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16

Pov Suga

La ambulancia llegó y Jimin se fue en ella junto a su hermano. Se le veía mal herido. Sehun y yo tuvimos que ir en su auto hasta el hospital. Al llegar vimos a Jimin sentado en una banca en la sala de espera del área de emergencias, estaba llorando entre sus manos.

Me acerco y lo abrazo. No sabía qué decirle. Me sentía muy mal. Claramente no era culpa de nadie que esto sucediera. Simplemente era la vida que es injusta con los más buenos.

El doctor apareció y nos dijo que estaba bien. Pudieron ocuparse de dos costillas fracturadas, contusiones y leves indicios de hemorragias internas. Xiumin estaba con los signos vitales completamente bien, según el doctor. Pero como siempre había un pero...

— Xiumin está en coma... — Fueron las palabras que hacían falta para que Jimin se quedara paralizado mientras bajaba su mirada al suelo. Lágrimas no paraban de brotar de sus ojos aun así por lo perplejo de su expresión.

— ¿Por cuánto tiempo? — Preguntó Sehun acariciando su sien con frustración. Yo aún tenía a Jimin entre mis brazos.

— Puede que semanas... — Habló el doctor rascando su nuca. — Meses... — Y suspiró como si no quisiera seguir hablando, pero lo hizo. — O hasta años...

Lo último nos hizo crispar. Hasta yo me derrumbé. Casi oí el sonido del corazón de Jimin detenerse. Me levanté furioso hacia el doctor que se alejó un poco por mi expresión. Me valía mierda si me demandaban, pero iba a golpearlo.

— Yoongi... — Una voz me llamó deteniéndome. Apreté mis puños y di media vuelta. — Déjalo...

No... Ese no es mi Jimin

— Pero amor... — Musito acercándome para agacharme ante él y así ver su rostro. Tomo sus manos entre las mía y recosté mi cabeza en sus rodillas. Lágrimas salieron de mis ojos cuando su mano pasó por mi cabellera.

— Gracias Yoongi... Pero no tienes que preocuparte... Xiumin estará bien... Eso lo sé... — Dijo. — Por ahora... Tenemos que conseguir un trabajo para mantener el hospedaje de Xiumin... — Tomó mi rostro y levantó mi mirada. Vi sus ojos llorosos y su sonrisa forzada. Me levanté y lo abracé.

— Lo siento~ — No podía contenerme más. — Perdón por todo~ Yo te amo Jimin y no quiero que llores~

Escuché que soltó una risa en medio de nuestro abrazo. Reí y me separé. Tomo su rostro y limpio sus lágrimas con mis pulgares. Sólo pude mirarlo. Mirar esos ojos de ángel y admirar su hermoso rostro. Lo besé con dulzura y escuché que me susurraba un 'Gracias' tan sutil como el tacto de una pluma.

~Dos Años Después~

Sehun se encargó de pagar el hospital hasta que pude conseguir trabajo. Jimin no pudo gracias a que no hablaba japonés. Yo antes había hecho un curso pero podía desempeñarme apenas en el idioma.

Trabajaba en una cafetería. El sueldo era bueno y suficiente para mantenernos. Le pedí a Sehun que me ayudara a comprar un departamento justo al lado del suyo. Accedió de inmediato. Jimin nunca lo supo, pensó que lo pagué con mis ahorros, que era en parte cierto. Porque le pagué a Sehun lo que gastó trabajando horas de más.

Jimin antes visitaba a Xiumin todos los días pero le pedí que no se exigiera tanto, que redujera sus visitas a una o dos veces por semana. Discutimos y dejamos de hablarnos por eso, hasta que un día me disculpé y de inmediato me dijo que tenía razón, que no debió gritarme.

Nos fue bien después de todo, conseguí un ascenso como gerente <<por ende, era más del sueldo que venía cobrando>> y pude comprarle algunas cosas para cada mes que íbamos pasando juntos.

Claro que me molestaba que Jimin saliera con Sehun mientras yo trabajaba, el muy idiota le coqueteaba a mi novio a pesar de todo. No me daría una mala idea, sabía que Jimin no me engañaría.

Hoy era un día como cualquier otro. Aunque había salido temprano del trabajo y le compré un ramo de rosas a Jimin. Esta noche quería que fuera especial.

Desde hace un mes ya que no me acostaba con él y le hacía el amor como es debido.

Sonreí recordando ese día que me sorprendió en el trabajo pensando que me acostaba con la mesera. Me hizo reír cuando entró gritando mi nombre mientras miraba a todos lados. Me escondí esperando a ver que hacía, nunca me imaginé que decapitaría con la mirada a la chica que recién entró a trabajar el día de ayer.

Le gritó preguntándole por mí. Claro que yo le gustaba a esa chica pero me hice de la vista gorda apenas me enteré.

Jimin, por otro lado, gruñó y me buscó con la mirada. Aparecí para que no destrozara la cafetería y recibí una bofetada. Todos voltearon a mirar algo asustados y me lo llevé a los vestidores para explicarle tranquilamente y con una sonrisa <<que no podía desaparecer de mi rostro>> que tal rumor era falso.

En fin, terminamos haciéndolo en los vestidores. Gracias a dios, por ser gerente, tenía las únicas llaves del cuartico.

Llego a la casa y no encuentro a mi hermoso novio. Toda la planta de abajo estaba vacía. Escuché sonidos en el piso de arriba. Claro, estaba esperándome en la habitación.

Dejo el ramo cobre la mesa del comedor y subo con una sonrisa de par en par. Iba a girar la perilla de la puerta de nuestra habitación pero escuché jadeos del otro lado. No, eso era imposible, era mi mente jugándome una mala jugada.

Pego la oreja de la puerta para evitar que el pensamiento siga rondando en mi cabeza.

Ah... Sehun... Si... Así... Se siente bien... — Era Jimin.

Joder, no...

Me separo abruptamente de la puerta y mi respiración se acelera. Aprieto la mandíbula y apretó mis puños. Esto no se iba a quedar así, no podía venir ese idiota a follar a mi novio en nuestra maldita habitación.

Giro la perilla y abro la puerta de golpe frunciendo el ceño.

— ¿Pero qué-? — Sehun se sobresaltó.

Abrí mis ojos como platos.

— ¿Qué sucede, amor? ¿Por qué abres la puerta como estérico? — Se quejó Jimin que estaba acostado boca abajo y Sehun estaba a un lado haciéndole un masaje en los pies.

Trago en seco y la sangre sube a mis mejillas. Mierda... Qué carajos me sucede.

— Nada... Sólo pensé que te la estaba metiendo... — Susurro avergonzado acercándome.

— Ya va... ¿En serio pensaste que dejaría que eso pasara? ¿No confías en mí? — Se quejó dando media vuelta para verme de frente. — Además, sabes que no hago tan poco ruido cuando me la meten... Deja el alboroto.

— Lo siento... Te escuché jadear provocativamente... Y pensé lo que mi imaginación tuvo a su alcance — Digo acercándome para dejar un beso en su mejilla.

Negó con la cabeza y sonreí.

— Yo mejor me voy... No quiero problemas — Se despidió Sehun apenado mientras huía del lugar.

Suelto una carcajada y me abalanzo sobre Jimin besándolo del cuello. No tardé en desvestirlo rompiendo algunos botones de su camisa. En serio tenía tantas ganas de tocarlo y que su piel roce con la mía una y otra vez. Estaba realmente enamorado de mi bello ángel.

Paso mi mano por su abdomen mientras me coloco entre sus piernas. Comenzaba a sentir calor por la ropa y sus manos me desvistieron mientras sus labios se empeñaban en hacer muchas marcas en mi cuello.

Jadeo sintiendo como succiona una y otra vez. Joder, que me reclamara como suyo dejando marcas visibles era lo mejor que yo podía presumir de mi novio. Tan territorial como yo.

— ¿Te pone tan celoso verme con Sehun como para lanzarte encima de mí así nada más? — Susurra sobre mis labios acariciando el elástico de mi bóxer. Sonrío y copio sus acciones pasando mi nariz por detrás de su oreja.

— Sonará enfermo... Pero me puso tanto escucharte jadear... Me hirvió la sangre al sentir que esos toques tan leves e inocente provocaban sonidos tan excitantes de tus labios... A pesar de ser un bello ángel... Eres como el pecado andante... — Respondo bajando su bóxer dejando su cuerpo completamente expuesto y desnudo.

— Ah~ Yoongi... Eres un sucio — Jadea removiéndose en su lugar por como su erección chocó contra su abdomen.

Tomó mi mano y sin permiso <<que no es como si lo necesitara>> ingresó dos de mis dedos en su boca. Su lengua se pasaba sobre ellos mientras su mirada penetraba en la mía levantando más mi erección que goteaba manchando la tela de mi bóxer.

— Y tú eres un lascivo~ — Un gruñido dale de mi garganta y trago viéndolo con atención. Cuando terminó de lubricar con su boca, interrumpí su labor para pasar mis dedos por su entrada que latía ansiosa.

Era tan tentador, estaba en mi límite de control.

Ingreso mis dos dedos sintiendo como su interior me absorbía. Me torturaba tanto prepararlo. Sólo sentía la manera en la que abrazaría mi erección. Hundí más mis dedos para moverlos una y otra vez simulando embestidas.

— Yoongi~ Sigue así~ Mghn~ — Soltó un gemido desvergonzado en mi oído.

— Mierda, Jimin... — Mi otra mano bombeó su erección y fue cuando Jimin se volvió un desastre de gemidos. Se corrió minuto después cuando presioné su próstata. Aunque eso no me detendría.

— Lo~ Lo siento~ — Se disculpó cubriendo su boca.

Sin prestar atención a ello, lo tomo con fuerza de la cintura y en un movimiento rápido, me acuesto boca arriba sentando su cuerpo sobre mi abdomen. — Si te disculpas mientras mueves tu precioso culo quizá te perdone~ — Comento tomando sus glúteos en mis manos. Proporcioné una nalgada sonora y fuerte viendo como chillaba y cubría su boca. — ¿Entonces? ¿Mi hermoso Jiminnie no va a disculparse? — Pregunto volviéndolo a azotar varias veces. Casi me corro con verlo chillar y gemir mientras se apoyaba sobre mi pecho.

— Di~ Disculpa~ Hazme correr de nuevo~ — Me pidió viéndome con los labios entreabiertos y ligeramente rosados. Restregó su trasero en mi longitud. Dios, me estaba matando de desesperación.

Sin más, levanto sus caderas y me ingreso lentamente en él. Tan apretado que no me moví mucho para no correrme al instante, a menos así se acostumbraría.

— No hables así~ Me pone demasiado~ — Jadeo comenzando a mover mis caderas sujetándolo con fuerza viéndolo saltar un poco sobre mí. De a poco el sonido de la cama nos delató y un poco de firmeza hizo falta para que gimiera más alto cayendo de lleno llenándose por completo.

La cama rechinaba y nuestras pieles chocaban a más no poder sin dejar de lado los gemidos que surgían en cada embestida.

— Oigan chicos, abajo- — Escuché que Sehun entraba a la habitación. Muerdo mis labios sin dejar de moverme.

— Se~ Sehun~ Qué~ Qué quieres~ — Habló Jimin entre gemidos. Furioso le proporcioné una nalgada fuerte seguro dejando mi palma marcada.

— Vuelves a decir su nombre mientras te follo~ Y te dejo el culo rojo~ — Amenazo tomándolo del cabello. Lo besé juntando mi lengua con la suya arremetiendo una y otra vez.

Ignoré que Sehun seguía allí parado.

— Yoongi... Un chico te busca abajo... Dice que es tu hermano.

Mi... ¿Hermano?

Me sobresalto y me detengo en el acto.

— Me estás mintiendo... — Volteé a verlo mientras masturbaba a Jimin rápidamente mientras salía de él. Gimoteó clavando sus uñas en mis brazos.

— ¿Cómo crees que te voy a mentir? — Se cruzó de brazos. — Eso me dijo... Además, se parece a ti.

Jimin se corrió en mi mano y suspiré. — Lo siento, cariño... Tengo que bajar... Ahora subo... — Sonreí y lo besé en los labios recibiendo una sonrisa agotada. Seguiría haciéndolo de no ser porque me tomó por sorpresa la noticia de Sehun ¿Mi hermano? Tenía que verlo por mis propios ojos. Porque se suponía que estaba muerto.

~o~

No sé escribir lemon, ayuda... En serio, lo siento si lo hice mal, hago lo que puedo

Como sea... Regresó el hermano de Yoongi ¿Será real?

¡Gracias por leer!

Besos

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