
[46]
Kang Byeol cinco meses de nacido.
La agenda de ese día, era cita con el pediatra y visita al café, ambos padres se levantaron desde temprano, haciendo sus aseos personales y además, organizando las cosas de su bebé.
Byeol había crecido solo un poco, estaba más activo, había empezado a jugar y querer llevarse a la boca todo a su paso, los adultos atentos de que no llevase nada desconocido o sucio a la boca, además había empezado a darse la vuelta de abajo hacia arriba, ganándose muchísimos halagos y besos de ambos.
Ese día tenían la consulta mensual que habían acordado con el pediatra, duraría unos cuantos minutos, máximo veinte.
—Ve a buscarlo tu, terminaré de lavar los platos —pidió el omega lavando todos los utensilios que usaron para el desayuno, fue Kang quien entró a la habitación de Byeol a darle los buenos días.
Aunque parecían no ser tan buenos para el bebé.
—Oh, ¿Qué pasa? —preguntó el alfa agarrando firmemente al bebé al sentirlo moverse a todos lados con fuerza, como en un berrinche— Byeol, calma —pidió rodeando al bebé de su aroma, revisó su pañal como pudo, pero estaba limpio, Byeol siguió llorando a todo pulmón, gritando y removiendo su cuerpo con fuerza, siendo casi imposible sostenerlo correctamente sin lastimarlo.
—¿Qué pasa? —preguntó BeomGyu al escuchar a su bebé llorar tan fuerte y sin calmarse con el alfa, se preocupó al ver las mejillas y nariz roja del bebé, se acercó de inmediato, tomándolo de los brazos de alfa, dejándolo en su hombro— Mi amor... Ya, no llores más —pidió acariciando su espalda, Byeol reguló su llanto, metiendo su puño en su boca.
—Tiene el pañal limpio, no sé porqué llora así... —murmuró TaeHyun mirando a los minutos como el bebé se había calmado con el abrazo del omega.
Había una llamada crisis de los cinco meses, todos los bebés la pasaban y era sumamente normal en su desarrollo.
Pero, ¿En qué consistía ésta crisis?
—Tae, tenlo un momento, necesito ir al baño —pidió el omega dejando al bebé adormecido en el hombro del alfa en cuanto salieron del pediatra, TaeHyun siguió a su esposo hasta la puerta del baño, quedándose ahí parado.
¿Cuánto le tomaba a una persona orinar?
¿Segundos? No llegaba al minuto siquiera, según sus cálculos.
El pasillo del pediatra ayudó muchísimo a que el llanto de Byeol se escuchara más fuerte por el eco.
Apenas el bebé registró el cambio de brazos y que no estaba BeomGyu, empezó a llorar.
—Ya va a salir, cálmate, por favor —pidió Kang meciendo al bebé que volvió a repetir los gestos de esa mañana, casi rechazando el toque del alfa.
TaeHyun mordió su labio inferior, BeomGyu salió de inmediato, secando sus manos.
—Byeol, aquí estoy, ya, mi cachorrito —le habló sin tener otra opción que tomarlo en brazos para calmar su llanto, cosa que fue casi de inmediato.
Byeol sólo quería estar con él omega.
Aún así, no rechazaba a los demás siempre y cuando estuviera en los brazos o regazo del omega.
Por eso, cuando estuvieron en el café, BeomGyu tomó asiento en la silla del escritorio, dejó a Byeol sentado en su regazo.
—Mira lo que traje —mostró el alfa agachado frente a ambos mostrando un peluche de colores, un pulpo.
Byeol balbuceó tomando al pulpo con sus manos, casi de inmediato lo llevó a su boca con un sonido agudo.
TaeHyun solamente sonrió pasando sus manos por la mejilla de su hijo.
—¿Por qué crees que me rechaza? —preguntó el alfa aún con la mirada en el bebé. BeomGyu frunció el ceño.
—No te rechaza —negó de inmediato, TaeHyun arqueó una ceja— Bueno... Lo de ésta mañana no sé que pueda ser... Tal vez... Uh, no lo sé —dudó, sin saber muy bien qué había pasado con su bebé las veces que lloró con tal intensidad por no tenerlo cerca.
Ambos voltearon a la puerta, Sussy entró cuando recibió el pase de ambos, sonriendo con ternura hacia Byeol, manteniéndose a una distancia considerable.
—Aquí están los currículums que me pidió, solo hay seis y si me pide mi opinión... No creo que pasen más de dos —mencionó entregando las hojas al alfa que se irgió en su lugar, BeomGyu extendió su mano para ver también.
—Las revisaremos, gracias Sussy —agradeció volviendo a ver a su esposo que con un brazo sostenía a Byeol y con la mano contraria veía el primer currículum.
Debían empezar a contratar personal tanto para esa como para la otra sede, les gustaba el personal de calidad y comprometido, y se dedicaban a leer currículum por currículum y hacer las entrevistas más indagadoras posibles.
La calidad para ellos era lo esencial.
—HaeChan dice aquí... Uh, parece ser el más capacitado entre todos —opinó BeomGyu meciendo su cuerpo en la silla, Byeol apretando el peluche y llevándolo a su boca, haciendo soniditos y soltando risitas cortas con el movimiento del omega, TaeHyun alzó los hombros— Puedo entrevistarlo, la última vez tú te encargaste de eso.
—¿Alfa u Omega?
—Dice... Alfa.
—No —negó de inmediato el alfa tomando la hoja de la mano de su esposo, BeomGyu frunció el ceño extrañado.
—¿Qué? ¿Por qué no? —preguntó dándole una mirada a su bebé, Byeol arrojó la cabeza hacia atrás, para verlo, sonriéndole cuando el omega apretó una de sus mejillas.
TaeHyun negó de nuevo con la cabeza.
—Es un alfa.
—¿Esa es la razón? TaeHyun, por favor —rió a carcajadas soltando su cabeza hacia atrás. Byeol sonrió al escuchar la risa del omega que dejó de reír cuando notó que TaeHyun le estaba hablando muy, muy enserio.
BeomGyu volvió a mirar la hoja con una mueca, su esposo le hablaba enserio y el ceño fruncido en su cara lo rectificaba.
—Ya... No te molestes —ordenó dejando la hoja en el escritorio. TaeHyun estaba siendo muchísimo más celoso de lo que era antes. Byeol soltó un lloriqueo llamando la atención de ambos.
—¿Qué? ¿Pañal sucio? —preguntó el alfa mirando a su hijo pucherear, BeomGyu revisó el pañal del niño, asintiendo unos segundos después— Ven, yo lo hago —propuso aún con el pequeño miedo e inseguridad de que el bebé lo rechazara o llorase cómo las otras dos veces.
BeomGyu igualmente tuvo esa inseguridad, sin poder encontrar aún la razón por la que Byeol se comportaba así.
—Ven, estrellita —mimó el alfa apretando las mejillas del bebé antes de querer tomarlo en brazos, Byeol se hizo bolita empezando a llorar más fuerte cuando fue separado del regazo del omega.
BeomGyu lo estiró hacia el alfa, Byeol encogió los pies y todo su cuerpo mientras empezaba a llorar.
TaeHyun hizo una mueca mientras el omega lo volvía a acercar a su pecho, Byeol solamente lloriqueó, dejando el pulpo de peluche en su boca, mirando todo con las mejillas enrojecidas y lo ojos cristalizados, un par de lágrimas deslizándose.
—¿Qué crees que sea? —preguntó TaeHyun mirando a su esposo cambiar el pañal de su hijo, él solamente pasando y tomando las cosas en ayuda.
BeomGyu hizo una mueca inclinádose más hacia su bebé, rozó sus narices sacándole un balbuceo, le entregó el pañal sucio a su esposo.
—Las otras veces ha estado contigo sin problemas, el viernes pasado apenas y me buscó —mencionó el omega acomodando las prendas del bebé— Solo cuando le dió hambre y luego estuvo todo el tiempo contigo.
—Tal vez solo quiere estar más pegado a su mamá... —murmuró guardando todos los implementos que usaron, BeomGyu soltó una risa tomando de nuevo a su bebé, abrazando su cuerpo pequeño y algo gordito.
—Primera vez que me dices mamá —rió, TaeHyun lo observó con una ceja arqueada.
El término madre/mamá era usado desde hace años para referirse a los omegas sin importar el género, a algunos les incomodaba y a otros les molestaba el hecho de que una persona con sexo masculino fuese llamado madre, etiqueta para el sexo femenino.
Los omegas hombres quedaban embarazados, daban a luz y algunos, lactaban. Tenían la capacidad de traer vida al mundo.
¿No es eso suficiente para llamarlos mamá o madre?
—Byeol... Es tu hora de comer —avisó el omega una hora después, cuando ya iba en el auto de camino a casa, TaeHyun miró por el retrovisor a su esposo unos segundos. Por seguridad, el omega y bebé viajaban en la parte trasera.
BeomGyu desabotonó su camisa hasta donde consideró y acomodó a su bebé que solo movió las piernas, apretando en sus manos el peluche que no soltó en todo el tiempo.
—¿No tienes hambre? —preguntó el omega extrañado, Byeol soltó una risita antes de apegarse más al pecho del omega, tomando el pezón en sus labios, empezando a alimentarse con lentitud, dándole miradas al peluche y al omega que se mantuvo atento a su bebé.
—¿Qué vamos a almorzar? —preguntó TaeHyun, Byeol con la voz del alfa reaccionó, volteando su cabeza hacia él, dejando de tomar y por ende, ensuciando al omega.
—No lo distraigas —regañó levemente el omega limpiando su pecho antes de volver a llamar la atención de su bebé que lo observó antes de volver a tomar su pezón, retomando la toma.
—No lo estoy distrayendo —se defendió siguiendo con el camino en silencio. BeomGyu prestó atención a su hijo cuando lo único que hizo fue juguetear y no hacer la toma correctamente, ensuciando su barbilla y al omega al mismo tiempo.
Byeol se rehusó completamente a seguir tomando, preocupando mucho más al omega.
—Esperemos dos días —propuso el alfa cuando estuvieron en casa, Byeol recostado en el pecho del omega aún con el pulpo en manos— Si en dos días sigue así, iremos al pediatra —decidió recibiendo un asentimiento del omega que suspiró sintiendo algo de calor.
—Iré a ducharme —indicó acercándose a un espacio exclusivo de la sala de estar, habían rodado los muebles y habían colocado un tapete de colores y acolchado para Byeol, junto a uno que otro juguete afelpado o con ruedas y sonido, TaeHyun le sonrió a su hijo tomando asiento en el tapete— Hora de jugar con papá, Byeol —indicó el omega extendiendo al niño hacia el tapete, pero Byeol lloriqueó casi de inmediato al sentir la separación con el omega.
BeomGyu tomó igualmente asiento, dejando a su bebé entre sus piernas, en posición de indio, Byeol se quedó tranquilo empezando a tomar todo lo que estaba cerca de él, prestándole atención a TaeHyun y riendo exclusivamente con el alfa.
El omega decidió esperar unos minutos a que su hijo se distrajera, pero cuando quiso sentarlo en el tapete, Byeol lloró y pataleó hasta más no poder.
—Byeol, mira —llamó la atención el alfa alzando una pandereta, el bebé la observó fijamente con la boca entre abierta antes de estirar sus manos a él, TaeHyun la dejó en el tapete a una distancia corta del bebé que se inclinó hacia ella.
BeomGyu sintió el corazón casi salir de su pecho cuando el bebé se inclinó en su regazo, fue un movimiento rápido e irregular del bebé que se sostuvo con sus manos en el tapete como si nada hubiera pasado.
—Oh, Dios —suspiró el omega mirando a su hijo boca abajo, alcanzando el juguete. TaeHyun soltó una risa.
—Cálmate —relajó el alfa mirando a su hijo tomar la pandereta para llevarla a su boca.
—¿Y si no ponía las manos y se golpeaba la boca? —preguntó el omega dándole una mirada al bebé, TaeHyun negó con la cabeza.
—Pero no pasó, cálmate, mamá gallina —mencionó inclinádose a besar su mejilla, volviendo a jugar con Byeol.
Las siguientes horas fueron iguales, Byeol estuvo todo el día pegado a BeomGyu, llorando cuando el alfa quería sujetarlo o simplemente el omega lo acostaba a su lado.
Y fue así al siguiente día.
Y el siguiente a ese.
Y el siguiente.
Una semana, dos semanas.
La crisis de los cinco meses de Kang Byeol apenas, estaba iniciando.
¿Qué opinan sobre el término "mamá"? Me gustaría leer qué opinan en este punto 😃
Espero les haya gustado el capítuloooooo, nos vemos en el siguiente::)
The_Dark_Diamond04
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