5 años atrás.

Había pasado un año y nueve meses desde que se habían conocido, ya no eran amigos que se besan, ahora eran novios y toda la universidad lo sabía.

¿Y cómo no podrían saberlo? Si la mayoría estaba al pendiente de su relación, siendo los únicos destinados de toda la universidad.

Habían tenido citas, salidas improvisadas, celebración de cada mes que pasaban juntos.

También habían tenido algunos encuentros privados que no pasaban más allá de algunos toques por encima de la ropa o algunos besos subidos de tono, estaban poco a poco pasando al siguiente nivel, sintiendo la atracción y tensión sexual entre ellos.

Y no estaba mal querer explorar y avanzar, ambos estaban muy seguros y consientes de lo que habían empezado.

Eran novios, jóvenes y con muchas ansias de calmar el deseo que sentían. ¿Cualquier era el problema?

—Tu ya lo hiciste... ¿Cierto? —preguntó el omega con las manos tras la espalda, mirando la habitación del alfa aunque ya la conocía bien, pero los nervios lo llevaban a ver cualquier cosa de una manera muy exagerada.

TaeHyun asintió tomando asiento en la cama.

—Si, lo hice un par de veces antes de conocerte —admitió recibiendo un asentimiento del omega.

¿Estaba celoso o molesto? No, no tenía alguna razón, TaeHyun lo había hecho antes de conocerlo, no eran nada, estaba en su derecho.

Lo único que sintió, fue inseguridad.

¿Y si no era igual que con los otros chicos y a TaeHyun no le agradaba?

—Yo no te voy a comparar con ellos, bonito... Si eso piensas —habló el alfa ladeando la cabeza al ver la incomodidad del omega.

BeomGyu lo observó antes de asentir, acercándose al alfa que le ofreció las manos.

Ambos tomaron sus manos y mantuvieron sus miradas.

—Si algo no te gusta, me lo tienes que decir de inmediato y lo dejaré de hacer, si quieres que pare lo haré, te lo prometo —habló el alfa con pura sinceridad y cariño, jalando a su pareja con suavidad.

BeomGyu tomó asiento en su regazo, dejando sus manos en sus propios muslos.

Él jamás había tenido sexo, nunca, tal vez sí se llegó a dar placer en sus celos solamente con masturbación, pero era completamente diferente a lo que iban a hacer.

—Más te vale cumplirlo, o te arrojo a un basurero —amenazó mirándolo a los ojos, el alfa rió antes de besar su mejilla.

—Nunca te obligaría a algo, tarrito de miel —negó sintiendo el aroma del omega rodearlo poco a poco— Jamás me perdonaría si hago algo que no te gusta...

—Yo tampoco te perdonaría —contestó el omega acunando las mejillas del alfa, juntando sus labios en un suave beso.

BeomGyu se sintió un poquito más relajado con el beso, así que rodeó sus brazos por los hombros ajenos, ladeando un poco la cabeza.

Ellos habían compartido ese tipo de besos antes, pero no habían llegado más allá.

El omega apretó la tela de la playera ajena cuando el alfa se separó de él en un suave suspiro, mirando los labios brillantes del otro.

—¿Puedo? —preguntó alzando su mano izquierda, señalando los muslos del omega que asintió con la cabeza.

Retomaron el beso sin problemas, el omega sintiendo los nervios apoderarse de su cuerpo.

Él desde su primer celo se había empezado a descubrir, descubrió su cuerpo, las funciones del cuerpo de un omega y además, se había tocado ya sea por curiosidad o por intentar calmar algún momento de su celo.

Pero era completamente diferente cuando otro tocaba su cuerpo, jamás había sido tocado de esa manera y además de estar nervioso, era extremadamente sensible.

Ahora solamente estaban compartiendo un beso mientras el alfa le acariciaba las piernas, apretando cada vez que subía más y más.

BeomGyu se separó del beso, mordiendo su labio inferior sintiendo un cosquilleo en su vientre.

El aroma a café se volvió más intenso, mientras que el aroma a miel se hizo más dulce. El omega dió un salto en su lugar cuando la mano del alfa llegó a su entrepierna.

—¿Qué pasa? —preguntó el otro buscando la mirada de su novio pero BeomGyu tenía la frente apoyada en su hombro.

—S-sigue... —murmuró sintiendo la mano derecha del alfa adentrarse bajo su ropa, acariciando su espalda mientras que la otra seguía estimulando la entrepierna del omega sobre la ropa.

Fue inevitable para él no soltar un gemido bajo, ya tenía una obvia erección bajo su ropa, sentía la mano del alfa acariciarla con insistencia, causándole cosquilleo.

La ropa no era más que un estorbo, no era necesaria para lo que iban a hacer.

—¿Te puedo quitar la camisa, bonito? —preguntó el alfa esperando el permiso del omega con aroma a miel que asintió con los ojos apretados, dejando que el alfa le quitara la playera con un estampado de alguna banda de rock del año.

Por petición de TaeHyun cambiaron de posición, el omega se recostó en la cama, mirando al alfa sobre él.

TaeHyun nunca le había intimidado, jamás se había sentido intimidado por él.

Pero en ese momento pensaba diferente...

—¿Qué haces? O-oye... —llamó nervioso, TaeHyun lo observó con una pequeña sonrisa.

—Dime si no te gusta y me detendré —recordó antes de pasar la punta de su lengua sobre el pezón del omega que cubrió su boca de inmediato al querer chillar de la sorpresa y el asombroso placer que le recorrió ese gesto.

A pesar de que TaeHyun ya tenía dos experiencias previas, no era un experto, así que también estaba nervioso y dudoso de lo que podría hacer con su lindo novio en ese momento, aún más, dudando de si lo hacía bien o no.

Ambos estaban nerviosos, ansiosos.

A la playera de BeomGyu le hizo compañía la de TaeHyun. El omega rodeó sus hombros con timidez, aceptando el beso desordenado que le dió el alfa, sintiendo las manos del mismo pasar por su torso.

—¿Puedo... Quitar... Tu pantalón?

—Ujum —accedió el omega incluso ayudando a quitar el mismo, arrojando también la prenda al suelo junto a las playeras.

Solo había sido cuestión de segundos, más roces curiosos y tímidos para que ambos estuvieran solamente en ropa interior.

—¿Vamos a seguir? —preguntó el omega con la respiración agitada, el cabello desordenado, sintiendo su cuerpo caliente, su vientre cosquillear y algo de lubricante natural en su entrada, humedeciendo la tela de su ropa interior.

TaeHyun lo observó, arrodillado entre sus piernas que le había costado separar voluntariamente.

—Si quieres paramos —habló el alfa mirándolo a los ojos.

BeomGyu negó con la cabeza tratando de no bajar la mirada a la entrepierna del alfa, avergonzado.

—Solo lo digo... P-por los condones —murmuró haciendo al otro asentir de inmediato. Ellos sabían que necesitaban cuidarse, por sus padres, por las clases de educación que habían tenido y por conocimiento general, debían cuidarse para prevenir algún embarazo.

—Lo siento... Se me había olvidado —mencionó el alfa abriendo su buró, sacó una hilera de cuatro condones recién comprados para la ocasión, tomó uno solo, dejándolo a un lado del omega— Necesito... Prepararte —comentó rascando su nuca.

Ya se habían tocado, se habían acariciado, pero estaban llegando a una parte más intensa.

—¡No, no, no! ¡T-tu primero! —pidió el omega aferrándose a la liga de su ropa interior, TaeHyun rió separándose de él antes de quitar su ropa interior sin problemas.

—Pero no sirve si no me ves —comentó mirando a su novio con la mirada desviada y las mejillas y orejas completamente sonrojadas.

BeomGyu miró de reojo a su novio, enfocando su entrepierna.

—¿¡Eso!? —preguntó mirándolo a los ojos, TaeHyun frunció un poco el ceño mirando su propia entrepierna. Indignado.

—¿Qué tiene? Es un buen tamaño —habló cruzándose de brazos.

—¡No digo que esté feo o pequeño! —excusó rápidamente negando con las manos, TaeHyun lo observó— Solo... ¿Seguro va a... A entrar?

—Si —afirmó el alfa muy seguro y respaldado por su poco conocimiento.

BeomGyu bajó su ropa interior poco a poco, sintiendo la mirada del alfa en él.

—Ush, no me veas... —murmuró pasando la ropa interior por sus pies, quedando totalmente desnudo frente a él.

—Es que eres tan bonito que no puedo parar de verte —contestó el alfa, pasando sus manos por su cintura, besando su barbilla, bajando por su cuello, pasando por sus clavículas y pecho, besando su abdomen plano, tal vez no estaba ejercitado, pero era delgado, sus piernas esbeltas también las acarició y las besó unas cuantas veces, cumpliendo uno de sus tantos sueños.

Algo que sabían que necesitaban era un lubricante, a pesar de que los omegas contaban con su propia lubricación era recomendable que la primera vez se usara un lubricante, eso lo habían aprendido en clase de sexualidad, además, sus padres aportaron conocimiento.

Por eso, los dedos de Kang se bañaron en lubricante antes de ir a la entrada de su novio que temblaba por la anticipación, nervioso.

—Relájate... —susurró el alfa besando su mejilla enrojecida, bajando por su barbilla.

Con cuidado, alineó su dedo índice y lo empujó poco a poco.

—¡Mngh! —el omega se quejó abrazando más fuerte al alfa que se tensó siguiendo con su movimiento, sintiendo su dedo ser apretado.

—¿T-te duele? ¿Me detengo? —preguntó el alfa asustado, mirando la mueca de su novio, BeomGyu negó con la cabeza aferrándose a sus hombros.

El aroma a miel se fusionó con el aroma a café en segundos, ambos aromas densos en el ambiente, muy intensos y delataban lo que estaba pasando entre ellos.

BeomGyu estaba consiente de que le dolería su primera vez, muy consiente.

Pero confiaba en que su novio no lo haría más doloroso y de hecho, seguía preguntando y asegurándose de su estado cuando ya iban por el segundo dedo.

Decidió relajarse y dejarse llevar por el placer a pesar de los nervios, jadeó, mordiendo su labio inferior, sintiendo la temperatura de sus cuerpos, la estimulación entre sus piernas, sintió un cosquilleo en su vientre.

El alfa entró en más confianza, moviendo sus dedos más rápido, estirando y haciendo sonidos húmedos.

—El otro... El otro —murmuró mordiendo su labio inferior, TaeHyun empujó poco a poco su tercer dedo, mirando como el omega mordía su labio inferior y arqueaba un poco la espalda.

Movió sus dedos en embestidas suaves, luego aumentó un poco el ritmo, inclinádose a besar su pecho, mirando la piel erizarse por su toque.

—¿Crees que ya pueda meterlo? —le preguntó sintiendo la entrada bien dilatada, aunque tres dedos no era lo mismo que su entrepierna.

—Creo que si... Hazlo —aceptó el omega aferrándose a las sábanas cuando el alfa se separó de él para abrir el condón.

Cuando los dedos salieron de él sintió una inexplicable necesidad y vacío, estaba excitado, más de lo que estaba cuando se masturbaba él solo en su habitación, eran sensaciones diferentes, el roce de pieles, besos desordenados que aún conservaban cierta timidez de ambos lados.

Cuando fue el momento de la penetración, volvieron a retomar sus nervios.

Abrazó sus hombros con seguridad, alzó su mentón para unir sus labios con el alfa que se alineó con cuidado antes de empujar poco a poco, BeomGyu no pudo continuar el beso, soltó un jadeo entrecortado sintiendo al alfa abrirse paso en su interior, era doloroso pero resultaba ser soportable gracias a la preparación.

Pero, estaba sintiendo algo que no había sentido nunca...

—¡N-no entres más! —pidió respirando agitado.

—¿Qué pasa? ¿Te lastimé?

—¡Siento que me voy a hacer pipí! —exclamó agitado, TaeHyun negó con la cabeza rápidamente.

—Es normal, e-es normal... —murmuró entre dientes sintiendo también un cosquilleo al ser apretado por su novio que soltó un lloriqueo sintiendo muy seriamente ganas de hacer pipí.

Inevitablemente, el alfa terminó de meter su miembro, sin poder contener tanto placer.

—¡Que me hago pipí, tarado!

—¡No te vas a hacer pipí! —negó TaeHyun mirándolo a los ojos, BeomGyu frunció el ceño.

—¡Que si! —insistió sintiendo un suave movimiento del alfa, mordió su labio inferior— He tenido orgasmos y no se sienten así.

—Porque es diferente —contestó el alfa buscando una explicación lógica para eso, aunque no podía, su mente estaba del todo nublada.

BeomGyu decidió seguir a pesar de la sensación de hacerse pipí, dejando que el alfa empezara a moverse causándole miles de sensaciones a ambos.

En ese momento, ya no había razones para inhibiciones.

Poco a poco ambos ambientaron la habitación con gemidos, jadeos y suspiros de diferentes tonos.

BeomGyu seguía aferrado a sus hombros, recibiendo besos de su novio en la clavícula, subiendo poco a poco hasta el punto en dónde estaba su glándula de olor.

—¡Así! —pidió el omega en medio de un gemido, TaeHyun no se resistió, gimió dando un par de embestidas con rapidez, quejándose cuando recibió un jalón en su cabello— Que sigas así, no que vayas más rápido, tarado —especificó el omega entre dientes, TaeHyun dió una embestida profunda, el omega soltó un gemido alto mientras arrojaba su cabeza hacia atrás.

—¿La encontré? Oh por la Luna, la encontré —murmuró el alfa emocionado, sintiendo su orgasmo formarse en su vientre.

BeomGyu jadeó con la respiración agitada, mirando a su novio entre el cabello en su cara.

—¿Q-qué encontraste? —preguntó confundido, su mente nublada de placer, recibió una sonrisa de su novio que no dudó en volver a embestir cómo lo había hecho antes volviendo a causar ese efecto en el omega, su piel se erizó, su vientre se contrajo, el placer lo consumió en menos de tres embestidas, por primera vez estaba siendo estimulado de esa manera. Tan rápido, fuerte y constantemente a su próstata.

Por eso, no pudo seguir controlando sus suaves gemidos, ahora eran altos, agudos, su expresión cambió a una de completo placer, mordió su labio inferior y arqueó la cejas sintiendo esas mismas ganas de hacer pipí.

Pero no avisó nada, de hecho, no le dió tiempo.

Anunció su orgasmo por medio de un gemido agitado, el alfa gimió sobre él, sintiendo a su novio apretarlo aún más al tener su orgasmo en medio de ambos, soltando sonidos entrecortados por la sobre estimulación.

TaeHyun no se quedó atrás, igualmente sintió su orgasmo cerca, embistió un par de veces más antes de gemir, llenando por completo el condón, sintió el nudo formarse así que salió del omega con rapidez y con miedo de que al condón se rompiera por alguna razón.

El omega jadeó con la respiración agitada, miró al alfa sobre él, TaeHyun también tenía una mueca de placer además de que su cuerpo sudado estaba laxo por su reciente orgasmo.

TaeHyun sintió un jalón en sus mejillas, sus labios volvieron a juntarse en un beso cariñoso, suave y que transmitía silenciosamente lo que sentían.

BeomGyu lo sujetó de la nuca, separándose del beso con una pequeña risa, el alfa se la devolvió besando su mejilla efusivamente.

¿Era necesario decir algo en ese momento?

Para ellos no.

Era suficiente con mirar al otro, estaban satisfechos, estaban felices, pero más que eso...

Estaban enamorados.

Espero les haya gustado 🤠 ya volveremos a la trama original del fic, tal vez más adelante vuelva a hacer ésta dinámica!

¿Qué opinan?

Nos vemoooos!

The_Dark_Diamond04