay problemas, hace que me olvide de todo, que me olvide de él.
—Kayla —la voz de Kylliam me llama de regreso—. ¿Estás bien?
No puedo caer de nuevo.
Me levanto de golpe de la mesa y corro hacia la puerta sin hacerle caso a los llamados de mi hermano, traspaso el pequeño portal y salgo al patio donde la lluvia me empapa de inmediato. Respiro y cuento mientras lo hago, intentando controlar los acelerados latidos de mi corazón.
La botella está ahí Kayla, puedes regresar por ella.
Niego mientras me arrodillo en el suelo mientras las lágrimas comienzan a caer por mis mejillas. Escucho algunos pasos y luego una mano levanta mi rostro mientras un cuerpo se arrodilla frente a mi. La mirada gris de Jared se mezcla con la mía y huyo de ella.
—Mírame —me pide pero lo ignoro—. ¿Yo te hice esto?
Ante sus palabras llevo mi mirada a la suya y puedo verlo, la culpa.
—No, esto me lo hice yo.
—Perdóname —me pide—. Perdóname por romperte, pequeña. Perdóname por haber estado ciego.
—Ya te perdoné, Jared.
—No lo has hecho, no me quieres cerca.
—Porque el que te haya perdonado, no quiere decir que aún no duelas.
—Vamos dentro, vas a enfermarte —me pide.
—No quiero ir dentro, ella está ahí.
—Lisandra, no es mala persona.
—Ella no me importa —le digo mientras mi corazón vuelve a acelerase al pensar en la bebida—. Hablo de la botella.
—¿Qué sientes, Kayla?
Una corriente eléctrica me recorre el cuerpo y la punta de los dedos me pican.
—Quiero beberla, quiero saborear hasta la última gota, perderme en las sensaciones que me provoca —le digo y soltarlo hace que duela menos.
—No sé cómo ayudar a que superes el alcohol —su mano acuna mi rostro—. Pero si puedo volverte adicta a otra cosa.
Un brillo ilumina sus ojos mientras se saborea los labios.
—¿A qué? —le pregunto.
—A mis besos.
Sus labios se estampan contra los míos y me olvido de la lluvia, de Kylliam, de Lisandra, del alcohol. Todo lo que mi mente procesa son los labios de Jared y el tiempo que había esperado para que este momento llegara. Sus manos se aferran a mi pelo mientras yo me pego a su cuerpo en busca de su calor. Los labios de Jared son suaves y tenía razón cuando dijo que puedo hacerme adicta a ellos. Se separa poco a poco dejando pequeños besos en mis labios y luego pega su frente con la mia.
—Por favor, no me alejes de ti.
—No confío en ti, Jared —una lágrima se desliza por mi mejilla—-. Si estás haciendo todo esto porque quieres quitarte la culpa.
—¿Qué? ¿Me crees capaz de eso? —me pregunta con molestia.
—Sólo se que no quiero volver a ser la Kayla de hace un año.
—Kayla —toma mis manos—. No sé de donde sacas todo eso de la culpa. Me gustas, maldita sea, me encantas, siempre lo hiciste, pero estaba tan jodido por dentro que no veía lo que tenía aquí afuera. Te hice daño y nunca voy a perdonármelo, pero por favor, déjame demostrártelo, déjame demostrarte que estoy enamorado de ti.
El corazón se me quiere salir del pecho de la emoción y aunque por dentro la felicidad que siento es desbordante, hay una pequeña espinita que no me deja creerle del todo. Así que si, Jared tiene que demostrarme con hechos todo lo que ha dicho.
—Está bien, demuéstramelo Jared, vuelve a sembrar la confianza entre nosotros.
Una sonrisa se dibuja en su rostro y luego me recibe entre sus brazos.
—Voy a reconstruir tu piezas rotas, pequeña, te lo prometo.
Y yo espero que cumplas esa promesa, príncipe oscuro.
Hola amoresss
Nuevo capítulo
Espero les guste♥️
Lisandra ya comienza a hacer de la suyas🤨
¿Tienen actor favorito?
Yo amo a Ian Somehalder, pero en estos días ando babeando por Kit Connor.
Nos leemos prontissss
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