Kang Byeol 8 meses.

—En definitiva, cada día me odias más —afirmó TaeHyun mirando a su hijo llorar a mares en sus brazos, sollozando casi a gritos. TaeHyun lo meció desesperado, sin gustarle mucho que el niño llorase así tan desesperado— No, no llores así, papá se está duchando... Por favor, Byeol —pidió secando las lágrimas del bebé que hipeó haciendo un puchero, mirándolo a los ojos. El corazón del alfa se derritió, no le gustó la situación, y se sentía tan mal de no poder calmar al bebé.

BeomGyu salió con rapidez del baño, con el cabello húmedo, y una toalla en la cintura.

—Ya estoy aquí, mi amor, ya... —arrulló tomando a Byeol en brazos, el bebé aferrándose a él, volviendo a hipear, teniendo las mejillas sonrojadas y los ojos cristalizados.

Byeol tenía recién cumplidos los ocho meses, una etapa que también contaba con una dichosa crisis.

Ésta crisis se caracterizaba el tener que estar y ver al omega cerca, despertaba angustiado en las noches, queriendo cercanía de ambos padres al dormir.

Era extraño, porque necesitaba de los dos para dormir, pero en el transcurso del día solo necesitaba a BeomGyu cerca de él, en un rango que pudiera verlo.

Y que el omega hubiera estado en la ducha apenas despertó fue lo peor para el bebé.

—No te odia —negó el omega dejando a su bebé en el regazo de su esposo, TaeHyun secó las mejillas húmedas con cariño, Byeol aún con atisbos de llanto que lo hacían respirar algo pesado.

—No me gusta que llore —murmuró el alfa aún limpiando la cara de su hijo, con una mueca incómoda, besando sus mejillas cuando las secó, el bebé dejándose por completo, BeomGyu suspiró colocándose la ropa del día.

—A mi tampoco, Tyun —negó sujetando a su bebé en brazos cuando ya estuvo listo, lo abrazó a él escuchando los torpes tartamudeos del bebé.

Casualmente, ese día ambas parejas iban a reunirse.

SooBin y TaeHyun saldrían.

BeomGyu y YeonJun pasarían la tarde juntos en casa.

Si bien al inicio el plan surgió para salir todos, resultó que los omegas prefirieron reunirse en casa mientras que los alfas quisieron salir.

JinSung iría con los alfas y Byeol obviamente se quedaría con los omegas.

Por eso, los esposos Kang estaban alistados para pasar la tarde, BeomGyu estando un poco más hogareño que Kang.

—No compres más peluches —advirtió cuando el alfa estuvo en la puerta, listo para salir— Y si van a tomar alcohol, no tomes tanto, es casi mediodía. ¿Llevas abrigo?

—Si, mamá gallina —asintió rodeando la cintura del omega para abrazarlo.

—Solo no quiero que lleves tanta brisa, luego te da frío y no tienes con qué abrigarte —explicó haciendo al alfa soltar una risa— ¿Y sombrilla? Si llueve no quiero que te mojes.

—Mi amor, mira el cielo —indicó haciendo al omega asomarse por una ventana, el día estaba sumamente soleado. BeomGyu hizo sus labios un pico, Byeol balbuceó llevando sus manos a las mejillas del omega— Llámame si pasa o necesitas algo —avisó el alfa besando su cien, BeomGyu ladeó su cabeza, besando rápidamente los labios de su esposo— Te amo, mamá gallina —bromeó.

—Te amo, estúpido —despidió volviendo su mirada a Byeol, que observó al alfa que le sonrió, besando su frente con afecto, el bebé balbuceó soltando una pequeña risita.

—Te amo, cachorrito —repitió el alfa volviendo a dejar un beso en la misma zona, Byeol solo chilló volviendo a distraerse con el omega, palmeando sus hombros y meciendo sus pies inconscientemente.

BeomGyu quedó solo con su cachorro en segundos, le sonrió a su bebé mientras lo llevaba a la zona de juegos.

YeonJun llegaría quince minutos tarde y la razón era que había rodado su entrenamiento, además de extender una hora más de las que había estado haciendo.

La condición física de YeonJun era envidiable la verdad, para cualquiera lo era, y a pesar de que BeomGyu tuvo tantos problemas con su cuerpo luego de dar a luz y prometió inscribirse en un gimnasio cuando pudiera, había dejado de pensar tanto en eso, dedicándose por completo a su bebé, aplazando su entrada al gimnasio.

—¿Y ahora qué? Hice pollo frito, o comes eso, o comes un pedazo de lechuga —fue lo primero que le dijo al ver a YeonJun llegar a su casa, con un cambio de ropa y recién duchado.

—¿Por qué todos me ofrecen lechuga? —preguntó con una risa, entrando con confianza a la casa, dejando su mochila en un sillón para ir a saludar a Byeol que soltó un alarido al ver al omega, balbuceando cuando este lo alzó en brazos— ¡Hola, Byeol! —saludó abrazándolo con afecto, estando completamente enternecido con el bebé que por cada día que pasaba y crecía más, era la copia exacta de BeomGyu.

—No lo sé, vienes de hacer ejercicio y de levantar quien sabe cuántos kilos en pesas, la mayoría de esos comen lechuga —opinó tomando asiento en el tapete de su bebé, YeonJun igual, ambos omegas estando en suficiente confianza y comodidad con el otro para hablar de cualquier tipo de tema, sin importar cambiarlo cada cinco segundos.

—No me prohibieron nada... Puedo comer lo que sea, y me han ofrecido un entrenador personal pero me he negado, solo voy al gimnasio a recuperar y mantener la condición física que tenía antes del embarazo, no quiero ir más allá —explicó apilando los bloques frente a Byeol que estaba boca abajo, mirando el movimiento apoyado en sus manitos.

BeomGyu asintió, siguiendo el tema de conversación, hablando de Byeol, de sus respectivos alfas, de cosas que habían visto, opiniones y demás.

Incluso en medio de la conversación BeomGyu fue a la cocina, entregando una cerveza al omega que agradeció, abriendo la lata con una sonrisa.

—Te ofrecí cerveza, así que ahí tienes —mencionó mirando a su bebé sentado en el tapete, apoyado con sus manos. Sonrió orgulloso lanzando un beso volador cuando Byeol lo observó, el bebé solo sonriendo un poco antes de seguir con su juego.

YeonJun bebió de su cerveza con gusto, soltando un pequeño jadeo al sentir lo refrescante que era.

—Puedes tomar solo tres... Compré un solo six pack y las otras tres se las prometí a TaeHyun —señaló recibiendo un gesto del omega.

—Tampoco es que bebiera tanto —contestó sacándole una carcajada a BeomGyu, el omega sujetando su estómago al reír.

—¡SooBin me dijo que lo dejaste sin cerveza la otra noche! —acusó aún riendo, su risa llamando la atención de Byeol, que observó al omega unos segundos, prestando total atención.

—Bueno... Estábamos viendo un maratón de películas y estaba distraído... No me di cuenta de cuando me tomé las seis cervezas —excusó desviando la mirada cuando BeomGyu arqueó una ceja— Bueno, ocho cervezas... O tal vez diez.

—Casi te tomas dos six pack tu solo —señaló, YeonJun soltó una risa, bebiendo un poco de su lata, ese día se había acostado a dormir algo ebrio— Y no te culpo, una vez... —soltó una risa recordando una pequeña anécdota de su esposo y él, obviamente antes de tener a Byeol y antes de siquiera saber la existencia de YeonJun— Una vez  me tomé dos six pack y medio, yo sólo, por venganza.

—¿Por venganza?

—Estaba molesto con TaeHyun, y él había comprado esas cervezas... Y bueno, me tomé más de la mitad. Ya ni recuerdo porqué estaba molesto —alzó los hombros sacándole una carcajada a YeonJun.

Al igual que ellos, los alfas estaban charlando, caminando e interactuando con el pequeño JinSung que los llevaba por todo el centro comercial contando las historias que salían de su cabeza, mencionando a todo su entorno familiar y preguntando constantemente a TaeHyun por Byeol.

Ambas parejas se estaban divirtiendo, pasando un día diferente, disfrutando su vida.

Así como había dicho BeomGyu, solo tres cervezas fueron las que le correspondieron a YeonJun que lo ayudó o más bien, se encargó de servir el almuerzo de ambos, insistiendo en colaborar a su amigo.

Byeol los acompañó en su mesita de comer, pero sin algún alimento, solamente siguiendo con sus juguetes y peluches allí.

—Byeol no ha querido comer desde hace dos días... Solamente acepta agua y pecho, pero no acepta las papillas, sopas, nada... Le ofrecemos y solamente lo ignora y si le insistimos parece estresarse porque empieza a lloriquear —habló BeomGyu mientras comía, dándole miradas a su bebé. YeonJun se extrañó por esa información— Tenemos cita para mañana en la tarde, nos preocupa que no esté bien alimentado —comentó mirando a su bebé. Byeol tenía unas mejillas súper abultadas, además de estar en el peso ideal para su tiempo de nacido, estaba sano pero aún así le preocupaba el repentino rechazo a comer.

YeonJun empezó a hablar del tema, relatando lo que él paso con JinSung en esa etapa, esperando que por lo menos algo le sirviera a su amigo, así sea mínimo.

Así transcurrió su comida, entre charla y charla que los hizo tardar un poco más en comer.

—Yo lavo los platos —ofreció YeonJun recogiendo el suyo y el de su amigo, BeomGyu lo observó con los ojos achicados.

—Quieres más cerveza, ¿Cierto? Por eso tanta amabilidad —señaló sacándole una risa al omega que negó, lavando los platos con calma.

En ese proceso, sintió un pequeño punzón en el vientre, frunció el ceño confundido.

Su celo había sido hace poco, por lo que era algo confuso sentir ese dolor. Secó sus manos sintiendo una incomodidad continúa en el vientre.

—Iré al baño —avisó dejando un pellizco suave en una de las mejillas de Byeol que balbuceó llevando un peluche a su boca. BeomGyu estaba terminando de colocar las sillas en su lugar, limpiando además la mesa para quitar una que otra mancha de grasa, o algún descuido que la hizo llenarse de salsa.

De camino al baño, YeonJun sintió sus rodillas aflojarse, perdió fuerza en las piernas, sus brazos también se debilitaron, se sintió mareado repentinamente, se apoyó de la pared mirando todo darle vueltas, casi de inmediato empezó a sudar frío, sintió el dolor intensificarse muchísimo más.

Empezó a quejarse como pudo, sintiendo el dolor intensificarse cada vez más, apoderándose de su vientre y su espalda baja, soltó un grito de dolor puro, encogiéndose en su lugar.

—¿Qué pasa? ¡YeonJun! —apenas escuchó el grito, BeomGyu salió de la cocina, apresurado y angustiado, preocupándose aún más cuando vió el estado de su amigo.

—No... No me siento... Bien —murmuró llevando una de sus manos a la zona del dolor, doblándose aún más cuando otro punzón llegó a él, se quejó constantemente por tal dolor.

Había sido cuestión de minutos.

El de aroma a fresa intentó dar un paso, sintiendo su cuerpo por completo ceder, si no fuera por el agarre del otro en su cintura, hubiera caído al suelo.

—¡YeonJun! —BeomGyu se asustó aún más, usando toda su fuerza para llevarlo al sillón, preocupado por el estado de su amigo. El omega sudaba frío, en cuestiones de segundos ya su cabello estaba húmedo y pegado en su frente, su cuerpo temblando de la debilidad y el dolor apoderado de su cuerpo.

BeomGyu se apresuró a tomar su teléfono de la mesa, llamó al número de emergencias mientras le daba una mirada a su bebé que se mantenía tranquilo ya que estaba viendo a su padre.

—¿Qué te duele, YeonJun? Dime, señala en dónde te duele —pidió rápidamente, preocupado, YeonJun susurró la respuesta, sin tener las fuerzas para contestar o siquiera señalar.

El teléfono de YeonJun se iluminó en la mesa de la cocina de inmediato, el nombre del remitente en la pantalla.

Binnie 💘

—¿H-hola?... ¡Si, hay un omega aquí conmigo, e-eh... Se le bajó la tensión! ¡No lo sé! Está muy mal, suda frío y se retuerce del dolor... ¿¡Qué le importa si es alérgico!? ¡Ya verá cuando llegue, está que se desmaya aquí! ¡No, no está embarazado! ¡Solo vengan por fa favor, mi dirección es...

—Me duele... —susurró YeonJun sintiendo el dolor expandirse aún más, se encogió en su lugar soltando un par de lágrimas por el dolor, el mareo, la debilidad y un constante pitido en sus oídos.

—YeonJun, YeonJun, ya vienen para acá... Escúchame, ¡No te desmayes, tonto! —regañó mirando a su amigo ceder por completo, quedando aún más laxo en el sillón, BeomGyu lo tomó de los hombros, mordió su labio inferior preocupado— No, no... Estaba bien —susurró volteando a ver a su bebé, se acercó a él y lo tomó en brazos, se apresuró a ponerle un abrigo, se colocó él mismo sus zapatos, dió un salto en su lugar cuando escuchó a lo lejos la sirena de la ambulancia.

De inmediato abrió la puerta, dejando al personal entrar.

—¡S-se desmayó hace rato! —informó caminando tras la canilla en dónde transportaron al omega inconsciente.

—¿Usted es familiar? Solo familiares viajan en ambulancia —indicó uno de los paramédicos, BeomGyu asintió repetidas veces.

—¡Soy su hermano! —mintió, subiendo a la ambulancia con los nervios a flor de piel.

De inmediato, la ambulancia partió con YeonJun, BeomGyu y Byeol en ella.

¿Qué estaba pasando?

¿Qué opinan del cap? Espero les haya gustado, nos vemos en el siguiente u.u

Este fic se está haciendo un poco más largo de lo que pensé, espero no les aburra

The_Dark_Diamond