La puerta principal de la casa fue abierta bruscamente y una estampida de niños entró haciendo ruido por todo el lugar. De paso también creando un gran caos en la sala del hogar Kim-Jeon.

Mochilas tiradas en medio del camino, zapatos regados por cualquier lugar y... ¿Cómo había llegado un calcetín en el ventilador de techo?

Jungkook bufó al ver tal desastre, justo hace unos minutos había terminado la limpieza de la casa.

Él no levantaría todo eso de nuevo.

—Tienen cinco minutos para recoger todo y dejarlo en sus habitaciones o si no, no hay salida al parque.— El Omega se cruzó de brazos viendo a sus cuatro crías.

Los niños quedaron paralizados al escuchar la voz de su padre, dejando de hacer lo que estaban haciendo viéndolo con ojos grandes.

—Uno... dos...— No fue necesario llegar al tres para que salieran disparados por todo el lugar recogiendo las cosas. Jungkook solo sonrió y sacó a Jimin del corral. El infante a había despertado de su siesta por el repentino escándalo.

Jeon beso sonoramente la rechoncha mejilla del bebé de dos años y éste puso delicadamente su pequeña mano en el cachete de su papi mientras movía su chupón con la boca, aún adormilado.

—Min, ¿Tienes hambre? Ven, vamos a hacer algo para ti y tus hermanos. — Le dió otro beso y tomó camino a la cocina con cachorro en brazos para preparar la comida.

Mientras, los demás seguían levantando todo el desastre ocasionado por ellos mismos. Seokjin solo había tomado lo suyo y corrió escaleras arriba para dejar todo en su habitación, pero no volvió. Quién sabe con que se habría entretenido.
Namjoon y Hoseok limpiaban las calcetas del piso.

Estos iban recogiendo una por una hasta que la última quedó, ambos se acercaron y tomaron el calcetín, pero Hoseok rápidamente quitó su mano para alejarla de la de su mellizo.

—Iug.

Namjoon frunció el cejo ante el comportamiento de su hermano, desde escuela se estaba comportando muy raro. El Omega de cuatro hizo un puchero, no le gustaba que Hobi se enoje con él.

Yoongi desde lo lejos también vio la reacción de Hoseok, extrañado por completo. Pero el niño de seis años lo dejó pasar, necesitaba limpiar lo más rápido posible porque realmente quería ir al parque a jugar.

[...]

Jimin veía desde la trona como Seokjin levantaba la pelota que él había tirado. El mayor de los hermanos le volvió a dar la pelota al menor, para que a los segundos volviera a tirarla al piso.

Estaban así desde hace cinco minutos.

El cachetón estaba entretenido al ver como su hermano seguía levantando la pelota como idiota. Hasta le causaba gracia. Jimin tenía a todos comiendo de la palma de su mano y él lo sabía muy bien.

Pobres ilusos.

Jungkook dejó la ensalada en medio de la mesa y miró que todo estuviera en orden. Cuando vio que así era, llamó a todos.

—¡A comer! Se va a enfriar.

Y por segunda vez en el día, una estampida de niños— pero esta vez con un Taehyung incluido quien había llegado del trabajo media hora antes— y cada uno se acomodó en sus lugares asignados.

El Alfa se sentó a un lado de la trona con Jimin para ayudarlo a comer, éste le ofreció una zanahoria y solo giró la cabeza negando.

—¡No!

Ah, la rebeldía de los dos años. El temor de todos los padres.

Taehyung suspiró y levantó las manos del menor en el aire, donde con su gran mano sostuvo las manitas del cachorro, le volvió a ofrecer la zanahoria y ahora sí la comió.

No sabían el porqué de esa maña del chiquito, si no tenía las manos arriba no comía.

—Yoon, ¿Puedes pasarme un vaso? — Jin apuntó lo que quería y como buen hermano lo hizo. Pero cuando estaba a punto de entregárselo, un grito por parte de Hoseok lo detuvo.

—¡No lo aceptes Hyung, te va a pegar los piojos! — Yoongi obviamente se iba a defender.

—¡Estás loco! ¡Yo no tengo piojos!

—¡Si tienes! Namjoon también los tiene. — Acusó el mellizo del mencionado.

—No es verdad. — Se cruzó de brazos el otro niño de cuatro años.

—Hobi, solecito, ¿De dónde sacaste que tus hermanos tienen piojos? — Preguntó Jungkook.

Obviamente no tenían piojos, él era muy meticuloso con eso y para prevenir cada semana les ponía un shampoo para prevenirlos. Le daba un patatús si llegara a pasar eso.

—Mi amigo de la escuela me dijo que su hermano mayor le dijo que todos los Omegas tienen piojos.

—Su hermano es un tonto. — Soltó Yoongi.

—Yoongi. — Dijo Taehyung en forma de advertencia.

—Entonces estás diciendo que papá Jungkook tiene piojos. — Comentó Namjoon de la nada.

Hoseok se mantuvo pensando hasta que el hámster de su cabeza empezó a correr en la rueda al escuchar lo que su hermano había mencionado y brinco sobre su asiento.

—¡Papá! — Refiriéndose a Taehyung— ¡Papá Jungkook ya te pegó los piojos!

El de ojos de Bambi casi se desmaya con solo pensar esos bichos en su cabeza. Incluso sintió como le empezaba a picar la cabeza. Su Alfa empezó a reír y éste lo fulminó con la mirada.

—Hoseokki, no es verdad. Eso solo es un mito para molestar, si tus hermanos y papá tuvieran piojos, Tú, Seokjin, Jimin y yo ya estaríamos llenos de piojos.

—Pero...

—No hay piojos, campeón.

—Bueno.

—Bien, ahora arreglado esto. — Jungkook empezó a comer— Hay que terminar de comer para que tomen un baño y después ir por fin al parque.

—¡No me voy a bañar! — Gritó Yoongi y salió corriendo del lugar.

—Ah, aquí vamos de nuevo. — Dijo Taehyung, luego el Omega mayor lo miró y le dijo "Te toca" para seguir comiendo.

Un caso de todos los días.

-luvckyun