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R e b e c c a   A r m s t r o n g

Hablar con esa extraña mantenía mi corazón palpitando muy fuerte.

Bueno, no tan extraña ya que al menos sé la inicial de su nombre.

Es lo mínimo, pero me conformo fácil.

En ocasiones odio ser muy nerviosa y tímida. Pero me sentía contenta de que, por primera vez, alguien se haya fijado en mí y haya llamado mi atención de una manera tan bonita.

Aún así, quería ser precavida o por lo menos lo intentaría, ya que Huilin me había recordado de que no sabía las intenciones de aquella extraña.

¿Y si se estaba intentanso burlar de mí?

- ¡Apúrate! -grita Huilin desde el baño y me saca de mis pensamientos.

- Está bien, está bien. -me dirijo a mi armario y suspiro con pesadez.

Me coloco un vestido color marrón, que resalta muy bien por el color de mi piel y cabello. Luego me maquillo con una tinta para labios, un poco de sombra de ojos y perfume.

- ¿Que tal me veo? -dice Huilin mientras posa con un conjunto negro ajustado y unas botas largas del mismo color.

- Hermosa.

- Como siempre. -decimos al unísono.

Pasa un rato hasta que decidimos que ya es tiempo de ir a la fiesta, la cuál no me emocionaría tanto si no fuese porque aquella extraña estaría allí.

F r e e n   C h a n k i m h a

Al llegar a la fiesta lo único que pude notar es lo fuerte que estaba la música y la escasa luz que había.

La gente bailando y bebiendo lucía muy animada, Matthew tomó mi mano y me llevó a una larga mesa en la que yacían bebidas de todo tipo.

- ¿Qué te preparo? -dice Matthew.- Lo que sea, menos tequila. -dice bromeando y me toca el hombro con su dedo índice.

La razón era obvia, recordando que la última vez tomé una dosis considerable de tequila y me terminé acostando con la enana rubia de ojos de gato, Lydia.

Hablando de ella, Lydia me ve entre la multitud y se acerca.

Mierda.

Me giro quedando frente a frente con Matthew para tratar que me perdiera de su vista, y hago como si fuese que no la ví.

- Lo que sea que te prepares tú. -respondo a Matthew quién gira sus ojos.

- Yo manejo, no voy a beber más que agua o refresco. -me recuerda.

- Pues dame una cerveza. -extiendo mi mano cuando él me la alcanza y la abro.

- Mira a quién tenemos por aquí. -dice Lydia abrazándose a uno de mis brazos.- ¿Por qué me ignoras?

- Ah. -exclamo vagamente tratando de mostrar el mayor desinterés posible.- ¿Que quieres?

- Ay, que carácter. -Lydia habla de nuevo mientras se separa.- En fin, no venía para molestarte a tí.

Pero lo estaba haciendo. Quiero decirlo pero no lo hago, trato de buscar a Matthew a mi lado para que me ayude a escapar de Lydia, pero él ya se había perdido entre la multitud.

Traidor.

- En serio, ¿que quieres? -vuelvo a hablar mientras le doy otro sorbo a mi cerveza y me cruzo de brazos.

- Sólo para decirte que ya no podré estar contigo, porque tengo un nuevo novio. -responde Lydia.

No podía explicar la expresión de confusión que tenía mi rostro en este momento. Lydia sabía muy bien que lo de nosotras había sido sexo de una noche, y luego de ese suceso yo no hice nada más que decirle directamente que no quería volver a saber de ella.

Loca. Está loca.

- Pero si te sirve de consuelo, puedo presentarte a una de mis amigas. -vuelve a hablar y me toma del brazo, sin mi consentimiento, me lleva a un grupo lleno de chicas.

En serio, debo matar a Matthew por dejarme sola.

- Mira Arabella, ella es Freen, la chica de la que te conté. -dice Lydia mientras le guiña un ojo a esa tal Arabella.

Es una chica con cabello castaño, un poco más baja que yo, cara bonita y cuerpo delgado, su piel es pálida y está adornada con algunos tatuajes, en su nariz, labio y ombligo lleva piercings, al igual que en su lengua, el que puedo ver cuando sonríe. Lleva una falda tiro bajo que le da una linda forma a su cintura y una blusa con partes transparentes pegada al cuerpo, ambas prendas de color negro.

Es completamente mi tipo, pero no estoy ni un poco interesada.

¿Cómo podría estarlo? Si acabo de ver a Rebecca con un lindo vestido marrón, cruzada de brazos mientras mira divertida como su amiga baila.

- Tierra llamando a Freen. -habla Lydia mientras mueve su mano en mi rostro.

Me doy cuenta que me había quedado mirando fijamente a Rebecca por varios segundos.

Ni siquiera hemos hablado en persona y ya me tiene loca.

- Mucho gusto, Freen. -dice Arabella de manera muy tímida, lo cuál me sorprende un poco ya que no va de la mano con su estilo.

Lydia hace bromas sobre el amor a primera vista y juro que me dan ganas de pegarle con mi lata de cerveza.

- Me voy afuera. -digo de repente.- ¿Me acompañas, Arabella?

Haría de todo para no tener que soportar a Lydia esta noche, pero no quería quedar mal con Arabella. Incluso si no me llamaba la atención, pasaría el rato con ella sólo para no quedarme sola.

- Vamos. -dice Arabella.

La tomo del antebrazo mientras escucho como Lydia hace una broma sobre mi rapidez para cazar a una mujer.

En serio, la odio.

Salimos del lugar y nos posiciono justo en la ventana para poder seguir viendo a Rebecca. Arabella se encuentra algo tensa, veo como saca un cigarrillo y un encendedor, pero se detiene al querer prenderlo.

- ¿Te molesta si fumo? -pregunta con la voz algo baja.

- No, de hecho, dame uno a mi también.

Sonríe y me extiende uno de los cigarrillos, empezamos a fumar en silencio y en lo único que pienso es que prefiero estar con Matthew o irme a mi departamento.

Los minutos pasan y la única que se encuentra hablando soy yo, a pesar de que realmente no quiero estar en esta situación pero me repito una y otra vez que Matthew es quién me lleva a casa y no quiero arruinar su noche, y que cualquier cosa es mejor que estar cerca de Lydia.

Arabella responde vagamente pero no con desinterés, sino más bien porque todo en ella grita timidez e incluso desconfianza.

Mientras tanto veo a Rebecca de vez en cuando, pienso que estoy disimulando pero Arabella decide hablar.

- ¿Que hay a través de la ventana que te llama tanto la atención? -pregunta con una sonrisa y creo que es la frase más larga que ha salido de su boca.

- No importa.

Si importa. Es que estoy embobada con como luce Rebecca y es lo único bueno que hay esta noche, a pesar de que no puedo hablarle para respetar su comodidad.

En serio, podría mirarla por horas.

Sigo hablando con Arabella y sólo recibo respuestas vagas o muecas.

Trato de comprenderla pero en su lugar me molesto un poco y decido decirle que vayamos por una bebida y si tengo suerte veo a Becky más de cerca o Matthew podría salvarme, pero me detiene.

- Te... -Arabella hace una pausa en la que suspira tratando de controlar lo que parecen nervios.- ¿Te puedo besar?

🥀🌸

N/A: Ni tan tímida es la Arabella, eh ksfjsjsjd. El próximo capítulo va a estar bueno jiji.

Mini spoiler para los próximos capítulos: entre Becky y Freen van a pasar cositas más rápido de lo que se esperan.

Nos vemos mañana con dos capítulos:]