Kang Byeol 10 meses de nacimiento.

Choi YeonJun 6 meses y medio de gestación.

—Tae, navidad es en cuatro días...

—Si, pero Byeol no sabe de horarios todavía —restó importancia el alfa acomodando cuatro regalos bajo el árbol, envueltos por BeomGyu ésta vez, pulcros y con los dobleces exactos— Además, pasaremos navidad con mis abuelos.

—Bien, bien, tienes razón —afirmó el omega mirando con una pequeña sonrisa los regalos de su bebé que ese día cumplía los diez meses de nacido.

Tan rápido que pasaba el tiempo...

—¡Papapa, mama, papapa! ¡Mama! —ambos voltearon de inmediato a la habitación de Byeol, algo sorprendidos pero con sonrisas en el rostro. Era la segunda vez que Byeol los llamaba al despertar.

—Bueno días, mi niño bonito —saludó BeomGyu haciendo un sonido de sorpresa mirando al bebé, de pié en su cuna, agarrado a los barrotes, pero de pié.

—Buenos días~ —canturreó el alfa tomándolo en brazos, repartiendo besos en sus mejillas, Byeol se aferró a las orejas del alfa.

BeomGyu revisó el pañal de su hijo unos segundos antes de besar la otra mejilla de Byeol.

—Hay que ir al árbol, Santa te dejó regalos, ¡Muchos regalos! —exclamó el alfa con emoción caminando hasta el árbol de navidad, dejó a Byeol en el suelo, el bebé balbuceando para gatear hasta los regalos, tocando las cajas con emoción, BeomGyu grabó con su teléfono con una inmensa sonrisa.

TaeHyun se acercó y rasgó un pedazo de papel de cada regalo, llamando la atención del bebé.

Byeol tomó una de las esquinas sueltas y rasgó el papel, soltando una carcajada por la sensación.

El bebé rasgó los papeles entre carcajadas y recibió ayuda de los padres para sacar los juguetes de las cajas.

—No lo metas en una caja, TaeHyun —regañó el omega armando uno de los juguetes de su bebé, Byeol carcajeó quedándose dentro de una de las cajas vacías, TaeHyun le vacío sus nuevos bloques dentro, sacándole más carcajadas.

—Se está divirtiendo —se excusó tomando otro de los regalos de Byeol, una bolsa de cien pelotas de plástico que venían con su respectivo cuadrilátero para asemejar la piscina de pelotas.

A Byeol le gustaban tanto, que no habían evitado comprarla.

—¡Mama, mama! —el bebé llamó al omega entre risas, alzando los brazos para ser cargado y sacado de ahí, BeomGyu lo dejó en frente de el cuarto juguete.

Una andadera.

La ciencia de ese juguete era que el bebé lo sujetara de pié y lo arrastrara por el lugar, siendo ayudado por las ruedas del juguete, pero siendo un buen incentivo para caminar. Además de que estaba decorado con botones y sonidos de animales que apenas TaeHyun le colocó las baterías, Byeol no dejaba de apretarlos, carcajeando.

—Santa te quiere mucho, Byeol, mira todo esto —habló BeomGyu mostrando los regalos alrededor, ya abiertos, Byeol gateó hasta el omega, se aferró a la camisa del mismo y se levantó, siendo abrazado de inmediato— Feliz navidad, mi bebé hermoso...

—Feliz navidad, Byeol —deseó el alfa besando la mejilla libre del niño que sonrió, rodeado de dos padres amorosos que harían cualquier cosa por verlo feliz.

A metros de los Kang, en el apartamento Choi llegó una correspondencia.

—No pedimos nada, debe ser un error —negó YeonJun al abrir la puerta del apartamento, al inicio había pensado que era alguien de la mudanza, pero en realidad era un paquete.

—No, estoy seguro que es aquí, lo mandó... Ésta persona —explicó el repartidor mostrando el nombre de la persona, YeonJun alzó las cejas al reconocer el nombre de TaeHyun.

Agradeció, mirando el paquete grande.

Obviamente no podía ni agacharse.

—Oh, déjeme ayudarlo, ¿Podría decirme en dónde lo quiere? —preguntó el beta, cargando la caja, YeonJun señaló hacia adentro, simplemente en la sala de estar. SooBin salió de la cocina con una paleta de helado, y el ceño fruncido— Buenas tardes, señor —saludó el repartidor, antes de irse, recibiendo un agradecimiento del omega.

YeonJun se extrañó por el hecho de que el repartidor solamente enseñó el nombre y no lo dijo en voz alta, cómo era típico.

Tomó asiento en el sillón, abriendo la caja con cuidado, JinSung salió de la cocina también, con un envase de helado y una cuchara, lo comía mientras caminaba.

—Hijo, es en la mesa que debes comer, si tropiezas se te caerá el helado —explicó SooBin, JinSung hizo un puchero.

—Pero no me dejes solito en la mesa, papito —pidió, SooBin asintió dándose la vuelta para ir con el niño, pero YeonJun empezó a leer la tarjeta de la correspondencia en voz alta.

—Para JinSung, un niño que es muy amoroso con sus padres y muy obediente... —leyó YeonJun con una pequeña sonrisa, JinSung se dió la vuelta, prestando atención con la boca abierta, SooBin rió mirando al niño— Que siempre sonríe y reparte abrazos a su familia, es un niño muy bueno y por eso le he mandado un regalo antes de navidad... Atentamente, Santa.

—¡Santa, es santa, papito! ¡Es de santa para yo! ¡Es para yo! —se emocionó dejando su envase de helado en manos de SooBin que rió, extrañado por ese paquete pero no menos emocionado.

JinSung dió saltos alrededor de caja, YeonJun sacó un regalo rectangular envuelvo con papel de regalo, JinSung lo tomó con emoción.

—¿Qué es, Jiji? —preguntó SooBin mirando atento el regalo, ambos adultos curiosos por el regalo que el niño empezó a revelar con emoción.

—¡La pista de autos, papi, de los autos que ruedan! —exclamó con emoción, SooBin soltó un sonido asombrado, mirando la pista de carreras, con algunos obstáculos.

—Está genial, hijo, podremos armarla en la otra casa, ¿Si?

—¡Si, si! —afirmó con emoción abrazado a la caja, YeonJun miró otro paquete de regalo en la caja.

Para la primera niña de una familia llena de hombres, la princesa de los padres y también de los tíos.

Atte: Familia Kang.

Feliz navidad.

—Pero qué preciosura...—murmuró el omega mirando los artículos que le había dado la familia Kang, incluso unos chupetes estaban incluidos. SooBin también los observó con una sonrisa enternecido.

Y ver esos lazos le hizo recordar que todavía ya tenía el nombre para su hija.

—¿Y eso, papi? —preguntó JinSung acercándose al omega para ver curioso, YeonJun le mostró todo con cuidado— ¿Es para la bebita?

—Si... Es para la bebita, JinSung...

—Uhm... ¿Y por qué es muy pequeñito? —preguntó tocando los lazos con el dedo índice, SooBin rió acariciando la cabeza del niño.

—Porque tu hermanita es muy pequeña todavía, va a pasar un tiempo para que pueda estar igual de grande que tú.

—Uhm... ¿Y puede jugar con mi pista? —preguntó aún aferrándose a la caja, feliz y emocionado por su nuevo juguete. SooBin rió antes de asentir a la pregunta.

Había durado semanas pensando en el nombre de su hija.

Pero de todas las opciones que tenía, había una que no podía sacarse de la cabeza.

Por eso, cuando tuvo un momento con YeonJun, mientras JinSung recogía los últimos juguetes que quedaban por fuera, habló del tema.

—¿Ya elegiste un nombre? —preguntó el omega emocionado, SooBin sonrió antes de alzar los hombros.

—Uhm... Digamos que sí... De todos los que he pensado, siempre me queda este nombre en la cabeza... Se ha vuelto mi favorito incluso... —habló, algo nervioso y emocionado, YeonJun lo abrazó por los hombros con una sonrisa.

—A ver... Dime cuál es.

—Choi JiHyun... Si no te gusta, podemos-... —se calló cuando el omega besó sus comisuras.

—Es precioso, SooBin... —halagó, SooBin sonrió.

Por mucho que pensó y pensó, buscó en internet, y se memorizó todos los nombres bonitos que había de niña, JiHyun no se le iba de la cabeza.

Tanto tiempo pensando y pensando, para terminar quedándose con una de las primeras opciones.

—Entonces... Choi JiHyun... —afirmó el omega con una sonrisa. Ya no tendrían porqué llamarla solamente por apodos, ya tenía un nombre a tres meses de su nacimiento.

Tres meses que pasarían tan rápido como pasar la página de un libro.

:"D corto pero con amor!

Por cierto, los siguientes capítulos saltarán en el tiempo... No tanto, pero sí irán más rápidos

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