2 meses de gestación.

SooBin, YeonJun, los empleados de la cafetería y obviamente Kang TaeHyun eran los únicos que sabían del embarazo de BeomGyu.

Lo ideal era darles la noticia a sus padres y aún más cuando estaba en los dos meses, aún así, BeomGyu estaba renuente a salir de su casa.

O más bien, de su nido.

—No me voy a mover de aquí —le había dicho cuando propuso ir ese día a casa de sus padres y luego a la de sus suegros, era temprano y no estaban tan lejos, así que les rendiría el día— No quiero salir hoy.

—Ayer tampoco quisiste, tampoco antes de ayer, ¡Oh, y los otros días tampoco! —dramatizó cruzándose de brazos frente al omega— ¡Tienes una semana sin salir de aquí, BeomGyu!

—¡No me grites! —le dijo a pesar de que Taehyun solamente había subido un poco la voz, se hizo bolita en medio del gran nido de ropa y sábanas, cerrando los ojos.

—Nos necesitan en la cafetería, Gyu —trató de convencer. El omega abrió los ojos para exclusivamente juzgarlo con la mirada.

—¿Algo explotó o qué? Si no es de nivel extremo no voy, hoy no, TaeHyun —dijo, harto de que el alfa quisiera sacarlo de su nido con excusas baratas.

En la semana, se había sentido muy agotado, el sueño era demasiado, y no lo ayudaba que algunos días, se levantaba de madrugada a, exclusivamente, vomitar, o no dormía bien por haber tomado mucho café en el día, o simplemente no podía conciliar el sueño.

TaeHyun se contuvo de decir algo y suspiró, tomando asiento al borde de la cama, el único espacio que no cubría el nido.

—Puedes pasar si no vas a seguir fastidiando —le dijo el omega tomando asiento con su teléfono en manos. TaeHyun sólo rió entrando con cuidado, para sentarse tras el omega, dejando que se recostara de su pecho.

El cambio físico era algo que había estado pasando poco a poco, la mayoría de cosas que había trabajado BeomGyu en el gimnasio, se había ido en esos meses, con piernas y mejillas rellenas, y el abdomen levemente hinchado.

—Te ves lindo —dijo, distraído, el omega alzó los hombros.

—Es mi magia natural —contestó mirando su barra de mensajes, decidiendo cuál responder y cuál no.

SooSooBinBin

Hoy en la tarde YeonJun se encontrará con su ex, estoy tan irritado.

Quiere conocer a JingSun.

Iremos a su café, me siento más seguro, la cita es a las cuatro y ya estoy irritado.

TaeHyun reposó su mejilla en la cabeza de BeomGyu, metiendo sus manos bajo la playera de este, solamente dejando sus manos ahí, aspirando el aroma tan dulce del omega, era tan suave su aroma, lo relajaba aún más, le gustaba y su lobo no dejaba de saltar y festejar.

BeomGyu terminó de leer los mensajes y miró la hora.

Eran la tres.

—¡TaeHyun! ¡Tenemos una emergencia! —gritó haciendo al alfa dar un salto en su lugar por salir de su casi sueño.

—¿Qué? ¿Qué pasa? ¿Un médico? ¿Que tienes? ¿Cómo te sientes? —preguntó con rapidez examinando al omega con la mirada, su corazón empezó a latir y por su mente pasaron millones de cosas que le podían pasar a un omega de dos meses, BeomGyu chasqueó la lengua.

—¡Estoy bien, hombre! Pero necesitamos ir al café, lee los mensajes mientras me cambio —le extendió el teléfono antes de bajar de la cama apresurado para cambiarse.

—Ah...Ten cuidado, por favor —fue lo que pidió el alfa al verlo tan apresurado.

TaeHyun leyó los mensajes con tranquilidad, arqueando una ceja.

¿Enserio? ¿SooBin había logrado sacar a BeomGyu de la cama y él no?

Eso era increíble.

SooBin subía su pierna de arriba a abajo, mirando a todos lados, cada cierto tiempo observando al Omega y al bebé a su lado.

—Cálmate —le dijo YeonJun limpiando la cara de su bebé con un pañuelo, el pequeño JingSun se dejó hacer, tranquilo por su reciente despertar.

Fue un despertar voluntario así que no estaba de mal humor.

—Aun falta para que llegue, además, siempre es impuntual —dijo a pesar de que el omega también estaba nervioso.

—Aparte de un cabrón, impuntual, genial —murmuró tratando de calmarse, pero era imposible.

SooBin y su alfa ya reconocían a YeonJun y a JingSun como su familia, los cuidaban como una y que viniera un tercero, lo irritaba.

No.

Lo enfurecía.

YeonJun y él habían hablado sobre ese día, SooBin solo estaba ahí de apoyo, no tenía nada que hablar y mucho menos pelear.

SooBin se lo había mentalizado, solo iba en apoyo, el tipo estaba en su derecho, no iba a pelear y tampoco a hablar.

—¿Cómo está el bebé más lindo de todos? —escucharon una voz masculina tras ellos, JingSun rió y aplaudió, buscando a la persona que le había hablado para pedirle con sus manitas que lo cargara.

YeonJun rió dejando que BeomGyu cargara a su hijo, ambos muy apegados por obvias razones. Los bebés se sentían peculiarmente atraídos por los omegas embarazados, más que todo por su aroma.

BeomGyu besó las mejillas del niño y lo apretó una vez más contra si, dada la situación, no quiso tener al bebé mucho tiempo, se notaban los nervios de YeonJun y todos sabían que su bebé era su centro de atención y quién sin saberlo lo calmaba cuando los nervios lo atacaban.

—Hey, SooBin —el alfa volteó saludando a TaeHyun mostrando su irritación apenas habló. TaeHyun y BeomGyu sabían que las cosas estaban tensas, y, conociendo a SooBin, este no aguantaba más de tres insultos porque se iba encima de la persona.

Si, así era Choi SooBin.

Así que esperaban que el alfa no fuese con otras intenciones.

—Estaremos por aquí, no se preocupen, todo saldrá bien —le dijo BeomGyu a YeonJun que asintió, soltando un suspiro.

—Solo va a conocerlo, unas cuantas horas y listo, ¿Cierto?

—Cierto —BeomGyu le dió una sonrisa y desapareció con su pareja, debían darles espacio.

Ellos, como amigos, solo podían dar apoyo de lejos en esos momentos y estar atentos a los movimientos.

No fue hasta las 4:20 que Kim MinHyuk apareció en la cafetería, YeonJun lo reconoció al instante, botas de combate, jeans ajustados y una playera con un estampado que no le importaba, caminando hacia ellos, mirando a SooBin fijamente.

—Buenas tardes —dijo mirando a SooBin, el alfa arqueó una ceja.

—Buenas tardes —contestó simplemente por educación.

El alfa observó ahora a YeonJun, tomando asiento, le sonrió.

—¿Cómo estás, YeonJun? —su tono de voz, suave y dulce muy contrario al tono que usó con SooBin.

—Estoy bien, gracias por preguntar —contestó mirando a su bebé, el cual estaba ajeno a todo, solamente buscando que SooBin lo cargase, pero el alfa no le prestaba atención, o más bien, estaba ocupado mirando a MinHyuk.

—Supongo que él es nuestro pequeño —dijo mirando con ternura al bebé, YeonJun asintió acomodando nerviosamente las ropas del infante de un año.

—Se llama JingSun, Choi JingSun —presentó levantándose al igual que su ex, para que este pudiera sostener al pequeño que no se quejó por ser quitado de los brazos del omega.

—Hola, pequeño —el alfa le sonrió al bebé al alzarlo en brazos.

MinHyuk volvió a tomar asiento, mirando al pequeño en su regazo.

BeomGyu mordisqueó su uña del dedo pulgar, estaba en una mesa cercana, solo, con un café a medio tomar.

¿En dónde estaba TaeHyun?

Solucionando algunos problemas con máquinas de café en la cocina.

Desde donde estaba, podía sentir la tensión

—¿Y él? —preguntó MinHyuk dándole una mirada a SooBin que solamente arqueó una ceja.

—Choi SooBin, soy su pareja —se presentó firmemente dándole una mirada retadora al alfa que solamente soltó una risa.

—No está marcado, así que eres reciente —adivinó el alfa sonriendo falsamente— Mientras no esté marcado, no es oficial.

SooBin frunció el ceño, preparandose para responderle al alfa, pero YeonJun detuvo a los dos alfas pasando a lo que era el asunto por el que MinHyuk estaba ahí.

JingSun.

—Tienes razón, vine por nuestro hijo —le dijo el alfa con una pequeña sonrisa. Observó a YeonJun— ¿Puede comer galletas?

—Solo si las remojas en leche —fue su respuesta, hasta ahora no se sentía tan incómodo, tal vez porque sentía la rodilla de SooBin pegada a la suya además de la mano del alfa puesta en su muslo, el alfa le transmitía calma, y el que su bebé se viera cómodo con MinHyuk lo ayudaba.

—Está bien, ¿Tu quieres un café, algo? —le preguntó, YeonJun solamente negó con la cabeza, el alfa suspiró mirándolo fijamente, dejando pequeñas caricias en el brazo del pequeño que había empezado a jugar con las múltiples pulseras de alfa— Solo intento ser amable, Jun.

—Ya yo le pedí algo, no te preocupes —dijo SooBin llamando la atención del alfa que solamente lo observó unos segundos casi con odio antes de volver al bebé.

A los segundos, BeomGyu se acercó a la mesa en silencio, entregando un café helado a YeonJun directamente.

—Muchas gracias —dijo aceptando la bebida, el omega en cinta solo le sonrió, haciendo ademán de irse, para MinHyuk, BeomGyu solo había sido un mesero más, por eso llamó su atención antes de que se fuera.

—Traeme unas galletas de vainilla y un vaso de leche para el bebé —dijo sin algún tipo de educación, BeomGyu solamente observó al alfa antes de irse, rodando los ojos luego— ¿Te gustan? ¿Cuál te gusta más? —el alfa empezó a hablarle al bebé, que no dejaba de pasar su mano por las pulseras del alfa que se tomó el tiempo de quitarse una y colocarla en la pequeña muñeca del bebé, ajustándola para que no cayera.

JinSung rió moviendo su mano para ver el objeto, volteó a su papá y le estiró la mano, gesto de que le estaba enseñando la prenda.

—Es muy linda, mi amor —fue lo que le dijo el omega con una pequeña sonrisa. JinSung hizo el mismo gesto hacia SooBin que igualmente le sonrió al pequeño.

—Muy linda, pequeño —ambos alfas se observaron fijamente, MinHyuk no odiaba a SooBin, siquiera lo conocía pero se supone que serían solo YeonJun, el bebé y él, más nadie y le inquietaba que estuviera ese alfa mirando el más mínimo movimiento que hacía.

Y más cuando le recalcaba con la mirada que no tenía algún tipo de oportunidad con el omega.

Cuando las galletas y la leche llegaron de mano de BeomGyu, YeonJun pensó que todo terminaría bien.

MinHyuk estaba era atento al bebé y parecía feliz de conocerlo.

—Él lo hace solo —YeonJun informó al alfa cuando este quiso llevarle una galleta a la leche— Aprendió hace dos semanas, solo debes estar atento a si ensucia algo.

—Umm... Eres muy inteligente, bebé —le dijo con una pequeña risa, el pequeño tomó una galleta y la observó.

JinSung extendió una galleta a YeonJun que la aceptó, conociendo de sobra que se pondría a llorar si no la aceptaba.

El pequeño hizo el mismo gesto con SooBin, entregándole una galleta.

Y tuvo el mismo gesto con MinHyuk, una galleta para cada uno y lo demás para él.

—¿Están deliciosas? —le preguntó el alfa al niño que metió un pedazo de galleta a su boca mirándolo fijamente— Si, están deliciosas, JanSeung.

—Se llama JinSung —le dijo SooBin entredientes mordiendo la galleta que el bebé le había dado.

MinHyuk solo lo observó, arqueando una ceja.

—Y ustedes, ¿Cuánto tiempo llevan juntos? —preguntó mirando a YeonJun, el omega suspiró mirando a su hijo.

—No creo que deba responder eso.

—Estamos en confianza, YeonJun, ya no me interesa estar contigo, solo quiero saber —rió arqueando una ceja— No creo que tengan mucho tiempo, te dejé antes del primer mes de embarazo, deben tener un año o menos.

—Al menos sabe de matemáticas —murmuró SooBin desviando la mirada a BeomGyu, el omega solo le hacía señas para que se relajara.

MinHyuk limpió las mejillas llenas de migajas del infante, y lo observó unos segundos.

—Aunque no veo nada mío en ti, confiaré en tu padre.

—¿Qué insinuas? —preguntó YeonJun con el ceño fruncido.

—No tiene algún parecido a mi, se supone que un bebé se parece a ambos padres, y se parece a ti, pero no a mí, mi alfa no siente una conexión con él —dijo, con una sonrisa burlona— Aún así, confío en ti, YeonJun —el alfa le dió una mirada a SooBin, amplió su sonrisa— Sé que eres algo tímido para la intimidad, así que no creo que hayas tenido algo con alguien más.

Y ahí, YeonJun supo que nada iba a salir bien.

—¿Acaso no conoces la palabra respeto? Eres un maleducado, no te interesa nada de lo que YeonJun haya hecho o no haya hecho después de ti, es tu hijo y si no estás convencido puedes irte y no aparecer más, no te necesitan —dijo SooBin luego de un momento de silencio. MinHyuk arqueó una ceja acomodando las ropas de JingSun con cuidado, el aroma a canela del alfa se hizo más intenso con toda la intención de cubrir al pequeño con su aroma, olía a fresas, pero también olía a chocolate y no le gustaba.

—Me interesa mucho lo que ha pasado después de mi, pero bien, ya dije que confiaré en YeonJun —le contestó, a todas éstas, BeomGyu veía a lo lejos el suceso, preocupado— Además, creo que hicimos las suficientes cosas para un embarazo, ¿Cierto, YeonJun?

—MinHyuk, por favor —YeonJun suspiró, estaba loco si pensaba que iba terminar bien esa reunión.

—Siquiera respetas que yo esté aquí —SooBin observó al alfa, este alzó los hombros.

—No me importa, tu no deberías estar aquí, es mi hijo y mi ex, tu solo eres un estorbo —señaló el de aroma a canela, SooBin relamió sus labios.

—No puedo ser un estorbo cuando yo si les estoy dando lo que tú no pudiste hacer por cobarde.

—Ya, basta los dos.

Por otro lado, JinSung se había desentendido de las galletas y la leche, al verse aburrido, y sin la atención a la que estaba acostumbrado, buscó con que entretenerse. MinHyuk llevaba un collar largo, con un dije redondo.

Ese sería su método de distracción y YeonJun se dió cuenta muy tarde.

—Ash, suelta —se quejó el alfa por el jalón en su prenda quitando bruscamente la mano de JingSun, sin controlar su fuerza.

YeonJun se levantó con brusquedad, SooBin también.

Y JingSun, empezó a llorar por ese trato tan brusco que nunca había recibido.

—Dame a mi cachorro, ¡Dámelo! —le gritó YeonJun al alfa, el omega, desesperado, le arrebató a su hijo de las manos, apresando al pequeño sollozante en sus brazos.

—Vete —le dijo SooBin al alfa que rió, eran del mismo tamaño, el de aroma a chocolate lo empujó— ¡Vete, inservible de mierda! ¿¡Acaso no te das cuenta que no te necesitan!? ¡El único estorbo aquí eres tú, entiéndelo de una vez! —le gritó. BeomGyu agradeció que solo había un cliente y este no estaba en una mesa, solamente retiró su pedido y se fue, ignorando la pelea.

BeomGyu avanzó hasta la puerta y volteó el cartel, indicando que estaba cerrado.

Miró a YeonJun, JingSun seguía llorando, el omega trataba de calmarlo, lo mecía, le hablaba, lo acariciaba pero el bebé solo lloraba.

—¿¡Ah sí!? ¡Yo soy el verdadero padre de ese niño, tu no tienes nada que ver aquí! ¡Es mi hijo! —le devolvió MinHyuk, SooBin gruñó y volvió a empujar al alfa, este no esperó dos segundos para darle un puñetazo.

TaeHyun apareció al escuchar el bullicio, ambos alfas estaban peleando a golpes, y estaban muy, pero muy cerca de su omega.

—¡SooBin, ya basta! —BeomGyu mirando a su amigo, tuvo el impulso de acercarse a separarlos. Sintió un jalón en el brazo, observó a TaeHyun.

—Ni se te ocurra, ve con YeonJun —le dijo revisándolo superficialmente antes de ir a arreglar la pelea de ambos alfas.

BeomGyu retrocedió hacia donde el otro omega.

YeonJun chasqueó la lengua, lo sabía, sabía que terminarían así. Miró a su hijo que estaba más calmado, no podía hacer nada si tenía un bebé en brazos.

—¡Ya, detente, SooBin! —TaeHyun jaló de la camisa a SooBin, el alfa cedió, separándose de MinHyuk, los dos golpeados y agitados.

—Que sea la última vez que apareces por aquí, no te quiero ver cerca de ellos o juro por lo que más amo que te mato a golpes —amenazó SooBin dándole una última mirada a MinHyuk, retrocedió quedándose en una esquina del local, debía calmarse.

YeonJun observó al alfa, MinHyuk sangraba por la nariz, y sus ropas estaban desacomodadas, el alfa se acercó unos pasos a él. TaeHyun lo dejó, aunque estaba atento a sus movimientos.

—Ese bebé es mío, y eso no lo quita nadie, ese alfa no tiene nada que ver aquí, yo soy su padre —le gruñó. BeomGyu se cruzó de brazos mirando fijamente a ese alfa con algo de odio.

Quería pegarle, iba a pegarle.

—Es el responsable de JingSun ahora, es mi alfa, no puedes hacer nada contra eso, él me está dando la familia que tú no fuiste capaz de darme —contestó escondiendo en su pecho al pequeño— Ya conociste a JingSun como querías, MinHyuk, ya vete.

MinHyuk lo agarró por los hombros.

—Sueltalo —pidió BeomGyu con voz suave, TaeHyun tomó del hombro al alfa en advertencia— Has causado muchos problemas.

—¿Quién te crees? Eres un estúpido mesero —preguntó bruscamente soltando a YeonJun.

—Soy el dueño de este lugar,¿Tú quien te crees para armar disturbio en mi negocio? ¿Ah? —le preguntó de vuelta, con las manos en la cintura, MinHyuk chasqueó la lengua.

—Me largo, espero que la próxima vez que quiera ver a mi hijo, no vengas con ese remplazo —le dijo a YeonJun, el omega sólo lo observó, sin contestar— ¿Entendiste, YeonJun? —preguntó. YeonJun solamente pasó su mano por la espalda de su bebé que a pesar de haber dejado de llorar estaba tenso, posiblemente asustado.

—Voy a venir con él a todos lados, MinHyuk, aceptalo —fue lo que le respondió, el alfa frunció el ceño dando un paso hacia adelante en amenaza, TaeHyun lo sostuvo del hombro, jalando al alfa hacia atrás, con las intenciones de sacarlo a rastras del local.

Pero, BeomGyu se acercó al alfa a pasos rápidos, y sin más le estampó un puñetazo en la mejilla, con tanta fuerza que MinHyuk volteó la cara entera.

—Y agradece que estoy embarazado, si no, te parto una mesa en la cabeza —le dijo entre dientes, el alfa solamente gruñó, TaeHyun lo jaló y tuvo uno que otro forcejeo, sacó a MinHyuk del local, el alfa se fue lanzando maldiciones.

—¡Kang BeomGyu! —el grito se escuchó en toda la cafetería, los empleados no sabían que hacer para ese punto. No sabían que hacer desde que los alfas empezaron a pelear.

Los jefes estaban ahí, así que no había a quien llamar en caso de emergencia.

—¿Si, pastelito? —preguntó BeomGyu sabiendo que el regaño que venía era grande.

—Esperame en el auto —fue lo único que dijo Kang antes de desaparecer en camino a los baños, en dónde SooBin aún trataba de calmarse.

Todo había sido, un completo desastre.

¿Opiniones?

Fue algo largo este capítulo pero preferí dejarlo así que cortarlo!

The_Dark_Diamond