Fred movió el rostro al sentir como alguien le picaba el parpado, pero se negó a abrir los ojos, probablemente era Anirak tratando de despertarlo, aun tenia demasiado sueño, no supo a qué hora se durmió, pero estaba seguro que era muy tarde porque se quedó platicando con su novia, y bueno, también estuvieron fajando un buen rato porque ella no acepto a dejar que la penetrara por dos razones:

1) Que estaban en la sala y los podrían descubrir y;

2) Anirak no se había tomado ni la poción o pastillas ese día ya que no tenían planeado verse y no quería arriesgarse a salir embarazada.

Por más que Fred quisiera hacerlo siempre respetaría la decisión de la azabache.

Abrió los ojos de golpe cuando el agua cayó sobre su rostro.

—¡¿Qué mier...?!

Dejo las palabras en el aire al ver unos ojos grises que lo veía con molestia, eran muy parecidos a los de la Black, pero se trataba de Sirius que tenía el ceño fruncido mientras a su lado estaba Bill viéndolos con una sonrisa burlona.

—Comadreja...

—¿Hola? — al darse cuenta que lo veía fijamente quito de inmediato la mano que tenía sobre el trasero de la chica que estaba durmiendo encima de él, sus mejillas se volvieron completamente rojas mientras se limpiaba el rostro — ¡Te juro que no hicimos nada más que dormir!

Anirak dormía plácidamente sobre él, Fred la rodeaba con los brazos, al menos ambos tenían los pijamas puestos.

—Los dos levántense y váyanse a bañar —musito entre dientes Sirius para caminar a la cocina—...y más te vale tener las manos lejos de ella.

—Creo que tu suegro se enojó— bromeo Bill guiñándole el ojo—, deberías de despertar a tu novia antes de que bajen todos los demás.

—¿Cómo es que ya lo sabes?

—Los vi la otra noche en el patio — el mayor sonrió socarronamente —...no te preocupes no le diré a nadie, aunque no sé porque lo mantienen en secreto.

—No es que lo mantengamos en secreto, pero no encontramos el momento de decirlo.

—No son muy discretos.

Bill fue a la cocina detrás del Black.

—Anir — Fred la movió suavemente —...es hora de que despiertes, muñeca.

—Mmh—Anirak se movió entre sus brazos mientras hablaba con voz adormilada —...cinco minutos más, no pude dormir mucho por tu culpa.

—Cielo, tu padre y Bill ya bajaron — el colorado le acariciaba el cabello mientras con la mano libre le abría los parpados para que no volviera a cerrar los ojos —...nos vieron juntos.

Anirak soltó un suspiro y se sentó sobre la cadera del chico bajo ella, mientras se tallaba los ojos, Fred paso la mirada lentamente sobre el cuerpo de su mirada, realmente lo volvía loco, era la mujer más perfecta que había conocido, nunca se cansaría de admirarla.

—Ya lo tenemos que decir, Fred — Anirak se acomodó bien la blusa y dejo un beso sobre la mejilla de su novio —, por cierto, buenos días, Freddie.

La azabache se puso de pie para estirarse, Fred se acomodó para sentarse en el sillón sin quitarle mirada de encima, en esos momentos quería besarla, pero sabía que Sirius podría salir en cualquier momento y lo trataría de golpear, una leve risa escapo de sus labios al ver como los pechos de Anirak se transparentaban a través de la blusa, negó con la cabeza y tomo la camisa formal de color magenta que había dejado anoche en el sillón.

—Buenos días, muñeca — Fred puso la camisa sobre los hombros desnudos de la Black —, póntela bien—se inclinó y murmuro contra su oído—, no es que me moleste la vista, pero no creo que quieras que toda mi familia vea tus bonitos pechos ¿o sí?

Las pálidas mejillas de Anirak comenzaron a tomar un color rosado, a veces solía ser algo descuidada con la ropa ya que estaba acostumbrada a vivir con puras mujeres a parte que con el pelirrojo que tenía por novio no le daba pena que se marcara alguna parte de su cuerpo o que él la viera desnuda, Fred llevo la mano hasta una mejilla para acariciarla con suavidad.

—Gracias — Anirak se colocó bien la gran camisa de su novio para comenzar a abotonarla, le quedaba tan enorme que le cubría más de la mitad de sus muslos.

—Eres tan preciosa...

Musito acercando sus labios a los de ella, cuando estaba por besarla escucho un carraspeo de garganta.

—Anirak, cielo, ¿no tienes que estar en la academia de aurores a las nueve? Ya son siete y media...

Anirak empujo suavemente a Fred para que se alejara unos centímetros, él solo soltó un bufido y fue detrás de ella que se acercó al mayor para abrazarlo.

—Buenos días, papá...

Sirius beso la frente de su hija mientras intercalaba la mirada de Anirak hacia Fred.

—Buenos días, cariño — el Black mayor enarco la ceja al ver la camisa que usaba la chica — ¿Hay algo que tengan que decirme?

Fred observo a Anirak, esperando que ella decidiera.

Ella solo sonrió y tomo la mano de Fred para acercarlo a ella, el pelirrojo se sentía nervioso, pero paso su brazo alrededor de la chica ante la mirada de Sirius.

—Ya sabes que Fred y yo pasamos mucho tiempo juntos...

Comenzó a explicar.

—Sí, eso veo, hasta duermen juntos y usas su ropa.

Ambos se sonrojaron.

—Sirius...yo te dije cuanto quiero a tu hija y te prometo hacerla feliz y siempre cuidarla—los nervios mataban a Fred y tratando de calmarlos abrazo con más fuerza a su novia la que solo soltó una pequeña risa —, en serio la quiero y, tengo tanta suerte que ella también me quiere.

—¿Entonces ustedes?

Claro que Sirius quería abalanzarse sobre el pelirrojo para golpearlo por tocar a su hija, pero al ver la sonrisa de Anirak y lo feliz que se veía trataba de aceptar la situación, para su desgracia ella estaba dejando de ser una niña para volverse toda una hermosa mujer, y sin duda tarde o temprano tendría una pareja.

Al menos conocía a toda la familia Weasley, y aunque no le encantara la idea de que Anirak estuviera con esa hormonal comadreja, sabía que él era un buen muchacho que siempre la cuidaría.

—Estamos juntos, papá —Anirak miro de reojo a Fred el que asintió con la cabeza —...somos novios.

—Ya te lo dije una vez, comadreja — el moreno observo fijamente—, rómpele el corazón y yo te romperé la cara.

—No lo hare, lo juro.

Fred le sonrió a su novia y beso con cariño su frente.

—Y...más te vale mantener las manos donde las pueda ver, Frederick.

Anirak soltó una carcajada y Fred soltó a la azabache alejándose unos centímetros mientras alzaba las manos.

—De acuerdo, ahí las puedes ver.

Sirius negó con la cabeza y puso los ojos en blanco.

—Bueno...ahora lo sabes, así que supongo que será normal para ti que pase mucho tiempo con él o que algunas veces salgamos o hagamos cosas que hacen los novios.

—Si...sobre eso, a partir de ahora cuando salgan, Anirak tiene que estar por muy tarde a las ocho de la noche de regreso...

Sirius los veía de forma seria, Fred solo asintió a pesar de que le gustaría que Anirak se quedara en su departamento no quería llevarle la contraria a su suegro.

—¡Pero papá, esa hora es muy temprano!

Exclamo Anirak

—¿Temprano? ¿Qué esperabas? ¿Qué te deje ir a quedarte con él toda la noche? — el Black enarco la ceja viendo a su hija que tenía el ceño fruncido —...ni lo pienses, señorita, te quiero virgen hasta el matrimonio.

—¡Eso no existe! — refunfuño la azabache — ¡Aparte ya soy mayor de edad, no me puedes poner un horario! ¡Y tú a mi edad ya eras papá!

—Anirak, sigues siendo mi hija, aunque seas mayor de edad —contrataco el mayor —...y no me interesa, respetaras ese horario si quieres tener permiso de tener novio.

—Pero...

Fred apretó los hombros de su novia y la interrumpió.

—De acuerdo, Sirius, ella estará a las ocho de la noche de regreso cada que salgamos ya sea que sigan aquí o estén la casa Black.

Para sorpresa de ambos Black, el pelirrojo parecía demasiado serio y maduro.

—Bien, ahora váyanse a bañar — ambos adolescentes asintieron con la cabeza para comenzar a subir las escaleras — ¡Separados, ni se les ocurra usar el mismo baño!

La pareja soltó una carcajada para desaparecer de la vista de Sirius que solo negaba con la cabeza, como si no fuera suficiente ahora tenía que preocuparse porque esa comadreja no se aprovechara de su inocente hija.

Anirak salió de la chimenea detrás de Molly Weasley.

Ese día Molly decidió que Harry, Hermione y Ron podrían ir con ella a comprar las cosas necesarias para su regreso a clases y pasar un rato en Sortilegios Weasley, por lo que todos viajaron juntos al departamento de los gemelos.

La chimenea volvió a arder y de ella salió el gemelo mayor.

—Si quieren pueden ir bajando, yo iré a cambiarme la ropa.

Fred sonrió.

—De acuerdo, cielo, estaremos con George abajo — Molly camino hacia la puerta principal, pero se detuvo en Anirak la cual sacaba varias cosas de su pequeña bolsa dándoselas a Harry para que las sostuviera — ¿Se te olvido algo, Anir?

— Estoy buscando mi credencial, es que tengo tantas cosas aquí que luego se va hasta al fondo y si no puedo entrar a la academia.

Y ciertamente, Anirak llevaba desde ropa, objetos personales y demás cosas, ya que no estaba viviendo fijamente en un lugar como para dejar todo eso y le daba pena dejar todas sus cosas en el armario de la habitación de Bill ya que lo compartía con Fleur.

—Si quieres puedes dejar algunas cosas aquí — Fred se acercó para ayudar a Harry con las cosas ya que tenía las manos llenas —, y al rato que vaya a cenar a la Madriguera te las llevo.

—Mira, esta excelente esa idea, hijo — Molly parecía feliz —, lleven las cosas de Anirak y los veo en la tienda.

—Sí, está bien.

—Vamos — Fred tomo la varita para hacer que algunas cosas de Anirak levitaba mientras le quitaba las cosas a Harry —, baja con ellos, Anir y yo acomodamos esto, no te preocupes.

—¿Seguro? — el elegido no parecía muy seguro, ya que Sirius le había dicho que no dejara mucho tiempo a Anirak y Fred solos, no entendía muy bien porque—...los puedo ayudar.

—No, baja, disfruta de recorrer la tienda, a esta hora no habrá tanta gente y si tardas más tiempo no podrás disfrutar bien.

Dijo de forma convincente el pelirrojo.

—De acuerdo — miro a Anirak — ¿estás bien con eso?

—Sí, no te preocupes — Anirak beso su mejilla mientras sonreía —, ve con los demás.

—Está bien, nos vemos.

Harry siguió a la señora Weasley, Ron y Hermione que ya estaban bajando las escaleras. Fred al ver que ya había desaparecido le hizo una seña a Anirak para que fuera a la habitación.

Anirak entro detrás de Fred, el cual dejo las cosas sobre la cama.

—Si quieres puedes dejar todo lo que traes en la bolsa y no uses, y puedes venir por eso cuando lo necesites...

Ofreció Fred, para ir a su armario a sacar ropa limpia, ya que en la madriguera solo tenía pans, playeras y bóxer.

—Gracias, Freddie.

La azabache se sentó en la cama para vaciar todas las cosas sobre la cama desde ropa, ropa interior, cepillo dental y todo lo que debería de estar en su habitación salió de ahí.

Fred se quitó la ropa quedando en bóxer, fue al baño para lavarse los dientes.

Anirak observo el reloj en su muñeca, apenas eran ocho y veinte por lo que aún tenía tiempo, así que con un hechizo doblo su ropa para no dejarla tan desordenada en la recamara de Fred, le gustaba como hola todo a su alrededor, el aroma a canela con manzana mezclado con el perfume masculino que utilizaba Fred inundaba su nariz.

Cuando por fin encontró su credencial, guardo solo lo necesario como una sudadera, el cepillo de dientes junto con pasta dental y su neceser donde metió un labial, delineador, rímel, rizador de pestañas y polvo traslucido, dejando un neceser más grande donde estaban todos sus maquillajes.

Fred salió del baño, para acercarse a la cama.

—Guardare esto en el armario — Anirak sonrió al ver a Fred, estaba solo en ropa interior y la veía fijamente —, tu ropa interior estará en el cajón de hasta arriba, los pantalones y faldas estarán junto a los míos, y tus blusas las pondré junto de mis playeras — señalo cada cajón — ¿llevas lo necesario?

—Sí, ya va todo aquí — enseño la pequeña bolsa que ya se sentía más liviana mientras se ponía de pie —...antes de volver a la Madriguera, pasare por un poco de ropa ¿no hay problema?

—Amor, tú puedes venir cuando quieras, si por mi fuera te quedarías aquí y no en la Madriguera — Fred se acercó a ella acorralándola en el mueble donde guardaba más ropa.

—Podría intentar escaparme cuando mi papá este dormido — la azabache acaricio el pecho desnudo de Fred —, así pasaríamos un rato juntos...o le puedo decir que tengo algún trabajo de la academia o algo así.

—Me agrada la idea, Anir — Fred la tomo de la cadera para empotrarla sobre el mueble con facilidad —...quiero pasar tiempo contigo, te extraño demasiado.

Anirak llevo las manos poniéndolas alrededor del cuello del pelirrojo.

—Creo que cierta parte en especial me extraña más — Anirak bajo la mirada hacia el miembro de Fred que comenzaba a despertar —, también extraño estar a solas contigo.

—No sabes cuánto te deseo.

Musito Fred contra sus labios para besarla, el beso rápidamente se volvió necesitado por parte de ambos.

Ambos movían los labios con rapidez, Fred introdujo su lengua para rozarla con la de ella volviendo el beso más demandante, Anirak apretó las piernas contra la cadera rozando la incipiente erección del pelirrojo con su núcleo.

Fred dejo escapar un jadeo al sentir eso. Dejo los labios de Anirak para bajar los besos a su cuello, donde mordía y chupaba toda la piel que estaba frente a él.

La azabache acariciaba la pecosa espalda desnuda de su novio, tenía la piel suave y demasiado caliente...ambos estaban igual.

—Anir, quiero follarte — mustio Fred besándole el cuello y metiendo las manos debajo de la blusa para acariciar su estómago —...me muero de ganas de estar dentro de ti.

Anirak soltó un gemido cuando la gran mano de Fred termino debajo de su sostén acariciándole el pecho desnudo.

—Freddie...tengo que estar a las nueve en la academia — hablo entre jadeos —, te prometo que lo haremos pronto.

Fred alzo el rostro para verla a los ojos y soltar un suspiro.

—Me van a explotar los testículos por contenerme demasiado — se quejó el pelirrojo con un puchero en los labios — ¿Y si dejas de estudiar y te mantengo?

Anirak soltó una carcajada y negó con la cabeza.

—Quiero ser Auror, Fred, y aunque me esté muriendo de ganas porque me folles tengo que ir a la academia —dejo un pequeño beso sobre los labios del pelirrojo —, mi mamá siempre dice que primero lo que deja y después lo que apendeja.

—Ya que — Fred llevo uno de los oscuros mechones rebeldes detrás de la oreja de la chica —...seguramente te verás demasiado sexy con el uniforme de Auror, cuando lo uses yo tengo que quitártelo por primera vez ¿entendido?

—¿Ahora me vas a decir que te ponen los uniformes y disfraces?

Anirak enarco la ceja sonriendo coquetamente.

—Me pones tú con cualquier cosa — Fred se alejó unos centímetros para ayudarla a bajar.

—Eres un hormonal, amor — Anirak se acomodó el brasier y blusa, para ver la hora —, faltan quince minutos, ya es hora de que me vaya.

—Deja me visto y te acompaño.

Fred presiono sus labios contra los de ella para ir por su ropa y vestirse, mientras Anirak metía la ropa en los cajones que él le había dicho, Fred se terminó de abotonar la camisa y tomo la varita para que los objetos personales de su novia terminaran en sobre el mueble donde el dejaba algunas cosas de uso diario, una calidez se hizo presente en su pecho, sentía como si ella se estuviera mudando con él y realmente le agradaba la idea.

La miro durante unos segundos, y estaba seguro que sus sentimientos por ella se hacían cada día más fuertes.

—Por cierto — Anirak llamo su atención y de forma rápida saco una pequeña caja de la bolsa —...te compré algo la última vez que fui a Londres muggle.

—¿Qué es, preciosa?

Fred se acercó a ella para tomar la caja que le extendía, la abrió y sonrió al ver su contenido.

—¿Te gusta? — parecía nerviosa por la opinión de Fred —...sé que siempre usas colores naranjas y tonos más vivos, pero me gusto ese color y creí que resaltaría en ti, si no te gusta la puedo camb...

Fred se inclinó callándola con un beso, el cual fue correspondido de forma inmediata, los brazos de Anirak terminaron alrededor del cuello del pelirrojo, mientras él la sostenía con un brazo alzándola unos centímetros para besarla con mayor profundidad.

Cuando la Black sintió que el beso comenzaba a volverse más apasionado se separó, Fred le mordió el labio con suavidad para dejarla en el piso.

—Me encanto...de hecho, el color gris es mi favorito— Fred saco la corbata de la caja para ponérsela en el cuello, la azabache al ver que no podía hacerse el nudo porque son tenía la caja con una mano, se acercó a ayudarlo.

—Pensé que era el naranja...

Las pequeñas manos de Anirak movían la corbata con facilidad, la mirada de Fred recorría cada centímetro de su rostro, las cejas eran tan negras como su cabello y pobladas peinadas perfectamente, sus pestañas largas y rizadas descansaban con suavidad sobre los pómulos cada que parpadeaba, tenía pequeñas pecas apenas visibles sobre la nariz y mejillas, su ojos se detuvieron más tiempo sobre los carnosos labios que tanto amaba besar, siempre tenían un color rojizo que contrastaba con su pálida piel, Anirak era preciosa y Fred se daba cuenta que lentamente comenzaba a enamorarse de ella.

—Lo era, pero ahora me gusta más el gris — Anirak termino de hacer el nudo y alzo la vista para verlo a los ojos con curiosidad —, si definitivamente el gris será siempre mi color favorito...

—¿Por qué?

Fred sonrió y llevo la mano hasta su mejilla para acariciarla con demasiada ternura.

—Tus ojos...son de ese color, desde que los vi no encuentro ningún color tan hermoso.

Anirak amaba cuando Fred era tan dulce con ella, la hacía sentir extremadamente querida, no podía tener un mejor novio, era la mezcla perfecta: divertido, atractivo, demasiado guapo, inteligente, la quería y adoraba todos los días, la trataba demasiado bien y, por si fuera poco, era el mejor haciendo el amor y siempre buscaba que ella disfrutara de todo, nunca se cansaría de él.

—Te quiero mucho, Freddie.

Anirak lo jalo de la corbata para besarlo cariñosamente, Fred sonrió entre el beso disfrutando del cariño que le brindaba su novia.

La puerta se abrió de golpe.

—Oye, Fred, necesito — una voz se hizo presente junto con unos pasos que se detuvieron al ver la escena —... ¡Fred!

Anirak soltó la corbata del pelirrojo para alejarse rápidamente, Fred volteo a ver a la persona que acaba de entrar con un gesto molesto.

—¿Qué pasó, Georgie?

Hablo entre dientes para tomar la túnica magenta que era el uniforme de su tienda de bromas.

—Hola, Anir — saludo a la azabache con un beso en la mejilla —...necesito que me ayudes, llego más gente y Verity y yo apenas nos damos abasto.

La azabache puso los ojos en blanco al escuchar ese nombre.

—Hola, Georgie...Veo que te divertiste anoche.

Apunto una marca roja en el cuello del chico.

—Tal vez — le guiño el ojo con una sonrisa divertida—... pero creo que yo interrumpí su diversión... ¿ustedes dos?

Fred y Anirak iba a responder cuando la voz de Ron se hizo presente llamando a los gemelos, ya que la tienda comenzaba a llenarse de clientes.

Anirak soltó un suspiro al aparecer delante de la Madriguera, estaba demasiado cansada, su día en la academia fue muy pesado, para pasar la última prueba se necesitaba tener una excelente condición física, la de Black no estaba tan mal, pero le lograba mantener un ritmo constante corriendo y el dolor de piernas era insoportable.

Le gustaba el dolor, pero solo el que era provoco por Fred.

Una sonrisa estúpida se instaló en su rostro al recordar todas las veces que habían hecho el amor, al inicio fue demasiado lento y en cambio ahora parecía que ambos querían experimentar con cosas nuevas, y esa idea le agradaba mucho.

Entro a la Madriguera, le gustaba demasiado la calidez que se sentía ahí pero también extrañaba mucho la casa Black ya que ahí podía pasar más tiempo sola, no es que le molestara estar con los Weasley pero realmente disfrutaba de sus tiempos a solas o de los largos baños que podía tomar en la bañera de su habitación.

Hablaría con su padre para ir a pasar un fin de semana allá, quería relajarse y también estudiar un poco para la última prueba ya que en la Madriguera siempre había ruido y se le dificultaba concentrarse.

Las voces se hicieron presentes, se acero a la sala y vio que Bill y Molly discutían acaloradamente, Anirak se sentó en medio de los gemelos, a los que saludo en silencio para no interrumpir.

—William, recapacita — Molly estaba exaltada y molesta —, no te puedes casar tan rápido con esa francesa.

Ginny, Harry, Arthur, Sirius, Ron, Anirak, Fred y George observaban como el mayor de los Weasley discutía con la matriarca de la familia.

—¡Mamá, ya lo decidí! —Bill parecía exasperado —, me casare con Fleur.

—Molly —hablo Arthur con la calma que lo caracterizaba —, ya déjalo, ya lo decidió.

—Yo estoy de acuerdo con mamá — interrumpió Ginny —, Bill debería de casarse con alguien más y no con la Flema.

—¡Ginny!

Regaño el mayor, los gemelos y Anirak reían lo más silencioso que podían, era muy divertido ver esa discusión.

—Bill, cariño, tu hermana tiene razón — Molly se acercó a su hijo mientras le hablaba de forma cariñosa —, mereces a alguien más...

—¡A alguien igual de genial que Anirak! —la pelirroja menor adoraba a Anirak como si fuera su hermana, la mencionada se sonrojo y desvió la mirada viendo como su novio fruncía ligeramente el ceño al escuchar esas palabras—, ella es genial y casi a pasado todas las pruebas para convertirse en Auror, ¿Qué más quieres?

Fred se acercó más a la azabache parecía que en cualquier momento la besaría o abrazaría para demostrar que estaban juntos.

Fred ya estaba harto de eso, últimamente su madre parecía tener empeño que Anirak se volvieron novia de Bill o que se casara con él, sabía que su hermano mayor no estaba interesado en ella, pero le molestaba que dijeran que su novia debía de estar con alguien más.

—Ginny, me casare con Fleur.

—Vamos, Bill, si te quieres casar, ¿Por qué no los haces con Anir? — Anirak intercambio una mirada con Bill, sabía que Fleur se entristecía que la trataran de esa forma y ella no quería ser la culpable de que la rubia se pusiera triste, realmente era muy agradable y no entendía porque a Ginny, Hermione y Molly no les agradaba—, tú y ella son buenos amigos, se llevan muy bien, harían una excelente pareja.

—Mamá, Ginny — Bill soltó un suspiro —, entiendan que con la que me quiero casar es con Fleur.

Fred se puso de pie mientras que George y la Black trataban de hacerlo volverse a sentar, parecía demasiado molesto y cuando eso pasaba nunca media las palabras que decía.

—Pero Anir y tu seri...

—Anirak no se puede casar con Bill — Fred se libró del agarre de los otros dos para interrumpir la discusión con voz seca—, porque ella es mi novia.

Toda la Madriguera se quedó en completo silencio.

George, Harry, Ron y Arthur abrieron los ojos viendo a la pareja con sorpresa, Bill y Sirius solo intercambiaron una mirada pues ya ambos ya sabían, Ginny soltó un chillido de alegría y dio pequeños brincos al saber que Anirak estaba con su hermano, Hermione parecía feliz, aunque claro ya sospechaba que esos dos terminarían juntos

—¿Qué? — Molly giro la mirada a ambos chicos, Fred había tomado la mano de Anirak para que se parara a su lado — ¿Ustedes dos?

La azabache rogaba que no la odiaran por estar con Fred, realmente les tenía mucha estima y no querían que la trataran mal, aunque eso no le importaría para estar con su pelirrojo.

—Sí, mamá, creímos que era algo obvio para ustedes — se encogió de hombros —, Anirak y yo nos gustamos desde hace más de un año, creo que desde que nos vimos en la casa Black era demasiado claro.

—¡Oh, niños!

Molly emocionada se acercó para abrazarlos, Anirak soltó un suspiro de alivio al ver como Ginny la abrazaba y le decía lo feliz que estaba que fuera novia de uno de sus hermanos y que esperaba que pronto se casaran.

Todos comenzaban a celebrar olvidando la discusión de hace unos minutos, estaba más que claro que la familia Weasley adoraba tener a Anirak Black como novia de uno de los integrantes.

Cuando Ginny soltó a la azabache, Fred se acercó para besarle la cien cariñosamente.

—Ahora sí, ya es completamente oficial que estamos juntos—murmuro contra su oído—...te quiero, novia mía.

—Te quiero más.

Anirak le robo un pequeño beso para alejarse e ir con Ginny y Hermione dejando completamente sonrojado a Fred ya que todos lo estaban observando para después reírse al ver al gemelo mayor nervioso.